Escondidas
Todos se encontraban sentados en el comedor, rodeados de un silencio incómodo. Los niños estaban adormilados, el mayor los acababa de despertar, el sueño todavía estaba en ellos ya que ayer se quedaron platicando hasta tarde con su padre. El único que tenía energía era el ruso, que movía sus pequeños pies mientras comía. El mayor trato de ignorarlo mientras le daba un sorbo a su café, pero sabía que el niño no se estaría en paz en todo el día.
USSR- Ya dilo. - Suspiro resignado dejando su taza de cafe en la mesa llamando la atención de todos.
El ruso sonrió victorioso imitando la acción de su padre pero con su taza de chocolate.
Rus- ¿Ellos ahora son nuestros hermanos? - Cuestiono apuntando a los alemanes que comían en silencio, aunque el menor de ambos miro disimuladamente al ruso.
USSR- No, ahora come. - Iba a volver a tomar su taza pero el pequeño kazajo hablo.
Kaz- ¿Entonces se van a quedar aquí?
USSR- Si. - Soltó secamente, solo quería terminarse si café.
Bie- ¿Sera por mucho tiempo? - Miro al mayor con intriga.
Ucr- ¿O para siempre? - Se paro en la silla asustando a la mayoría de sus hermanos, cosa que aprovecharon comenzando un revuelo lleno de gritos y empujones.
Letonia y Lituania se estaban peleando, otra vez, tratando de tirarse de sus sillas, Turkmenistán y Armenia se reían al ver como Azerbaiján y Uzbekistan peleaban inculpandose entre los dos por comerse las galletas, lo que no sabían era que Georgia y Kirguistán se estaban robando las galletas de todos, Kazajistán trataba de parar a los ladrones de galletas. Mientras tanto Tayikistán lloraba por que sintió que algo le agarro el pie, el mayor ya sabía que era Estonia tratando de anudar las agujetas de sus botas. Todo esto mientras tres de sus hijos observaban atentos esperando su respuesta.
USSR- Solo suspiro mientras con una mano sacaba a Estonia debajo de la mesa. - Hoy USA se reunirá conmigo para decidir que pasará con ellos.
Los tres hijos mayores miraron a su padre queriendo que les explicara un poco mas, a esas miradas también se le sumaron otras dos que provenían de los alemanes. Esto no duro mucho ya que el pequeño Lituania, por un enojo, aventó un poco de su comida al rostro de Letonia, así que este trato de hacer lo mismo pero por su mala puntería le dio a Ucrania a lo que este también tomo algo de comida y la lanzó. Y así es como inicio una guerra de comida.
USSR- ¿Por que tenían que ser 15 malditos niños? - Se lamento por lo bajo tratando de esquivar la comida.
Rus- ¿Puedo hacerte otra pregunta papá? - Su rostro estaba lleno de comida, por lo que el mayor trato de limpiar un poco con una servilleta.
USSR- Si no es un pregunta tonta, entonces si. - Hizo una mueca de disgusto al ver que solo embarro mas la comida.
Rus- ¿Podemos jugar con ellos?
El soviético se quedo sorprendido por la pregunta, aveces se olvidaba que los niños no entienden algunas cosas que pasan a su alrededor, como lo del matrimonio.
USSR- Te propongo algo. - El pequeño ruso sonrió por ello, eso significaba que su padre le diría que si. - Si limpian este desastre pueden jugar.
Eso cambio la expresión en el rostro del menor, limpiar, eso era como un castigo. Pero la curiosidad de jugar con los alemanes era muy grande.
Rus- Esta bien. - Dijo en un puchero sacándole una sonrisa a su padre, aunque se borro al sentir que algo de comida impactaba en su cara.
USSR- Suspiro pesadamente para después levantarse tratando de ignorar todo el escándalo. - Iré a mi cuarto a descansar, me despiertan si pasa algo importante. - Se tallo el rostro cansado siendo ignorado por todos sus hijos a excepción del ruso. - Solo no salgan al bosque.
Subió las escaleras directo a su cuarto, no sin antes mirar a los alemanes, sobretodo al menor que también lo miraba pero con un enojo que se notaba a leguas.
Rus- Entonces...a que quieren jugar. - El ruso se acerco a ambos alemanes que trataban de esquivar la comida.
RFA- A lo que sea menos a lanzar comida. - Recibió un golpe disimulado por parte de su hermano.
Rus- Le diré a mis hermanos. - El chico de la ushanka fue con el ucraniano a tratar de llamar su atención para calmar la pelea.
RFA- ¿Por que me golpeaste? No hice nada.
