(Narra Jimin) 

- ¿Ya tienes todo listo cachorro? - Me preguntó mi Hyung 

- Si solamente llevó una fotografía que tengo con Kookie, y un par de prendas que ni loco dejaría - Le respondí un poco avergonzado a mi Hyung. 

- Esta bien Minnie. Todo lo que necesites esta en la casa. 

Solamente asentí y salimos de mi habitación. Kookie ya estaba esperándome, tenía los ojos un poco rojos por el llanto y yo no me quedaba atrás. Ambos lloramos por unos largos minutos y nos despedimos, prometiendo visitarnos cada vez que podamos y siempre estar el uno para el otro. 

Se nos hará un poco difícil separarnos ya que estuvimos viviendo juntos durante ocho años aproximadamente y después de tanto tiempo, debíamos tomar rumbos diferentes. 

Siempre fuimos sólo nosotros dos, desde que perdimos a nuestros padres y todo de nosotros, siempre fuimos el apoyo uno del otro, estuvimos juntos en las buenas, en las malas y en las peores. Y separarnos no se nos está haciendo una tarea fácil. Pero tarde o temprano tenía que pasar. 

Kookie encontró a su pareja y yo también. No podemos seguir viviendo juntos, debemos hacer nuestras propias vidas. 

Siempre estaremos cuando lo necesitemos y jamás dejaremos sólo al otro, cumpliremos con nuestra promesa de " Siempre juntos, luchando contra el mundo" 

Me acerqué a Kookie y me abracé a él. 

- Jungkook, Jiminie, había olvidado por un momento entregarles esto  - Nos dijo Yoongi Hyung, entregandonos una cajita a cada uno. La abrí con cuidado y dentro había un teléfono celular de último modelo - Ya están sus números registrados y el mío también y antes de que digan algo. No aceptó ningún No como respuesta. ¿Entendieron? 

No nos quedó más que sonreír y agradecer. 

- Gracias Yoongi Hyung. Creí que no lo haría - Le dijo Kookie a Hyung. 

- Pues ya ves que si lo hice y no lo olvide. 

¿Ya tenía planeado todo? Al parecer si. 

El momento de irnos había llegado. Kookie me abrazó y yo me aferre a él. 

- Te extrañaré mi galletita. ¿Quién me dará mi chocolate caliente por las mañana ahora? - Pregunté, entrando en modo dramático. 

- Yoongi Hyung - Respondió

- ¿Quién me dará mís galletitas de chispas de chocolate? 

- Yoongi Hyung 

- ¿Quién me comprará mi leche de fresa? 

- Yoongi Hyung 

- ¿Quién me dará mis antojitos de fresas con chocolate? 

- Yoongi Hyung 

- ¿Quién.... 

- Ya Minnie. No lo haré yo, pero ahora tienes a Hyung, él es tu Alfa y el complacerá  todos tus antojos y caprichos. ¿Verdad Hyung? 

Volteé hacía Yoongi Hyung, él estaba sonriendo y asintió ante la pregunta de Kook. 

- No me he ido y ya te extraño Kookie - Dije a punto de entrar en llanto. Disculpen, son las hormonas. 

- Lo sé Minnie, pero te iré a visitar siempre que pueda ¿Ok? 

- ¿Lo prometes? 

- Lo prometo 

- ¿Por la garrita? - Alcé mi meñique, el sonrió y yo igual. 

- Por la garrita Chim - Entrelazó nuestros meñiques y selló la promesa. 

Nos dimos un último abrazo y luego giré hacía Yoongi Hyung, extendió su mano y yo la tome. Sentí tan bonito tener su mano unida con la mia. Las de Hyung son grandes, pálidas y huesudas, mientras las mías son, pequeñas, gorditas y esponjositas. Encajan perfectamente nuestras manos entrelazadas, sonreí y salimos del departamento. 

No quise voltear, por que sabía que me podía arrepentir y debo aceptar y afrontar con madurez la situación. 

Bajamos hasta el estacionamiento, una vez ahí, Hyung abrió la puerta para mi, entré y el rodeó el auto para luego entrar. Estaba jugando con el borde de mi suéter y sentí que Hyung se acercó y abrochó mi cinturón de seguridad. Robandome un pequeño besito en el proceso. 

Sentí mi rostro arder de la vergüenza. 

- Hay que tomar las medidas de precaución cariño, no queremos que nada malo ocurra. 

Asentí y le sonreí, como ya se está haciendo costumbre hacerlo. 

