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Mini maratón (2/3)


(Narra Yoongi)

Justo hace una semana y media que no tenemos a nuestra pequeña Sumin con nosotros.

La búsqueda ha sido tan exhaustiva que no se qué más hacer para poder tener a mi nena entre mis brazos, no se qué más hacer para volver a ver a mi pequeño Jimin siendo el mismo de antes y que ese brillo y esa luz vuelva a él.

Después de lo sucedido Jiminie entró en una crisis, pues él no reconoce a nadie, absolutamente a nadie más que a mí y el recuerdo de nuestra pequeña, tiene siempre entre sus manitas una sábana amarilla que él siempre decía que sería de nuestra pequeña y la foto que Tae logró sacar de nosotros.

Constantemente ve la foto, y llora día y noche ante el recuerdo de nuestra pequeña entre sus brazos.

Me siento débil, me siento vulnerable y un imbécil por no poder tener la suficiente fuerza de devolverle la felicidad a mi pequeño, me duele en el alma ver a mi pequeño Minnie en ese estado.

No come mucho, y cuando lo hace es inconscientemente, pareciera que estoy cuidando a un bebé grande. Lo baño yo mismo, lo cuido y lo alimento pues aunque Jin Hyung me ayuda a preparar la comida él no deja que nadie más se acerqué a nuestra habitación.

Jimin entra en crisis ante la presencia de alguien que no sea yo mismo, Jungkookie lloro cuando no lo reconoció ni a él, cuando se enojó al intentar acercarse, fue una escena desgarradora para todos.

Mi Jiminie a veces se me escapa, se va a la habitación de Sumin y llora por horas en ese lugar, se me dificulta sacarlo de ahí, por eso esperó a que se duerma entre mis brazos para poder llevarlo a nuestra habitación.

Juró que no se qué más hacer para que mi Jiminie sea el mismo de antes, el doctor Kim me ha dicho que necesita terapia psicológica, pero Jiminie no me deja llevarlo a ningún lado.

A si que mi única opción según el doctor Kim es que yo trate de hacerlo entrar en razón, que le hable de recuerdos de ambos, pero en todos no debo mencionar a Sumin, es un método que él me dijo podría resultar, lo he estado intentando.

Cuando le mencionó algún recuerdo de ambos Minnie solo sonríe, pero más nada, siempre llega a su mente Sumin, me hace preguntas constantes por ella.

¿Sumin?

¿Ya viene?

¿Dónde está?

¿Está bien?

¿Y mi pequeña?

Esas y más son las preguntas, yo no sé qué más hacer, a veces me encierro en mi despacho y me dejo vencer yo sólo, lloró sólo y me desahogó yo sólo, trató de hacerlo cuando él está dormido pues no quiero hacerlo sufrir más con mi dolor, me siento devastado.

Ésto es algo que jamás deseé cuando quise tener un hijo, si, agradezco haber conocido al amor de mi vida, pero jamás pedí que sufriera por mi culpa, jamás deseé que él pagará las consecuencias junto a mi hija por una desquiciada loca y obsesionada.

Estaba en mi despachó, Rose estaba junto a mi ya que no podía dejar mucho tiempo sólo a Jiminie, ella se ofreció a venir aquí todos los días, ayudarme en todo, para recuperar las empresas.

Namjoon al ser mi abogado estaba haciendo todo lo posible, tenía investigadores para todo, para mis empresas, para buscar alguna pista de Suran, para buscar a mi hija, solo me faltaba uno para buscar la felicidad que se me fue arrebatada.

Aún no entiendo cómo es que teniendo a miles de investigadores, policías y a los mejores no han encontrado a Suran, aún no entiendo cómo es que ella logró escapar y no ser encontrada por ningún lugar, la última pista fue en una carretera desierta, de ahí no hay más, esto empieza a causar estragos en mi.

Jin Hyung constantemente me dice que debo alimentarme mejor, pues mis energías son las que siente Jiminie y mi hija, trató de ser fuerte por ambos, pero a veces me desmoronó.

No es fácil estar en mi lugar en estos momentos.

- Iré a ver a Jiminie, regresó en un momento - Le dije a Rose, Hoseok y Nam, quienes son los que están trabajando conmigo.

- Ve amigo, descansa un rato, lo necesitas más que nadie - Me dijo Nam.

En el camino a mi habitación vi a Taeyang quien había regresado cuando se enteró de todo, dejó a Juni con su madre.

¿Saben de lo que me enteré?

