Shipp ➠ Theia x Tierra

Resumen: Viviría un millón de años, pero nunca olvidaría su risa.

Te lo contaré todo
(cuando te vuelva a ver)

¿Dinámica? Romántica.
- Planetas Humanizados

⚠️ Advertencia de Narrador poco confiable.⚠️

"El amor es como una flor y, al igual que el cuerpo, necesita que se le alimente constantemente.
El cuerpo mortal pronto se consumiría y moriría si no se le alimentara con frecuencia.
La tierna flor se marchitaría y moriría si no se le diera alimento y agua, asimismo el amor se cultiva con cada pequeña acción positiva que decidimos tener con el otro"

En un principio, ambos habían seguido una órbita en la que no coincidían, te diré porqué.

- Así que tú eres el otro planeta que comparte órbita. Bien. Escucha, hagas lo que hagas debes evitar coincidir con él, si algo sale mal incluso en lo más mínimo, no habrá un lazo sentimental que los sofoque - Le advierte el astro rey de su sistema planetario un día, al parecer el Sol estaba decido a obligarlos a permanecer lejos uno del otro, tanto que ni siquiera les brindo el nombre del contrario.

Normalmente cualquier otro planeta habría estado de acuerdo, después de todos los planetas obedecen a sus estrellas dado que estás velan por la seguridad de sus planetas.

Theia no era particularmente una partidaria de seguir al resto.

- ¿Porqué? - cuestionó. Había tantas motivos por los que podría haber estado de acuerdo, pero decidió que si iba a seguir esa regla todo su existencia deberia tener una buena razon al menos.

El sol suspiro exasperadamente, pero tuvo la decencia de contestar su pregunta.

- Los planeta que comparten órbita no acaban bien. Gravedad y esas cosas. - cuando Theia frunció el ceño en confusión sin entender el sol rodó los ojos con fastidio y simplificó aún más las palabras para ella - aveces dos planetas en una misma órbita colisionan, ese es... uno de los estados más cercano en el que un planeta puede morir. -

- oh... -

En aquel momento él Sol pasaría días enteros advirtiendo cuan intrisicamente destinados al dolor estábamos, nos habló de la muerte que se encontraba gravada en cada parte de nuestra ser y nos recordó permanecer separados.

Theia no lo hizo.

- - - - -

Ella lo conoció por accidente.

"Me gustaría hacer algo divertido", había susurrado a la nada, casi aburrida hasta las lágrimas en la soledad del espació exterior, cuando el sistema solar no era tan amable y las amistades no habían surgido aún.
Fue en ese momento de histeria y desesperación por cambiar algo que le vió por primera vez.

Un planeta de Magma y roca fundida, Theia nunca se había aburrido desde entonces.

Los siguió cuando pudo, a través de los límites asignados por el sol qué podía cruzar en su órbita. Y se apresuró a completar la mitad de su órbita antes de tiempo solo para verlo de nuevo cuando no podía aguantar esperar, solo cuando estaba tan ansiosa que no podía soportarlo.

Y luego solo mirar no fue suficiente. No se les permitía interactuar, no de la manera importante, no tenían ese tipo de autorización como simples planeta.
Pero ella podría salirse con la suya con solo un poco...

Dejó pistas donde pudo, saludos cortos de parte de ella que pidio a los cometas que pasaban por ahí le dijeran y notas pequeñas en los asteroide que sabía él frecuentaba. Por lo general, no ayudó mucho, pero la hizo sentir mejor, y cada vez que Proto-Tierra inclinaba la cabeza, entrecerraba los ojos y le decía a Sol: "¿Nunca sientes que alguien está tratando de decirme algo?" se sentía como si alguien realmente la estuviera escuchando.

Era un sentimiento del que se enamoró, mucho antes de enamorarse de él.

- - - - -

"Es, como, un placer conocerte", dijo, por primera vez. "¡Mi nombre es Theia!"

Estaba en más problemas de los que había estado nunca. El sol había descubierto lo que había estado haciendo, y afortunadamente para ella hizo de la vista gorda en cuanto Proto hizo la petición por si mismo de verla, pareció considerarlo y eventualmente terminó aceptando. Aunque probablemente todavía tendría que limpiar el cinturón de asteroides cuando regresara, (¡ESO NI SIQUIERA SE LIMPIABA! si te estoy hablando a tí Sol) pero, por ahora-

Cuando ella alargó la mano, él la tomó sin el menor suspiro de vacilación, de la forma en que ella sabía que lo haría después de observarlo durante tanto tiempo. Lo conocía antes de conocerlo, sabía que era amable sin previsión ni parámetro, confiado e ingenuo de una manera que hacía que todo aquel que lo conociera exasperar con cariño y lo protegiera a partes iguales, y sabía que él la tomaría de la mano.

