Arianne

La semana pasa volando como un relámpago.

Mi transformación está a la vuelta de una esquina así que entreno hasta quedarme sin fuerzas. Kellan cumple muy bien su papel de maestro mientras Asher ha estado ocupado con su padre. Sé que hoy entierran a Julianne y se siente mal por no poder estar presente. Anoche dormimos abrazados, perdidos en el otro. No le comenté las cosas desagradables que me dijo su madre. Ya no quiero agregarle más drama al asunto. Me ocuparé de mis asuntos y que el resto siga su curso. No me enfocaré en lo negativo porque atraerá a las malas energías. Es lo que Emmie me aconsejó.

—Estoy esperando, Laroux —Kellan me provoca y rebota en sus pies —. Vuelve aquí y pelea.

Oigo el silbido del viento cuando me abalanzo sobre él y un fuerte puñetazo desencaja su rostro un segundo. Hace una mueca y me devuelve el golpe mucho más duro. Mi espalda golpea el suelo y el entorno da vueltas debido al mareo.

—¿Eso es todo? —ríe —. Muévete mejor la próxima vez. Lee los movimientos de tu enemigo.

Me incorporo, formo dos orbes de fuego en las palmas para lanzárselo y él esquiva con mucha facilidad. El siguiente ataque es con la tierra de por medio. Las enredaderas se aferran a sus piernas, pero Kellan logra cortarlos con facilidad gracias al fuego.

Genial.

—Vamos, Laroux. Imagina que quiero matarte. ¿Qué harás?

Me lanzo sobre él sin ningún poder esta vez. Sostengo su brazo derecho en alto y le clavo varios codazos en las costillas que lo dejan sin aire. Suelta un gruñido doblándose y con la frente sudorosa. Pensó que usaría algún elemento. No predijo que sería un combate de cuerpo a cuerpo.

—Estuvo mejor. Sigue así, Arianne.

Soy más agresiva después y le doy uso a los poderes psíquicos. Me quedo quieta, mi visión se torna oscura mientras Kellan se cae de rodillas con los huesos quebrándose. Imagino mi primer encuentro con Abigail, la vez que tomó posesión de mamá y la mató. Recuerdo a mamá llorando y diciéndome que su lucha no fue suficiente. El asesinato de Theo, Julianne burlándose, la señora Aria...

—Suficiente —Josh me interrumpe cuando Kellan está casi muerto en el suelo —. Lo has hecho muy bien, Arianne, pero es suficiente.

Me muerdo el labio inferior y sacudo la cabeza para calmar el odio dentro de mí. La furia, el rencor, la desesperación. Quiero tener a esa bruja de frente y masacrarla parte por parte. Quiero verla sangrar.

—Lo siento —musito.

—No —Kellan me corta —. Nunca te disculpes por lo que eres. ¿De acuerdo?

Asiento con dificultad y él limpia la sangre de su nariz.

—Puedo notar la energía en ti y sé con certeza que el cambio de forma será un completo éxito. Has ganado, Arianne. No tienes nada que temer ese día.

Me paso un brazo por la frente para atrapar el sudor que se me acumula en la piel.

—No es nada atractivo saber que mis huesos se romperán.

Josh resopla.

—Cuando tu lado licántropo al fin salga a la luz te darás cuenta que todo ha valido la pena.

Mi sonrisa es cansada.

—Eso espero.

Kellan se pone en posición nuevamente, enseñándome los puños.

—Aún no he terminado de patear tu trasero, Laroux. Ven aquí y pelea como la guerrera que eres.

🌙

Después del entrenamiento, decido tomarme una ducha y cambiarme para esta noche. Espero pasar un rato agradable y olvidar los problemas. Asher aún sigue deprimido por la muerte de Julianne. Sé que lo superará con el tiempo y su pérdida quedará como un recuerdo. Algunos buenos y otros malos. Nunca olvidaremos el acto de valentía que tuvo su amiga antes de morir. Le salvó la vida. Dónde sea que se encuentre, espero que tenga paz.

―¿Cuál prefieres? ―Le pregunto a Asher con una sonrisa ―. Elige uno, lobito.

Asher se encuentra acostado en la cama, mordiendo su manzana mientras le enseño dos vestidos de diferentes estilos. Uno es verde y el otro amarillo. La ocasión amerita que los use. Examina las prendas sin dejar de masticar la bendita fruta. Parece que ambos le gustan por la expresión de lujuria en su cara, pero finalmente se decide por una.

―Definitivamente esa ―Señala el vestido verde con mangas ―. Combinará con tus preciosos ojos, aunque estoy seguro de que te verás fantástica con cualquier cosa que te pongas. Eres la mujer más hermosa que he conocido y mía. Muy mía.

Sonrío.

―Deja de decir cosas como esas porque me enamoras más.

Su sonrisa se amplía.

―Admito que te prefiero desnuda y gimiendo debajo de mí. Me encanta cuando gritas mi nombre.

Mis mejillas se vuelven calientes, apuesto a que estoy completamente roja. Asher siempre encontrará la manera de hacerme ruborizar con sus comentarios subidos de tono. Es muy bueno en eso.

―Uh... ―Me desnudo lentamente para que aprecie la vista. Su mirada ardiente permanece en mi cuerpo y traga saliva. Este juego entre ambos es muy divertido ―. Estoy nerviosa ―acepto después de cubrir mi cuerpo con el vestido ―. Hablé con el alfa y me disculpé, pero algunos licántropos de la manada aún me temen. Piensan que soy una bruja como Abigail.

Se mofa.

—¿Y qué más da? Con el tiempo aprenderán a conocerte y se darán cuenta de que eres un ángel.

―No es tan fácil como dices. Han visto de lo que soy capaz, Asher ―Agacho la cabeza ―. Quemé sus casas, provoqué un temblor y casi maté una persona en la manada. No los culpo por sentirse así. Creo que deberías ir solo y dejarme aquí. En verdad no me importa, odiaría incomodar.

Su mandíbula se aprieta y termina de masticar lo que queda de la manzana.

―No te conocen como yo, al diablo lo que piensen. Estaremos ahí por Andrew y Emmie. Después nos perderemos en el bosque.

¿Perdernos en el bosque? Cuando miro a Asher, ahí está de nuevo esa sonrisa maliciosa que tanto amo. Sucio pervertido.

―¿Qué haremos en el bosque exactamente? ―cuestiono ―. ¿Mirar las estrellas? No es mala idea.

Lame sus labios.

―Algo donde nuestras ropas no serán un problema ―responde y tomo la almohada para golpearlo con ella. Asher se ríe, posicionándome debajo de él en la cama ―. Bueno, no es del todo cierto, pero quiero estar a solas contigo dónde nadie nos moleste. Funcionamos mejor en privado, ¿no?

Dioses, sí... Un golpe suena en la puerta y empujo a Asher para ponerme los zapatos.

―¿Están listos, tortolitos? ―pregunta Axel con una risita ―. Es bastante tarde.

―Sí, espera un minuto ―pide Asher y su hermano se aleja ―. Por nada del mundo te apartes de mi lado, Arianne. No importa lo que veas u oigas. Siempre permanece a mi lado. ¿De acuerdo?

Suspiro.

―No tenía intenciones de alejarme.

―Bien, vámonos de una vez antes de que Axel regrese a molestar.

Luego juntos nos dirigimos a la ceremonia sin perder ni un segundo más. Espero que todo salga bien y que Andrew sea feliz al lado de Emmie. Aunque no puedo evitar sentir este malestar, un mal presentimiento me invade. Algo dentro de mí me susurra que el evento será más que interesante y no en el buen sentido.

🌙

Asher

Le hablé a la familia Nelsson más temprano. Ellos aceptaron mi llamada y mis condolencias. Están al tanto de la obsesión que su hija sentía por mí y no me culpan. Me alivia saber que no tendré esa carga en mi mente. Julianne me ha quitado mucha paz y no pienso darle ninguna. Mi ciclo con ella ha sido cerrado y tomaré el consejo de papá. Mi mayor prioridad será mi felicidad y Arianne. Ya no más manipulaciones, ni preocupaciones. Un nuevo comienzo me espera junto a la chica que amo.

Arianne...

Está tensa cuando descendemos de la camioneta y nos unimos con mis hermanos a la caminata que conduce al campamento. Andrew vino más temprano para ayudar a organizar la ceremonia. Qué incómodo. Marcará a su chica en público.

―Relájate ―Atraigo el cuerpo de Ari más cerca de mí ―. Estoy aquí, nadie se atreverá a molestarte.

Pone los ojos en blanco.

―Claro que no. Eres mi protector.

―Y tu hombre, tu compañero ―Le robo un beso y tiro su labio inferior con los dientes ―. Pobre del idiota que diga algo malo de ti.

―Definitivamente nadie lo hará ―Habla Axel sin quitarse las gafas ―. También se enfrentarán a nosotros ―Le toca el hombro a Ashton quién rueda los ojos ―. Estás segura con nosotros.

Ari sonríe.

―Gracias, chicos.

Lo malo de este evento es que veré a mi madre nuevamente. Espero que regrese a New Hope cuando la ceremonia termine. Mi resentimiento con ella sigue muy presente y dudo que lo olvide en mucho tiempo. Lo que hizo es imperdonable. Fue como recibir una puñalada en el corazón.

―Aquí estamos ―dice Ashton con una mueca de disgusto ―. Bienvenidos a la manada más disfuncional que han visto.

Soy golpeado por el olor de varios licántropos. Me siento fuera de mi territorio. Me mantengo alerta por si algún idiota intenta lastimar a Arianne. Ella está bastante agobiada sabiendo que la consideran una bruja maligna. Hay cabañas, grandes árboles, fogatas y una canción irlandesa suena en los estéreos.

―Creo que no vinimos vestidos para la ocasión ―Se ríe Axel ―. Ups.

Mierda...

Captamos la atención de varios licántropos debido a nuestros aspectos. Arianne tiene un vestido verde mientras mis hermanos y yo lucimos ropas oscuras. Los demás en cambio portan muy bien el blanco y coronas de flores. Si antes no les agradábamos por ser extranjeros, no quiero imaginarme ahora. No seguimos ninguna tradición.

―Nadie nos dijo sobre el código de vestimenta ―protesta Arianne ―. Si hubiera sabido que debíamos utilizar un color en especial...

―A la mierda con el código ―masculla Axel ―. Estamos aquí y deberían estar agradecimos por ser honrados con nuestras presencias.

―Tan humilde ―dice Arianne.

Sin dejar de reír, nos mezclamos con los demás en el círculo que han formado. Afortunadamente, nadie molesta a Arianne como había pensado que lo harían. Perfecto. Me meteré en una pelea con mucho gusto para defender a mi chica.

―Bienvenidos ―Una mujer se acerca y nos tiende las coronas de flores ―. Ya que no cumplen las mismas pautas que nuestras ropas es justo que usen esto.

―Gracias ―Arianne le sonríe con ternura y acepta la corona de flores.

Me quedo sin aire cuando lo coloca sobre su cabeza. Se ve mucho más preciosa. El brillo en sus ojos esmeralda es una imagen que me gustaría grabar. La miro embobado mientras me ayuda a ponerme la mía.

―Te ves como un príncipe, lobito ―ríe.

Mi mano se aferra a su pequeña cintura mientras Ashton y Axel son los siguientes en aceptar las coronas.

―¿Quieren comer algo? ―pregunta la mujer.

Ashton mira el conejo que está cocinándose a la parilla casera.

―No, gracias. Estoy bien ―carraspea.

―Nosotros preferimos tomar algo ―mascullo al ver que a Arianne tampoco le agrada la idea.

La mujer asiente.

―Estaré aquí en un minuto.

Nos sentamos en los troncos de madera con Arianne en mi regazo. Las estrellas brillan en el cielo al igual que la luna. Todo luce tranquilo, normal y relajante. Mis hermanos se ríen cuando ven las sábanas blancas en el centro del círculo que han formado los licántropos. Andrew marcará ahí a Emmie. Agradezco más que nunca haber mordido a Arianne en privado. Me parece absurdo hacer este acto con varios ojos observándonos. Cabe destacar que no sería placentero. Yo disfruté mordiendo a mi chica, Andrew se sentirá muy incómodo.

Distingo a mis padres vestidos de blanco mientras se mantienen cerca de Andrew. Puedo sentir la tensión entre ambos. Papá siempre está tocando a mamá, ahora no veo que tenga un dedo sobre ella.

Papá me saluda con una mano cuando nos ve y mamá aparta la mirada. Qué se sienta jodidamente avergonzada por la mierda qué hizo. Tarde o temprano se quedará sola si no reflexiona.

―¿Qué haremos cuando regresemos a New Hope? ―pregunta Ari desde mi regazo.

Bebo un trago de mi cerveza.

―No creo que pase en mucho tiempo.

Ashton suspira.

―Tenía planeado volver lo antes posible.

Lo miro con una ceja enarcada.

―¿Por qué?

―Buscaré a Marianne. Sé que está en alguna parte y la encontraré.

Axel niega.

―Hombre, supera a esa chica. Pasaron dos años.

―¿Qué pasa si mamá le hizo daño?

―Ella juró que no y le creo ―dice Axel ―. El caso de Marianne es... raro. Me da la sensación de que no quiere ser encontrada.

―¿Tú qué sabes? Ni siquiera la conoces.

Axel se encoge de hombros.

―No hay que ser adivino. Esa chica me daba mala espina, lo siento.

No recuerdo mucho a Marianne así que no puedo opinar. Era muy tímida y callada. Mi madre la vio como una presa fácil y le dio el susto de su vida. Alguien con carácter no sería manipulada de esa forma. Espero que mi hermano la encuentre para que logre cerrar ese ciclo.

―Chicos, el acto ha comenzado ―Arianne se mueve inocentemente en mi regazo. Ella no es consciente de la erección que está provocándome.

Finalmente, el alfa de la manada decide hacer acto de presencia. Emmie permanece detrás de él con un vestido blanco bordado de flores. El traje de Andrew es elegante y blanco. Hay una rosa del mismo color en su bolsillo.

―Estoy muy agradecido de que estén aquí ―La voz del alfa es fuerte y dominante. Todos inclinan la cabeza en señal de respeto ―. Es un honor para mí entregar a mi hija a su compañero de vida.

Mi padre se aclara la garganta.

―Como el alfa de mi manada, aseguro que la unión con el clan de los Karlsson será irrompible. Tienen nuestra lealtad y nuestro respeto ―asiente hacia Andrew y él da un paso cerca de Emmie con una sonrisa ―. Me siento honrado de tener a su hija en nuestra familia. Ella es parte de nosotros y le aseguro que nunca le faltará nada. El único deber de mi hijo será mantenerla feliz el resto de su vida.

Luego se pasan la mano en señal de respeto.

―Entonces son más que bienvenido en mi familia. Seremos aliados cuando la unión se haga posible y pelearemos cualquier guerra que enfrenten ―Mira a mi hermano ―. Eres un hijo más para mí, Andrew.

La mirada azul de Andrew destella. Es obvio que le agrada contar con la aprobación de su suegro.

―Gracias, Eslem.

Arianne suspira y levanta la mirada a mis ojos.

―¿Eso es todo? ―pregunta.

―Andrew deberá morder a Emmie.

Mi madre está limpiando las lágrimas de sus ojos mientras ve como Andrew y Emmie se ubican sobre las sábanas blancas.

―¿Lista para ser mi chica por siempre? ―Se ríe Andrew.

Emmie le devuelve la sonrisa.

―Lista.

Andrew enseña los colmillos mientras Emmie inclina su cuello. Veo con atención como sucede la unión mientras mi hermano muerde a su chica. Entonces los vellos de mi nuca se erizan y frunzo el ceño.

―Asher...

No tengo tiempo de pensar porque de repente todo sucede muy rápido. Oigo gritos de horror y posiciono a Arianne rápidamente detrás de mi espalda. Alrededor de cincuenta licántropos en forma empiezan a atacar la manada de Emmie y la batalla empieza. ¿Qué demonios está pasando?

Arianne tiembla a mi lado.

―Vienen por mí.

🌙

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