Se abrochó su cinturón de seguridad y arrancó el auto, él tomó mi mano y beso el dorso de esta, me sentí más sonrojado aún y puedo jurar que parezco un tomatito. 

Andubimos entre las calles y lugares hermosos al rededor de media hora. Hasta que poco a poco nos fuimos acercando, debo admitir que cuando vi a Hyung presionar un botón en su teléfono y luego se abrieron las puertas de aquella gran residencia, casi me desmayo. 

¡Oh por la madre luna! 

Ni en mis más grandes sueños había visto una casa como esta, es una mansión ante mis ojos, lo más hermoso que haya visto jamás.

La casa era de color cenizo, como... ¿Negro con un contraste de gris? Un color hermoso, al igual que todos los muebles, todo en ese lugar combinaba perfectamente, el lado de enfrente eran de grandes ventanales transparentes la sala era grandísima y hermosa. Pero ¿saben que amen más?, así es ¡La cocina! La cocina era enorme y muy hermosa, me enamoré de ella. Había una enorme pecera en un pequeño pasillo, se veían a todos los peces al entrar. 

La parte trasera de la casa fue lo mejor. Había una enorme piscina, una sala y un comedor. Pero todo ahí no le queda la palabra "pequeño" ese lugar es enorme y hermoso. 

- ¿Te gusta Minnie? 

- Esto... ¡Es hermoso Hyung! ¿Sabes que me gustó más? 

- ¿La cocina? 

- ¡Exacto! ¿Cómo lo supiste? 

- Por que se que amas cocinar Minnie, se que amarias ese lugar. ¿Subimos? 

Asentí frenéticamente. Subimos a la segunda planta y desde ahí podía ver todo el paisaje y las demás casas, era una vista maravillosa. Hyung me encaminó hasta una habitación. 

- Esta será nuestra habitación pequeño. 

Me paralice, dijo... ¿Nuestra? 

- ¿Nuestra...? - Pregunté en un susurro. Claro que el escuchó. 

- Si Minnie, somos pareja ahora, anoche dormimos juntos, así lo haremos de ahora en adelante o ¿Prefieres que me cambié de habitación? Sabes que lo haría si me lo pides cachorro. 

- ¡No!... Digo, no hay... problema por eso Hyung - Le sonreí. 

- ¿Seguro Minnie? 

- Si Hyung. Perdón es que me sorprendí por un momento, es todo. 

Debo admitir que la habitación es hermosa. Los contrastes de los colores cambian un poco en la segunda planta, todo es más blanco, con tonos cafés, se ve acogedora y muy bonita. Vi dos puertas supongo que una es el baño, pero... ¿Y la otra? 

- Hyung ¿Por qué hay dos puertas? - Pregunté.

¿Les dije que soy muy curioso? 

- Una es del baño y la otra es el closet. 

- ¿El closet? ¿Tan grande es? 

- Algo así. 

Hyung me enseñó primero el baño y cabe decir que todo en esta casa es hermoso, me encantó la tina, es blanca y muy grande, ya quiero poder usarla. 

Luego me enseñó el closet, sentí como el aire se me corto en un instante. ¿Pueden existir closet de ese tamaño? Pues al parecer si, por que era enorme, con la ropa, zapatos y accesorios, bien ubicados. Habían dos lados, pero en uno había más trajes y ropa formal y en el otro, mucha variedad de ropa y zapatos. 

- El lado izquiero es mi ropa, y el lado derecho es la tuya Minnie. Al igual que los zapatos y accesorios, el lado izquierdo es mío y el derecho tuyo. 

- ¿Cuándo hiciste todo esto Hyung? ¿Ya sabías que aceptaría venir a vivir contigo? ¿Sabías que aceptaría ser tu pareja? 

- La verdad, no Minnie. Anoche cuando ya dormías, le escribí a mi modista y le pedí todo esto y que lo ubicara como le indique y pues así lo hizo. 

- Wow Hyung, pues si que eres rápido. Esto me encanta. 

- Me alegra que te haya gustado todo Minnie. 

Me dijo Hyung, abrazándome por la espalda, entrelazó sus manos sobre mi vientre y recargó su barbilla sobre mi hombro. 

- Me siento feliz de tenerte aquí Minnie. 

- A mi también me hace feliz estar contigo Hyung, nunca creí que podría llegar a ser tan feliz. 

Le dije con honestidad y suspirando de alegría. Hyung depósito un beso en mi cuello, que erizó todos los bellos de mi cuerpo, me encantan sus besos, son calidos, humedos y cariñosos. Me causan sensaciones maravillosas y mi lobo brinca de emoción cada vez que puede. 

Me di la vuelta aún entre sus brazos, entrelace los míos sobre su cuello y me armé de valor para poder sentir sus labios. 

Así lo hice. 

Uní nuestros labios en un hermoso beso, Yoongi Hyung, me correspondió al instante, me atrajo más hacía él y llevó una de sus manos a mi cuello, para poder profundizar más el beso. 

Sentía que estaba en el cielo, los labios de mi Alfa son el paraíso para mi inexistente experiencia. Sentí un mar de sensaciones recorrer mi cuerpo, sentí esa tan conocida corriente eléctrica recorrer mi cuerpo, mis labios moviéndose al compas de los suyos, creando un beso húmedo, ambriento, necesitado y cargado de emociones que nos hacía delirar de felicidad. 

Nos separamos por falta de oxígeno y juntamos nuestras frentes, abriendo los ojos y nuestras miradas se encontraron, sonreimos por el acto y Yoongi acarició mis mejillas con sus manos. 

- Eres hermoso Minnie - Me dijo Hyung 

Me avergonce y esta de más decir que me puse rojito de la vergüenza. Me oculte en mi lugar favorito, mi escondite El cuello de mi Alfa, amo hundir mi narisita en él. 

Sentir su agradable y delicioso aroma. Menta y café una exquisita combinación que me encanta. 

Todo de Mi Alfa me encanta. 

🐺🐺🐺 

(Narra Yoongi) 

Cuando Jiminie se sonroja o esta avergonzado sobre algo, siempre busca esconder su bello rostro, como en estos momentos. Esta con su narisita restregandola en mi cuello y amo la sensación. Me gusta saber que me ve no sólo como su Alfa, si no que también como un refugio para él, en alguien a quien puede resguardarse cuando lo necesite y yo estar ahí para protegerlo y siempre lo haré. 

- ¿Ese es tu pequeño refugio cariño? - Pregunté, juguetón, el río bajito y me causó una inminente ternura. 

- Tú eres mi refugio Hyung. 

- ¿En serio? ¿Sólo eso? 

- No. Eres mi salvador, mi ángel guardián, mi Alfa y mi persona favorito en el mundo. 

He dicho. Este pequeño me matará de ternura en cualquier momento. ¡Es tan lindo! 

- Iré a preparar comida Mochi, ya es noche y aún no has comido. 

- ¿Puedo ayudarte Hyung? - Me preguntó mi pequeño, aún en su escondite. 

- Claro que puedes pequeño. Quiero probar una riquísima comida hecha por ti. 

- Entonces no perdamos más tiempo Yoongi Hyung y vamos. Muero por usar esa cocina - Mi pequeño estaba más que emocionado. Se separó un poco de mi y tomo mi mano. 

Sonreí por el acto, Minnie empieza a tomar más confianza y toma la iniciativa en varias ocasiones, no se si es consiente de ello o no, pero aún así, me alegra saber que se siente más cómodo a mi lado y mi lobo salta de alegría al sentir cerca a nuestro Omega. 

Bajamos tranquilamente a la cocina y Jiminie quedó fascinado nuevamente por el lugar, empezó a inspeccionar primero, luego vió todo lo que había en los cajones, la refrigeradora, en fin reviso todo y luego empezó a sacar lo necesario para la cena. 

Yo estaba sentado en la isla de la cocina y observaba cada uno de sus movimientos, era precioso. 

- ¿Te ayudo Minnie? 

- ¿No pensabas ayudarme? - Me preguntó incrédulo. 

Reí por su respuesta. Vaya que este Omega es todo un caso. 

- Claro que lo iba hacer, ¿Por quién me tomas cariño? 

- No lo sé. Dímelo tú. 

No pude contenerme y me tiré una carcajada enorme, por las respuestas de Jiminie. Él si sabe contra atacar, él sólo río por mi estruendosa risa y seguimos cocinando. 

Entre juegos, bromas, risas, carcajadas, malos chistes, besos robados, sonrojos. Terminamos de cocinar y una vez la cena estuvo lista la servimos y nos dispusimos a comer. 

Jiminie  preparó casi todo y vaya que le quedó, riquísimo. Debo admitir que sus dotes culinarios, superan los míos. 

- Esto está fantástico Minnie. ¡Me encanta! Jamás había probado estas delicias. 

- Me alegra que te haya gustado Hyung. Lo haré mas seguido. 

- Esta casa ahora también es tuya cariño y puedes hacer en ella lo que tu quieras y nadie tiene por que decirte nada. 

