Meses después...

Era un hecho, habíamos adoptado legalmente a Tita como nuestra hija, lo que nos hizo aún más felices, de lo que ya éramos.

Más que contenta, revisaba los exámenes de primer semestre de los alumnos y sin dejar de pensar en mi amado, en que ya pronto regresara, mi corazón latió con anhelos e ilusión

Joakim había tenido que viajar a Londres para ver los contratos de una nueva gira, que daría con su banda el próximo año, por lo que nos habíamos quedado solas Tita y yo en la casa.

Después de que terminaron las clases, llevé a Tita a pasear al mall. Queríamos tener una tarde de compras de mamá e hija.

Ella iba feliz tomada de mi mano y yo realizada, le sonreí y caminábamos las dos contentas por el mall.

Pasamos por una tienda de juguetes y miré con cariño a Tita.

_ Mira mamá

_ Ven mi pequeña, entremos...

Corrió por todos los pasillos y yo detrás de ella, la seguía sin dejar de sonreír. De pronto sonó mi celular.

Era Joakim...

_ ¡Mi amor!

_ Hola niña mía ¿Cómo están las dos por allá?

_ Genial, de hecho, ahora Tita y yo estamos paseando aquí en el mall – sonrió.

_ Que bien mi vida

_ ¿Y a ti? ¿Cómo te ha ido allá?

_ Súper. Ya estamos casi listos con los muchachos

_ Oh. Eso me alegra – él sonrió con destellos.

_ Te extraño tanto

_ Y yo a ti. Solo quiero que vuelvas – escuché su suave risa.

_ Paciencia mi hermosa. Ya falta poco

_ Lo sé, pero hacía mucho que no te ibas así por tantos días

_ Calma mi vida. Todo sea para que tú y mi hija estén bien

_ Siempre lo estamos amor mío, ahora solo faltas tú. Te amo – sonrió intenso.

_ Yo también te amo mi hermosa. Te amo con todo mi corazón.

_ Mi Joakim

_ ¡Mamá, mira! –sonrió al oír a Tita llamarme por mamá. Yo la miré.

_ ¿Qué pasa mi amor?

_ Es una muñeca y camina sola

_ ¡Oh, pero que bonita! Espérame nena. Voy en seguida – escuché su risa y sonreí.

_ Jejeje, que tierna es, la escuché

_ Si es que vio una muñeca y creo que le gustó mucho – sonrió.

_ ¿Y cómo se ha portado? ¿Todo bien con ella?

_ Si. Es una gran niña – sonreí - También te extraña

_ Dile que yo también la echo de menos

_Puedes decírselo tú, déjame llamarla – volvió a sonreír.

_ Bueno

_ Tita, cariño, tú papá está en el celular. Quiere hablarte – ella sonrió.

_ Halo, papito – su corazón se le estremeció de alegría y ternura.

_ Hola nena ¿Cómo estás? ¿Cómo te has portado?

_ Muy bien papá. Mamá y yo te extrañamos mucho ¿Cuándo volverás? – él sonrió.

_ En unos días más mi cielo. Ya falta poco. Luego nos iremos de vacaciones los tres

_ ¡Sí! ¡De vacaciones!

_ Si cariño. Cuídate y cuida a tu mamá. Pórtate bien ¿De acuerdo?

_ Si papito. Te quiero mucho

_ Y yo a ti mi nenita hermosa – sonrió – Pásame a tu mamá

_ Si. Te queremos papá. Adiós

_ Y yo a ustedes. Adiós nenita

_ Toma mamá. Papi quiere hablarte – le sonreí y le recibí el celular.

_ Halo

_ Mi niña hermosa. Quería oírte antes de irme – me derretí.

_ Que tierno eres. Te amo tanto

_ Y yo a ti. Ya solo quiero regresarme, para tenerte en mis brazos y besarte como un loco

_ Yo también. Te quiero mucho

_ Y yo niña mía...

Miré una tierna muñeca de trapo y miré a Tita...

Ella feliz cargaba a su nueva muñeca y amiga, a la que había llamado Gaby. Gaby corrió junto a ella y Tita me dio un dulce beso y abraso.

_ Gracias mamá, eres la mejor

_ Mi pequeña...

Saliendo ambas de la tienda, tomé con cariño a Tita de su mano, bajamos las escaleras eléctricas y sin darnos cuenta, un extraño sujeto nos estaba mirando desde el frente y nos siguió...

Tita jugaba con su nueva muñeca y yo la miraba jugar, cuando Joakim llegó y mi corazón se llenó de alegría. Lo miré perdidamente y él me sonrió con destellos.

_ ¡Joakim! ¡Mi amor!

_ ¡Papá llegó!

Las dos corrimos a sus brazos y él rio más que feliz. Extendió sus brazos y cargó a Tita y a mí me abrazó con todo su amor.

