(Foto de arriba hecha por VVVaneV)

(ALERTA: Puede producir demasiada diabetes)

En la casa del peliazul, Bonnie intentaba callar a Bon, quien lloraba descontrolado por el frío que estaba pasando, pues el pelimorado le tenía que cambiar el pañal, pero eso al peliazul le incomodaba, no por vergüenza, ya que no se enteraba, sino por que estaba tumbado sobre una mesa... ¡Y estaba helada!

- ¡¡Waaah!! ¡Waah!- las lágrimas caían de los ojitos verdes del pequeño, mientras que el mayor le acariciaba la mejilla, tratando de calmarlo.

- ¡Tranquilízate, Bon, enseguida termino!- el pelimorado terminó de ponerle talco y le puso un pañal limpio, para luego volver a vestirlo, y cargarlo sobre su hombro y frotarle la espalda, tratando de devolverle el calor a esta- Ya, ya pasó... tranquilo, mi niño...- lo último lo susurró, pero Bon lo escuchó y eso lo tranquilizó.

El peliazul se aferraba con todas sus fuerzas a la camisa del pelimorado, el cual le seguía acariciando la espalda, mientras le susurraba para que se calmara del todo. Poco a poco, se iba controlando, y ya no lloraba, pero le pesaban los párpados.

- Mmm...- el pequeño se estaba quedando dormido- Uaa...- bostezó mientras se tallaba su ojito derecho con su manita.

Bonnie lo miró a la cara mientras lo seguía sosteniendo en uno de sus brazos, le acariciaba su pelo con su otra mano libre y le quitaba las lágrimas que seguían cayendo cada vez con menos frecuencia, haciendo que se apoyara en su hombro, logrando que el peliazul empezara a cerrar sus ojitos, quedándose dormido. El pelimorado sonrió satisfecho y le besó la frente, para luego ponerle de vuelta su chupete, pues al peliazul le tranquilizaba el tenerlo, y lo dejó dormir en su cama, para luego arroparlo y dejarle dormir tranquilo. Salió del cuarto para luego cerrar con cuidado la puerta. Justo en ese momento llamaron repetidas veces a la puerta, asustando al chico. Fue temeroso hacia esta y la abrió con cuidado, para ver de reojo cómo Chica y Mangle estaban furiosas al otro lado, esperando que les abriera. Cerró la puerta. Tragó saliva. Respiró hondo. Y abrió la puerta.

- Ho-hola, chicos- Bonnie tenía una sonrisa forzada, pues por dentro se estaba muriendo de miedo por las miradas fulminantes que tenían las chicas.

- Hey, rarito, te dejaste la guitarra en la sala- dijo el pelirrojo con el instrumento en la mano-, y el de tu novio también.

- A-ah, sí... m-muchas gracias Foxy, jeje...- rió nervioso el pelimorado, tomando ambas guitarras y escondiéndolas detrás de él.

- Muy bien, Bonnie, ¿qué nos ocultas?- Chica se cruzó de brazos y el mencionado se puso pálido. Estaba muerto...

- E-eh...- estaba perdido... pero no podía mentirles a sus amigos, además, se suponía que Paola ya les había contado, ¿no? ¿Qué más podría pasar? Suspiró- Bien, pasad y os lo contaré.

- Y no te cortes, queremos todos los detalles- dijo Mangle igual cruzada de brazos con una minúscula sonrisilla, aunque quería ahorcar a la pareja por lo ocurrido.

- Está bien...

Y así, tras una larga historia, según Bonnie, la banda estaba ya más aclarada... y ahora sólo querían matar a la chica bully... y a Irene por no cerrar el laboratorio.

- ¡¡AAGGHH!! ¡Voy a matar a esa maldita científica!- la peliblanca estaba que se tiraba de los pelos, e hizo falta que Joy y Freddy la sujetaran para que no fuera detrás de la castaña.

- ¡Mangle, tranquila!- Foxy estaba por golpearle la cabeza, pero eso sólo empeoraría las cosas.

- Je... je... je...- de repente empezó a escuchar algo, pero casi no podía por los griteríos- ¿Eh? ¿Qué es eso?... ¡¡CALLÁOS UN MOMENTO!!- Bonnie gritó poniéndose de pie, haciendo que todos callaran y le miraran sorprendidos.

Se escuchó claramente el llanto de un bebé proveniente del piso de arriba, y a paso rápido, el pelimorado se dirigió hacia allí. Abrió un poco la puerta y vio que Bon estaba delante de esta, sentado y llorando mientras se frotaba los ojitos intentando parar las lágrimas. Al mayor se le paralizó el corazón al ver al peliazul así, por lo que lo cogió con cuidado y lo abrazó con cariño, acariciándole el pelo para tratar de calmarlo.

- ¿Cómo habrás bajado de la cama si está tan alta del suelo?- dijo en voz alta Bonnie, hasta que vio cómo las sábanas estaban un poco tiradas por el suelo, dándole a entender que se había ayudado con estas- Bueno... al menos parece que ahora sí usas la cabeza...

Bonnie giró la cabeza del pequeño para verle y notó que ya no llevaba su chupete, debió de haberse perdido mientras dormía. Se acercó a la cama y empezó a rebuscar entre las sábanas y encontró el chupete justo debajo de estas. Se lo acercó al pequeño y este rápidamente lo tomó entre sus manitas y se lo colocó en la boca. Bonnie le sonrió y este se lo quitó un momento para...

- Buhnie... bueno...- sonrió el pequeño y se volvió a colocar el chupete en la boca.

