Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝟬𝟲. 𝗐𝖺𝗇𝗇𝖺 𝖽𝖺𝗇𝖼𝖾?

 ੈ ‧ 𝐃𝐘𝐒𝐓𝐘𝐂𝐇𝐈𝐏𝐇𝐎𝐁𝐈𝐀 | 𝟷𝙰
▃ ▃ ▃ ▃ ▃ ▃ ▃ ▃ ▃ ▃ ▃ ▃ ▃

००० ━━━ ❛ wanna dance? ❜

  Ava se encontraba recostada sobre la cama de James, su codo estaba recargado del colchón y su cabeza era sostenida por su muñeca. Usaba un conjunto deportivo negro que le quedaba diminuto y llevaba los labios pintados de un rojo cereza. Miró a James con una sonrisa de lado e hizo un ademán con la mano para que se acercara hacia ella, el azabache caminó a paso lento y se sentó frente a la chica quien le sonrió con los dientes.

La castaña se acercó rodeado su cuello y sentándose sobre su regazo.

─ A-Ava, ¿Qué haces? ─ Preguntó con la voz entrecortada.

Ava le guiñó un ojo abrazándolo por el cuello y aspirando su perfume embriagante, haciendo que el chico llevara sus manos a su cintura, Smith posó sus labios cerca de su mandíbula haciendo que el chico se tensara y comenzó a dejar un camino de besos a lo largo de su cuello haciendo que James apretara su agarre.

─ Si me pides que me detenga lo haré ─ Dijo con voz seductora.

─ N-No, no quiero que te detengas ─ La tomó por el pelo, entrelazando los dedos entre sus mechones.

Ava pasó rápidamente de su cuello a sus labios, y ambos jóvenes comenzaron a devorarse en un beso hambriento, como si lo hubieran estado reprimiendo desde hace mucho tiempo, los labios de la castaña se movían con agilidad sobre los del azabache y James solo podía pedir por más. La chica comenzó a moverse sobre él provocando que algunos jadeos salieran de ambos, Potter apretó su trasero, haciéndola gemir en sus labios.

─ Ava... ─ Se separó cuando sintió que le faltaba el aire.

─ ¿James? ─ Escuchó la voz de la chica algo lejana y más grave.

─ ¿Ava?

─ ¡JAMES! ─ La voz de Sirius hizo que abriera los ojos en par.

El azabache miró a su alrededor dándose cuenta de que Ava no estaba ahí, solamente Remus, Peter y Sirius, tal como la noche anterior.

¡Mierda! Había tenido un sueño sucio con Ava Smith, bueno, tal vez no había sido un sueño sucio, pero pudo convertirse en eso si Sirius no lo hubiera despertado.

El grupo frente a él no pudo seguir reprimiendo la risa y pronto los tres chicos estallaron haciendo que las mejillas de James se tiñeran de rojo.

─ ¿Qué soñabas, eh, Cornamenta? ─ Preguntó Sirius con burla.

─ N-Nada...

─ Oh, está bien si no quieres contarnos... de todos modos, no quiero saber de tus fantasías con Smith.

─ ¡Yo no...!

─ Oh, claro que tú no ─ Remus le dio unas palmaditas en el hombro ─, no te preocupes, Cornamenta, no es secreto para nadie que la pequeña Smith te flechó.

James rodó los ojos, tal vez Ava sí le gustaba un poquito, aunque hubiera sido un sueño, su corazón comenzó a acelerarse como loco en cuando la castaña lo besó y si así se sentía algo que creó su subconsciente, ¿Cómo se sentiría si pasara de verdad?

. . .

El día comenzó muy bien para Ava, cuando despertó buscó disfraz que usaría para la fiesta de Vega y Sirius, había decidido irse por algo simple y cliché en realidad. Durante el verano, se había animado a buscar entre las cajas de su abuela Stella y había encontrado una capa roja que le quedaba muy bien, así que decidió quedársela y que mejor, porque ahora serviría perfecto para su disfraz. La castaña bajó al gran comedor a lado de la rubia, quien parloteaba sin parar sobre lo bien que se la pasarían en la noche.

