Los parques suelen ser lugar llenos de buenas vibras, con muchos niños corriendo y padres siguiéndolos de cerca, asegurándose de mantenerlos vigilados.

Yo los detesto. Son muy incómodos y me traer recuerdos de una infancia reprimida.

"No saltes ahí, Nícolas"

"Te ensuciaras si juegas ahí, Nícolas"

"Sólo hemos venido a tomar aire, Nícolas. Quédate quieto, ahora"

Mis padres jamás fueron referentes de diversión así que estar aquí, viendo a esos niñitos siendo felices me pone de mal humor.

Entonces ¿por qué estoy aquí?

Voy a admitir que me gustar sentarme en estas bancas de madera gastada y escuchar a lo lejos la felicidad de otros. Así que, en resumen, vengo por inspiración.

Hago algo de música y necesito tener algo de refrescante libertad para escribir. 

Pero cuando todo estaba perfecto, ella apareció.

Para desordenar mi vida.

Para hacerme perder la cabeza.

Para enamorarme.

n/a: Holaa, bueno esta historia será algo diferente. Tendrá partes escritas por el protagonista y partes narradas por él mismo (No sé si se entiende, a veces me enrollo yo sola lol)

Para los que no lo saben esta historia es la tercera parte de la saga "Ellos escriben, ellas sonríen" La lista y orden de la saga está en la descripción de la historia.

Es posible que encuentren spoilers o referencias a las otras historias así que lo más recomendable es leer todas las historias en orden. ¡Gracias por el apoyo! <3