Capítulo 4 - Yasaka

Ella es una mujer preciosa con rasgos de zorro, sus nueves colas se balanceaban suavemente sin control.
Su cabello dorado, combinaba con sus ojos y cabello también dorados.

Ella observaba aparentemente contenta al protagonista que lucia embobado.

Estaba realmente embobado por su belleza, sonrío con cariño, y aplaudió para la llegada de sirvientas.

―Antes que nada, encantada de conocerte; mi nombre es Yasaka, reina de los Yokai del Oeste.―, Se presento cortésmente.

―Ah.. Ah..―, Continúo anonadado por su belleza, pero ante una ligera risa de ella, se recupero, sonrojándose de vergüenza. ―Lo siento, sin intenciones de incomodarla, es una completa belleza, Yasaka-sama.―, Él hablo con respetó y sinceridad.

―Gracias pequeño, tú también eres encantador, esperare para que crezcas un poco más.―, Comento causando la curiosidad del chico.

―¿Para qué?―, Preguntó, para una risa un tanto traviesa de ella.

―Somos los únicos de nuestra especie, hay una gran oportunidad de reproducción ahora.―, contó, no buscaba que el chico entendiera, solo era un niño. Sin saber que fue completamente comprendida.

―¡¿Perdón?!―, Su rostro se volvió rojo vivo, y de sus orejas expulsaron humo debido a la calentura de su rostro. Comprendió totalmente ese mensaje.

―¿Vaya, vaya?―, Ella se avergonzó un poco, comprendiendo que fue entendida perfectamente. ―Era una broma.―, contestó de inmediato.

Río con elegancia. Momento después bajo su mirada para ver en dirección a la desmayada Hana.

―¿Sucedió algo con ella?―, Señalo desviando la conversación descaradamente.

―Cuando entre aquí de la nada me salió estas colas y mis orejas. Se desmayó a causa de la sorpresa.―, contó para asentamiento. ―Yasaka-sama, tengo muchas dudas al respecto de este mundo.―, intentó ir al punto de la reunión.

―Por supuesto. Sin embargo, antes de conversar.―, Ella hizo una señal a las sirvientas que rodearon a un cauteloso protagonista. ―Por favor, no te preocupes, la verdad estoy encantada de que estés aquí, y le daremos a la humana un lugar para descansar.

Hizo una reverencia agradecido, decidiendo confiar en la reina de los Yokai.

― ― ―

Estaba avergonzado. La causa de ello, fue debido a que muchas mujeres de la nada lo desnudaron.

Y ahora se encontraba parado frente a un espejo.

Yasaka que estaba a sus espaldas, bebía una taza de té, esperando a que sus doncellas hicieran todo el trabajo para el chico.

Izuku empezó a ser vestido nuevamente, un kimono sumamente elegante que dejaba sus colas en plena libertad, por encima una especie de tela sumamente suave que se sostenía en su cintura.

La tela era negra con diseños de calaveras verdes y líneas del mismo color impresas.

Izuku se vio obligado a ponerse como una postura elegante. Mientras era levemente maquillado y sus cejas se cortaban ligeramente para que tuvieran una alineación perfecta.

Mientras las doncellas hacían lo que querían con él, sinceramente se abrumó un poco.

Para el ultimó detalle, una de las doncellas llevo una corona en sus manos, caminando con sumo cuidado y precaución para no tirar el importante objeto de oro.

Ella le colocó la corona suavemente.

Después de casi media hora, estaba sentado frente a la líder. Una doncella se acerco para el susto del chico que se negaba a recibir más tratamiento de belleza. Pero solamente ella se encargo de darle un poco de té y comida.

―¿Era necesario todo esto?―, Cuestiono, para asentimiento delicado en respuestas.

―Claro que es necesario, un miembro de la realeza se debe ver perfecto en todo momento.―, Contesto en un tono elegante. Bebiendo un poco de su té, suspiró satisfecha.

―¿Yo? ¿Realeza? ¿Acaso soy tu hijo?-, Preguntó para una nueva negación de la hermosa mujer.

