Luego del brutal asesinato se llevó a cabo en la que era nuestra casa, el caso titulado "la venganza pasional" fue escuchada asta en los rincones del país y la polémica que causó tuvo sin fin de teorías por parte de los escépticos quienes trataban de esclarecer los hechos.

Levanní obtuvo la custodia de nuestra hermanita pero al no tener lazos sanguíneos no pudo llevarnos con ella asi que Nila y yo pasamos una semana en un orfanato asta que los padrinos de mi hermana fueron notificados de lo que había pasado y pidieron ser nuestros tutores, Annelien y Joep Janssen; una pareja adinerada la cual no había podido tener hijos por lo que veían a Nila como su hija. Me gustaría decir que fueron por las dos pero en realidad solo era a Nila a la que querían pero por petición de mi hermana me llevaron; me sentí como la mala condición que viene con el premio pero no me quedaba de otra mas que ir con ellos.

Fue un viaje de tres horas en auto desde la ciudad asta la casa, ellos vivían en una lujosa casa en medio del bosque, con muchos cuartos con baños privados y una piscina; fue un trecho muy incomodo para mi ya que mi hermana respondía a la interrogación de sus padrinos mientras yo solo miraba por la ventanilla en silencio, cuando por fin llegamos realmente supe que lo que mamá decía de sus amigos los Janssen sobre sus lujos no era mentira, la casa era enorme y muy hermosa aunque no sabía el porque estaba en el bosque tan alejada de la ciudad.

La mano de Nila sobre mi hombro me devolvió en si de mis pensamientos, la ví y su felicidad era notable, asi que le respondí con una sonrisa igual "si ella era feliz, yo igual lo era"

Nila: hermana, este es nuestro nuevo hogar, aquí seremos felices lo prometo -dijo con extrema confianza-

Dara: no importa donde nos encontremos Nila, me basta con estar a tu lado para estar completa y ser feliz -respondí con aquella sonrisa nerviosa- pero... ¿Porque viven en un bosque Nila?

Nila: -señala el bosque otoñal a su alrededor- aquí nadie los molesta y viven sin el ruido ciudad aunque no te internes en el Dara, los niños desaparecen en este bosque... Dicen que una entidad se los lleva

Dara: ¿una entidad? -dije mirando el bosque con curiosidad-

En el ultimo año mas de 35 niños habían desaparecido y sus pertenencias misteriosamente aparecían en ese bosque, me causaba intriga ya que podría tratarse de Slender aunque de ser así creía que tal vez los llevaba a un lugar mejor, no sabia con certeza pero de lo que si estaba segura era de que yo me adentraría asta los rincones de ese hermoso y solitario bosque de otoño.

Cuando entramos a la casa el panorama no cambiaba, si era una muy lujosa. El cuarto de Nila era como de un cuento de hadas, todo en el era nuevo y preparado especialmente para ella en cambio el mio... Bueno era uno de los cuartos de servicio, mucho mas pequeño que el baño del cuarto de Nila; aunque no me quejé ellos no tenían responsabilidad conmigo y aun asi estaba ahí siendo solo una molestia.

Tuve que ejercer un papel de mucama para pagar lo que me comía y el instituto en el que estudiaba, mi hermana ingresó a una prestigiada institución académica y poco a poco se fue volviendo antipática y superficial en mi opinión, una copia de mamá y debido a que se la pasaba con sus padrinos o con sus amigos ya no hablábamos asi que yo siempre estaba sola

Pasaron los días, las semanas y los meses y así mismo se hicieron 6 años, Nila a sus casi 15 años ya era una plástica mas y yo a mis 13 seguía sola pero no me molestaba a que en todo ese tiempo libre sin supervisión exploré el bosque de arriba a abajo y era la única que lo conocía, tanto así que tenia un mapa hecho por mi y tenia trazado en los arboles un camino que llegaba a un risco de por lo menos 30 metros de alto, debajo de este un gran lago tapado con hojas secas y de ahí mas bosque asta donde la vista olvidaba. Amaba estar en ese bosque, era mi lugar feliz.

Faltaba una semana para los 15 años de Nila y como era de suponerse tenía que armar una fiesta que cumpliera con las exigencias de sus amigas por lo que Annelien y Nila partieron a la ciudad por unos días para preparar todo y así festejar por lo alto, yo me quedaría sola en casa ya que Joep había salido de la ciudad hacía unos días por asuntos de negocios y no llegaría asta dentro de tres días; asi fue como Nila se fue sin mi y como ni siquiera me preguntaron si quería ir no me molesté en pedirles que me llevaran, estaba feliz nuevamente estando sola.

Ese dia en la noche comí lo que quería ya que no se me permitía hacerlo, vi tv en la gran pantalla plana de la sala y luego me fui a dormir al cuarto de mi hermana, su cama era como una nube a comparación de la mía por lo que me dormí rápido. Al día siguiente me despertó el sonido de un auto que llegaba... Era Joep, me levante de un salto y acomode la cama para salir corriendo a recibir su equipaje, al estar frente a el miré hacia otro lado porque a los Janssen no les gustaba que sus mucamas los vieran a la cara, fue muy extraña su reacción puesto  puso su mano en mi mentón y me hizo verlo a los ojos

Joep: mira me pequeña no muerdo ¿tu hermana y mi esposa se fueron? -dijo con una inquietante sonrisa-

Dara: S-si señor Janssen, salieron desde ayer y demorarán por lo menos 5 días -dije sumamente incomoda-

Joep: ¡perfecto! Y dime Joep pequeña -aun sonriendo-

Iva a recoger su equipaje pero se negó, hizo que otra mucama lo recogiera y me llevó a desayunar. No sabia porque estaba tratándome así, nunca me habían dejado comer en el comedor pero ahora estaba compartiendo un desayuno con Joep. Todo el resto del día me mantuvo a su lado, y al día siguiente me levantó muy temprano para ir de compras; me hacía desconfiar demasiado... Si nunca hubiera dejado de desconfiar mi vida hubiera sido diferente...

Dara: ¿¡que, de compras!? pero... Señor jan... Joep ¿que tiene de malo mi ropa? -dije mirando mi pijama-

Joep: llevas 6 años con la misma ropa, ya eres una hermosa jovensita, y alguien tan hermosa no debe lucir esos harapos, no está en discusión iremos de compras

Fue un día maravilloso, me compró ropa tan cara y fina como la que tenía Nila y me llenó con juguetes de marca. Poco a poco fui entrando en confianza con el aunque algo me decía que no tenía buenas intenciones. Ese mismo día en la noche  me hizo ponerme uno de los vestidos elegantes que me había comprado y me pidió que brindara con el al pie de la chimenea ya que había hecho un buen trato con sus nuevos socios, no me negué...

Joep: Vamos a brindar por el trato y por nuestra nueva amistad Dara -dijo dándole una copa de cristal con soda-

Dara: pero Joep soy una niña no puedo beber licor -respondí negándome a tomar la copa-

Joep: pequeña es soda, nunca le daría licor a una menor

Luego de eso tomé la copa, mi cuerpo se negaba a poner la bebida dentro de mi, algo me decía que estaría muerta si lo hacía Pero no hice caso y luego de chocar las copas bebí el contenido completamente, Joep me miró con malicia y un miedo intenso se apoderó de mi entonces el ambiente en el lugar se volvió pesado, me puse de pie con terror y miré las escaleras

Dara: gracias por la velada Joep pero tengo sueño y debo ir a dormir, buenas noches -tras decir esto caminé con rapidez hacia las escaleras sin mirar atrás-

El miedo que sentía me hacia temblar, mi sentido común me decía que saliera corriendo por la puerta pero no tendría a donde ir asi que solo caminé hacia las escaleras, y ahí estaban, tan cerca que casi podía alcanzar las cuando mi cuerpo ya no se movió... Quedé paralizada contra mi voluntad, podía girar mis ojos, respirar, parpadear y hablar pero no podía moverme. Entonces escuché los pasos de los zapatos finos del señor Janssen acercándose, se puso frente a mi con el atizador de leña de la chimenea en la mano, se agachó, me besó y luego volvió a ponerse de pie. Le supliqué que no me hiciera nada pero fue inutil, empuñó el atizador y me golpeó con el.

Cuando desperté estaba en el sótano de la casa, lugar al que solo Joep tenía acceso. Mis muñecas y tobillos estaban atados con correas de contención, miré a todos lados y noté aquella mazmorra de agonía. Sobre mi había una lampara como las de los dentistas, al lado de la camilla en la que estaba había una mesa con distintos utensilios que a simple vista se veían dolorosos, pero lo mas aterrador eran las fotos.... Las paredes estaban llenas con fotos de los niños y niñas desaparecidos marcadas con una X y la mía... Mi foto también estaba ahí, yo era la que seguía; traté de soltar me como pude "es inutil que forsegees o grites" dijo Joep acercándose a la camilla mientras se ponía unos guantes quirúrgicos "nadie podrá oírte por mas que te duela". Nuevamente le dije que me dejara ir pero solo se rió, me dijo que era tan fácil atraer a los niños a su trampa como llenarlos de regalos, para el era un jobi el atrapar niños, abusar de ellos y torturarlos asta que morían, me contó de algunas de sus mejores experiencias y tan solo escuchar lo me revolvió el estomago.

Me dijo que no me mataría solo jugaría un poco conmigo, amenazó con hacerle lo mismo que le hizo a los niños a mi hermana y llorando supliqué porque no la involucrada, le dije que hiciera lo que quisiera conmigo pero que se alejara de Nila.

Fue la noche que perdí mi inocencia y de la manera mas dolorosa y baja posible... El... Ese hombre arrebató de mi ser la alegría y me despojó de mi niñez... Y no le bastó con eso, también me torturó asta que me desmayé del dolor...

Al día siguiente me encerró en mi cuarto con llave y en mi ya no quedaba rastro de la niña que era antes, ya no quería estar ahí, quería irme correr asta cansarme sin mirar atrás. Cuando la luz del sol se desvanecía en el horizonte rompí la ventana con mi codo y salí de la casa solo con lo que tenía puesto, corrí por el bosque oscuro solo guiada por la luz de la luna y mi corazón roto; me detuve en el borde del risco, ahí me puse de rodillas y grité con todas mis fuerzas con la vista al cielo, me quebrante, con un llanto desgarrador comencé a hablarle a la luna a gritos

Dara: ¡lo siento Elena, no puedo mas! ¡Es injusto, yo tengo que sufrir lo que ningún niño ah sufrido solo para que Nila viva ignorante de todo y feliz! ¡Renunció a seguir!

Me puse de pie y de espalda al precipicio, levanté mis brazos de lado a lado y dejé que la gravedad me jalara hacia abajo, fueron 30 metros de caída, al tocar el agua mi cabeza impactó con ella dejando me inconsciente, moriría ahogada y no sentiría nada... Mientras mis pulmones se llegaban de agua me pregunté si Nila lloraría por mi... Después de todo ella no había cumplido su promesa y yo estaba por incumplir la mía, de todos modos ya no importaba... Era el fin de mi historia... Moriría y nadie se daría cuenta... Que triste final.

CONTINUARÁ....