El pelimorado casi se desmaya de la ternura del peliazul... ¿así se sentía Bon cuando él era así? Sonrió muy feliz y plantó un beso en la mejilla del pequeño, quitándole los restos de lágrimas ya secas.

- Jeje... vamos abajo... todos nos estarán esperando- despeinó un poco los pelos de Bon y fueron hacia abajo.

Los demás seguían como antes; Mangle quería salir tras las que quería matar y las chicas la intentaban parar mientras Foxy se aguantaba las ganas de golpearle la cabeza.

- Okey, no ha cambiado nada- suspiró el pelimorado, haciendo reír al pequeño.

- Ah, ya estás de vuelta- Golden se giró y miró al pelimorado cargando a Bon-. Uhh... ¿por qué me parece un déjà-vu?

- ¿Tal vez porque yo también estuve así?- respondió el pelimorado con ironía.

- Jaja, puede ser, puede ser...- rió el rubio.

- Vaya, creo que así no podrá tocar la guitarra- dijo Freddy acercándose al pequeño, al que se le iluminaron los ojos.

- ¿Gui-guitada?- se le cayó el chupete por abrir tanto la boca, pero Fred tenía buenos reflejos y se apoderó del cuerpo rápidamente y lo atrapó antes de que cayera al suelo y se lo dio a Bonnie- ¡¡Guitada!!- gritó el pequeño feliz, le gustaba esa palabra... Por una MUY extraña razón...

Bonnie no pudo evitar reír al oír al pequeño, no había tanta diferencia a cuando tenía 15 años. Todos los demás se golpearon la frente.

Así pasaron el resto de la tarde, entre risas y chácharas todos estaban muy contentos... salvo cuando Mangle interrumpió el momento, hablando del principal tema por aquella visita.

- Bueno... ¿y ahora qué haremos si no tenemos guitarristas?

- Eh... Mangle, te recuerdo que Freddy también toca la guitarra- Foxy golpeó con un poco de brusquedad la espalda del mencionado.

- Pero quedaría mejor si cantara, ¿no?- Fred no lo pudo evitar, podría ser su oportunidad de brillar... creo que pasó demasiado tiempo con Golden.

- ¿Y si tocas y cantas a la vez?- sugirió Bonnie.

- Sí... al menos necesitamos una base de guitarra- le animó Joy.

- Mmm... está bien, si las señoritas me lo piden~- le guiñó un ojo a Joy, haciendo que se sonrojara.

- Bueno, creo que nosotros nos vamos- dijo Foxy mientras se estiraba-. Mañana te vendremos a buscar para escoltarte hasta la escuela, ¿entendido?

- Jeje, sí- Bonnie también se levantó de su asiento y los acompañó a la puerta- ¡Adiós chicos!

- ¡Adiós, Bonnie!- dijeron todos, sorprendentemente, al unísono.

- Uff, vaya día tan loco, ¿no, Bon?- dijo el pelimorado elevando al pequeño para que le mirara a la cara.

- ¡Guitada!- dijo feliz el peliazul mientras sonreía y extendía sus brazos hacia el mayor, quien sólo rió bajito.

- Lo tomaré como un "sí"... Supongo que tendrás hambre, ¿no? Ya es algo tarde- Bonnie le acarició la tripita y notó que le rugía un poco.

Bonnie fue a dejar a Bon al sofá, para ir a preparar un biberón de leche, pero el pequeño no quería que el pelimorado se fuera. Aún así, Bonnie lo dejó ahí sentado mientras se iba a la cocina para prepararle a Bon su "cena". El pequeño sólo miraba cómo se iba, y triste, bajó su mirada y se recostó en el sofá para estar más cómodo. Luego de un rato, el pelimorado volvió con un biberón en la mano, mientras lo agitaba. El pequeño se alegró y le pedía que lo cargara, mientras que el mayor reía y se sentó a su lado, para luego cargarlo y recostarlo en su regazo. Cuando el pequeño ya estaba cómodo, el mayor le quitó el chupete, a lo que al principio el pequeño se quejó, y luego le acercó la boquilla del biberón a la boca. Bon lo miraba curioso, y lo metió en su boca, para empezar a tomar la leche del biberón. Bonnie veía cómo el peliazul bebía sin rechistar, no como hizo él al principio. Sonrió inconscientemente, mientras el pequeño iba cerrando sus ojos, volviendo a quedarse dormido. Ya cuando terminó, Bonnie le dio unos golpecitos en la espalda para que eructara, y luego no tuviera gases. Ya al terminar del todo, le puso de vuelta su chupete y Bon se quedó totalmente frito. El pelimorado miró con dulzura al pequeño y lo llevó hasta su cama. Volvió a la sala para recoger y limpiar el biberón y luego ponerse el pijama para dormir junto al peliazul. Se tumbó junto a él, le acercó su mano y Bon, por instinto, le agarró su dedo. El mayor rió y se durmió junto a su pequeño bebé Bon.

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Palabras: 1682

¡¡Wii!! Parece que la inspiración no me quiere abandonar hoy, aunque no pude poner dibujos... pero eso es culpa de la falta de tiempo. Espero que os haya gustado el cap, le puse mucho cariño y empeño.

 En serio, cada vez que leo uno de vuestros comentarios no puedo evitar sonrojarme y sólo tengo una cosa que deciros...

¡Ale, vamos con los Fanarts!

Fue de Atarimeko-chan, quien además tuvo la genial idea de que Bonnie (tal vez) le cante una nana a Bon. Os recomiendo que la escuchéis, es preciosa.

Y este Bon, tan morenito, es de Liesel_Depaz. Muchas gracias, es hermoso.

¡Disfruten!

- Irene