RDA- No le hables. - Desvío la mirada para no ver la de su hermano, que seguramente estaría enojado.
RFA- Ayer hablaste con el.
RDA- No debí de hacerlo, es hijo de ese señor.
RFA- Solo es un niño, y debemos aprender a convivir con el, no sabemos cuanto tiempo estaremos aquí. - Lo ultimo lo dijo con tristeza, ahora no tenían un lugar al que pudieran llamar hogar. - Y no comprendo por que odias tanto al señor USSR.
RDA- Es un secreto. - Bajo su mirada con un poco de rabia y tristeza al recordar a su padre y el soviético en el bosque.
RFA- Haz lo que quieras yo iré a jugar con ellos, necesito pensar en otra cosa que no sea papá. - Su hermano menor no dijo nada así que se levanto para buscar al pequeño ruso pero no tuvo que hacerlo ya que estaba justo frente a ellos...gritandole al ucraniano.
Rus- ¡Primero debemos recoger para jugar!
Ucr- ¡Tu no me mandas!
Rus- ¡Soy el mayor así que tienes que hacer lo que digo!
Ucr- ¡Solo eres mayor por un día, estúpido!
Rus- ¡Pero sigo siendo mayor!
Ucr- ¡Eres un estúpido bebé que sigue jugando con su peluche, por eso ya no quiero jugar contigo!
Rus- ¡Pues Bielorusia también juega con peluches!
Al ucraniano se le coloraron las mejillas al escuchar el nombre de su hermano, aunque solo se notaba en la mitad de la cara que era azul ya que la otra era roja.
Bie- ¿Ya no jugaras conmigo Ucrania? - Comenzó a hacer pucheros hasta que no aguantó mas y comenzó a llorar.
Rus- Bielo, no llores, el so...
Ucr- Hiciste llorar a Bielo.
Rus- ¡¿Que?! ¡Fuiste tu idiota!
Ucr- ¡No es cierto, fuiste tu! - Se lanzo arriba de su hermano comenzando una pelea de jalones, mordidas y pequeños golpes.
Kaz- No otra vez.
RFA- ¿Y ahora que harás, jugar a las mordidas con ellos?
Su tono burlón hizo que su hermano se decidiera por detener la pelea, pero no lo haría solo, así que tomo al menor de la mano llevándolo junto a los niños que estaban rodeando al par de hermanos buscapleitos mientras decían quien creían que ganaría esta vez.
RFA- Toma al chico de azul y rojo.
RDA- Los dos son azul y rojo.
RFA- El que tiene el gorro.
RDA- Si me muerde no respondo.
RFA- Solo tomalo y yo tomare al otro.
Ambos hermanos con mucho cuidado tomaron a un niño, aunque el ucraniano se retorcía con tal de zafarse del agarre del alemán, que solo trataba de que este no tirara sus gafas. En cambio Rusia...
El menor de los alemanes sostenía al ruso de su blusa como si fuera un gato o un perro, los ojos de ambos se conectaron, ambos con distintas emociones. Curiosidad y molestia se juntaron en un extraño y breve momento hasta que el menor sonrió inocente, cosa que avergonzó al mayor y rápidamente bajo al niño.
RFA- ¡Ali, podrías ayudarme! - Seguía tratando de mantener calmado a Ucrania que aun no se rendía y quería seguir peleando.
RDA- Ese no fue el trato.
RFA- Traicionero. - Entrecerro los ojos para reprochar a su hermano pero el ucraniano casi le tira los lentes. - Hey, calmate un poco, podemos jugar a las escondidas si te calmas.
Ucr- ¿Seguro?
RFA- Solo si le haces caso a tu hermano mayor.
Ucr- Esta bien.
Después de recoger empezaron a jugar a las escondidas en la casa, aunque RFA obligo a su hermanos a jugar. Ahora era el turno del ucraniano para buscar, algo fácil para él, al menos con la mayoría de sus hermanos que se la pasaban pensando o discutiendo sobre donde esconderse, al que siempre tardaba en encontrar era al ruso que estaba tan loco que una vez se escondió en el refrigerador.
Hablando del ruso, este trataba de encontrar un nuevo escondite ya que ahora todos lo buscan primero en la alacena o el refrigerador.
Ya sabia cual era su siguiente escondite, lo vio desde que llegaron a la cabaña por ''vacaciones'', que sabía eran por el trabajo de su padre. Era una puerta que estaba algo escondida, le había llamado la atención pensado que era un cuarto especial, pero media no mucho mas de 1 metro y habían algunas escobas y cosas de limpieza.
En cuanto divisó la puerta corrió hacia ella abriendola para meterse sin siquiera mirar dentro. Cerro con cuidado y al darse la vuelta vio al menor de los gemelos alemanes, lo reconocía por esa marca en su cara.
RDA- ¿Que haces aquí niño? - Lo dijo en voz baja por que no quería que los encontraran.
Rus- No, tu que haces aquí, este es mi escondite. - Dijo con el mismo tono, metiéndose mas al pequeño cuarto caminando pegado a la pared.
RDA- Yo entre primero aquí, busca otro lugar.
Rus- No me moveré de aquí. - Se sentó recargado en la pared mirando retador al mayor.
El alemán solo gruño como respuesta mientras se sentaba recargado en la pared frente al niño, solo que tuvo que doblar un poco las rodillas.
El silencio duro varios minutos en los cuales el mayor evitaba mirar al ruso, que era un caso contrario, ya que no paraba de mirarlo.
RDA- ¿Porque me miras? - La mirada del menor término por fastidiarlo, hasta parecía que no parpadeaba.
Rus- Por que quiero hablar contigo. - Definitivamente el alemán odiaba a los niños.
RDA- Pues yo no quiero.
Rus- ¿Por que no?. - O tal vez solo odiaba a este niño.
RDA- Mira niño, te explicare esto solo una vez, tarde o temprano mi hermano y yo nos separaremos y, tal vez, nunca mas nos volvamos a ver, y todo por culpa de tu padre.
Rus- Mi papá no haría eso... - Se quedo pensando un rato sobre la actitud de su padre con el trabajo. - O tal vez si.
RDA- ¿Y así quieres que actúe contigo como si fueras mi amigo?
Rus- Si, por que yo no soy mi papá.
Las miradas de ambos volvieron a chocar, parecía que ninguno de los dos sedería a la petición del otro, aunque claro esta que el pequeño tenia razón y eso lo sabia el alemán.
RDA- Deja de mirarme.
Rus- No.
Siguieron discutiendo hasta olvidarse de sus hermanos que los buscaban afuera. Tanto hablaron que se quedaron dormidos por casi una hora.
La puerta de la oficina de USSR sonó, no hubo respuesta de parte de este, así que el que llamaba a la puerta simplemente entro encontrándose con el soviético dormido sobre su escritorio.
Bie- Se quedo dormido.
USA- Ya me di cuenta. - No sabia si estar enojado o preocupado por el soviético.
Ucr- ¡Yo lo despierto! - El ucraniano se acercó al oído de su papá. - ¡Papá, Rusia le volvió a pedir matrimonio al maldito capitalista! - Volvió al lado de su hermano y del americano que lo miraba extrañado por como le había llamado. - Así te dice mi papá. - Volteo al escuchar murmuros de parte de su padre.
USSR- ¡¿Que Rusia que?! - Se levantó de golpe tirando varias cosas y sacando su arma de uno de sus cajones.
USA- ¡No hice nada! - Grito cuando el soviético le apunto arma.
Bie- Te quedaste dormido aquí, papá.
USSR- No vuelvan a abrir la puerta de la casa sin mi permiso. - Miro serio a los niños cuando reacciono a la presencia del mayor.
Ucr- Perdón, pero no dejaba de tocar la puerta.
USSR- Solo vayan a jugar y no dejen que sus hermanos entren.
Bie- Pero papá, Rus...
USSR- Esto es cosa de adultos.
Ucr- Pero...
USSR- Afuera niños. - Se levanto para sacar a los menores de la habitación y cerrar la puerta.
USA- Que buen padre eres.
USSR- Solo callate y sientate. - Volvió a sentarse en su silla tras el escritorio.
USA- Parece que alguien no durmió bien. - Recibió una mirada de fastidio, que casi lo hace reír, pero tenia que guardar la compostura. No podía olvidar los regaños de su padre.
USSR- Necesito un descanso de esto.
USA- Lastima que eso no se puede. - Se sentó frente al soviético mirando de reojo todos los papeles regados. - Todavía queda un país, que por cierto, no le has declarado la guerra.
USSR- Dije que lo haría cuando Reich estuviera muerto.
USA- Ya lo esta.
USSR- Ya lo se, pero eso apenas fue ayer. - Se estaba empezando a enojar por las palabras del contrario, aunque el otro no tuviera idea de por que.. - Dame tiempo, necesito volver a Moscu para dejar a mis hijos.
USA- Tienes una fecha limite y espero que cumplas tu palabra, soviet.
USSR- Te he dicho un millón de veces que me dejes de llamar así.
