1 - Nuevo Mundo
Capítulo 1 - Nuevo Mundo
No recordó cómo todo inicio.
Pero si era capaz de recordar un sentimiento, un sentimiento de estar en un sueño profundo, un sueño perfecto, sin interrupciones, sin maldades.
Hasta que de repente, ese sueño se vio interrumpido cuando tuvo un "despertar".
Olvido de que trataba ese sueño.
Pero dejo de lado cuando tuvo consciencia por primera vez de sus alrededores.
Se había convertido en un bebé.
Un bebé de apenas un año.
Un bebé pequeño y gordo.
Su impacto claramente no fue el mejor, sin saber que sucedía.
Pensó rápidamente en la acción de un posible villano que lo volvió bebé.
Pero todas teorías paranoicas y terribles fueron desechadas cuando una anciana se acerco a él, hablándole de manera extraña con un biberón en manos.
Sin poder formular oraciones ni negarse, fue alimentado como el bebé que era.
Fue un sentimiento vergonzoso, todo lo que sucedió después fue vergonzoso.
Alimentado, bañado, todas las cosas que se hacían para cuidar a un bebé, ellos lo realizaban.
Personas desconocidas tocaban de buena manera su pequeño cuerpo.
Y cuando pudo formular algunas palabras. "Héroes". "Mamá". "Villanos".
Esas habían sido sus supuestas primeras palabras, raras palabras que esperaba que comprendieran.
Pero no fue así.
En el regazo de una cuidadora.
Ella miraba televisión tranquilamente mientras sostenía a un gordito bebé Izuku.
Izuku interesado en las noticias, estos solo hablaban de sucesos políticos, deportivos, económicos, climáticos, pero no hubo nada de héroes.
Raro.
Si todo giraba entorno a los héroes en su mundo. Una civilización concentrada por y para los héroes. Era raro que no saliera ni siquiera una noticia heroica.
―¿Héroes?
―¿Esto te aburre pequeño? ¿Quieres ver héroes?
Esto causo el interés del protagonista.
Hace algunos días comenzó a confiar en estás personas cuidadoras, después de todo supo que estaba en un orfanato.
―¡Héroes!
La señora empezó a cambiar de canal, en una extensa búsqueda de caricaturas, ella se detuvo hasta encontrar una del famoso hombre araña.
Izuku reconoció al mismo héroe a través de historietas, sin embargo, había algunos cambios, por supuesto porque era infantil.
Mientras la caricatura avanzaba.
Él solo pensaba en que ocurrió exactamente, dónde estaba su madre sus amigos, su maestro.
Pensando en sus recuerdos pasados.
Su mente llegó un repentino destello.
― ―
Él cuando se iba a dormir, sintió una sensación de ser despegado de algo importante.
Después de oscuridad, y entre ellas muchas sensaciones de calidez.
Era envuelto por una brillante luz, como si el mismo sol lo envolviera en un cálido abrazo.
Intentando forzar sus recuerdos.
Él puso una expresión sorprendida.
Recordaba la sonrisa de una mujer
Y un brilló antinatural.
Después, no recordó nada.
Un sueño profundo, y tuvo un despertar hace tan solo 3 semanas.
― ―
¿Quién era esa mujer? ¿Una villana?
Sinceramente forzar tantos pensamientos era abrumador, le hacía doler su pequeña cabeza.
Se termino durmiendo.
Mientras no sucediera nada, esperaría, no es como si pudiera hacer mucho para cambiar la situación.
Era un bebé que apenas podía gatear, más rápido que un bebé, sin embargo eso no ayudaría mucho con tantos adultos a su alrededor, cuidándolo en todo momento.
― ―
Después de un agradable sueño, se despertó en su cuna, no acostumbrado en despertar en un lugar donde no fuera su hogar, provocaba que solo pensará constantemente en todos los sucesos recientes.
Olfateó su ambiente.