Lo que ella no sabía en ese momento era que pasarían innumerables tardes cálidas explorando nebulosas y descubriendo las constelaciones, le mostraría los lugares más remotos de la galaxia, y él la besaría al atardecer en el cinturón de asteroides más de una docena de veces. No sabía que un día en el futuro lejano, seria ella misma la causante de seguir el camino para el que habían estaban destinados desde el principio.

En el presente, envolvió sus dedos alrededor de los de él y se encontró memorizando su sonrisa.

.

Habría sido más fácil no amarlo.

Pero cuando él hablaba de todo o de las cosas más mundanas del universo, Theia no era capaz de apartar la mirada.

- Theia!
- Mmm? Perdón, decías? - él solo negó mientras hacía un ligero puchero, solo atinó a reírse para disuadir su molestia.
- Ni siquiera estás escuchando - amonestó a la ligera aunque continúa de todas formas.
- Venus tiene vida vegetal, ví algunos de ellos hoy, eran ¡MUY LINDOS! - Proto hablo tímidamente pero la emoción apenas contenida por su voz lo delató de todas formas, él estaba brillando, literalmente sus ojos reflejaban estrellas que destellaban en la oscuridad del espacio. Se encontró sonriendo sin darse cuenta ante tal espectáculo - No pude evitar pensar en tí.

- ¿Eh? en mí? - Él asintió
- ¿Porqué? - Proto solo inclinó la cabeza hacia un lado como si no fuera capaz de entender porque preguntaría algo así, (lo encontro adorable).
- ¿Qué quieres decir con porqué? - contestó simplemente.
- ... Tú dijiste que eran lindas. - apretó ligeramente sus dedos temblorosos, conocía su lugar, no era exactamente bonita en la forma en que Venus o Mars lo eran.
- sí, son preciosas, como tú. - el la señaló mientras fugazmente tocó su nariz con su meñique.

Theia sintió su rostro arder, muda e incapaz de decir algo que no fuera una oración incoherente.

Él solo sonrió, feliz de que los ojos tristes de Theia no lo estuvieran más.
Está última se encuentra devolviéndole la sonrisa casi por reflejo incluso aún siendo un desastre nervioso.

¿Qué es el amor, sino cuidar la fragilidad de otro como si fuera propia?

Cuando la relación de Theia y Proto-Tierra no era algo que fuera claro para nadie aún, y empezaban a pensar que quizás ni siquiera ellos mismo lo sabían, principalmente porqué si les preguntabas a uno de los dos ninguno te respondería.
No obstante, si prestarás la suficiente atención, notarias la forma en que Theia no tenía ojos para nadie más y Proto - Tierra a su vez seguiría a Theia como un satélite natural a su planeta.

Había algo ahí, una tensión que flotaba a su alrededor y no parecían ansiosos por resolverla, simplemente dejándola fluir entre ellos.

Entonces un día, su relación dió un paso en una dirección más clara.

- - - - - - - -

En días jóvenes del sistema solar, entre los rocosos solían jugar un juego tonto en el que preguntarían a lazar a alguien cualquier cosa, no importaba que tan tonta fuera o cuan poco sentido tenía.

Proto que era bastante tímido generalmente no solía jugar, sin embargo siempre se sentaba a su lado en silencio.

- ¿Si me convirtiera en una semilla que
harías? - Theia lanzo una pregunta a nadie en específico.
- Mmm... Buscaría la mejor tierra para cultivar hasta que crecieras lo suficiente, serías una de esas hermosas plantas que tiene venus, y después buscaría el mejor jardín para moverte ahí, uno que fuera nuestro. Sería nuestro jardín secreto. - Proto habló distraídamente mientras jugaba con pequeños asteroides ajeno a las miradas sorprendidos y los susurros.
- Amigo, la pregunta no era para tí - Interrumpió Mercury. Eso pareció hacer volver la atención de Proto.
- Oh. - Proto se aleja rápidamente, avergonzado ante sus palabras antes dichas, pero no evita que todos noten lo rojizas que se encuentran sus orejas.