Qué el maldito desgraciado de Suho era un espía más en mi mansión, él no nos protegía, él le daba toda la maldita información a Suran, antes de poder atraparlo, escapó con esa maldita perra.

Fue el mismo Taeyang quien lo descubrió, ya que cuando iba a saludarlo, lo escuchó hablar, Suho sintió su aroma y huyó, eso fue la gota que derramó el vaso, pues desde entonces tengo solo policías, soldados en mi casa, cuidándola las 24 horas del día.

Taeyang es el único de confianza para mí en estos momento, a parte de mi familia y amigos, no confío en nadie más.

Subí a la segunda planta y al entrar a la habitación, no pude evitar sonreír al ver a mi pequeño Minnie, profundamente dormido, con la sábana entre sus manitas, la foto a un lado y a Tari por sus pies, hecha bolita, ella no se despegaba de Jiminie en ningún momento, hasta él mismo la tomaba entre sus brazos y la arrullaba, si era triste también de ver, pero creo que de alguna manera Tari calmaba los ataques compulsivos de Minnie.

Entre a la habitación y decidí tomar un baño antes que Jiminie despertace y poder bañarlo. Me relaje un poco, pensando en todo lo ocurrido, pensando en una y mil cosas, todo lo que ha estado ocurriendo esta semana y media.

Claro Minnie y yo somos los más afectados, es nuestra hija y nadie que no sea padre no sabe lo que se siente que un día la veas, la ames, la acaricies te alegre la vida y al segundo después te la arrebaten de los brazos, o más bien tú mismo la entregues en bandeja de plata.

Por qué sí, no hay un maldito día que no me culpe el haber entregado a mi nena sin darme cuenta antes quién era esa mujer.

Deje mis pensamientos de lado y salí de la ducha, me cambie con la ropa que tenía ahí, pues así perdía menos tiempo en estar buscando.

Al salir casi se me va el alma, al no ver a Minnie en la cama nuevamente, salí rápidamente de la habitación y entre a la de enfrenté, la respiración llegó a mi al verlo en una silla mecedora a un lado de la cuna, estaba ahí con la mantita de Sumin y con Tari en sus piernas, cantaba una suave melodía para dormir, mientras tenía su mirada fija en la cuna.

Era así siempre que salía de la habitación, siempre hacía lo mismo, una vez cerré la habitación con llave y cuando él no pudo entrar fue lo peor de todo.

Jiminie gritó, lloró, pataleo e hizo un enorme berrinche por qué no podía entrar, no fue molesto, fue doloroso, por qué decía que había dejado a Sumin ahí encerrada y que la podía ahogar si no abría las ventanas.

¿Saben que me dijo el doctor Kim?

Que Jiminie estaba entrando en una crisis de la que no podría salir fácilmente, si esto iba en aumentó me tocaría ingresarlo en un psiquiátrico y eso es lo que menos quiero, mi Omega no está loco, es sólo una etapa de la que juntos podremos salir.

- Amor... - Lo llamé y aunque no me volteó a ver, se que me entendió pues sonrió aún con su vista en la cuna.

- Yoonnie... - Abrí mis ojos como platos, pues es sólo suele decir Sumin o mi pequeña, siempre llama solo a Sumin y nunca a mi, entiende mi llamado pero jamás me ve. Me acerqué a él y me arrodille frente a él.

- Dime cielo - Le hablé como suelo llamarlo siempre, esperando un avance.

- ¿Volveré... A ver a mi cachorrita? - Su pregunta me dolió.

Pues suele hacerle muchas, pero jamás esa, no sabía que decirle pues ahora ni yo sabía que ocurriría, aunque es poco tiempo, esto podría alargarse, empeorar, juro que intento mantenerme seguro, positivo, pero a veces me es casi imposible cuando día a día me dicen que no han encontrado nada aún.

- La volveremos a ver mi amor, tendremos con nosotros a Sumin nuevamente, te lo prometí y cumpliré, ¿Recuerdas? - Le dije con todo el amor del mundo.

- Puedo ver a Sumin ahí - Me dijo, mientras señalaba la cuna. Volteé a ver y no había nada, Jiminie ve cosas que nadie más ve, él se las imagina, su mente y su dolor las crea para mantenerlo tranquilo.

- Mi amor... ¿Vamos a tomar un baño? - Le hablé, tratando de desviar un poco el tema.

- ¿Puedo bañar a Sumin?, Ya tiene más de una semana, ya se puede, ¿Verdad?

- Jiminie... - No quería que Minnie volviera a llorar cuando le diga que no tenemos a Sumin.