Habían muchos niños en la misma habitación que él, y por el ambiente silencioso, todos dormían sin preocupación.
Un punto importante que aprendió no hace mucho.
Fue un inesperado sentido de audición y olfato bastante desarrollado, superior a su antiguo cuerpo, por mucho.
Era capaz de sentir la presecia de una persona a metros de él con tan solo su audición, y su nariz detectaba hasta cierto punto.
¿Acaso los bebés eran criaturas sobrenaturales o había desarrolado un super poder?
Eso ultimó era imposible, él era una persona sin un poder originalmente.
Su cuerpo seguía teniendo ciertas características suyas, como sus ojos verdes y su cabello del mismo color, incluso su propio nombre sin apellido.
Es imposible que fuera el mismo en otro cuerpo.
Cuerpo que si poseía poderes sobrenaturales.
Suspiró con resignación.
Se sentía impotente.
Pero ahora en su situación actual de bebé gordo no era capaz de hacer nada.
― ― ―
Ahora mismo sí, al menos.
Izuku de tan solo tres años, su mirada perdida exploraba un diario de noticias, mientras los adultos pasaban a su alrededor y miraban con sorpresa al pequeño niño.
Este mismo los ignoraba avanzando de paginas para descubrir más, hasta ahora, nada bueno.
En este tiempo, descubrió ciertas cosas perturbadoras de este lugar.
Para iniciar con lo más sencillo.
Por suerte continuaba en su país.
Esto no resultó nada nuevo, sus cuidadores eran japoneses.
Pero ahora no se encontraba en su ciudad, se encontraba en [Tokio] capital del país.
¿Cuál era la mala noticia?
Su cuidad natal, no estaba ubicado en el mapa de japón, en otras palabras, Musutafu, es una ciudad inexistente.
Otra de las noticias malas, es que se encontraba casi 40 años en el pasado.
Actualmente estaba en el año 2003, "nació" nuevamente en el año 2000, en un principio al presenciar estas fechas, se preguntó si volvió al mismo pasado.
Pero casi de inmediato supo a medio de otra noticia extraña que era mala.
La razón, sencilla, no habían personas con super poderes, como su ciudad natal, eran inexistentes, ni hubo indicios de mutaciones o de un bebé iluminado en china.
Las calles antes con muchas personas mutadas, ahora solo eran personas normales, adultos con trajes, adolescentes con uniformes escolares, niños que iban de la mano con su madres.
Todo era normal, pero sin poderes.
Una realidad confusa para su cabeza, no llegó a comprender de inmediato que sucedía realmente, ahora estaba demasiado aturdido y asustado como para pensar correctamente.
Sin héroes que lo ayudarán.
Ahora los héroes que tanto inspiro a ser, solo eran existentes dentro de unas historietas de ficción.
Sonaría como una teoría paranoica un tanto loca, sin embargo, ¿y si alguien lo trajo a este mundo desconocido por alguna razón?
Su mente, como si fuera iluminada, recordó los labios sonriente de una mujer, una imágen que quedó impregnada en sus recuerdos.
No fue capaz de reconocer a esa mujer. Puesto que ella estaba siendo iluminada por un brillo nada natural.
¿Acaso esa persona es Dios?
¿Una mujer? ¿Dios es mujer?
No tuvo nada en contra, no obstante muchas historias de creyentes remarcaban lo contrarió fielmente.
Pero su tuviera que apostar por una teoría loca, podría llegar a aceptar que un dios lo trajo aquí.
Su olfato desarrollado, su audición mejorada, una fuerza física sobrenatural en constante desarrolló, no comprendía porque 'Dios' lo traería a este lugar con estos aparentes dones.
¡Si no había humanos con poderes!
―¿Qué esta pasando realmente?―, Susurró, no siendo capaz de pensar en tantas cosas al mismo tiempo, su cabeza estaba estallando.
¿Qué sucedió en su antigua vida?
¿Qué sucedió con su madre?
¿Cómo estarían sus amigos?
Su maestro.
¿Qué podía hacer para regresar a su mundo?
Nada, ahora mismo es tan solo un niño, no es capaz de hacer nada para volver a su anterior vida, deseaba volver, aquí no tenía absolutamente nada.
Se masajeo el cabello bastante estresado. Cuando unas nubes lograron destapar los rayos del sol, una cálida luz cayó encima de nuestro protagonista.
¿?
Confundido, la calma empezó a apoderarse de su mente, también de su corazón. Todo pensamiento sobre su situación actual se desvanecían lentamente como si nada.
Su mente volvió a ser claridad.
Solo le tocó aceptar esta nueva realidad, no tenía idea de que hacer desde ahora, sin conocimiento ni objetivos nuevos por lograr, simplemente se volvió un cascaron vació.
Regresó por donde vino, hacía una señora que parecía buscarlo intensamente.
El tiempo no se detuvo.
Transcurriendo normalmente.
El pequeño antiguo maestro crecía.
―¡Pequeño Izuku!―, La cuidadora se acerco a él rápidamente. ―¿Qué te he dicho de abandonar la sala por tu propia cuenta, pequeño?―, Ella se arrodillo a la altura del niño, adquiriendo una expresión preocupada.
―Lo siento.―, se disculpo con honestidad.
Debido a ciertas circunstancias.
Fue inscrito a una primaría, ahora mismo contaba con sus 6 años en edad.
Nada cambio, no termino volviendo a su mundo por arte de magia, y sus esperanzas en despertar en su antiguo mundo casi desaparecían notablemente.
Estaba resignado a esta nueva vida.
Al menos contaba con la inteligencia de superar sencillamente primaría, secundaría, y se esforzaría un poco más recién en universidad.
Pero sin mucho que hacer en este cuerpo de niño, se dedico a estudiar.
―Bien, pequeño, no vuelvas a caminar solo por la escuela, te vas a perder, ¿entendido?―, Exclamó, ingresando a la sala donde habían más niños de su edad.
―Entendido, maestra.―, Contestó con un tono respetuoso y bastante formal.
De inmediato por incomodidad, bajó de los brazos de su maestra que lo llevo durante todo el camino.
Volvió a su asiento, dispuesto a dar su atención a estás clases bastantes aburridas.
Deseaba poder transformarse automáticamente en su versión adulta, pero eso es imposible, solo le quedo ser responsable.
Sin embargo, no tuvo interés, tampoco se esforzó nada en fingir ser un niño.
Comenzando con la sencilla actividad de matemáticas, sonrió un tanto nervioso, sus experiencias pasadas, él había sido un profesor de la prestigiosa academia de héroes.
Ser un niño de nuevo, literalmente, era raro e incomodó, bastante aburrido. Y todavía no es capaz de acostumbrarse del todo.
―Maestra, terminé mi actividad.―, En segundos, nuestro protagonista se levantó para caminar en dirección a su maestra.
La maestra sonrió, orgullosa de tener un alumno tan naturalmente talentoso, no siendo la primera vez que él mostraba sus deberes antes de tiempo.
―Buen trabajo, excelente, pequeño. Te has ganado varias estrellas por tu esplendido trabajo.―, Ella usó algunas calcomanías, y le dio de regresó su trabajo con una sonrisa.
―Gracias maestra.―, Sonrió, en el fondo estaba un poco desinteresado al respecto, sin embargo apreció el gesto sin dudas.
Era como si un jugador de nivel máximo volviera a los primeros niveles del mismo juego.
Izuku se sentó de nuevo.
En estos dos años, no ocurrió nada relevante, dos años bastante festivos para ser sincero.
No hubo cambios, tampoco algo que llamará su atención. Tan solo se dedico a estudiar, leer, y recientemente empezó a cultivar plantas.
―Oye, sabelotodo, ¿te crees superior a nosotros por terminar primero?―, Un niño con expresión malhumorada se acercó a él.
Mientras tanto sus pequeños compañeros rodearon a un nervioso protagonista. Sonrió con cierto nerviosismo, ¿Cómo pensaba en lidiar con estos niños sin herirlos?
Usar la violencia fue totalmente innecesaria, y él era un adulto maduro, ¿cómo se sentiría golpear unos niños pequeños con ciertos complejos de inferioridad?
Nada bien, más cuando una extraña fuerza sobrehumana se desarrollaba en su cuerpo.
Ahora mismo su pequeño cuerpo es igual de fuerte que un adolescente en etapa de madurez.
Una locura.
Cualquier daño que provocara en estos inocentes niños, seria un problema demasiado grave.
Izuku se levanto de su asiento.
Y los pequeño niños se intimidaron un poco por la diferencia de estatura, había cierta diferencia, pero no significativa.
―No soy superior a nadie, solo estudió mucho, ¿quieren un poco de ayuda? Si nos esforzamos todos juntos, tendremos menos tarea y más momentos libres.―, Izuku le sonrió de manera fraternal al pequeño niño
Los niños en su totalidad expectantes de la situación, habían sido rodeados por una inesperada calidez.
―¿Te parece bien?―, Preguntó, y el niño solo asintió sin resistencia.
Había sido sencillo que los niños no se sintieran mal por terminar sus tareas antes. Retomo su asiento, y los niños de salón empezaron a acercarse para iniciar a estudiar todos juntos.
Siendo instruidos por nuestro protagonista que tomo inesperadamente el rol de profesor.
La maestra que ingresó después de ir al baño un momento, se sorprendió cuando presencio a su alumno estrella rodeado por todos los niños a su cargo.
Todos estudiaban furiosamente, mientras parecían comprender mejor el tema de los estudios.
Esa misma tarde, tuvo que dar muchas calcomanías de estrellas.
― ―
Después de terminar el día escolar, él caminaba de la mano junto a una joven cuidadora bastante hermosa.
Ni por un segundo dejaba de pensar en su antigua vida. Y su cara pensativa había atraído la atención de dicha cuidadora.
―¿Estás bien, Izuku?―, Preguntó su cuidadora.
―Si, tan solo recordaba mi pasado.―, Murmuro, y dejó a un lado su rostro desanimado, para mirar hacía adelanté con suma atención.
―¿Cual pasado? ¿No tenés seis años?-, cuestiono incrédula, continuando observando al niño, sinceramente él para ella es todo un misterio. Su incredulidad aumento cuando el mismo niño negó con su cabeza en resignación, como si ella fuera una tonta.
Izuku se abstuvo de caminar, apretando con un poco más de fuerza la mano de la chica distraída, la obligo a detenerse, justo cuando un auto paso frente a ellos a una velocidad considerable.
―Debes dar tu atención al camino, Joven Brown.―, Regaño levemente.
―¿Ah? Ah, si, muchas gracias.―, Agradeció para poner su vista al frente nuevamente, aunque estaba extrañada, incluso incrédula por el regaño y porque un niño la llamo "Joven". Lo superaba por casi 15 años.
Cruzando la calle poco después. Ahora nuestro protagonista se encargaba de llevar a la chica, ayudándola a cruzar la misma calle correctamente.
Él era el adulto aquí.
―Señora, hemos llegado.―, Izuku saludo respetuosamente a la señora, dueña del mismo orfanato. Una mujer atenta y amorosa con todos los niños huérfanos.
―Bienvenido, pequeño, ¿cómo has estado?―, preguntó, ella se arrodillo frente al niño.
―Todo bien, señora, no hubo ningún problema.―, Izuku sonrió, se sentía bastante nostálgico con esta señora. Después de todo, la señora le recordó mucho a su madre.
Llegaba a calmarse bastante con la presencia de la señora cuidadora.
Después de algunas charlas.
Izuku camino a la sala de habitaciones, dejó su bolso escolar encima de su cama, mientras oía varios pasos acercarse a él.
Unos cuantos niños se adentraron a la sala, emocionados corrieron en dirección a nuestro protagonista.
―Hermano, bienvenido.―, La niña con su misma estatura, saludó con una brillante sonrisa de admiración y emoción.
Izuku en este orfanato, es el [Hermano Mayor] de todos.
Sin importar la edad, siendo menor a muchos niños, se gano rápidamente la buena estima de muchos de los niños del orfanato, por no decir todos.
―Gracias, ¿cómo han estado niños?-, Empezando a saludar a los adorables niños con mucho afecto,
―Todo en orden, hermano, ha ocurrido algo genial...―, cuando un niño estuvo a punto de contar sobre eso "genial" otra niña le tomo la palabra.
―Han venido adultos.―, La niña contó entusiasmado.
Izuku miró al pequeño grupo de niños, con su olfato, fue capaz de detectar algo, aquí le faltaban dos niños.
2 de sus 15 pollitos habían desaparecido.
―¡Si, han venido dos parejas! Se llevaron a Mai-chan y la otra pareja se llevo a Yuta-kun.―, La niña informo, contenta por sus dos compañeros.
―Esas son geniales noticias.―, sonrió obteniendo la misma emoción que la niña.
―Si, fue genial, pero estaban muy tristes de no poder despedirse de ti, hermano.―, volvió a concentrarse después de haber sido groseramente interrumpido.
Noto el cambio de ambiente. ―Uh, comprendo.―, sin dudas estos niños le habían tomado bastante estima. ―Pero no hay de que preocuparse, si un adulto llega para adoptarlos, yo estaré muy contentó por ustedes. Si es que no nos podemos despedir.―, como su héroe favorito, su maestro, le regaló a los niños una brillante sonrisa..
―Pero ¿y si no vienen por nosotros?-, Preguntó desanimado un niño que se sentó en la cama del protagonista.
La verdad, fue raro que vinieran tantos adultos para adoptar.
―Vendrán.―, Afirmo. ―Ahora no olviden de que me tienen a mi. Yo los voy a cuidar, niños.―, Había sido suficiente como para subir los ánimos de los niños.
―Hermano, si me adoptan, juro que te llevare conmigo.―, La niña se tomo sus propias mejillas, adorablemente sonrojadas.
―¡¿Qué?! ¡Claro que no, mi hermano viene conmigo.
Una disputa se había formado. Izuku sonrió nervioso, tras un momento como simple expectante, decidió con terminar la discusión.
―Bueno, bueno, es momento de calmarse, ahora vayan a jugar afuera.-, ordeno levemente, empujando suavemente a los niños que terminaron de discutir.
Esta es su nueva vida.
Escuela, cuidar de estos niños, cuidar sus plantas, una vida bastante común, sin inconvenientes ni cosas raras.
― ― ―
En un departamento bastante desordenado.
Una mujer fumaba.
Ella es [Hana Tachibana] maestra de una escuela primaría y maestra de nuestro protagonista.
Ella miraba las notas de su alumno estrella, en todas las materias, en todas destacaba.
Un niño demasiado prodigioso.
Deseaba mucho saber más de este pequeño niño, y como sabía que era un huérfano, tuvo las ansias de poder adoptarlos.
Aprender juntos sobre las criaturas.
Criaturas Sobrenaturales.
De fondo, hubo muchas imágenes fotográficas de criaturas oscuras con extensas alas negras.
En otras, extraños humanos con cabezas de aguilas.
Finalmente, monstruos demoniacos con apariencias muy deformadas.
Desde lo ocurrido hace tiempo.
Ella se obsesiono con las criaturas sobrenaturales.
Izuku prontamente tendría una motivación en este mundo.
La razón por la que fue traído.
― ―
Final Del Capítulo - [Gracias a todos]
Boku No Hero - High School DxD
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro