Capitulo 10: "por nosotros"
— D-Dazai, ¿Dazai-san?.. — Chuuya peló sus ojos tras escuchar el nombre de de su ex-compañero salir de los labios de Akutagawa. Su boca comenzó a tartamudear y un calor tan intenso llegó desde su cabeza. En pocas palabras, el pelirrojo estaba totalmente confundido; no sabía si estar muerto de rabia por volver a recordar a su viejo amante o sentir gusto por saber que se encontraría con él después de tantos años. Sin embargo, la furia de Chuuya lo hizo perder la cordura y acudió al rumbo negativo.
— ¿está usted bien, Chuuya-san? — el pelinegro frunció el ceño tras ver la cara pálida de quien tomo el puesto de su jefe después de que Dazai abandonara la mafia. No obstante fue la única frase que preguntó luego de que el mencionado lo tomara por sorpresa de los hombros y lo empujara con mucha brusquedad a la pared.
— ¡¿Donde está?! ¡¿Donde tienes a ese maldito?! — gritó mirándolo fijamente a los ojos.
El ojigris lo observó de igual manera, pero con la expresión de un niño inocente con temor a ser golpeado, sin duda alguna; éste siempre se sentía tan indefenso a compañía de el pelianaranjado. Uno de los líderes más importantes del cuartel — de acuerdo, se lo diré. Pero por favor tranquilicese.
Chuuya no tuvo de otras más que soltarlo y desviar la vista hacia los pasillos que llevaban a las celdas. — Disculpa mi mal comportamiento, pero.. necesito saber más detalles sobre tu plan. ¿qué piensas hacer con él después?
'Más bien ¿porqué se te ocurrió capturar a ese bastardo?'
Akutagawa continuaba apoyado en la pared mientras que su respiración comenzaba a sonar agitada — está encadenado en el sótano, no tiene escapatoria alguna. Las cadenas están completamente blindadas y difíciles de romper... Mori me dijo que después de acabar con la agencia lo podía eje..
— ¿m-me regalarías un momento para hablar con él? — interrumpió sin escuchar las ultimas palabras y le devolvió la mirada para intentar manipularlo una vez más — no lo eh visto desde el día en que abandonó la port-mafia y tengo que contarle algo... importante
El pelinegro asintió aun más confundido. El más bajo le devolvió otra disculpa para acto seguido retirarse en dirección a la planta alta del edificio y dejar solo al chico con quien recién charló.
Minutos después, Chuuya entró a su habitación cerrando con seguro la puerta. Caminó en dirección a su cama y sacó del cajón una botella completa de Vino tinto.
'El vino con el que solía beber con Dazai cuando era su.. amante'
Apreció un poco el envase del alcohol rojizo imaginando nuevamente aquel momento tan herotico que experimentaron ambos. Recordando detalladamente los jadeos del castaño, y los gemidos que él le dedicaba con tanto cariño.
Continuó admirando los detalles de la botella hasta sentir la presencia de una persona a quien se acercaba poco a poco detrás suyo.
— ¿Qué sientes? — murmuró en su oído el sujeto extraño. Sintió claramente como las manos de éste pasaron hacia sus caderas.
— ¿Cómo lograste escapar? Grandísimo imbécil — susurró de igual manera reconociendo su voz y sintiendo un escalofrío en su espalda.
— eso es lo de menos. Lo importante es que te eh vuelto a encontrar — la boca del joven aterrizó hacia el cuello del menor comenzando a darle ligeros besos.
— mmf..
— ¿Qué sientes ahora? — volvió a preguntar
— m-mucho frío — Chuuya intentó seducirlo mientras contenía sus ganas por gemir
El mayor comenzó a reír discretamente, sabía cuales eran las intenciones del ojiazul y con la misma forma decidió llamar su atención recorriendo su mano derecha por todo el muslo hasta parar en dirección al miembro y masagearlo desde afuera de una manera que hiciera que el contrario liberara sus gemidos.
— ¿y que tal ahora?
— jmm.. D-dazai, Detente.
— ¿ah? pero si tú fuiste quien me provocó cariño. — el castaño metió su mano en el interior del pantalón — y sabes que después de que me provocas... Me cuesta tanto detenerme
Dazai encontró el miembro de su ex-compañero y lo volvió a acariciar con un poco más de fuerza — estás más caliente de lo que me imaginaba.