Ambas chicas se sentaron junto de Alice Fortescue y Frank Longbottom, quienes eran una pareja adorable a opinión de ambas.

─ Buenos días, chicas ─ Las saludó la pelinegra.

─ ¡Alice! Hola Frank.

─ Hola Alice, Frank, ¿Irán a mi fiesta? Es esta noche.

Ambos chicos se miraron antes de asentir ─ Por supuesto, no nos la perderíamos.

─ Bien, los veremos ahí.

Las dos chicas se enfrascaron en una conversación sobre sus disfraces y lo complicado que sería hacer que el cabello de Vega luciera como el de Debbie Harry y que el disfraz de Ava se vería mejor con un toque siniestro, entre otras muchas cosas. Los Merodeadores no tardaron en hacer acto de presencia, haciendo que algunos los miraran molestos por el ruido que hacían.

Sirius dejó un beso en la mejilla de la rubia antes de sentarse, y los chicos se acomodaron estratégicamente para que James quedara a lado de Ava, haciendo que Vega los mirara con curiosidad.

─ Así que... ¿Cómo durmieron? ─ Preguntó Sirius sin apartar su mirada de James.

─ Yo creo que durmieron excelentemente, Canuto...

─ Sí, ah... ─ Ava tomó algunos trozos de fruta ─ dormimos, ¿Bien?

─ ¿Sí? Que bueno que nos dices, Ava... ─ Remus habló por primera vez ─ ¿Tuviste algún sueño en específico?

─ ¿Sueño en específico? ─ La castaña frunció el ceño.

─ Sí, sí... ya sabes, porque James tuvo uno, podría contártelo.

Ava miró con curiosidad al azabache quien quiso golpear su cabeza contra la mesa ─ No... yo... soñé que ganaba la copa de Quidditch.

─ Ah ─ Ava volvió a mirar su plato ─ ¿Qué tendría ese sueño de especial? No es como que sea un sueño, tú eres... ─ Cuando notó que todas las miradas estaban posadas sobre ella, se encogió sonrojándose ─ muy bueno.

─ Oh sí, sí, muy bueno ─ Los chicos comenzaron a burlarse del azabache nuevamente ─ Muy bueno en tantas cosas... en fin.

El día avanzó con rapidez y antes de que alguno pudiera notarlo, la noche ya había caído, Ava se encontraba en su habitación terminando de peinar su cabello, había decidido ondularlo un poco con ayuda de un hechizo, ya que quería un toque diferente. Vega salió del vestidor improvisado que las chicas habían armado algunos años atrás.

─ ¿Y?, ¿Qué opinas? ─ Preguntó a Ava.

─ Creo que podría pedirte que cantaras X Offender y esperaría que lo hicieras.

Vega hizo un ademán con la mano restándole importancia ─ Oh, basta, ¿Te ayudo con algo?

─ No, ve a tu fiesta, estaré ahí en un minuto.

Vega llevó sus dedos a sus ojos en una seña de "más te vale" y salió de la habitación.

Todas las chicas habían bajado ya, así que Ava era la única en la habitación, alistó la falda negra que llevaba y se puso la capa roja, poniendo la capucha sobre su cabeza, estaba por salir de la habitación, justo cuando decidió regresar para aplicar algo en sus labios, no era de usar mucho maquillaje, ya que le molestaba demasiado tardarse tanto desmaquillándose por la noche, así que raramente lo hacía, solamente en ocasiones especiales, y esa contaba como una, se miró en el espejo y comenzó a aplicar un labial rojo cereza sobre sus labios, ahora sí, estaba lista para irse.

Cuando llegó a la sala común, no se encontró con nadie lo suficientemente conocido como para quedarse, así que se acercó hasta la mesa de las bebidas y se sirvió una cerveza de mantequilla.