- ¿Hablas en serio Hyung? - Me preguntó un poco tímido mi pequeño Mochi 

- Claro que habló en  serio Minnie. Esta casa ya es tuya también. 

Jiminie estaba tan feliz, que se lanzó a mis brazos y repartió muchos besitos en todo mi rostro, párpados, mejillas, frente, barbilla, pero no tocaba mis labios ¡Hasta en la comisura de mis labios y no en ellos! 

Hice un puchero y eleve mis labios, pidiéndole besos a Mochi. El río y me complació, depósito muchos besitos en mis labios. 

¿Desde cuándo soy tan cursi y berrinchudo? 

Desde que conocí a Minnie, he cambiado por él y es que sin esfuerzo alguno me enamoró, simplemente me cautivó con sus encantos, su personalidad, tan pura y honesta. Con sus encantos, que cabe decir es su tierno ageyo natural. 

Definitivamente estoy irremediablemente enamorado de mi lindo Mochi. 

- Eres una bolita de arroz muy hermoso Minnie

- ¿Ya me veo tan gordo? - Me respondió mi Mochi y sus ojitos se pusieron llorosos. 

- Claro que no cachorro, pero amo tus cachetitos abultaditos. 

Mochi sorbio de su narisita y me sonrió. 

- ¿De verdad Hyung? 

- Si mi pequeño. Todo de ti me encanta - Le di un piquito en sus bellos labios y el chillo de vergüenza. Lo he dicho, Minnie es una bolita de ternura andante. 

Después de cenar subimos nuevamente a la habitación, Minnie ya tenía varios minutos de estar bostezando, así que nos fuimos a dormir. 

- Toma un baño primero Minnie, yo lo haré en otra habitación y me cambiaré allá para que no te incomodes ¿Si? 

Jiminie sólo asintió, algo tímido y se entró al baño. Yo salí y me fui a bañar a la habitación de enfrente, había llevado mi pijama, bueno últimamente estoy durmiendo sin camisa, me incomoda hacerlo con ella. 

Me bañé y cambie, todo con lentitud, para darle tiempo a Minnie. Entre nuevamente a la habitación,  esperando verlo acostado, pero aún no estaba ahí, vi la puerta del baño abierta y la puerta del closet cerrada, supuse que aún se estaba cambiando. 

Me acerqué y toque dos veces esperando que contestará. Pero no dijo nada, me preocupe un poco. 

- ¿Jiminie? ¿Estás ahí? ¿Estás bien? 

- Si Hyung... En un momento salgo. 

Suspiré de alivio al escuchar su hermosa voz. 

- ¿Puedo entrar? 

- Si Yoongi Hyung... pase 

Entre y se estaba terminando de poner una camisa de pijama. 

- ¿Pasó algo? - Le pregunté a mi pequeño. 

- No Hyung... Todo está bien, sólo que me tarde un poco en entender el orden de la ropa y pues no encontraba  las pijamas - Dijo con sus mejillas rojitas. 

- Lo siento cachorro, olvidé explicarte el orden.

- Esta bien, logré hacerlo al final 

- Por cierto Minnie, ven - Tome su mano y lo llevé a la habitación - Este será tu tocador, aquí hay muchos productos para tu piel, que son totalmente tuyos. 

- ¿En serio Hyung? - Me preguntó mi pequeño con un hermoso brillito en sus ojitos. 

- Si mi pequeño. Todo aquí es tuyo ¿Si? 

Mi pequeño asintió muy contento, luego nos fuimos hacía la cama y aunque Jiminie estaba aún muy tímido y avergonzado por tenerme cerca y sin camisa, terminó tratando de disimular su sonrojó, aunque eso es casi imposible. 

Nos acostamos y el me dio la espalda, me acerqué y lo abracé, apegando mi pecho a su espalda. Coloqué mis manos sobre su pequeño vientre y el puso sus manitas sobre las mías, deposité un casto beso en su cuello y escuché como ronroneo gustoso. Sonreí feliz por tenerlo así de cerca conmigo. 

- Buenas noches Minnie 

- Buenas noches Hyung 

Esa noche dormimos mejor que nunca, me encanta tener a Jiminie entre mis brazos y espero sea así siempre. 

Juntos toda la vida.

🐺🐺🐺

Casa del Yoonmin

.
.
.
.
.
.
.

¡Hola amigos!

Esperó les guste este nuevo capítulo.

Sin más que decir...

Bye💜

No olviden dejar su estrellita si les gustó el capítulo ⭐