Todo ocurrió muy rápido, la chica había pegado a Nancy. Sin pensármelo dos veces corrí en su dirección y me tiré encima de ella evitando que esta recibiera otro puñetazo. Ambas caímos al suelo.

—¿Skylar?

La voz de Nancy me hizo reaccionar.

Miré en dirección a la chica, esta permanecía en el suelo. Una melena plateada se dejó ver. Era Skylar, la novia de Jessica. Ella intentó escapar, pero la cogí a tiempo de ambos brazos.

—¡Mierda!— masculló ella—Como no me soltéis le enseñaré las putas fotografías a todo el mundo.

Nancy y yo nos miramos entre nosotras, seguíamos sorprendidas, no teníamos ni idea de por qué ella había hecho eso, nunca habíamos tenido una relación con ella y no nos conocíamos lo suficiente.

—¿Sabes qué? Nosotras podemos hacer algo peor— dije yo, Nancy me miró desconcertada.

Cómo he dicho antes, no la conocía lo suficiente, pero sabía perfectamente cual era su punto débil.

—¿Qué podéis hacerme vosotras, eh?— rió ella intentando levantarse.

—¿Cómo crees que reaccionará Jessica si sé enterarse de lo que has hecho?

Ella apretó la mandíbula y los puños. Había dado en su punto débil.

—Me entenderá, y me perdonará como siempre hace— dijo ella convencida.

Negué con la cabeza. Sabía que no la iba a perdonar, había agredido a Nancy. Era algo demasiado grave.

—¿Por qué has hecho esto Skylar?— preguntó Nancy.

Ella miró fijamente a Nancy, sus ojos estaban llenos de odio y rencor.

—Me jodisteis la vida, a mí y a mí hermana. Tú, tu novio y tu grupo de amigos.

Ambas nos miramos entre nosotras, Nancy no parecía acordarse de nada.

—¿Hermana?— pregunté.

—Tammy Thompson.

Me quedé paralizada al oír el nombre de la chica de la cual había estado enamorada. Ambas miramos a Skylar desconcertadas.

—Antes era una simple chica, pelo marrón, gafas de botella y brackets. Todos se reían de mí, tú y tu estúpido novio me jodisteis la vida, él se metía conmigo y tú no hacías nada por evitarlo. Hasta que un día de vacaciones de verano cambié, me quité las gafas, los brackets y me teñí el pelo, estaba irreconocible y todos dejaron de meterse conmigo. La única persona que me ayudaba era mi hermana.

Sus palabras me dejaron helada, Nancy me había explicado algunas cosas de su pasado, y yo también sabía algunas cosas que ella y Steve habían hecho. Sin embargo, sabía que ambos habían cambiado y que ahora serían incapaces de hacerle nada malo a nadie.

—Mi hermana era la mejor persona que había conocido, hasta que el imbécil de tu novio le rompió el corazón, entonces cambió completamente.

—Skylar...Yo sé que hice cosas que no estuvieron bien. Fui una idiota, yo nunca quise hacer esas cosas, pero me dejaba llevar por los demás. Por favor, acaba con esto, tú no tienes por qué hacer las cosas mal— Nancy se mostraba realmente arrepentida.

Yo, en cambio, tenía que procesar toda la información.

—¿Tu hermana también ha sido parte de esto?— pregunté.

La pregunta salió de mis labios casi de forma inconsciente, necesitaba saberlo.

—Claro, ella escribió la carta.

Noté una sensación de vacío en ese momento, le tenía mucho aprecio a Tammy. Negué con la cabeza, era mejor dejar eso para más tarde.

—Skylar por favor...Si lo dejas ahora todo irá bien, será como si no hubiera pasado nada. Lo siento.

Nancy le estaba dando una oportunidad de oro, noté como los ojos de Skylar se humedecían poco a poco. Me levanté y ella hizo lo mismo.

—¿Acaso sirve de algo disculparse ahora?— la interrumpió ella.

—Por favor— añadí yo—Estás jugando con algo que podría acabar con nuestras vidas.

Ella suspiró y metió la mano dentro de una pequeña bolsa de tela que llevaba, de ahí sacó un sobre y nos lo tendió. Nancy y yo suspiramos aliviadas. Cuando lo íbamos a coger, ella lo retiró.

—Que te den Nancy Wheeler.

Ella comenzó a correr. A Nancy le había tomado por sorpresa, pero yo empecé a correr detrás de ella, aunque estaba muy lejos. De pronto, frené en seco.

Skylar se había parado y había alguien delante de ella. Las fotografías estaban esparcidas por el suelo y Skylar las recogió rápidamente.

—¿Esa no es Jessica?— preguntó Nancy.

Efectivamente, Jessica se encontraba parada delante de Skylar. Decidimos no acercarnos más, pero podíamos oír perfectamente la conversación.

—Jess ¿Qué haces aquí?— Skylar parecía igual de sorprendida que nosotras.

—Te he seguido. Sabía que me estabas mintiendo.

Nunca había visto a Jessica tan seria. Mantenía el ceño fruncido.

—¿Así que esto es lo que has estado haciendo?— preguntó mirando la fotografías que permanecían en las manos de su novia.

—Puedo explicarlo.

Pude notar que Skylar tenía miedo. Porque sabía que a causa de sus acciones iba a perder aquello que más le importaba.

—¿Puedes explicarlo?— rió Jessica de forma amarga—Esto es sucio y rastrero Skylar, no me puedo creer que hayas hecho algo así.

—Jessica, tú no sabes lo que he sufrido por su culpa.

—Claro que lo sé, sé perfectamente lo que has sufrido y lo que es sufrir, pero eso no justifica una mierda lo que has hecho. Me prometiste que nunca me mentirías— noté como sus ojos se humedecían.

Skylar no dijo nada, nos miró de reojo. Por unos instantes sentí pena por ella.

—Sabes lo delicado que es el tema de la sexualidad, podías haberles hecho mucho daño Skylar. Tú deberías saberlo ¿Pensaste por un momento lo que hacías o solo te dejabas llevar por la venganza?

—No lo entenderías.

Jessica apretó la mandíbula y negó con la cabeza.

—Dame las putas fotografías, Skylar.

Ella agachó la mirada y le entregó las fotografías sin rechistar.

—Lo siento Jess, yo...

—Te he dado demasiadas oportunidades, porque te quiero, pero tus oportunidades se han acabado— algunas lágrimas cayeron de sus ojos—Vete.

Parecía que no era lo primero fuera de lugar que hacía Skylar. A saber cuántas oportunidades le habría dado.

—Pero te quiero Jess, por favor...

—Vete.

Las palabras de Jessica fueron duras. Ella asintió y se alejó de nosotras lentamente. Jessica parecía importarle demasiado para querer empeorar la situación.

Ella se acercó a nosotras y nos dio las fotografías. Nancy y yo nos sentimos muy mal por ella.

—Siento lo que ha pasado— se disculpó ella.

—¿Qué? No, no. Tú no has tenido nada que ver, no te disculpes, al final ha salido bien.

—Gracias Jessica. Y siento haberte llamado falsa y haber dudado de ti— Nancy la miró con arrepentimiento en los ojos.

—¿Me llamaste falsa?— preguntó ella arqueando una ceja.

—Bueno...— dijo ella con un gesto nervioso.

—No importa Nancy, tranquila. Me alegro de que estéis bien— sonrió.

Era increíble la compresiva que era.

Un silencio se formó entre nosotras, supongo que habían pasado muchas cosas en tan poco tiempo.

—Siento lo de Skylar— la miré.

Ella negó, prefería no hablar del tema. Era muy tarde, así que acompañamos a Jessica a casa. Nancy y yo fuimos a la mía, mi padre se encontraba durmiendo, así que Nancy se quedó conmigo.

Dormimos acurrucadas sabiendo que lo malo ya había pasado.