Si las miradas matarán, Theia probablemente no habría vivido lo suficiente con todas las miradas ligeramente molestas y llenas de celos dirigidas a su ser, contrario a la situación actual solo podía sentir una calidez inexplicable.

Porque apesar de su entorno helado en el vacío espacial siente burbujear su núcleo, se siente mareada y apesar de lo poco sobria que pueda estar, realmente encuentra reconfortante el sentimiento.

Theia y Proto-Tierra fueron hechos para estar juntos en una misma órbita coexistiendo por separado, sin embargo no estaban destinados a depender del otro quizás sea por eso que todo empezó a fragmentarse. Cuando eran jóvenes planetas recién formados, una Theia no tan resentida y un Proto-Tierra más tímido, eran ingenuos y ajenos a la tragedia por la que estaban marcados, tragedia que no ocurriría hasta mas tarde.

Lo importante ahora, sin embargo era la distancia que comenzaba a crecer entre ellos, verás al compartir órbita, la cantidad de tiempo que pasaban juntos, lado a lado era abismalmente más grande que con los demás, por lo que resultó natural que Theia fuera el todo de Proto-Tierra y asimismo Proto-Tierra era el todo de Theia.

Entonces... ¿En dónde fue que se equivocó? ¿Porque todo salió tan mal? ¿En qué momento todo empezó a decaer? ...ella podría tener una idea.

- - - - - -

Júpiter y Saturno eran Gigantes Gaseosos a los que temer, el sol habia advertido quedarse lejos de ellos adentro de la zona interior.

Es por eso que había estado preocupada con la desaparición repentina de Proto.

- ¿Y si lo secuestraron? ¿Y sí se lo comieron?
¡NO! ¿y si lo destrozaron? - Theia estaba comenzando a tirar de su cabello con desesperación. Abrumada hasta las lágrimas - ¡Theia! - incluso aún puede oír su voz en el más allá. - ¡THEIA! - espera...

Más tarde se enteraría que de hecho, ningún planeta fue devorado y que increíblemente el pequeño planeta rocoso que llama... bueno, son un nombre indefinido por ahora. Están trabajando en ello ¿ok?. Él punto es que descubriría que su compañero de órbita había evangelizado a dos Gigantes desalmados a base de ser solamente él mismo. Fue increíble.

Y así, el sistema solar poco a poco se convertiría en lugar de risa y amor a medida que pasaba el tiempo.

Pero Theia se encontró resentida con él resultado, no la malentiendas, no es que estuviera de acuerdo con que planetas enormes destrozaran a otros pero... si el precio a pagar para que eso se detuviera fue la distancia que crecía misteriosamente entre ellos ahora, con Saturno y Júpiter acaparando a Proto (incluso con ella ahí) y los otros rocosos emocionados por acercarse cada vez mas a él, no podía importarle menos la muerte sin retorno de otros. Las cosas estaban escalando rápidamente a un punto de quiebre inminente.

Discutieron sobre ello un día. Ni siquiera fue algo tan importante, los sucesos de la pelea desvanecidos en sus recuerdos, Theia había estado celosa y el ardor de la furia acumulada durante semanas picaba en cada parte de su ser, así que explotó.

Las personas suele decir tantas cosas que no quieren decir en realidad cuando están enojados así que sucedió. Le dijo cosas horribles a Proto- Tierra. Ella había elegido arremeter en su contra sin ningún motivo en realidad, algo que se hacía cada vez más común últimamente.

- ¡NO FINJAS QUE ME QUIERES AQUÍ! - él intentó acercarse para ofrecerle un consuelo, pero no quería ser consolada, no cuando no habia dicho todo lo que tenia por decir - Theia, no estoy fingiendo nada. Me importas mucho, ahora y siempre? qué está mal?

- ¿Qué está mal? - Ella pregunto con burla, ¿Porque no podía verlo? Porque no la entendía - LO PROMETISTE. PROMETISTE QUE NO ME DEJARÍAS SÓLA.

- Nunca te he dejado Theia.-

- ENTONCES PORQUE TODOS TRATAN DE ALEJARTE DE MÍ - Proto realmente no quería desestimar el sentir de Theia, pero ¿Cómo hacerle saber cuan importante es ella para él? Cómo contarle que ella es todo para él? Cómo empezar a demostrar sus sentimientos que ha estados callado durante años, talvez había una manera.