- Yoonnie... - Por primera vez en días Minnie me dio una mirada, pero era una cargada de tanto dolor, era como si estuviera atrapado en él mismo, era una mirada desgarradora, como pidiendo ayuda y eso me lastimo más el alma, su brillo no estaba, seguía con su luz apagada, no soportaba más toda esta terrible situación - ¿Me puedes traer a Sumin?, Tiene hambre.

Con eso me derrumbe, recoste mi cabeza sobre sus piernas, pues Tari ya no estaba ahí, lloré con dolor sobre sus muslos, no lo soportaba más, no quería más este dolor para él, pero era el mío también. Podía sentir perfectamente todo el sufrimiento por el que estaba pasando.

- No llores Yoonnie, Sumin llorará también y no queremos eso - Acariciaba mi cabello con delicadeza, con todo ese amor que necesito de él, me desahogue en sus piernas como tanto necesitaba, solo quiero paz y felicidad y no la tenemos.

- Jiminie... No tenemos a Sumin, no está, ya basta por favor - Le rogué, mientras me aferraba a él.

- ¿No está?, Pero yo la veo en la cuna, mira Yoonnie, ya la despertaste, Sumin está llorando.

- ¡No está Jimin! ¡Sumin no está! - Me dolió gritarle, me lastimo ver cómo se asustó cuando le grité y como sus ojitos se llenaban de lágrimas  - Sumin no está... - Me deje caer al suelo, recostando mi espalda en la cuna y llevando mis rodillas a la altura de mi pecho, abrazándome a mi mismo y llorando a mares.

- ¿Yoonnie? - Lo escuché hablarme, sin embargo no lo vi, no quería que me viera peor de lo que ya estaba - No llores Yoonnie, perdóname... - Se sentó a mi lado y me envolvió en sus brazos.

Ahora fui yo quien se dejó ser arropado y quién se dejó consentir, Minnie recostó mi cabeza en sus piernas y ahí juntos en el suelo ambos lloramos, nos desahogarnos quién sabe por cuantas veces ya.

Sólo nosotros entendíamos nuestro dolor.

Duramos horas en esa posición, no nos dimos cuenta cuando nos quedamos dormidos, en medio de sollozos. Al despertar, Minnie estaba profundo, así que con cuidado lo levanté entre mis brazos y lo llevé a nuestra habitación, debía bañarlo así que lo deje en la cama un momento mientras llenaba la tina y preparaba todo.

Llené la tina, preparé su ropa, coloqué un poco de aroma a vainilla la tina, y cuando salí a la habitación, él estaba despertando, empecé a quitarle toda la ropa, él no vio la sábana ni la fotografía por ningún lado, casi se altera pero lo calmé.

- Te daré un baño primero amor y después te doy la foto y la sábana, ¿De acuerdo? - Minnie solo asintió y lo cargué, como siempre pues él es como un bebé en estos momentos.

Lo metí a la tina y con todo el amor que le tengo lo bañe, con mucho cuidado, siempre trato de que se relaje, que se calmé y está no fue excepción.

Al terminar, lo saqué de la tina y le sequé todo el cuerpo, para después empezar a cambiarlo, a pesar de que hace poco tuvo a Sumin, Jiminie tiene un buen cuerpo, claro que las marcas que dejó el embarazo están ahí, los pocos estragos están aún ahí, pero con el tiempo y con el cuidado debido irán desapareciendo.

Por indicaciones del doctor Kim, debo sacar siempre la leche del pecho de Minnie ya que si no lo hago, está se irá acumulando y puede causar estragos fuertes en Jiminie y es lo que menos quiero, hice lo de siempre, saque la leche y después coloque una pijama en él. Una vez cómodo lo lleve a la habitación, él se sentó y empezó a buscar sus cosas.

- Iré por ellas - Le dije y salí de la habitación.

Entré a la habitación de Sumin y tome la mantita y la fotografía que estaban en la silla mecedora, una fuerte punzada llegó a mi al observar que nada de aquel lugar ha sido utilizado por qué nuestra pequeña no está. Solté un suspiro cansino y salí para entrar nuevamente a nuestra habitación, al hacerlo esta vez sí casi me da algo al no ver a Jimin en ningún lado.

Lo busqué en el baño, en el clóset y nada, me aterró no verlo en ningún lado, corrí escaleras a bajo y solo observé a todos trabajando en la sala, no veía a Jiminie por ningún lado, Jin estaba en la cocina, Nam, Rose y Hoseok iban saliendo del despacho, Tae y Jungkook estaban trabajando y Jisoo estaba con el doctor Kim en el hospital.