―Nosotros somos una especie rara de Yōkai. Bendecidos por la misma Diosa del Sol, Amaterasu-sama. Eventualmente, estamos destinados a gobernar sobre los demás Yokai. Desde el primer Kyūbi, el liderato se paso de generación en generación sin fallas.―, Contestó mirando al chico.

Amaterasu. ¿Ella lo trajo a este mundo? Tenía sentido, la característica más notable de la mujer sonriente en sus sueños, brillaba resplandeciente.

―¿Hay una posibilidad de tener una reunión con Amaterasu-sama?―, Decidió mantener un gran respetó, no sabía que tan adorada era esa diosa para los Yokai, y temía usar un termino inferior y causar el enfado de la mujer que estaba frente a él.

―No hay forma. Si ella no te llama, no es correcto aparecer frente a ella.―, comentó, causando una pequeña mueca de disgustó en el niño. ―¿Para qué deseas verte con ella?―, preguntó.

...

Hubo un breve silenció, hasta que contestó, contaría parte de su historia, su nueva historia.

―Viví cómo humano huérfano desde que tengo memoria; no fue malo, sin embargo, en mi mente siempre llegaba una mujer brillante que me sonreía. Pienso que ella es mi madre.-, Contó, sin saber en verdad si mentía en lo ultimó.

Nació en sus brazos, ¿no?

Yasaka por otro lado, lució sinceramente sorprendida, ni ella fue capaz de ver a la deidad suprema. Nacida a causa de una familia de zorro comunes, a través de los años fue demostrando sus nuevas colas. Hasta alcanzar las nueves y suplantar al antiguo líder.

El primer zorro de nueve colas, fue en realidad una mujer, creada por un dios sintoísta. Inari, Dios de la fertilidad.

Ellos estaban conectados con los cielos divinos, directamente, bendecidos por una fuerza mayor.

Pero un zorro creado directamente por la diosa suprema?

Eso sonaba como una locura. Pero no fue capaz de detectar mentirás en él pequeño zorro de tres colas.

―Si es cómo dices, lamento decirte que ahora es imposible contactar con ella y su paradero. Ella te llamará, por eso necesitas ser un poco más paciente.―, Comentó.

Izuku hizo otra leve mueca, sinceramente la ansiedad de ubicar a la diosa era demasiada, continuaba deseando volver a su hogar, a su mundo.

―¿Ella es capaz de enviar personas a otros mundos?―, Preguntó seriamente, no tenía tiempo para esperar a la divinidad.

―¿Qué?―, Sorprendida por la inesperada pregunta, dudo un poco en que contestar.

―Si ella tiene el poder de enviar personas a otro mundo.―, preguntó nuevamente, obteniendo una negación con cierta incredulidad.

―Amaterasu-sama es poderosa, pero ¿Enviar a personas a otro mundo? Es demasiado, incluso para ella, desconozco esa información, pero sigue sonando como una idea loca.―, comentó.

Izuku puso una mirada pensativa. ¿Y si la divinidad no fue consciente de su llegada cuando nació?

No importaba verdaderamente, le iba a dar detalles de que literalmente secuestró su alma para dejarlo sin nada en otro mundo.

Lo que en verdad fue preocupante. ¿Y si ella no es capaz de volverlo a su mundo? ¿Quién seria capaz?

―Existe una criatura sobrenatural capaz de viajar entre dimensiones?―, Preguntó, para un ceño fruncido de Yasaka.

No comprendía porque este pequeño zorro le hacía tantas preguntas sobre otros mundos o dimensiones.

―No, solo existe un ser en todo los mundo capaz de viajar entre dimensiones. Gran Rojo. Vaga por la brecha dimensional como si fuera su jardín.―, contó. ―¿Puedo saber por qué estás tan ansioso por este tema?

Izuku bajo su mirada de nuevo. Si nadie es capaz solo necesitaba encontrar a este "Gran Rojo" su nombre sonaba un tanto arrogante, ¿no?

Él ignoro la pregunta de la líder como si no lo hubiera escuchado, decirle al respecto de su antigua vida no funcionaria de nada.