Él la tomo de las mejillas, la atrajo hacia sí y la besó , frente a todo el sistema solar mirando, y ella se vio obligada por una fuerza que no conocía, que no entendía arrojar todo por la borda y enrollar sus brazos alrededor de su cuello y devolverle el beso.

No todo estaba bien. Theia lo sabía, no fue la primera vez que tuve un ataque de histeria y no sería la última vez que Proto-Tierra secaría sus lágrima y calmaría sus temores susurrando palabras dulces.

Pero lo estarían.

Después de todo, él siempre la había amado, siempre tan dulce con ella incluso si Theia no podía ser la mitad de buena para él.

Quizás ese fue el comienzo del fin.

- - - - -

Apesar del tiempo que se reducía cada vez más entre ellos, Proto Siempre se aseguró de dedicarle todo el tiempo que podía, hablarían de sus planes a futuro, de las pequeñas cosas que amaban y en las que coincidían como los asteroides más deformes o la nada en particular, simplemente feliz de recostarse a su lado mientras delicadamente pasaba su brazo alrededor de ella, Theia se hundió contra él, volviendo la cara hacia el hueco de su cuello mientras le contaba sus pensamientos más descabelladas y sin sentido pero eso nunca evito que Proto-Tierra la apoyara sin límites.

- Nosotros viajaremos más allá de las estrellas y exploraremos todas y cada una de las galaxias que hay por haber, por eso tú y yo seremos interesantes para
siempre - Aseguró, Proto asintió felizmente con una alegría que solo podía describirse como infantil. Theia rió suavemente mientras se acurrucaba contra su costado.

Porqué no podían quedarse así. Juntos. Para siempre, pensó, si hubiese una manera de garantizar que no se separarían sin importar que, ella la tomaría, podría hacerlo.
Mirándolo, mirándola a ella, sus ojos repletos de estrellas rojizas que brillaban con el reflejo de la luz solar, la curva torcida de su sonrisa, se sentía correcto. Destinado a ser. El espacio y la materia y el tiempo mismo eran fugaces y transitorios ante lo mucho que lo amaba, lo lejos que llegaría por él. Ella haría cualquier cosa, cualquier cosa-

Pero ella no podía obligarlo a quedarse. Y el fuego inmortal en su núcleo se convirtió en ascuas ardientes, ¿porque no? Porqué era tan difícil mantenerlo para siempre a su lado ¿Que era lo difícil?

- Proto-Tierra! - fue la voz de Júpiter la que interrumpió el momento.

Parpadeó entre lágrimas cuando lo recordó. Era por ellos, esos que lo estaban esperando y lo llamaron con impaciencia, pero él parecía apenado y sumamente triste de dejarla.

- Bien. Deberías ir. Están llamándote. - Theia se alejo rápidamente de su agarre molesta de todo y por todo, pero no la soltó, se quedó ahí con ella.

Aún cuando las voces de Júpiter y Saturno se volvieron aún mas insistentes.

- Pueden esperar - él se demoró un momento más que no era suyo, presionando su frente contra la de ella.
- Pero están llamándote - insistió con la voz quebrada y contrarió a sus palabras ella clavó los dedos en sus prendas y lo abrazó tan fuerte como pudo.

- La eternidad no es suficiente si no estoy a tu lado. - agregó, en voz baja. - no iré a ningún lado. - sus palabras le brindaron una tranquilidad que no sabía que necesitaba y cualquier sensación abrumadora que sentía se desvaneció en la inmensidad del manto de estrellas siendo reemplazada por una sensación electrizante que hacia vibrar su núcleo. Ella lloró, como si de alguna manera marcaría la diferencia si el Universo comprendió cuánto lo amaba.

No lo haría. Ella ya lo sabía.

- - - - - -

- Está alejándose - susurró, era una voz profunda y amarga, reafirmando las inseguridades que taladraban en el fondo de su mente donde Theia guardaba celosamente sus pensamientos más profundos. Pensamientos de los que ni siquiera Proto era conciente - Hasta cuando vas a engañarte a ti misma con está farsa? Todos aquí tratan de alejarlo de tí.

- No. No es así - la voz solo rió históricamente.

- ¿Cuando aceptaras la realidad?

- basta... - Theia mordió ansiosamente sus uñas.

- ¿Y sabes que es lo peor?

