Todos han escuchado y leído sobre que los ángeles y demonios se odian, que Dios y Lucifer, no se llevan bien. Que el caos y destrucción lo provocan las dos partes y que el sufrimiento y la paz, están separados en diferentes caminos.

Bueno les cuento que las cosas no son como lo parecen. Dios un día tomó la decisión de crear Bangtan Company, una compañía en donde ángeles y demonios trabajan en conjunto para mantener el orden en el mundo humano. Y hacen cumplir la moralidad en la tercera humanidad.

Jeon Jungkook un demonio mestizo, nacido de una madre que es un ángel y su padre, el cual es un demonio, su amor surgió varios siglos atrás, su madre flecho a su padre, decían que eran una pareja totalmente diferente, pero que cuándo se encontraron, se dieron cuenta que eran el uno para el otro. Y de ese amor nació él, un demonio mestizo. Lo amaron desde que nació, hasta el día de hoy.

Al crecer conoció, ahora su amigo, Park Jimin, sus madres son amigas, y hasta fueron nombrados, el mismo día. Al crecer, era algo lógico que iban a ser los mejores amigos, fueron a la misma escuela y trabajan en el mismo lugar.

Pero, algo con lo cual no iban a congeniar era sobre el tema del amor.

¿Será que también iba ser lo mismo? Para Jungkook esa pregunta, se le fue planteada en su mente, hace 10 años atrás, cuando por primera vez tuvo un sueño húmedo, en donde los protagonistas eran él y su amigo, Park Jimin.

Ahora en el presente, esos sueños siguieron, dia tras día. Así como esta mañana. Jimin, como en varios de sus sueños, estaba apoyado en el escritorio, en donde ellos dos trabajan, sus caderas eran presas de las grandes manos de Jungkook, el mencionado entrando y saliendo con brusquedad de su interior, sus caderas tenían un ritmo duro y rápido. Jimin jadeaba y gemía bajo. Jungkook gruñía desde lo profundo de su garganta, teniendo la vista del culo y la espalda de Jimin y como esta se arquedaba. Jimin se retorcía de placer, apretando más su interior.

—Oh, lindo culo. —Pensó Jungkook, mientras aún metía y sacaba su polla del culo de  Jimin. —Su cara... ¿Podré verla hoy? —Con su mano, tomó el menton de Jimin y volteó su rostro. Pero como en todos sus sueños, él no podía verle, mas bien lo que siempre veía, era la hora del reloj y el ruido que este hacía.

—Buenos días. —Un Jimin sentado al orilla de la cama y un Jungkook tirado en el suelo a medio despertar. —¡Jeon despierta!

—¿Esta despierto Jungkook? —Pregunto la madre de Jungkook.

—Si, ya lo esta. No se preocupe.

Durante los últimos diez años o algo así, haber tenido sueños húmedos acerca de mi amigo de la infancia, no era algo lindo.

—Tú... Sabes, vas tarde, pero deberías encargarte de lo que hay en esa tienda. —Jimin señalo su entrepierna.

—¡Joder!

Siendo amigos de la infancia Jimin y yo...

—¡Oh! ¿Veniste de uniforme otra vez? —Pregunto, Kim Seokjin era el jefe en el departamento de administración, es una persona gentil pero cuando se trata sobre el trabajo, se convierte en una persona totalmente distanta.

—Es mas eficiente de esa forma. —Jimin le respondió de forma simple. Él era igual o peor que Jin en cuanto al trabajo hablamos.

—Aquí esta la asignación de hoy, asi que trabajen duro. —Se volvió hacía mi. —Bueno aún así, lo hiciste a tiempo ¿no Jungkook?

—Lo siento, lo siento. —Jin frunció el ceño.

—Si, si siempre lo sientes Jungkook. Para la próxima vez, no llegues tarde. —Se volvió hacia Jimin otra vez.

Hemos pasado nuestras mañanas juntos, hasta ahora.

—Ahh, quiero hacerlo con Jimin. —Un susurro suave salió de sus labios.

Agarrarlo ahora mismo, acorralarlo hasta que no pueda resistirse... Y venirme dentro de ese pegajoso lugar, una y otra vez, una y otra vez...

—Para... ¡En serio! —Sr. Namu, un ángel y el lider del equipo de edición en Bangtan Company, hace mi vida más díficil.

—¿Por qué? ¿No es eso en lo que siempre piensas?

Además de ser lider, puede influenciar en las fantasías de los demás y a estado torturadonme con ello durante ya un tiempo.

—N-No... Bueno lo es, pero no todo el tiempo. Y necesita ser romántico. —Dije en un lío de voz.

No hay un solo día de la mañana, en que no me pase esto. Él maldito siempre se ríe en mi cara y eso me fastidia más.

—Si vas hacerlo, ¡solo hazlo! Eres demasiado sensible. ¿Acaso no fue un poco romántico. —Dijo con inocencia.

—Encontrare el momento adecuado para hacerlo. Solo déjame solo. —Sonreí falsamente.

—¿Cómo podría parar de hacer algo tan divertido? —El chupetín que traía en su boca lo hacía parecer un niño de 5 años, más molestó no podría ser.

—¡¡Tu eres así todas las mañanas!! —Y otra vez su risa ruidosa hizo acto de presencia.

—Así que, ¿Qué vas hacer Jungkook?

—¿Sobre qué? —Inquirí confundido, mi vista se fijó en Jimin quién aún seguía conversando con Jin sobre algo.

—¿Lo vas hacer con Jimin? O ¿Te le vas a confesar de verdad?

—Te han dicho que haces muchas preguntas Sr. Namu y sobre... —Oberseve a Sr. Namu mirar en dirección en donde estaba Jimin.

—Sabes, pienso que Jimin es un poco lento, asi que supongo que tú eres el que esta en apuros. Si te vas a confesar ¿por que no te apuras? Si no lo haces un jugador como yo podría entrar.

—Jungkook, hemos terminado de chequearnos así que vamos a trabajar. —Jimin apareció de repente y el Sr. Namu ya se había ido.

—Oh, esta bien.

¿Qué es lo que paso de repente?

"Confesar"

He estado pensando en ello, pero para Jimin, soy solo un amigo. Si me apuro y me confieso y él me rechaza, entonces nuestra amistad acabaría y eso sería aún peor. Si así son las cosas, entonces no tiene remedio que me confiese. Si todo esto acaba mal, no solo sería rechazado, también lo perdería a él. Así que ninguna de las dos partes saldría ganando. A menos que él me corresponda lo que es malditamente imposible.

—Hmmm, todas nuestras plegarias de hoy fueron respondidas. Nuestro siguiente trabajo es... —Dijo Jimin, con su vista en los documentos.

El trabajo de nosotros es simplemente atender las plegarias, regularmente en la tercera humanidad o como comúnmente se le conoce 'mundo humano' es similar a una petición de humanos, cuándo la humanidad divina reza en serio, la solicitud es recibida. En simples palabras, nosotros hacemos que eso se cumpla, y muchas veces las cosas se salen de control como ahora.

Jimim no tolera a los pervertidos y siempre resuelve los problemas con puños.

—Oye calma. —Dijo Jungkook, Jimin ya estaba sobrel el tipo, quién tenía la mejilla roja por el golpe proporcionado por él mismo. —Es un exhibicionista.

—Estoy calmado Jungkook, no puedo herirlo esa es la ley. Yo solo tengo un mal hábito con golpear a los pervertidos. —Dijo con una mueca

—¡Agredirme en vez de proporcionarme ayuda! ¡Por favor que el alguien me ayude. —El hombre con él cuál estamos tratando, pretendió correr, pero Jimin fue más rápido y lo atrapó.

—Somos la policía ¿lo sabías? Es mi trabajo enviar a las personas desviadas como tú a casa.

Ese es el patrón que se repite cada día, Jin no va estar contento cuando sepa que Jimin hizo de las suyas otra vez.

—¡Jimin tenemos que hablar! —Jin entró azotando la puerta. —Como supervisor, ¡Trae a Jungkook! —Jin se detuvo y miró a Jungkook. —Oh por dios...

La imagen demacrada que me cargaba  no era tan bonita que digamos y eso se notaba a kilómetros.

—¿Por qué está tan triste? —Pregunto Jin.

—No lo se, está así desde la mañana... —Jimin dirigió su vista a él y un aura negra rodeaba todo el cuerpo de Jungkook.

—Eh... ¿Jungkook? —Dijeron los dos al unísono.

—Wow, ¿qué harás ahora?

—Sigo dándote advertencias, pero tu progreso es muy lento.

—Provocarme no logrará nada Sr. Namu...

—"Jimin no quería esta clase de relación en primer lugar". Solo piensa en ello un poco más.

¡Basta! Quiero que esto paré...

—Jungkook, ¿puedes venir aquí un segundo?

Levantó su vista y cerró los ojos un momento y luego camino hacia la mesa, en donde estaban Jin y Jimin.

—Ahora, ¿pueden ver esto los dos? —En la pantalla estaba el último humano desviado con él cuál nosotros intervenimos.

—Te dije que te calmaras. —Jimin hizo un puchero y luego chasqueo la lengua.

—No es mi culpa que fuera un completo pervertido. —Jin les sonrió escalofriantemente.

—¡¡Es todo lo que tienes para decir tu idota!! ¡¡En serio tienes que controlarte!! —Jin lo tomo de la camisa y lo zarandeo de un lado a otro.

—¡Hey! Si fueras tú quien hubiera visto a ese pervertido sin ropa, lo hubieses golpeado tu mismo. —Jimin se defendió.

—Bueno, puede ser pero no es la forma en que debes hacer las cosas y una suspensión no sería lindo para tu compañero también. —Jin suspiró sonoramente. —Ahora vamos hablar sobre la cancelación de una de las peticiones, ¿que ocurrió?

—La chica dijo que su cónyuge la acosaba, así que lo puse en aislamiento, pero en menos de 24 horas ella lo quiso de vuelta. La verdad si fuera ella jamás volvería a ver a ese bastardo. —Dijo Jimin, continuando con su poca paciencia.

—Ah dejemos pasar eso por hoy, no haremos nada discutiendo. —Dijo Jin, y luego tomo unos documentos antes de salir por la puerta.

—¿Puedes ser un poco menos rudo? —Dijo Jungkook. —Como dijo Jin, una suspensión no sería bueno para los dos. —Jimin lo miró con sus orbes color miel.

—Prometo hacerlo la próxima vez, Jin tiene razón. —Cerro sus ojos un momento.

—Dime, ¿qué piensas sobre Sr. Namu? —Dijo Jungkook y Jimin abrió sus ojos otra vez.

—No me cae tan bien ni tan mal. Tampoco tengo interés en ser cercano a él, ¿por qué? —Jimin me miró con su cara de pocos amigos.

—Nada, nada.

—Como sea pero no lo vuelvas un marginado o algo así, no somos niños. —Volvio a cerrar sus ojos. —Tomaré una siesta

—Jimin pareces un viejo. —Jungkook rió con ganas.

En la puerta del departamento de administración, se hayaba un Jin con los ojos fijos ante la escena que se presentaba ante sus ojos. Y es ahí donde él se dió cuenta de todo.

Dedicado a: ChimChim-oficial

¡Hola!

Vuelvo a publicar esta historia pero más extendida.

Por favor, denle mucho amor y espero que en verdad les guste :)

Cada capítulo contará con 1000 o más palabras y será una historia corta.

Nos vemos mañana con un nuevo capítulo ♡

•MINKxx•