Ella le comentó que no había nadie capaz de viajar entre dimensiones o mundos, solo este "gran rojo".

―¿Cómo encuentro a Gran rojo?― preguntó.

―Es imposible, no tengo idea de que tratas, pero Gran Rojo es una entidad poderosa, la más poderosa de todos los reinos.―, Comentó seriamente. ―Si desea destruirnos a todos, simplemente lo hace, sin embargo no representamos nada para él. La brecha dimensional es su hogar, un lugar donde nadie puede estar debido a las condiciones. El más fuerte del mundo sobrenatural actualmente es una larva a su lado.

Ahora comprendió que "Gran rojo" no era un sujeto arrogante, tenía bien ganado ese título. Sus esperanzas de volver a su hogar se reducían considerablemente.

Necesitaba hablar con la deidad.

Izuku suspiró, no sabia que hacer. ―Ya veo.―, susurro desanimado, había venido para nada. ―Ahora que estoy aquí, y soy un "príncipe" ¿necesito cumplir algún rol?―, preguntó, intentando cambiar de conversación.

―Por ahora solo recibir educación avanzada, ¿hace cuánto has descubierto el mundo sobrenatural?―, Preguntó de regresó, pero todavía continúo intrigada sobre la conversación anterior.

―De hecho, la mujer que cargaba, ella un día observo una batalla sobrenatural, creo que has participado en ella contra unos ángeles caídos.―, Contestó. ―Ella los dibujo y hoy descubrí prácticamente el mundo sobrenatural.

―¿Descubriste el mundo sobrenatural este día y has venido sin precaución alguna?―, cuestiono, ella no intento regañarlo, puesto que era un niño, tendría intriga de conocerlos, pero fue una decisión verdaderamente imprudente.

―Soy consciente de que fue una decisión imprudente, pero mi fuerza y sentidos no humanos, necesitaba saber quién era en verdad. Al menos decidí bien al venir hasta aquí.―, respondió.

―Ahora que eres consciente de ello, necesitaras ser más cauteloso. Fuiste afortunado de haber venido aquí, en otro lugar te habrían detectado como enemigo debido a tu naturaleza.―, Ella comentó. ―Desde que descubriste el mundo sobrenatural eres parte de ella. No todos serán neutrales.

Izuku asintió en acuerdo, comprendiendo la situación, ahora como una especie de "príncipe" cualquier criatura hostil a esta facción intentaría atacarlo.

―Por cierto.―, Yasaka sonrió de manera juguetona, para nerviosismo del protagonista. ―No te has presentado hasta ahora, hablamos de otros mundos o dimensiones pero no de tu nombre.

Izuku paso a rojo por la vergüenza. ―¡Lo siento! Mi nombre es Izuku..―, Ahora que fue adoptado, pensó un breve segundo. ―Tachibana Izuku.

Yasaka asintió satisfecha. ―Bien, encantada, Izuku-kun. Por ahora, continuáremos nuestra conversación mañana, ¿bien?

Él asintió de nuevo. ―Entendido, Yasaka-sama, iré en busca de mi hermana y nos iremos.―, comentó para la rápida negación de la mujer.

―Por supuesto que no, es muy tarde, y los ángeles caídos hacen de las suyas por ahí. Pueden quedarse aquí el tiempo que deseen.―, Se levanto lentamente.

Izuku tragó un poco, desviando un poco el tema, su fuerza de voluntad para no bajar su mirada a los grandes pechos de la mujer fue admirable, verdaderamente admirable.

Para no buscar faltarle el respetó a la dama, se levanto para hacer una respetuosa reverencia.

Necesitaba abandonar esta habitación.

Pero antes;

― Mi hermana no esta aquí, pero agradecemos totalmente su hospitalidad, Yasaka-sama.―, Agradeció para recibir una cálida sonrisa de la dama. ―Y antes de retirarme, ¿puede decirme como hacer desaparecer todo esto?―, señalo sus colas y sus orejas de zorro.