- ¿¡No han visto a Jimin!? - Les pregunté a todos ya alterado.

- ¿No estabas con él? - Me dijo Jin.

- ¡Si!, Pero fui por sus cosas a la habitación de Sumin y cuando volví él no estaba.

Escuché un ruido proveniente del patio trasero y corrí hacia el lugar. Al llegar el alma regresó a mi cuando lo vi regando sus rosales, me asusté tanto el no verlo en su lugar de siempre que pensé lo peor.

Me acerqué a él y cuando me vio soltó la manguera para correr a mí y abrazarme, estaba tan sonriente, pero sin ese brilló y aún así me sentí feliz de verlo sonreír nuevamente.

- ¡Mira Yoonnie! ¿No están bonitas? - Me dijo mientras veía sus rosas.

- Si amor, están bonitas, como tú - Le dije y él sonrió hermosamente con su bello eyesmile.

- Yoonnie, ¿Puedo traer a mi bebé aquí? - Mi mundo se cayó a pedazos nuevamente.

Sabía que todos nos veían desde una distancia prudente, ya escuchaba el llanto de Jin, escuché el timbre y sabía quienes eran, todo lo escuché aún viendo a Minnie sin decir nada, sin poder responder a su pregunta.

- ¿Por qué lloras Yoonnie? ¿Sumin no está?, Pero... ¿Si regresará? ¿No?

- Ya Minnie, por favor amor, no más.

- Yoonnie...

Levanté la vista y él me sonrió, su sonrisa me alegró y acaricié sus mejillas.

- ¿Puedo tener otro cachorro? - Cuando terminó de preguntarme, él se acercó a mí y me abrazó otra vez, lo envolvi en mis brazos y sentí mi camisa siendo humedecida por sus lágrimas - Quiero un bebé contigo Yoonnie, Sumin siempre será su hermanita mayor, ¿Verdad?

Su abrazó se fue debilitando, me preocupe al instante, después de un segundo Jiminie se desmayó entre mis brazos, no sabía que hacer, esto no había ocurrido ni una sola vez.

- ¿Amor?, ¿Jiminie? - Trataba de hablarle pero no respondía - Jiminie, responde cielo, por favor - Me altere, esto no debía pasar - Llamen al doctor Kim.

- No es necesario, aquí estoy - No sabía que Jisoo había regresado y venía con él, así que rápidamente lleve a Minnie a la habitación y lo recoste.

El doctor Kim lo reviso por varios minutos, sus signos y todo lo necesario para saber que estaba sucediendo.

- Yoongi... — Me llamo al terminar - Jimin-ssi, entro en un cuadro de estrés postraumático, es posible que entre en coma, no serán meses pero si es probable que sea al rededor de dos a tres semanas, su cuerpo no lo soportaba más y menos su lobo quien si está en una grave depresión, y su única manera de proteger a Jimin-ssi es mandarlo a un profundo sueño.

- Quiere decir que... ¿No... Despertará en semanas?

- Es lo más probable, mira... En una parte es lo mejor, Jimin-ssi no puede estar en dos mundos, aquí solo te reconoce a ti y a su bebé y en su mundo es sólo de él y de su cachorra, tú no existes en él, por lo tanto él se estaba lastimando a él mismo, es mejor que descanse y no sienta el dolor que estaba sintiendo.

No podía creer lo que escuchaba, ahora ya no tengo a mi bebé si no que mi amado Omega estará en un profundo sueño, sin hablarme, sin verme y sin sonreírme.

Esto se estaba saliendo de control y debía encontrar lo más rápido posible a nuestra hija, no podía soportar más esta situación.

Me senté a un lado de él y tome su mano, inconscientemente Minnie la apretó aún en su sueño y me acerqué a su oído para susurrarle.

- Prometo traer de vuelta a nuestra princesa mi amor, te prometo regresar esa felicidad y brillo que te caracteriza cielo. Te amo muchísimo mi lindo Minnie.

Deposite un beso en sus labios y me acosté a su lado, el doctor Kim salió y quedé con mi pequeño Minnie.

Esperó que esto acabé pronto. Por el bien y felicidad de mi familia, ellos deben regresar a mí y ser felices, como debió ser desde un inicio.

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¡Amigos!

¿Qué les pareció esté capítulo?

Esto fue triste para mí😣 de verdad que me dolió escribirlo, pues el estado actual de Jiminie es deprimente.

Esperó les guste, aunque sea así de triste y fuertes.

¡Nos seguimos leyendo amigos!

Los amo💜





No olviden dejar su estrellita ⭐

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