El pelirrojo soltó más gemidos, ahora sin importarle que alguien lo escuchara. Por otro lado, el mayor punzaba su boca hacia la mandíbula de un Chuuya el cual no resistió tanto y segundos después acercó sus labios hacia los de éste generando otro beso tan apasionado. Obviamente Dazai lo correspondió en seguida y alejó su mano de aquel miembro con la intención de voltearlo y quedar frente a él.
Ambos chicos caminaron unos cuantos pasos para terminar cayendo en la cama sin romper aquel beso. Chuuya soltó por un momento la botella para aferrar sus brazos en el cuello de Dazai mientras que éste regresó su mano en el miembro ajeno y desabrochó el botón de su pantalón para manocearlo sencillamente. El ojiazul contenía sus gemidos con forme lo besaba, parecía un momento tan conmovedor, y más para Chuuya quien creyó haberse olvidado por completo del amor que sentía hacia el suicida.
El castaño terminó de masturbar con fuerza el miembro y quiso tomar un pequeño descanso, algo verdaderamente extraño de él. Rompió el beso para colectar aire y esperó a escuchar más gemidos de su ex-compañero, sin embargo, Chuuya dijo algo antes de hacer la lucha por respirar.
— te amo tanto Dazai. — murmuró entre jadeos dedicándole una tierna sonrisa.
La reacción del mencionado fue tan extraña. Por un segundo el pelirrojo creyó que se sentiría emocionado tras escucharlo, pero fue todo lo contrario. Él peló los ojos sin responder ante las palabras de Chuuya; más solamente acomodó de vuelta su miembro ya duro a su lugar y abrochó el pantalón para acto seguido levantarse de la cama y alejarse de él.
Chuuya recién notó que éste continuaba portando su traje negro, y las vendas de su ojo.
— ¿Qué ocurre? — preguntó confundido.
— lo lamento Chuuya, pero, N-no puedo hacerlo — Dazai negó con la cabeza metiendo su mano en el bolsillo de su gran saco. Al parecer en busca de algún objeto.
El odio de Chuuya volvió desde su mente provocándolo a gritar agobiado — ¡¿como puedes pensar eso?!, ¡después de lo que habíamos pasado juntos, te comportas como un patán sin vergüenza! ¡¿te das cuenta de que esa es la razón por la que te estoy odiando!?...
Dazai no respondió, si no que bajó la mirada en dirección a su mano ocupada sintiéndose culpable ante la actitud de Chuuya.
— es más... Ni si quiera tengo el valor de odiarte. Por más que lo intente no puedo y mucho menos olvidarte.
De pronto el castaño sacó de su bolsillo un arma de fuego dejando impactado al pelirrojo y haciéndolo pensar en que le iba a dar un disparo.
— ¿Qué piensas hacer con eso? ¿A caso vas a matarme?.. Si vas a hacerlo, ¡hazlo ya! me harías un gran favor si me sacaras de este maldito infierno.
Él negó con la cabeza mientras comenzaba a sollozar — n-no lo entiendes Chuuya. Además, recuerda que nunca sería capaz de hacerte daño.
— entonces... ¿porqué la pistola? — preguntó con el nudo en la garganta
El ojicafe suspiró — Vine para despedirme de ti. Quería que la ultima noche en que la pasaríamos juntos fuese especial. Pero, el que no pueda corresponder de tu amor no significa que no te quiera. Claro que te quiero. Pero, tengo mis razones, razones las cuales tu nunca comprenderás y es por eso que tengo que acabar con ellas — en eso, la mano con la que sostenía el arma la dirigió directo a su cabeza y la cargó — Disculpame, por todo el daño que te he hecho...
— ¡Dazai no! — Chuuya se levantó de la cama intentando detenerlo pero fue demasiado tarde ya que justo cuando lo vio levantarse jaló del gatillo y dejó salir la bala dentro de su cabeza. Al escucharse el disparo éste cayó al suelo sin dar señales de vida. El corazón de Chuuya se aceleró tras ver los charcos de sangre salpicando desde la pared. Rápidamente se hincó intentando levantar la semblante de su amado y la apoyó en sus piernas. — no, Dazai... No me dejes, Por favor te lo ruego ¡no me dejes!