USA- ¿Donde están los niños? - Evadió el reclamo del soviético, no es como si le importara lo que a los demás les molesta.
USSR- ¿Los hijos de Reich?
USA- Se supone que solo vine para eso.
USSR- Están jugando con mis hijos. - Comenzó a ordenar los papeles del escritorio. - Ayer estaban tan asustados y tristes.
USA- ¿Les dijiste lo que pasara?
USSR- Ellos lo tienen muy claro.
USA- Ese maldito sabia lo que pasaría.
No hubo respuesta departe del menor, se quedo pensando en lo que le pasaría a el y a sus hijos. ¿Pasarian por lo mismo o podría hacer algo?
USA- ¡USSR! - Sacudió un poco al menor para que reaccionara.
USSR- ¿Que paso? - Pregunto confundido empujando levemente al estadounidense para que lo soltara, en cuanto lo soltó noto que los papeles que había ordenado volvían a estar regados.
USA- No lo se, te quedaste mirando a la nada.
USSR- Disculpa, no me siento muy bien. - Volvió a tomar los papeles y volver a acomodarlos.
USA- ¿Entonces estas de acuerdo con lo que te dije?
USSR- ¿Con que?
USA- ¿Estuve hablando como idiota todo este tiempo?
USSR- Es lo que siempre haces.
USA- Respiro profundo evitando gritar al soviético. - Tu cuidaras a esos dos niños en lo que hacemos la siguiente reunión.
USSR- ¡¿Que?! - Los papeles volvieron a regarse por 3 vez en menos de 1 hora. - ¡Sabes que cuido a 15 niños!
USA- 2 mas, 2 menos. No creo que sea tan difícil cuidarlo por unos meses.
USSR- ¡¿Meses?! ¡Esto no seria tan grave si no estuviéramos en guerra, creo que tu serias el indicado para cuidarlos!
USA- Te recuerdo que yo estoy ayudando a cuidar a ONU y, por obvias razones, a SDN, ellos son mas importantes.
USSR- ¿No puede cuidarlos alguien más?
Se escuchó la puerta abrirse.
USA- Aunque lo hubiera tu eres el indicado para cuidarlos, tu fuiste un gran amigo y rival de Reich, tal vez podrías enseñarles a ellos a no ser como su padre.
RFA- Disculpen.
Ambos adultos miraron al alemán que acababa de entrar con los hijos de USSR tras de el.
RFA- Rusia y mi hermano no están.
Ambos estaban mirando a los niños que estaban ''perdidos''. Después de horas buscándolos encontraron la puerta del pequeño cuarto encontrándose con ambos niños dormidos recargados el uno en el otro.
USA- Tu te quedarás con ese niño.
USSR- Si, si, lo que digas. - Cargo a Rusia y, con dificultad, a RDA. - Creo que es mejor que te vayas.
USA- Y yo que pensé que me invitarías a cenar.
USSR- Muy apenas soporto tu presencia.
USA- Lo mismo digo, Soviet. - Se dio media vuelta pero se detuvo al ver al mayor de los alemanes. - Nos vemos en unos meses. - Y salio de la pequeña casa sin decir nada mas.
Mol- Papá, ya esta la cena.
USSR- Enseguida voy pequeño, solo llevare a estos dos a su cuarto.
Primero dejo al ruso, que sorprendentemente seguía dormido después de que el soviético por accidente golpeara su cabeza con la puerta del cuarto. Después dejo al alemán, lo acostó y lo arropó, se dio la media vuelta dispuesto a salir pero una voz lo detuvo.
RDA- Te odio.
USSR- Lo se.
RDA- ¿Sabes por que?
USSR- Si.
RDA- Entonces no pretendas no saber nada.
USSR- No lo hago.
El mayor miro al niño, su rostro demostraba todo el rencor que tenis hacia él, el ''asesino'' de su padre.
USSR- Tengo un limite con mi paciencia, así que no te cuidado con lo que haces - Dijo mientras salía de la habitación. - Tu hermano esta cenando abajo, si quieres cenar con nosotros baja.
En cuanto el mayor salio del cuarto el alemán comenzó a llorar, quería a su padre, quería que el lo arropara, quería que el estuviera aquí en vez de esa familia tan extraña para el. Deseaba que su padre lo despertara diciendo que había tenido una pesadilla, se bajaran a hacer de almorzar juntos y salir a jugar con los perros.
Pero solo se quedara como un simple deseo.
Renací después de años sin publicar.
Ok no.
No se cuanto tengo sin publicar pero no tenia inspiración y por que estuve algo ocupada.
Pero volví.
¡Ay papantla tus hijos vuelaaannn!
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