- Ya cállate - Cerró los ojos al tiempo que se abrazaba a si misma en un intento de reprimir las palabras de la voz que detestaba.

- Qué lo permites. ¿Tienes idea de porqué?

- DIJE QUE TE CALLES!!! - sin embargo, la voz no se inmutó ni pareció afectado porque no se detuvo y continúo.

- Porque tú no eres suficiente, él es demasiado para ti. Y todos te lo han
dicho. - La voz que susurró era la suya, producto de su mente fragmentada y la desesperación de perderlo. Él miedo constantemente de que él la dejara algún día.

Y tenían razón, Júpiter y Saturno siempre la miraban como si no pudiera ser suficiente aumentando su complejo de inferioridad, tal vez sus celos se debían a las miradas anhelantes de otros cuerpos celestes por a quien más amaba. Suyo. Quizá simplemente Theia no quería compartir a Tierra con nadie.

Así que encontró una manera de no hacerlo.
Incluso si Proto-Tierra no la perdona.
Encontró que era la única solución factible.

- - - -

Iban a morir hoy. Theia lo sabía. Ella miró hacia adelante.

Proto- Tierra también debe haberlo sabido: él no era un sabelotodo como Júpiter, ni tenía la comprensión que él Sol tenía, pero era perceptivo de una manera que era completamente suya, podía leerla como un libro en todos los sentidos. eso importaba Y cuando el golpe se sentía cada vez más inminente, él lo sabía, lo sabia por la forma en que trataba de evitar el golpe, tratando de alejarla. Sus ojos, oh sus ojos estaban cristalizados llenos de lágrimas desesperadas. Ni una pizca de odio ahí. Parecía adecuado que su ser entero no pudiera guardar ni un solo gramo de odió. Él era así después de todo.

Se sentía tan vivo, para un astro que se estaba muriendo, no tenía sentido la calma que transmitía, cómo su núcleo podía arder tan fuerte, cuando sabía que solo le quedaban unos momentos. Theia ya se habían acercado demasiado al límite de Roche, el punto en que la atracción gravitacional de Proto sobre ella era mayor que su propia gravedad: estaban predestinados a ésto, Theia comprendió. A su lado, inmóvil y silenciosa, a un brazo de distancia.

Y estaba segura, que aunque ella se iba, Proto, como siempre, la alcanzaría en algún momento.

Theia podría haberlo evitado. Ella podría haber desviado su dirección en el último momento, él estaría a salvó, y no tendrían que aprender esta herida imposible, no tendrían que conocer esta angustia.

Pero no. No había otra manera. Esto los mantendría juntos. Theia sabía que al hacer esto lo cambiaría todo. Él choque lo cambiaría, pero lo mantendría para ella.

Así que besó su rostro, resbaladizo y salado como estaba por las lágrimas, y dejó que sus labios se demoraran allí porque sería la última vez. Y cuando podía, sonreía.

- ¿ Theia, q-qué? -
- Te lo contaré todo, cuando te vuelva a ver mi amor.- Eso dijo Theia en el momento en que todo paso tan rápido. - Dile a los demás que dije hola -fue lo último que le susurró mientras se reía y cerraba los ojos.

Todo se desvaneció en un instante.

Y él viviría un millón de años, pero nunca olvidaría su risa.

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Proto- Tierra tenía muchos pequeños arrepentimientos.

Cosas que nunca llegó a decirle a Theia.

Cosas que ella nunca llegó a escuchar.

Cosas que olvidó.

¿Sabía ella que la había amaba desde el primer instante? ¿Comprendió cuan desesperadamente la quería él?
¿Lo sabía ella...?

Él pensamiento silencio se desvaneció en el frío del espacio y se perdió entre los miles de pedazos de roca que ahora eran Theia y él.

En el futuro, aunque su núcleo lo recordaría, su mente no.

- Theia y Proto- Tierra colisionaron -

Más tarde, cuando él Sol está lamiendo sus heridas, las estrellas brillan más que nunca en el cielo de onda sintética y hay suficientes lágrimas y angustia emocional para todos, se preguntarán cómo empezó todo. Júpiter se encoge de hombros y dice que no hay mucho que decir. Solo dos núcleo que ardieron como uno solo pero demasiado jóvenes para entender.

Contarán un montón de cosas que ya no importan y el resto se convertirá todo en confeti.

Así pasarían eones, y aunque su historia podría haber muerto. Los prestigios de su pasado siguen presentes en las pequeñas cosas, solo debes observar con atención.

- - - - -

- Que divertida es la muerte. -

Los pétalos se secaron, y la raíz se marchito,
las flores ya están muertas cuando llegan a nosotros, después de todo.
tan efímeras como lo es la vida misma.

- - - - -

Cuando abrió lo ojos por primera vez, había un planeta ahí mirándolo fijamente ni siquiera se conocían pero se encontró confiando ciegamente en él sin ningún motivo real. Era como haber estado esperado por él toda una vida y más importante aún, se sentía destinado a ser así, incluso si no sabía el porque.

- Hola pequeño tú ¿De dónde
saliste? - El era amable de una manera que te hacía sentir cálido.
- Tierra, idiota, ese es tu satélite! -
- ª - Se rió ante ello. - Lo siento, ignóralo, ese gruñón de ahí es Venus y siempre tiene el ceño fruncido, te digo un secreto, él nacio enojado. - Su planeta le susurró con cuidado como si fuera él secreto mejor guardado aún con los gritos enojados de su vecino en ese entonces habitable de fondo y le sonrió mientras lo guío con cuidado hacía él con su gravedad- Espero que nos llevemos bien, Luna.- y aunque no estaba disgustado, si se extraño ante ello - Luna?
- no te gusta? Me parece un buen nombre.

- no es cierto, eres pésimo para nombrar cosas. - Venus se entrometió de nuevo, pero no sé equivocó, porque más tarde su nombre seria considerado uno entre miles, aún así dijo. - Me gusta Luna. - a pesar de todas las que existirían un día en el sistema Solar, Luna se distinguía sobre todas y eso quedaría claro por todas las horas que Tierra dedicaría a su satélite natural, dias enteros de dicha y felicidad futura. Pero por el momento...

- ¡Yei! Yo ganó - su planeta sacó la lengua a ¿Venus?
- Agh, No se trata de ganar, ¿Eres estúpido? - una pelea más inicio entre ellos y Luna se escondió detrás de su planeta, más por reflejo que por miedo en ese momento debido a que lo único que mantuvo ocupada su mente en ese entonces fue el descubrimiento de que a pesar de apenas conocerlo jamás podría mirar a nadie como miraba a Tierra.

Extra : ̗̀➛

- - P R E S E N T E - -

Tierra soñaba, soñaba constantemente con constelaciones magníficas y nebulosas que nunca antes su memoria recordaba haber visitado, soñaba con mundos nunca antes explorados y soñaba con tiempos en los que no pertenecía. Fue en uno de esos sueños en que la vió, aunque no sabia quién era ella.

Tenía el presentimiento de que la conocía de un tiempo de antaño, y eso fue suficiente para encontrar gratificante el sentimiento que evocaba esa memoria.

Entonces despertó.

- - - -

- Th- - la palabra se corta antes de decirla y luego el nombre desaparece ya olvidado hace mucho e incapaz de saber porque siente que perdió un detalle importante otra vez.
- Tierra?! - Mercury y Luna se acercan rápidamente dejando de lado su conversación. - ¿Que sucedió?

- No... nada. Solo, fue un mal sueño. - Tierra agacha la mirada evadiendo los ojos ajenos negándose a mirar a alguno de los dos.
- Quieres hablar de eso? - pregunta Luna sentándose a su lado. Tierra lo piensa pero no niega ni afirma nada.
Mercurio está a punto de hablar (cosas que viene con ser terapeuta después de todo) pero es interrumpido antes de tiempo.
- Aveces... Tengo un sueño. Hay un planeta que no conozco en él, ella tiene un aura melancólica, siempre me sonríe, pero, yo sé que esta triste, yo solo... simplemente lo sé. -

Cuando él alza la mirada, sus ojos parecen tan angustiados.
- No puedo moverme ni consolarla y se siente mal. - toma un momento digerir toda está información.
- Entiendo. - hablá Luna con calma cuando Mercurio no responde, acariciando suavemente la espalda de su planeta.
- ¿Sucede algo más? - dice abruptamente el planeta más pequeño mientras Luna le da una mirada de reojo, pero él no parece notarlo más concentrado en la respuesta del habitable.
- Ella dice algo, pero no puedo escucharla. Excepto su risa, es cálida, pero está llena de tristeza y cuando trato de correr a ella, el sueño siempre se termina. -

Oh... ¿Él la recuerda?

❏ Ahora, no te vayas aún realmente agradecería que leas los extra 😿algunos de ellos explican cosas que la trama no:

🅳🅰🆃🅾🆂 🅴🆇🆃🆁🅰🆂:

❏ ¿Anthony, como chuchas se besaron y no colisionaron? Yo te diré, la gravedad es extraña y no puedo explicarla sin por lo menos escribir 500 palabras más, por lo tanto solo te diré que para que un planeta colisione con otro se necesita la intención en ello. Cuando Proto- Tierra la acerca es simplemente para eso, acercarla
Y cuando Theia se estrella contra él, es para eso. Estrellarse.

Ellos son capaces de tocar cosas y tener contacto entre ellos ¿Okey? Aunque eso cambia ¿al ser habitable? Ya que bueno, un mínimo impacto lo destruye... Pero bueno.

Fuentes: yo (por favor no lo cuestiones)

❏ ¿Que es lo que sucede todo el Capítulo y que pasa con Theia? Bueno, a lo largo del escrito te explico como ella es bastante inestable con un complejo de inferioridad, de hecho ella misma experimento alucinaciones. (¿lo notaste?) y sus inseguridades terminaron dañaban lentamente su relación y empezó a lastimar a Proto- Tierra con sus actitudes.
Hay que echarle la culpa a que no tenían psicólogo, el Sol no contrato ninguno 🙄

❏ ¿Júpiter y Saturno realmente trataron de alejarlos? Sí y no.
Si, porque intentaban ayudar al Sol en lo que podían para evitar la inminente colisión.
Y no, porque este es el Pov. Theia quien en realidad no es una narradora confiable pero tampoco una villana.

❏ Al principio Theia le mandaban cartitas en asteroides y recados con los cometas que pasaban cerca de Proto- Tierra.

❏ Durante la línea:
- Porque apesar de su entorno helado en el vacío espacial siente burbujear su núcleo, se siente mareada y apesar de lo poco sobria que pueda estar, realmente encuentra reconfortante el sentimiento. -

¿Que significa?
Es como la expresión me late el corazón fuertemente, pero como son planetas? No podía escribir eso, porque no tiene corazón? intenté explicarlo.

❏ ¿Porqué saltamos de Theia y Proto- Tierra a Luna y Tierra al final? Simple, tómalo como una "reencarnación"

❏ El sueña que experimenta en el extra es la colisión momentos antes de ello y la razón por la que no puede escucharla es debido a que ya olvidó como suena su voz y lo que le dijo en ese entonces.

❏ también queda implícito que Mercury sabe acerca de la colisión y lo que ocurrió más no está muy seguro del porque pasó.

❏ Theia prefirió colisionar con él antes de perderlo por alguien más.

❏ Al colisionar una parte de ella está ahí en él núcleo de Tierra por siempre. (Esto es canon, hay restos del planeta Theia en el núcleo de la Tierra, no es broma, búscalo por internet) por cierto, sabian que la colisión de Theia "el mundo perdido" y la Tierra primitiva denominada "Gaia" en aquel entonces, científicamente se debió a la gravedad de Júpiter y Venus Según algunas teorías?

❏ Considera el final esperanzador (el corto de Luna y Tierra) y el Extra un final agridulce.

❏ ¿Proto-Tierra alguna vez podría odiar a Theia por la decisión que tomó? No. Es cierto que no entendió sus motivos pero no necesita hacerlo para saber que nunca la odiaría, la ama hasta el infinito todavía recordándola sin saberlo.

❏ Ellos son el Verdadero, Ella se enamoró primero y él más fuerte.

❏ La forma en que las flores se representan en los banners explican el estado de la relación de Proto- Tierra y Theia, por eso al ir en declive las flores se marchitan.

❏ ¿Cómo que los ojos de Tierra brillan? Bueno, mi headcanon personal es que los ojos de Tierra tienen estrellas que brillan si está emocionado o experimenta una emoción fuerte.

❏ Estos dos son mi imperio romano (mis papis ancestrales, Change My mind)

❏ Por cierto, hace poco fue 22 de abril día conmemorativo a la Tierra, nunca es tarde para
recordarlo🎉

- recuerda, cuidemos el planeta (independiente de si habla o no)

Bueno, ¿Cómo están? Mal? Que bueno 😌✨

Mi inicio de semana fue horrible:

¿Leíste hasta el final? <3
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Gracias por leer y votar!