Chuuya acercó su oído al pecho de Dazai para intentar escuchar su corazón pero ya no había remedio para salvarlo. Soltó un llanto de desesperación tras darse cuenta de que el castaño estaba totalmente muerto. Minutos después volvió a dirigirse hacia aquel pálido rostro sin vida y acarició su frente alejando los cabellos que le estorbaban. Pudo apreciar que su ojo seguía abierto, su mano pasó en seguida para cerrarlo y a continuación le dio un último beso en sus labios y lo recostó en el suelo.
Al momento en que intentó secar sus lágrimas recogió el arma cual seguía permaneciendo en la mano del mayor y se dio cuenta de que quedaba una bala. Una lluvia de pensamientos negativos llegaron desde su mente tras ver los rasgos de la pistola y a su ex-compañero sin vida y un recuerdo pasó sin consideración — lo único que quería era que fuésemos felices... Juntos
Tomó la pistola con ambas manos y la apuntó en dirección hacia él...
'Chuuya... ¿Qué estarías dispuesto a hacer por mi como tu "amo"?'
'Ya se lo dije, estoy dispuesto a hacer lo que sea'
'¿aunque se tratara de un suicidio?'
Metió la punta del arma dentro de su boca...
'P-por su puesto que no'
' y ¿Porqué no?'
Recargó la última bala..
'¿a caso cree que lo dejaría morir?'
Cerró sus ojos para evitar sentir el impacto de la bala mientras que unas lágrimas salieron en seguida — 'Lo que sea por estar contigo... ¡Lo aré por nosotros!' — pensó luego de jalar el gatillo del arma dentro de su boca
Después de escuchar su disparo esperó sentir el dolor insoportable que le marcaría la pistola, pero había un pequeño error, no sintió dolor alguno. Abrió ligeramente sus ojos, observando el alrededor de la habitación y dándose cuenta de que estaba limpia, sin rastro alguno de sangre pero mejor aun, sin rastro de el castaño.
— ¿E-estoy muerto? — pensó en voz alta y bajó su vista dándose cuenta de que estaba sentado en el suelo, con su espalda apoyada en la cama y con su mano sosteniendo la botella de vino cual estaba apunto de terminar. Por otro lado, su mano derecha estaba dentro de su pantalón sosteniendo su miembro, rápidamente lo sacó y notó que las yemas de sus dedos estaban empapadas del liquido viscoso, cosa que le tomó poca importancia y se secó con un pañuelo que por suerte tenía cerca. — fue, ¿fue solo otra pesadilla?
Chuuya suspiró de alivio, por un momento creía que Dazai si había muerto en realidad. Pero por el contrario pensaba que las ultimas palabras que le dijo el castaño antes del impacto eran sólo una vil mentira y producto de su imaginación. Se tiró al suelo, volviendo a soltar su llanto y sin dejar de repetir el nombre del suicida mientras sacaba la venda de su pantalón y la acariciaba con sus mejillas.
Sin duda alguna esa era una de las pesadillas que lo atormentaba desde casi cuatro años, ya que ésta contenía dos cosas las cuales no toleraba el pelirrojo. La primera, el temor de ser rechazado. Y la segunda, el temor del perder a un ser querido.
-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-
¿Los asusté? :3
Ok ok me pasé un poquito disculpen no me manden la chancla plox ...
Bueno ¿qué les pareció el capítulo de hoy? ¿Les gustó? ¿No les gusto? Ed fin.. Pueden darme sus opiniones en los comentarios *no los obligo eh -w-*
Bueno como se darán cuenta, este martes ya sera 14 de febrero.. ¿alguien por aquí es forever alone? :'v para no sentirme que soy la única que no tendrá pareja este san valentin.. Oka oka a lo que vine posss.. Les vengo a avisar que PROBABLEMENTE voy a publicar dos libros para un especial que tenía en mente para este 14 de febrero, uno sera de soukoku y el otro de Dazai x reader ¿que les parece amiguitos? 😋 ... Bueno ya no les quiero arruinar la sorpresa
Espero que tengan bonita noche y una feliz semana..
Chao chao :v 💕
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro