Miré como se iba Torao de allí mientras mi cerebro dejó de funcionar unos segundo preguntándose porque él estaba aquí.

Le seguí hasta la cocina.

- ¿Pasa algo Mugiwara-ya? - Me miró de reojo con curiosidad.

- No...sólo no me esperé que estuvieras aquí... - Le dije mientras me sentaba en una de las sillas de madera que había en la cocina.

- Ya, bueno - Dijo secamente.

- Y... ¿Sabes por qué Ace me dejó sólo y contigo? - Le miré fijamente.

- Creo que salió con Sabo-ya - Dijo mientras se sentaba en frente de mí.

- ¿Sabo? - Le miré extrañado, ya que nunca había escuchado que Ace tuviera algún amigo con ese nombre.

- Si, el nuevo novio de tu hermano.

Al escuchar aquello abrí los ojos como platos. <Así que...ese era su nombre>. Me quedé pensativo un buen rato hasta que un chasquido procedente de los dedos de Torao, hiciera que volviera a la realidad.

- ¿Estas bien? - Me miró.

- Si...sólo pensaba - Me levanté de la silla - Voy a salir un rato - Le dije mientras iba hacia la puerta de la cocina.

- Mugiwara-ya - Le escuché por lo que miré hacia atrás - No puedes salir, tu hermano me prohibió en todo momento que salieras - Sonrió más mientras me enseñaba las llaves - Así que, tenemos todo el día.

- Dame las llaves - Le dije serio mientras me acercaba a él.

- Obligame - Sonrió de una manera malvada y picardía.

En cuento escuché aquello acerqué mi mano hacia las llaves, pero el rápidamente apartó su mano y cogió mi muñeca con fuerza.

- ¿Por qué no te relajas un poco? ¿Eh, Mugiwara-ya? - Me susurró al oído en cuanto me acercó rápido hacia él.

Le pegué un empujón, me solté y me fui de allí dando zancadas.

Sino me dejaba salir por la puerta lo haría por la ventana. Así que me acerqué a una de las ventanas del piso de abajo, la abrí y fui a salir por ella, cuando observé como tenía rejas por lo que maldije.

Cerré la ventana.

Me fui rápido hacia mi habitación y me encerré en ella mientras me tiraba en la cama.

Escuché como alguien subía las escaleras por lo que rápidamente me senté en la cama y miré hacia la puerta. Abrieron la puerta de una manera lenta.

- Recuerdas ¿esto? - Escuché decir a la persona que estaba abriendo la puerta.

Miré hacia la puerta y observe unas cadenas. Nada más comprender de que se trataba me tense.

- Si... - Le dije sin apartar la mirada de la puerta.

Torao entró por la puerta y cerró tras de él mientras se acercaba a mí.

- Bien, porque hoy también te las vas a poner - Sonrió.

- No pienso ponerme eso - Le dije serio mientras observaba como se quedaba delante de mí.

- Oh vamos, Mugiwara-ya. Ambos sabemos que tu hermano está con ese chico por lo que está.

- ¿A que te refieres? - Le miré algo extrañado.

- ¿Creías que no se iba a enterar de lo que pasó hace unos años con ese chico? ¿Tan ingenuo eres?

Al escuchar aquello abrí mis ojos como platos.

- ¿Como?

- Sabe que te acostaste con él. Quizás estará intentado decir de quien eres - Se rió - Ace-ya es demasiado posesivo ¿no es así? Quizás por eso aquella vez malenterpreto las cosas.

Nada más terminar de decir aquello noté como me puso uno de los grilletes en la muñeca.

Me mordí mi labio inferior.

- Y terminaron las cosas de aquella manera - Terminó de decir poniendo otro grillete en la otra muñeca - Pero quizás me esté equivocando y simplemente en verdad le ame.

Me agarró de las piernas y me colocó tumbado en la cama.

- Me encantan las reacciones de tu hermano, Luffy - Me agarró del mentón e hizo que le mirase.

Le miré directamente a los ojos. Observé sus grisáceos ojos. <Eran realmente bellos...>

- ¿Por qué...te gustan tanto? - Le pregunté.

- Desde que eramos pequeños siempre nos estuvimos peleando, pero desde que él se volvió mayor cambió muy drásticamente. No volvió a ser el mismo. Pero al conocer a ti, supe al mismo instante que era lo que le ocurría. El muy tonto se había enamorado de su hermano menor - Dijo con énfasis aquella frase - Pero poco duró aquello. Malinterpretó aquello que pasó entre nosotros y desde entonces dejó de estar contigo, pero después, le contaste la verdad y te creyó... Pero él ya quería a otra persona - Se puso sobre mí - Fue una lástima. No entiendo como pudo dejarte sólo.

- Bajate... - Le dije algo incómodo - No tengo ganas y no pienso hacerlo contigo - Me intenté quitar los grilletes mientras le decía aquello.

Le vi negar con la cabeza mientras comenzaba a acercarse a mí pero un ruido procedente de la puerta principal nos sorprendió a ambos.

- Parece que llegaron - Dijo mientras se quitaba de sobre mí y me quitaba los grilletes.

Le vi bajar hacia abajo mientras escuchaba a Ace hablar con él y poco después escuché como se cerraba la puerta principal.

Un leve toque en la puerta de mi habitación hizo que pusiera toda mi atención a ésta.

- Luffy - Escuché la voz de Ace - Necesito que bajes un momento - Y tras decir aquello bajó a bajo.

Suspire y me levanté, yendo hacia la puerta. Bajé las escaleras y me paré en seco en el penúltimo escalón, observando a aquel rubio de espaldas a mí y hablando con Ace.

- Luffy, quiero presentarte a alguien - Me miró mientras observaba como se daba la vuelta el rubio.

Nada más verme abrió los ojos como platos.

- Él es Sabo, mi pareja - Me dijo Ace, rompiendo el silencio.

- Hola... - Dijo Sabo, aun sorprendido.

- Hola... - Respondí igual.

- Presentate al menos, Lu - Me miró fijamente.

- Si... Soy Luffy... Un placer.

Me quedé en el mismo lugar, estático y sin sabes que decir ni hacer.

- Bueno ya que os conocéis, debería decir que, en unos días nos iremos de viaje Sabo y yo. Así que llamé a papá para que estuviera más pendiente de ti.

- Ah... - Aquello fue lo único que mis labios articularon.

- Bueno, voy a la cocina. ¿Quieres algo de beber Sabo? - Le miró.

- Si, agua sino es molestia.

- No lo es - Fue lo último que dijo Ace antes de irse.

Le miré fijamente sin sabes más que decir pero él fue quien comenzó ésta vez a hablar...

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Bueno aquí está el capitulo prometido. Espero que os haya gustado y siento la tardanza.

Nos vemos en la próxima❤