_ Hola a las dos mujeres más hermosas de todo el mundo

_ ¡Hola papito!

_ Hola nena – me sonrió todo enamorado.

_ Hola mi vida

_ Mi Joakim. Te extrañé tanto

_ Y yo a ti, a las dos – le sonreí y él no se resistió más – Ven aquí

Me abrasó con más cariño y nos besamos. Tita tierna nos miró y se cubrió los ojos.

Nos sonreímos y le hicimos cariño a nuestra hija.

_ Bien mi amor, vaya a jugar con su amiguita Gaby

_ ¡Si mamá!

Joakim me sonrió y bajó a Tita y ella salió, corriendo, entusiasta con su muñeca de trapo. La miramos con cariño.

Él me miró con alegría y yo le sonreí.

_ Te extrañé tanto, niña mía

_ Y yo a ti mi Joakim – acarició mi mejilla.

_ ¿Cómo han estado las cosas aquí? ¿Todo bien?

_ Sí. Todo bien cariño

_ ¿Y Tita? ¿Cómo se portó? – me preguntó risueño.

_ Es una buena niña. Está tan feliz de estar aquí con nosotros ¿Te diste cuenta? Ya me dice mamá y a ti papá – sonrió con ternura.

_ Si de mi cuenta. Cuando te llamé el otro día y ella dulcemente me llamó papá

_ Si, es un sol. La adoro

_ Qué bueno que pudimos ganar el juicio y quedarnos con su adopción

_ Mi Joakim soy tan feliz

_ Y yo mi niña bella. Ahora con Tita, nuestra felicidad está completa

_ Te amo

_ Y yo

Me miró apasionado y nos besamos.

Al cabo de besarnos, nos sonreímos contentos y Joakim acarició mi rostro, cuando sonó su celular.

Contestó, yo lo miré con amor; el corazón me brincó de alegría y vi que Joakim se puso serio, más de lo normal. Me miró.

Tita jugaba afuera con su muñeca y otros juguetes, y yo preocupada por Joakim, él no dejó de mirarme, mientras hablaba por celular. Luego cortó.

_ ¿Qué pasa mi vida?

_ Emma... mi amor...

_ ¿Qué pasa Joakim? Me estás asustando

_ Era mi abogado. Me dijo que hace dos días salió en libertad, Maciel, el padrastro de Tita – temí lo peor.

_ ¡No! ¡No es posible! ¡Mi hija no! ¡Mi hija no!

Joakim me abrasó a su pecho y yo asustada, me puse a llorar. Él lo advirtió y acarició mi cabello.

_ Tranquila mi vida. No temas – más lo abrasé.

_ No quiero que me la quite. No quiero

_ Eso no va a pasar niña mía. Tita es legalmente nuestra hija y ese tipo, ni nadie, podrán quitárnosla – lo miré con mis ojos llenos de lágrimas.

_ ¿Y sí ese hombre puede? Tengo miedo – más me abrazó.

_ No pienses en eso. Ese mal hombre no se atreverá a acercarse a nosotros. Yo mismo colocaré una orden de alejamiento en su contra

_ Oh Joakim – más lo abrasé y él me abrasó con todo su amor.

_ Mi hermosa. Nadie nos la va a quitar. Hemos luchado tanto para tenerla y así lo seguirá siendo. Tita es nuestra hija y nadie cambiará eso - lo miré aun llorando y él me destelló con sus tiernos ojos celestes.

_ Te amo tanto Joakim

_ Y yo a ti mi pequeña parvularia

Le sonreí un poco más aliviada y él sin dejar de sonreírme, secó mis lágrimas y me cargó en sus brazos. Yo lo miré amándolo con todo mi corazón.

_ Mi hermosa. Ven, vamos a ver a nuestra pequeña jugar en el jardín

_ Si mi vida...

Llevó a Tita dormida en sus brazos y la recostó con cariño en su cama. Me sonrió perdidamente.

_ Está profundamente dormida

_ Si, es que hoy jugó y corrió mucho con sus otros compañeritos – no dejó de sonreírme.

_ Vamos, antes que se despierte

_ Si...

Me dijo en susurros y le cerramos despacio la puerta...

Nos miramos a los ojos y yo le acaricié su mejilla. Amó sentir el toque de mi mano en su piel.

_ Te extrañé tanto mi Emma

_ Y yo a ti amor mío – sin dejar de mirarme, suspiró con deseos.

_ Quiero hacerte el amor como un loco niña mía

_ Yo también te deseo mi vida. Te deseo mucho

_ Ven aquí entonces...

Me susurró, me ató a sus brazos y nos besamos largamente. Me cargó en sus brazos, sin dejar de besarnos y él se desabrochó rápidamente los jeans; me recostó suavemente sobre la cama y se tumbó sobre mí.

Yo amándolo más que antes, me perdí en sus deseosos labios y volvimos a besarnos e hicimos el amor.