―Piensa en ello como un interruptor en tu vientre.―, Ella toco su propio vientre enseñándole en donde concentrarse.

Izuku supo que hacer. Recordando su entrenamiento con su maestro [Gran Torino], el huevo dentro del microondas. Esto debía ser casi similar.

Unos segundos fueron suficientes para que sus rasgos de zorros desaparecieran por arte de magia.

―Excelente, pensé que tardarías un poco más, en verdad impresionante.-, Felicito acercándose a él, acaricio su cabello cariñosamente.

―Gracias, Yasaka-sama.―, Izuku bajo su mirada nuevamente rojo como un tomate, la cercanía produjo que ambos pechos se acercaran a su rostro considerablemente.

―Nos vemos mañana, ¿si?―, preguntó para asentimiento del niño. ―Bien, ahora sigue a la doncella, te llevará a la habitación donde esta tu hermana.

Izuku hizo una reverencia, separándose de la hermosa mujer.

― ― ―

Caminando entre unos pasillos oscuros. Yasaka mantenía una pequeña sonrisa, a su lado, le acompañaba su guardiana, la mujer que se encargo de guiar a nuestro protagonista hasta ella.

―¿Qué le parece el joven, mi señora?-, Estaba curiosa por el descubrimiento de un Joven Kyūbi.

―Me resulta curioso, la verdad.

Un acontecimiento llamo su atención. Una energía espiritual sumamente poderosa y brillante.
Como si se acercará a un pequeño sol que estaba en constante calma.
Temió su descontrol, un pequeño sol que ante un ligero detonante, conseguiría consumir todo a su alrededor.

Supuestamente él estuvo en brazos de la deidad suprema.

Y si eso resultaba correcto. Este chico al crecer seria un monstruoso ser de energía destructiva.

Quizás exageraba, pero no dudaba de la diosa suprema, él chico podría tener un potencial casi divino.

―Me sorprendió su comentario anterior, mi señora.―, Sin ser consciente de los pensamientos de su señora.

―¿Cual comentario?―, preguntó.

• "Somos los únicos de nuestra especie, hay una gran oportunidad de reproducción ahora."

―Oh~ Vaya, vaya, bueno, quién sabe.-, Rio elegantemente. No pensó en eso, era tan solo un pequeño niño, no le interesaba ese asunto. Al menos no por ahora.

Ella ingresó a una habitación, necesitaba notificar sobre un nuevo Kyūbi No Kitsune.

― ― ―

Izuku entro a la habitación donde descansaba Hana. Ella dormía cómodamente en un futón, mientras el viento fresco ingresaba a través de la puerta abierta que apuntaba al jardín trasero.

Cuando apenas entro a la habitación, ella se sentó de inmediato, viendo en todas direcciones solamente para ver al protagonista.

―¿Estás bien? Lo siento tanto.―, Ella se levanto casi de inmediato.

―No sucedió nada, no te preocupes por nada. No hay hostilidad.―, Él tomo los hombros de Hana que se arrodillo ante él.

―¿Qué paso?―, preguntó notando la corona de oro brillante en el chico. ―¿Eso es una corona?

Asintió con una sonrisa nerviosa. ―Descubrí que soy de una raza extraña, y esta raza es de la realeza, ahora soy el rey de la facción Yokai.

―¡¿Qué?!―, Este día había sido demasiado para ella.

―Es broma, solo soy una especie de príncipe.―, Comentó para causar que Hana abriera su boca en incredulidad.

―Lo dices como si no fuera menos, ¿en serio ahora eres un príncipe?―, Preguntó, viendo las elegantes prendas del protagonista, con tan solo ver esto, dejó de tener dudas.

―¿Recuerdas cuando hablamos de la mujer zorro de grandes pechos?―, preguntó.

―¿Si?―, Recordó al momento, su amor platónico no muy heterosexual.

―Unos segundos después de que te desmayaste, ella apareció para recibirnos.―, Contó, cuando su cuidadora estuvo a punto de desmayarse de nuevo.

―Sus..―, Moviendo sus ambos a la altura de pecho. ―¿Son igual de grandes que mi dibujo?

Hubo un silenció.

―Es más grande.―, Confeso, nunca fue un pervertido como su amigo [Mineta] él quedaría impactado, moriría por tal belleza.

Hana babeo de forma asquerosa.
Recuperándose, se limpió con la manga de su camisa. Mirando de nuevo protagonista.

―¿Puedo conocerla?―, Preguntó.

Negó. ―Creo que mañana nos reuniremos, ahora nos dejo quedarnos esta noche.

Izuku se acerco a una pequeña mesa, cuando iba a tomar su corona dorada, esta misma de la nada desapareció.

Subió una ceja.

Pensó en la corona, y concentro en su cabeza, y la corona volvió a aparecer.

Vaya cosa innecesaria, ¿era para mostrar su postura? Al menos no se lo robarían, le gustaba mucho.

Camino hasta su armario, y enrollado dentro del lugar, había un futón.

Él claramente lo tomo y camino de nuevo hasta su cuidadora, deteniéndose a unos metros de ella, empezó a acomodar todo para dormirse.

Tan pronto ordeno todo, se acostó.

Cuando alguien entro a su futón. Hana bostezo mientras se estiraba notablemente. Ella abrazó al chico, poniendo una pequeña sonrisa ante una pequeño calor que transmitía él.

―Hana tenés tu propio futón ahí.―, Empujó un poquito a la mujer. Pero ella volvió a unirse al abrazo.

Unos minutos después se durmieron.

― ― ―

Izuku caminaba con unos pasos exageradamente elegantes, no sabía sobre etiquetas de las altas sociedades.

―Izuku estás caminando cómo un payaso, detente, me provocas vergüenza ajena.―, Hana miraba sin dudas incrédula.

Izuku se sonrojó de pena, volviendo a caminar normalmente. Hana después de llamar a la escuela para notificar su falta debido a que estaba enferma.

No se le daba actuar como un noble.

Hana se detuvo frente un espejo, arreglándose un poco su ropa y su peinado perfectamente recogido, sin un solo mechón desordenado.

Su ropa era un impermeable, debajo lleva una camisa y una falda negras. Ajusto su las prendas para verse lo mejor posible.

―¿Cómo me veo?―, Preguntó mirando a su por ahora único confidente.

―Ah.. Si, está bien, ¿por qué te preparas tanto?―, Preguntó de regresó. ―Perdón la brusquedad, pero ¿eres lesbiana?―, cuestiono, ella adquirió una cierta obsesión por Yasaka.

―Conozco bien mis preferencias; tuve un novio, no ha sido la mejor pareja, pero era divertido. Se desanimaba muy rápido, pero valoraba su esfuerzo.-, comentaba nerviosa. ―Además, ella es muy hermosa, no? Cualquier mujer dudaría de sus preferencias, no hay nada de malo intentar, ¿cierto?

Izuku subió una ceja. ―Creo que lo primero no me interesa para nada, ni respondía a mis dudas.

Ambos continuaron su recorrido a un paso lento, siguiendo a una de las doncellas.

―Me tiembla todo.―, Confeso Hana en un tono bajo, parados frente a la puerta.

―Es amable, dudo que te sea indiferente porque eres una humana. ¿Quieres que te tome una fotografía de recuerdo?―, Preguntó.

Como si estuvieran conociendo personalmente un famoso, ella asintió ansiosamente, extendiéndole su celular, un pequeño Nokia.

―¿Crees que ella acceda?―, Regresó la pregunta para asentimiento del chico.

―Tal vez, hay una altas probabilidades.―, Contestó cuando una doncella abrió la puerta.

―Yasaka-sama desea de sus presencias, ingresen, por favor.―, Ella abrió más la entrada para que ambos ingresarán.

Hana por ultima vez se frotó en cabello en busca de que sea perfecto. Ingresando detrás del protagonista, pudo verla. Tal y cómo recordaba, una belleza sin igual.

Yakasa vestía con un bonito kimono amarillo, un obi dorado y llevaba una piel oscura, con calaveras y líneas doradas impresas en ella.

[Autor: Fue la más digna en sus tiempos.]

―Buenos días, Izuku-kun.―, Saludó cortésmente, echándole un vistazo rápido al niño para pasar su mirada a la embobada humana.

―Buenos días, Yasaka-sama. Te presento a mi cuidadora, Tachibana Hana, ella es una admiradora suya, ¿puede darle el honor de una fotografía?―, Con suma formalidad y respetó, él enseño el celular.

―¿Um? Si, claro, mientras no le enseñe a ningún humano más, no hay problemas.―, Yasaka no tuvo problemas en darle una foto a su "admiradora".

Izuku observo a la hipnotizada Hana. ―Hana-san, si quieres una foto no seas descortés y acércate tú.―, Izuku empujó levemente a su maestra, ella le dio un rápido vistazo para asentir.

Hana tragó duramente, Izuku había creado esta oportunidad para entablar una conversación. ―Yasaka-sama, es un completó honor; admiro mucho su fuerza cuando se enfrento a aquellos ángeles caídos, y admiro mucho su belleza.

Yasaka sonrió. ―Gracias, Tachibana-san.

Izuku apunto su teléfono. Hana adquirió una sonrisa de oreja a oreja, mientras Yasaka sonrió con cierto toque de elegancia.

Después de tomar la fotografía de mala calidad debido al teléfono. Izuku termino por devolverle el teléfono mientras Hana se daba muchos golpes en la frente a causa a la exageradas reverencias y agradecimientos.

―No es nada, en serio.―, Yasaka detuvo a la mujer humana con un toque de nervios.

―Hana, estás incomodando.―, Llamo nuestro protagonista, cuando automáticamente se detuvo. ―Lo siento, Yasaka-sama, si me da un poco de pena decir que es mi cuidadora.―, comentó.

―En verdad, no pasa nada.―, Desestimo la situación, sinceramente no le intereso la situación. Sin embargo, lo que si le incomodaba, era poder oler la excitación de la mujer.

―Hana necesitas controlarte, podemos oler tu emoción.―, Le susurró.

―¡Lo siento mucho!―, Exclamo, intentando calmar su emociones.

Izuku observo a la reina. Yasaka también le termino devolviendo la mirada.

―¿Qué tanto saben del mundo sobrenatural?―, Inicio la conversación con nuestro protagonista.

―No mucho, en realidad, nada.―, Confeso. ―Ella cuando descubrió de los seres sobrenaturales, se encontró con varios seres; Ángeles caídos, Yokai, Monstruos deformes.―, Resumió.

―¿Monstruos deformes?―, preguntó con una ceja elevada.

―No sabemos. Pero antes de venir aquí, ideé una hipótesis; ¿hay varías facciones sobrenaturales?―, preguntó.

―¿En qué te basas?―, devolvió la pregunta.

―Yokai, vienen mayormente de los mitos sintoístas, pero también son parte de china. Por otro lado, los ángeles caídos son bíblicos, desobedecieron la volutad de su creador por alguna mala acción. Por eso, ambos son diferentes, ¿verdad?―, se pregunto. ―Entonces, deben haber otros mitos; nórdica, egipcia, griega.

Yasaka sonrió mientras asentía. ―Tu hipótesis es inteligente, y bastante acertada. Hay muchos panteones en el mundo sobrenatural, ocultó de los humanos que nos tratan como seres mitológicos.

Hana que también deseaba ser parte de la conversación, preguntó. ―¿Por qué criaturas tan poderosas como ustedes no atacan al mundo humano?-, Cuestiono.

Se puso pensativa, había sido una buena pregunta para ella. ―Algunos humanos, nacen siendo especiales; hay poderes en ellos. Dados por su creador, el Dios bíblico.―, comentó.

Izuku se intereso, ¿seria como en su mundo? ―¿Poderes?

Ella asintió lentamente. ―Se les llama [Sacred Gear] artefactos poderosos que son otorgados por su creador a los humanos. Hay muchas habilidades impresionantes en ellas, y las que más destacan son las longinus, armas capaces de asesinar a un Dios.

Eso había sido una sincera sorpresa, ¿armas capaces de asesinar dioses?

―Entonces, Dios es único, ¿es el más poderoso del mundo sobrenatural?―, preguntó. ―Dar armas para matar dioses no creo que lo haría un dios normal.―, Teorizo para asentimiento de la mujer.

―Dios es uno de los más poderosos del mundo sobrenatural, si. Atacar al mundo humano es cómo declarar guerra, y también hay panteones sin hostilidades a los humanos. Cómo nosotros.―, Comentó.

―Y es mejor mantener ignorantes a los humanos.―, Murmuro.

―Considero que los humanos son la facción más potencialmente poderosa. Y aunque se escuche mal, es mejor mantener está ignorancia en ellos.―, Contestó, manteniendo cierta precaución en sus palabras, sin buscar ofender a la única humana de la sala.

―¿Entonces los humanos no llegan a activar sus artefactos?―, preguntó de nuevo.

―No todo el mundo tiene un poder, solo los que tienen talento en ello, y cuando son conscientes, son capaces de despertarlos.―, Confirmo.

―Y cómo la humanidad no se dio cuenta de esto?―, Preguntó ahora Hana.

―Muchos de ellos terminan en manos del panteón demoniaco bíblico y de los ángeles caídos. Otros se transforman en ciervos del vaticano o son directamente ángeles.―, contestó. ―Son como contratados por el panteón bíblico.

―¿Demoniaco, ángeles caídos? ¿No son lo mismo?―, Preguntó Izuku para negación de la mujer.

―Lucifer, Beelzebub. Leviathan y Asmodeus son de la facción demoniaca, con ellos las 72 pilares de Ars Goetia.―, Contó. ―Y los ángeles caídos: Azazel, Kokabiel, Baraqiel, Shemhazai.

Si ambos traicionaron a su creador. ¿Por qué no se unifican? Pequeñas cuestiones, había un extenso mundo ocultó. Necesitaría explorar mucho para buscar alguna solución a su problemas.

―¿Y cómo es nuestra facción?―, Preguntó, había preguntado del mundo humano y bíblico pero no de su ahora panteón.

―El panteón Yokai se divide en dos. Oeste nuestra facción, ocupamos todo el territorio de Kioto. Y la facción Yokai del Este, que ocupa el territorio de Kanto.―, Yasaka empezó a explicar sobre su panteón.

―¿Uh? ¿Eh? ¿Estamos en Kioto?―, Hana preguntó para asentimiento de Yasaka.

Esto había sido sorprendente para Hana. Izuku por otra parte subió una ceja.

―¿Acaso hay una enemistad?―, Preguntó, causando la leve risa nerviosa del Yasaka.

―No exactamente, nuestras diferencias de pensamientos no nos dejan ser tan unidos la verdad. Ellos eran bastantes bromistas, confianzudos, no solo con nosotros, sino también con los humanos. Pero un desacuerdo entre unos clanes humanos y ellos provoco que se volvieran más reservados.―, Explico mientras unas de las sirventad traían los desayunos para los tres.

―¿Se puede saber de eso?―, Preguntó. ―¿Cuales son estás diferencias de pensamientos?

―Todo empieza con los clanes humanos, encargados de purificar el mal y proteger su territorio. Ellos tenían un acuerdo con la facción del este, no estoy al tanto de ello, pero algo llegó a romper ese acuerdo.―, Comentó. ―Los más jóvenes se volvieron un tanto rencorosos con los humanos, más con los que tienen una [Sacred Gear] nosotros por otro lado, no tenemos ningún desacuerdo con nuestro panteón. Y no somos hostiles a los humanos, menos a estos cinco clanes sagrados.

―Al menos no hay tensiones, ¿verdad?

Ella negó. ―No hay tensiones, pero tampoco somos cercanos, al menos no cómo antes.

Izuku asintió relajado, por lo menos no tendría que participar en una nueva guerra.

―¿Entonces estamos todos conectados de alguna manera a los dioses sintoístas?―, preguntó.

―Ellos son neutrales a todo, nos dejan tomar nuestras propias decisiones.―, contestó. ―Pero..―, mirando de un lado a otro de manera cautelosa, susurro. ―Ellos tienen cierto favoritismo por estos clanes humanos.―, Rió nerviosa.

―Has hablado muchos de estos clanes, ¿Quiénes son en realidad?―, Preguntó.

―Los cinco clanes sintoístas; ellos tienen conexiones divinas con los dioses sintoístas y los han servido durante generaciones. La mayoría de sus miembros desde la antigüedad han sido bendecidos con poderes espirituales. Son muy desconfiados a las criaturas sobrenaturales, cualquier cosa sobrenatural que no sea sintoísta es herejía para ellos.

Ahora más o menos era consciente de este especie de rol. Dioses sintoístas - Yōkai - Clanes humanos.

―Seria increíble conocer el mundo sobrenatural.―, Hana chilló entusiasmada.

―El mundo sobrenatural es peligroso para un humano, has tenido una gran suerte hasta ahora de no ser encontrada después de tus observaciones. Ten más cuidado desde ahora.―, Yasaka le recomendó muy seriamente.

―¿No hay una manera de saber si ella tiene un [Sacred Gear]?―, Preguntó.

Ella puso su mirada en una ahora nerviosa Hana. Unos segundos pasaban, y no había alguna palabra de Yasaka.

―Intenta imaginar a alguien que consideres poderoso.―, Comentó después de esos segundos de silenció.

―¿Alguien poderoso?―, preguntó.

―Correcto, alguien poderoso. Una pose o algo en particular.

Hana empezó a girar, mientras hacía poses, poses de sailor moon en plena transformación. Izuku se mantuvo expectante con bastante intereses.

No sucedió nada.

―¿No tengo nada?―, Desilusionada.

―Siento algo, pero no estás haciendo lo requerido. Tienes tiempo para aprender, pero estás segura de entrar al mundo sobrenatural?―, cuestiono. ―Tu vida normal habrá desaparecido eventualmente.

Hana pensó un segundo. ―Izuku ahora va a ser parte del mundo sobrenatural, no me quiero alejar de él. Es la única familia que me queda. No quiero estar sola de nuevo.

Izuku se entristeció. ¿Cómo reaccionaría ella ante sus pensamientos de querer volver a su hogar?

―Aquí estarán en plena seguridad, recibirás la mejor educación que puedas desear. Y en un futuro, la posibilidad de ser un gran líder.―, Yasaka observó a nuestro protagonista una vez más.

―Gracias, sin embargo quiero continuar viviendo en el mundo humano.―, Respondió para una rápida negación.

―Es muy riesgoso, tu supervivencia desde ahora es de suma importancia, Izuku.―, Negó.

―Entonces por favor, entrenarme para ser más poderoso por mi cuenta.―, Propuso, con una fuerza mayor, lograría explorar otros panteones, en busca de su objetivo.

―Para eso es la educación avanzada, aquí aprenderás absolutamente todo.-, Intentó tentar de nuevo.

―¿Y si nos mudamos a Kioto?―, Hana propuso, ella no quería separarse de Izuku que viviría en un mundo sobrenatural.

―¿Eso funcionaría?―, Izuku preguntó.

El panteón que cuidaba Kioto, obviamente se ocultaba en una especie de dimensión que separaba ambas realidades. Yasaka observo levemente a la mujer humana que también esperaba ansiosamente una aceptación.

―Si, si te acercas podremos protegerte. Ahora eres de gran importancia para nuestra panteón. Ten mucho cuidado, ¿bien?―, Pidió para asentimiento de nuestro protagonista.

Desde ahora iniciaba un nuevo camino para nuestro protagonista. Un mundo extenso sobrenatural, con grandes aventuras y peligros desconocidos.

Final del capítulo -

Próximo capítulo - [Senjutsu I]

¡Deja tu voto!

¿Qué poder debería darle a Hana? Para darle más utilidad en el futuro.