─ Hola ─ La voz detrás de ella la hizo voltearse con rapidez ─, me gusta tu disfraz.

─ Oh, hola, gracias... a mí también me gusta el tuyo.

Lily llevaba un vestido morado y una diadema del mismo color con un pañuelo verde atado a su cuello, incluso su cabello parecía más anaranjado que el usual.

─ Marlene me convenció, dijo que... me quedaría bien.

─ ¡Y te queda bien! ─ Respondió con honestidad ─ ¿Te gusta Sooby Doo?

─ No realmente, digo, cuando tengo la oportunidad me gusta ver las caricaturas en casa, pero... ya sabes, no es mi cosa.

─ Oh... ─ A Ava sí le gustaban las caricaturas, esos dibujos animados la hacían entretenerse a lo grande ─ Igual es lindo, te queda bien.

─ A ti también te queda el tuyo, esa capa es linda.

─ Bueno... gracias, era de mi abuela, hace al menos treinta años.

─ Vaya... ¿Y ella dónde está ahora?

James quien llevaba buscando a Ava desde que bajó a la sala, por fin logró visualizarla y estaba a lado de... ¿Lily? El azabache se acercó con una sonrisa en los labios, observando lo linda que se veía la chica con ese disfraz.

─ Buenas noches ─ Saludó en un tono coqueto.

─ Potter.

─ Hola James.

Potter observó a Ava con detenimiento, las botas tipo militares, las medias agujeradas, la falda de cuero negra que se ceñía a su figura, la blusa blanca que era sujetada por el corsé negro y esa capa roja que hacía que el disfraz cobrar sentido, finalmente se detuvo en sus labios que eran del mismo color que los utilizaba en aquel sueño... y tuvo unas ganas inmensas de besarlos, tragó saliva antes de hablar.

─ ¿Quieres bailar?

─ Ya te lo he dicho, Potter, yo no... ─ Lily se tuvo que interrumpir a sí misma cuando notó que James no la miraba a ella, sino a Ava, quien sostenía la mirada con el azabache y parecía ni siquiera escucharla, ya que ambos estaban en una especie de burbuja, así que decidió salir de ahí cuanto antes, sin embargo sus pies no la dejaban, era como si estuviera paralizada. Ava la miró antes de decidir algo ─ Ve...

La castaña tomó la mano extendida del azabache avanzaron hacia la pista y comenzaron a bailar al ritmo de Close To You de Carpenters, Ava comenzó a cantar en voz baja deleitando a James con su voz.

─ A veces olvido lo bien que cantas, deberías de hacerlo más seguido, extraño escucharte.

─ No... yo no lo extraño ─ Río ─, era terrible.

─ ¿De qué hablas? Siempre me gustó escucharte.

─ Sí bueno... en ese momento, mis únicos antecedentes en la música eran Los Beatles y Elvis.

─ Lo sé, escuchaste Let It Be todo ese verano.

Las mejillas de Ava se tiñeron de rojo ─ Me gusta Let It Be, a mis abuelos les gustaban los Beatles y Elvis no les parecía mal, así que...

─ ¿Aprendiste sus canciones?

─ Exacto.

Ambos chicos se quedaron en silencio por varios minutos, solo disfrutando de la música, las manos de James estaban en la cintura de Ava y se puede decir que sintió una especie de déjà vu, quería besarla, mierda sí, quería que Ava estuviera con él y que todos lo supieran, que se olvidaran de cualquier inconveniente, que no existiera más Evan Relish, ya que sí, pese a sus intentos por evitar que asistiera a la fiesta, Vega lo había invitado, así que había tenido que hacer unas cuantas bromas para que el castaño enfermara, solo era un catarro y duraría un día... nada grave. Pero en cambio a todo lo que quería hacer, simplemente abrazó a Ava, escondiéndose en su cuello y aspirando su perfume cítrico... y era el tipo de fragancia podría oler por siempre y no tendría problemas.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro