Jungkook

Me desperté al siguiente día con una sonrisa en mi rostro, había soñado con Taehyung, aquel hermoso chico de ojos azules y un trasero enorme. Fue un sueño bastante intenso pues me desperté con el miembro super erecto.

-Mira lo que ocasionas Taehyung.

Me sonreí con picardía y me quité el bóxer que traía puesto y comencé a tocarme. Me tocaba pensando en Taehyung, en sus preciosos ojos azules y en aquellas nalgas que se cargaba, cuanto daría por estar dentro de él y hacerle el amor toda la maldita noche.

Seguía pensando en tantas cosas sucias que le haría que en menos de lo que pensaba me corri. Me corri imaginandomelo debajo de mí, gimiendo mi nombre con su dulce y melodiosa voz aguda.

Esa corrida se había sentido tan bien y mejor se sentía si lo había hecho pensando en Taehyung. Me sentía tan enfermo y tan pervertido pero al mismo tiempo me sentía tan afortunado de haberme cruzado con Taehyung, el chico era hermoso y no iba a estar tranquilo hasta tenerlo bajo mis sábanas.

Me levanté de la cama y fui directo al baño a darme una ducha y prepararme para irme a trabajar y en todo este tiempo estuve pensando en Taehyung, me había dejado muy caliente y no hacía otra cosa que pensar en volver a verlo. Aunque eso era algo prácticamente imposible, el chico tenía 18 años y si Namjoon se llega a entrar que yo lo que quiero es tirarme a su hermano me va a matar, tenía que conformarme con solo mirar el muñeco desde el aparador y esperar a que me enviara un mensaje o me llamara, lo cual aún no había hecho pero bueno le daría su espacio quizá se asustó por yo ser mayor que él.

Cuando ya estuve listo tomo mis llaves y salgo directo a mi empresa. Entro a mi oficina y comienzo con el trabajo que tenía para el día, siempre pensando en los hermosos ojos azules de Taehyung.

Este niño al parecer iba a ser mi perdición, era como el fruto prohibido del edén. Sentía tanta atracción y tantas ganas de morderlo pero esta prohibido hacerlo.

O bueno estará prohibido hasta que Tae me diera luz verde, y por lo que vi ayer el chico es una pequeña joyita, una que tendré en mi cama muy pronto, de eso estaba seguro. Taehyung sería mío y algo me decía que eso sería mucho antes de lo que estaba estimado.

-Oh Taehyung serás mío, pequeño.

Encendí la computadora y comencé a trabajar, pensando nuevamente en el hermoso cuerpo del pequeño ojiazul.

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Taehyung

Estaba sentado en uno de los pasillos de la universidad junto a mi mejor amigo a quién le estaba contando sobre lo hermoso y caliente que era Jungkook.

-Te digo Bogum, es un hombre tan hermoso y tan caliente. Es perfecto, tiene unos brazos tan musculosos, sus ojos son de un verde esmeralda hermoso, tiene una espalda tan ancha y su voz. Dios Bogum tienes que escucharlo hablar, te juro que se te iria la heterosexualidad a la mierda si lo escuchas hablar.

-No gracias Taehyung, me gustan las tetas, el pene no entra en el listado de cosas que me gustaria comerme.

-Eso es porque aún no haz visto a Jungkook, el tipo es perfecto te lo juro Gummie. Me lo he estado imaginando de todas las maneras posibles y estoy casi completamente seguro de que su pene también es enorme, y si es así sería tan perfecto tenerlo dentro de mí.

-Por favor Tae, no me cuentes esas cosas. No me importa como lo tiene.

-Es cierto, aquí lo importante fue que me dio su número de teléfono, quedó loco conmigo estoy seguro de eso.

-¿Lo llamaste o le escribíste un mensaje?

-No, la verdad no lo hice.

-¿Y porque no lo hiciste? Si el te dio su número de teléfono fue porque también le atraiste, estoy seguro que mataría con tal de recibir un mensaje tuyo.

-Pues si, tenía ganas pero no me voy a ir tan facil Bogum. Sabes que cuando conozco a alguien me gusta saber de dónde salio, sé que le guste lo vi en sus ojos pero quiero dejarlo en la espera un rato.

-Eres malo Tae, estoy seguro de que el tipo esta ansioso de hablarte y tú lo tienes esperando.

-Pues si, le hablare cuando yo quiera. El me gustó mucho también y no sabes las ganas que tengo de estar con él. Pero lo dejaré unos días más esperando.

-Estoy seguro que con lo que le hiciste para hacer que él observara tu trasero logro que se pajeara a tu nombre, estoy casi seguro que así fue. Con lo fogoso que eres, sé que lo que hiciste fue lo suficiente para dejarlo caliente.

-Estoy seguro de que así fue y no me molesta para nada que se hiciera una a mi nombre. Me calienta el solo imaginarmelo tocandose pensando en mi.

-Eres un sucio Taehyung.

Los dos comenzamos a reir sobre esto. Era extraño que Bogum y yo fueramos mejores amigos, yo era extrenadamente gay y el era heterosexual al cuadrado. Pero bueno gracias a mí, él conoció a su novia y luego de ahí nos volvimos muy amigos lo cual le agradecia a la vida porque Bogum era un gran chico y habiamos hecho una amistad muy bonita a pesar de todo.

-Deberías escribirle un mensaje Taehyung, un simple saludo, no tienes que empezar de una siendo un puto. Hablale y a medida vaya pasando el tiempo pues entonces sacas la puta que hay en ti.

-Tengo una mejor idea ¿Y si le dices a tu primo que te diga todo lo relacionado a Jungkook?

-No metamos a Jin en tus cochinadas.

-No, o sea solo pregúntale si esta soltero y esas cosas, pero que no diga nada porque si mi hermano se entera me va como en feria.

-Está bien, le voy a preguntar y tan pronto sepa algo te lo digo.

Bogum y yo dimos nuestra conversación por terminada pues el timbre que anunciaba el comienzo de clases estaba sonando. Yo realmente queria hablarle a Jungkook pero no lo haria todavía, no hasta que estuviera seguro de dónde era y que realmente estaba solo, yo queria pasarla bien con Jungkook sin ningún problema, así que tenía que estar seguro de todo.

Lo investigaria por ínternet si era necesario, además ya Bogum hablaría con su primo, que por lo que sabía Namjoon había comentado que trabajaba para Jungkook en la empresa, la calentura no me iba a quitar lo cuidadoso.

Porque si algo era cierto era que en lo único que había pensado desde que conoci a Jungkook fue en acostarme con él, pero tampoco lo haría así sin saber nada de él, así que me juré saberlo todo para luego entonces pasarmela muy bien con él.

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