¿Has tenido algún arrepentimiento?

*Pov Jungkook*

Taehyung se escabullo a su habitación cuando comenzamos a ver los videos del partido. Me sentí tan relajado viendo las jugadas y hablando sobre donde nos habíamos equivocado que no me entere cuando se marchó.

No fui tras de él -sabía que quería escapar- podía deducirlo, solo se había quedado por mí.

Pero ahora mi cabeza ya no se concentraba en el juego. Pensaba en mi padre y en el hecho de que ya llevaba demasiado tiempo fuera de casa.

Quería volver y comprobar cómo iba todo. Hablar con él incluso si no me respondía. Descubrí que ya no importaba, simplemente necesitaba estar cerca de él.

El final se acercaba, y no sería fácil. Me levanté y caminé hacia Chanyeol, entonces le susurré que me dirigía a casa, pero antes le dije que me mandara por un mensaje el número telefónico de Tae. Los chicos se encontraban tan envueltos en ver el juego que no se dieron cuenta ni dijeron nada respecto a que me marchara temprano.

Aún no llegaba a mi camioneta cuando mi teléfono vibro. Chanyeol ya me había enviado el número, al parecer confiaba en mí para mantenerme a su lado y me aseguraría de merecer esa confianza.

Abrí la puerta de mi auto mientras alzaba la mirada hacia su ventana. Se encontraba sentado en el asiento de la ventana, sus rodillas encajadas bajo su barbilla, observándome. Alce la mano para despedirme, y él hizo lo mismo. Luego sostuve en alto mi teléfono, lo puse contra mi oreja y lo señalé.

Solo para asegurarme de que me entendía, le mande un mensaje rápidamente.

Soy yo, Chan, me dio tu número. Si llamo ¿Responderás?

Presioné enviar, luego volví a mirar hacia él. Bajo su mirada a su teléfono y observé mientras escribía algo. Cuando su rostro se alzó otra vez para mirarme, mi teléfono vibro.

Sí, si me necesitas, responderé.

Eso era suficiente. Asentí y subí al auto para conducir hasta casa y enfrentar mi realidad. Me sentaría y hablaría con papá. Le hablaría sobre ver el partido con los chicos, y le contaría acerca de Taehyung, estoy seguro de que le encantara.

Cuando abrí la puerta de la casa, todo se encontraba en silencio. La trabajadora del hospicio se fue por el día. Cerré la puerta y me dirigí al interior. Había una nota sobre la mesa de mamá diciéndome que me preparo un sándwich y lo dejo en el refrigerador junto a una jarra fresca de leche de banana. Qué papá había preguntado por ella, así que fue a recostarse a su lado.

No tenía apetito, comí dos porciones de pastel antes, y ahora, sabiendo que no conseguiría hablar con papá esta noche, no me daba ganas de comer. Pero mi madre se preocuparía si revisaba el refrigerador y veía el sándwich todavía allí. Así que me serví un vaso alto de leche y llevé ambas cosas a mi habitación. Intentaría comer algo antes de dormir, si no, me aseguraría de que no se diera cuenta de que no me lo comí.

Camine de forma silenciosa por el pasillo hasta pararme en el exterior de la puerta de la habitación de mis padres. Había silencio, mi padre solía roncar, pero ya no lo hacía. Dormía tan silenciosamente ahora, solía quejarme en mi cama por las noches, cubriéndome los oídos, queriendo que dejara de roncar para poder dormirme. Pero actualmente me encontraba deseando escuchar sus ronquidos, así sabría que todavía respiraba.

Mi corazón se estremeció ante la idea de mi padre sin respirar. El pánico y el dolor que vinieron con ese pensamiento estrecharon mi garganta, haciendo que fuera difícil inhalar. Me aparté de su puerta y seguí a mi habitación, así no molestaría a mi madre. Cerrando la puerta detrás de mí, coloque ambas manos en ella para sostenerme erguido mientras dejaba la cabeza colgando y jadeaba por aire.

Iba a perderlo.

Lo sabía, pero maldición, dolía tanto.

Cada vez que permitía que los hechos se asimilaran, mis emociones comenzaban a perder su agarre. Sentí temblar mi cuerpo, mi cuerpo mientras que las lágrimas empañaban mis ojos ¿Cómo iba a pasar mi vida sin él? Lo necesitaba, lo necesitábamos.

Me las arreglé para inhalar agudamente, tosí para aclararme la garganta antes de apartarme de la puerta y caminar hacia la cama para hundirme en ella. Mi teléfono se presionó contra mi pierna, y el rostro de Taehyung entro a mis pensamientos.

Sin pensar mucho en ello, saque mi celular y escanee los contactos buscando su número.

Respondió al segundo tono.

–Hola -dijo suavemente.

Era tarde, pero sabía que los chicos todavía no se habrían marchado de casa de Chanyeol.

–¿Estabas dormido? - pregunté.

–No, aún me encuentro justo donde me viste por última vez -respondió.

Cerré los ojos y lo imaginé ahí en esa ventana. Perdido en sus pensamientos, en su soledad. Paso tanto tiempo en los pasados dos años encerrado en sí mismo. Sin hablar con otros, no me gustaba pensar en eso. La idea de él en soledad me hacía daño. Lo entendía, pero deseaba que hubiera sido capaz de estar ahí para él, del mismo modo en que él lo estaba para mí. Tal vez ahora yo podría ser ese amigo que necesitaba

–¿Alguna vez tuviste veces en las que no podías respirar? ¿Cuándo el dolor es tan intenso que aprieta tu garganta y la cierra con fuerza?

–Sí, se llama ataque de pánico, los tenía muy seguido. Sin embargo, no los he tenido desde que me mude aquí.

–¿Cómo lidiabas con ellos?

Suspiro.

–No lo hice al principio, una vez incluso me desmayé por no respirar. Pero aprendí a pensar en algo que me hacía feliz, que me daba paz. Me negué a dejar que el dolor me controlara, así la presión se aflojaba, y podía respirar otra vez.

Él me daba paz, él era lo único que me dio paz en mucho tiempo.

–¿Te da miedo cerrar los ojos por la noche? -pregunté.

–Sí, porque sé que vendrán las pesadillas, siempre lo hacen.

–Yo también, temo que no despierte al día siguiente -respondí.

Permaneció en silencio durante un rato. Ambos nos sentamos allí y escuchamos la respiración del otro. Extrañamente, era suficiente.

–Un día eso sucederá, Jungkook. Y será increíblemente difícil, pero lo que puedes hacer ahora es sacar el máximo provecho del tiempo que te queda. Habla con él, incluso si no puede responderte, sostén su mano, cuéntale todo eso que quieres que sepa. Así, cuando se haya ido, no tendrás arrepentimientos.

Su madre le fue arrebatada sin advertencia, y de igual modo su padre, con su horrible y enfermo acto. Él lo perdió todo de esa manera, tenía razón. Tenía tiempo para asegurarme de que no tendría arrepentimientos.

–¿Tienes arrepentimientos? -pregunté, ya sabiendo la respuesta.

Podía oírlo en su voz.

–Sí, muchos -fue su suave respuesta.

No podía imaginarme al dulce Tae teniendo nada de lo que arrepentirse, era cariñoso y amable. Era difícil pensar en él siendo nada más que perfecto.

–Estoy seguro de que era el hijo que toda madre desea -le asegure- Sé que la tuya tuvo que sentirse orgullosa de ti.

No respondió al principio, y me daba miedo que estuviera haciéndole hablar demasiado al respecto. Me centré en su dolor para olvidar el mío, no tuve el cuidado suficiente.

–Dos horas antes de que mi madre muriera, le dije que estaba arruinando mi vida -dijo, luego dejo salir una risa amarga- Porque quería ir a una fiesta que daría una amiga en su casa, y mi madre no sentía que hubiera una apropiada supervisión adulta ahí. Deseaba tanto ir, pensaba que el no ir sería el fin del mundo. Lo peor que podría sucederme, simplemente si hubiera sabido que dos horas más tarde la perdería... que descubriría como se sentiría, de verdad, lo peor que podría sucederme jamás.

Cerré los ojos, sentí su arrepentimiento pesado en mi interior, como si fuera propio. Él fue un adolescente de quince años que quería crecer, actuó como lo hacen los adolescentes. Demonio, yo tenía mi cuenta justa de metedura de pata. Simplemente, era injusto que él hubiera perdido a su madre de esa manera antes de que pudiera arreglarlo. Antes de que pudiera disculparse y hacer lo correcto.

–Ella sabía que no lo decías en serio -le dije, sintiendo que las palabras eran inadecuadas, pero no sabía que más decir.

–Eso espero, pero siempre será mi mayor arrepentimiento.

Perooo pase de demorarme más de cuatro meses en actualizar a subir cinco capítulos en menos de una semana 😭

Pobre nuestro Tae 🥺

¿Quieren otra actu o esperamos a enero?

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Tengan una bonita semana. Les quiero 💕

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𓆩Candy𓆪

15-12-2023