HyunJin tomaba la mano de su ahora esposo, a la vez que caminaban rumbo al hotel de aquella hermosa isla paradisíaca. Al llegar al hotel, habían muchas personas que se ofrecieron a darles recorridos a lo largo del lugar, una lista de actividades pensadas para los turistas y varias cosas más relacionandas con eso, pero a HyunJin no le pareció del todo buena la idea, él solo quería estar con su bebé todo el día.

Y la noche.

Ambos.

Solos.

Y Felix no parecía estar en desacuerdo con eso. Iban a estar ahí tres semanas, habría tiempo para esas cosas luego.

—HyunJin, se ve el mar. —Mencionó el menor jalando de la mano a su esposo, mientras este sonreía por la emoción de Felix.

La suit era enorme. La cama era grandísima y los ventanales daban una vista perfecta del mar y la vasta vegetación del lugar. Había una pantalla plana de al menos cincuenta pulgadas y muebles blancos haciendo juego con las paredes de color crema.

—¿Te gusta, bebé? —Felix asintió, para después de unos segundos mirarle con el labio inferior abultado.

—HyunJin, ¿Y si se sale el mar? —No era una novedad que a Felix en cierto modo le diera miedo el mar. Las pocas veces que HyunJin le había llevado a la playa, el pecoso se dedicaba a juguetear en la orilla, nunca más a allá de ella, ni siquiera cuando el otro siendo un gran nadador lo llevaba en brazos hacia más al fondo. Cuando eso sucedía a Felix le daban ganas de llorar y HyunJin no tenía de otra que dejarlo en la orilla y estar con él. Porque se le rompía el corazón al ver los ojos de su bebé llenos de lágrimas.

—Eso no pasará, bebé. Confía en mí, ¿Sí? —El menor volvió a asentir, esta vez abrazando a HyunJin por la cintura. Este le correspondió gustoso y besó su sien. Luego de aquello ambos durmieron unas pocas horas debido al cansancio del viaje.

HyunJin fue el primero en abrir los ojos, posando estos en el tranquilo rostro de su esposo a escasos centímetros de él, sonrió perezosamente viéndole tan hermoso, sus cabellos alborotados eran una maravilla ante los ojos del mayor. Luego notó la escasa luz que había, percatándose entonces que era de noche y la luna llena se alzaba en lo alto proporcionando un hermoso reflejo del mar que se lograba colar por la habitación.

Acarició los cabellos de su esposo con suavidad, sacándole a este leves suspiros de satisfacción ante la grata sensación. Su corazón latió deprisa cuando los ojitos del menor se abrieron poco a poco hasta que lograron enfocarse en él.

—¿Te desperté, mi amor? —Felix vio el lugar abriendo sus ojos con algo de sorpresa al ver todo casi oscuro, a excepción del balcón donde se podía apreciar el resplandor de la luna.

—Ya es de noche. —Frotó su ojo con su puño y a HyunJin se le agitó el corazón un poco más.

—Sí, ¿Tienes hambre? —Preguntó cariñoso, mientras aprisionaba al menor entre sus brazos. Felix asintió levemente, entonces HyunJin sacándolo de la cama y tomando su mano se dirigió a la habitación que se suponía era el baño, estando ya ahí se dedicó a lavar el rostro de su esposo y el propio.

—¿No prefieres mejor un baño? —Felix le miró y asintió —Tomaremos un baño, entonces. —Finalizó el mayor.

—¿Te bañarás tú primero, Hyung? —HyunJin paró en seco, parecía ser que Felix no estaba consciente de la situación. Y es que el pelinegro planeaba que ambos se bañaran. Al mismo tiempo. En el mismo lugar.

No lo culpaba, decir que Felix era inocente hasta niveles celestiales no era una mentira, poseía la mentalidad de un pequeño niño y rápidamente HyunJin se dio cuenta que mientras él pensaba en cosas no muy sanas, su bebé estaba ahí sin saber nada.

—¿HyunJinnie? —El mencionado suspiró y frotándose la cara miró a su bebé.

—Lo siento, mi amor. Bañate tú primero, ¿Sí? —Pasaron unos cuantos segundos cuando HyunJin volvió a hablar —¿No vas a desvestirte, bebé? —Felix se sonrojó levemente.

—E-Es que tú sigues aquí. —Soltó con pena el menor, entonces HyunJin se mordió el labio inferior y, con un sonrojo bastante notorio, preguntó:

—Bebé, t-tú... Bueno, tú sabes lo que hacen las personas casadas... ¿Verdad? —Felix ladeó la cabeza algo confundido, pero asintió y respondió:

—Amarse mucho. —Sonrió hacia HyunJin y este juró sentir que se le iba el aire.

—S-Sí, pero hay otra cosa aparte de eso... —Inhaló y exhaló —¿Sabes qué es hacer el amor, mi vida? —Felix se sonrojó tapando su rostro, a la vez que asentía.

—¿Vamos a hacer eso?—Susurró y HyunJin se sintió mal, parecía que la idea le desagradaba a su bebé, y si él no quería, no había nada qué hacer. Lo importante era que su hermoso ángel se sintiera bien y seguro. Y si para eso no debía tocarlo más allá, entonces eso precisamente haría.

—No, yo creo que no, bebé. —Sobó su cabeza y Felix destapó sus ojos, enfocándolos en HyunJin y la mini sonrisa que este le daba. Entonces vio como el mencionado iba a dar la vuelta e irse, pero no lo dejó.

—¿Por qué? —Abultó el labio —¿HyunJin no quiere hacerlo conmigo? —Parecía que eso le había dolido al menor y HyunJin no fue lo suficientemente rápido para correr a abrazarle.

—No, no, no, cielo, mi amor —Le besó la sien —. No hay nadie con quien quiera hacer eso más que contigo...

—¿Entonces por qué no lo hacemos? —Exclamó, sonrojado.

—Porque me da miedo hacerte daño. —Susurró, retirando algunos mechones de cabello de la frente de su bebé, a la vez que este fruncía el ceño.

—HyunJinnie nunca me haría daño —Lo miró a los ojos —, yo quiero hacerlo —El sonrojo aumento —. Está bien, Jinnie. —Terminó sonriéndole. Entonces HyunJin, más que feliz, le besó en los labios.

—Seré gentil, confía en mí, ¿Sí? —Felix sin titubear asintió, teniendo total confianza en HyunJin.

Se dirigieron fuera del baño, para que así Felix, con la luz de la enorme luna como única iluminación, fuera desvestido por HyunJin lentamente. Cabe decir que HyunJin nunca había visto a Felix desnudo, ni este al otro, así que ambos se iban a descubrir esa noche.

HyunJin pudo apreciar totalmente embobado la cremosa piel del menor, comparándola con la porcelana, sus pezones rosados, una cintura tan delgada y hermosa, y lo que sería una de sus perdiciones, las pequeñas pero bien formadas nalguitas del menor. Felix veía atentamente el torso desnudo de HyunJin, sonrojándose ante lo intimidado que se sentía bajo la mirada algo pícara de su esposo.

Las manos de HyunJin picaron por aquello, y despojándose de todo –exceptuando el bóxer– comenzó a acariciar desde los hombros del menor hasta la espalda baja de este, sintiendo los temblorosos escalofríos de Felix ante su toque.

—Tranquilo, bebé —Le susurró al oído —. Déjame cuidar de ti, ¿De acuerdo?

Felix con los ojos cerrados suspiró, mientras las manos de HyunJin no se detenían en recorrer su desnuda espalda y sus labios succionar su cuello, provocando que soltara leves gemidos.

Poco después, HyunJin buscó sus labios, uniéndolos junto a los de él en un beso muy diferente a los muchos que antes se habían dado, este era más profundo y dominante, incluso su lengua jugueteó con la contraria y al menor pareció gustarle, pues un suspiro abandonó sus labios cuando se separaron levemente y así se volvieron a unir en otro candente beso.

Felix se dejó hacer y sin ser realmente consciente, sus manos algo temblorosas bajaron por el torso de HyunJin, haciendo a este temblar un poco ante aquello, se sonrojó al tiempo en que su miembro parecía despertar, poniéndose duro. Separó sus labios de los contrarios pegando su frente a la de Felix, sintiendo las respiraciones aceleradas de ambos.

—¿Te he dicho cuánto te amo? —Felix soltó un leve "Sí" y HyunJin continuó —No importa, te lo diré de nuevo, una y otra y otra vez... —Suspiró, llevando su mano a un recorrido por el brazo de Felix, llegando hasta su mano y tomando esta para besarla —Te amo, mi bebé.

Y así con cuidado lo acostó encima de la enorme cama con sábanas blancas. Rebuscó en la maleta que tenía a un costado y sacó un botecito de lubricante, colocándose una buena cantidad en sus dedos bajo la atenta mirada sonrojada de Felix. Sonrió hacia él y le guiñó un ojo, acercándose a su rostro y así plantándole un beso en los labios.

—Escucha, amor —Volvió a besarle —, tienes que confiar mucho en mí, ¿Está bien? —Felix asintió —Solo dolerá un poco, seré cuidadoso, mi cielo, así que si no te gusta, tú solo dilo y yo me detendré —Besó los labios del otro, para luego de separarse escuchar el "Sí" por parte del menor —. Bien...

Entonces HyunJin con cuidado tanteó la entrada rosada de Felix, viendo a este abrir sus ojos sorprendido. Su dedo ingresó poco a poco, a la vez que sentía la evidente incomodidad de su bebé, mas no paró hasta que el menor pareció acostumbrarse a la intromisión, entonces sacó el dígito para esta vez ingresar dos dedos. Ahí fue cuando Felix lloriqueó con algo de dolor, sin embargo, el castañito se negó a detenerlo, él realmente confiaba en HyunJin.

Y así vino el tercer dedo, esta vez al poco tiempo Felix comenzaba a destensar los músculos, el dolor era poco y se sentía sumamente bien, entonces HyunJin probó a lamer uno de los pezones de su bebé, haciendo a este tener escalofríos y soltar gemidos algo altos. Un sonido nuevo para HyunJin que le había puesto bastante duro, más de lo que ya estaba.

Entonces los dedos se retiraron de la entrada de Felix como los bóxers de la intimidad de HyunJin. Felix con vergüenza se tapó la cara cuando vio el "Amiguito" de su esposo, pensando si realmente eso iba a caber en él.

HyunJin por otro lado le veía con ternura mezclada con lujuria. El miembro de Felix no era grande, pero si grueso y con un glande rosado que realmente le estaba tentando a probar con sus labios, y así lo hizo, sacándole aire a Felix, quien avergonzado intentaba apartarle, pero HyunJin no dio su brazo a torcer, engullendo aquello con su boca. Cuando Felix se vino, él tragó la escencia que el contrario expulsó; sintiéndose, de alguna manera, orgulloso de ello. Por otro lado, Felix, con los ojos llorosos, le miraba apenado. HyunJin no lo dejó pasar y unió sus labios con los del castaño, haciendo que de alguna manera el menor probara la escencia propia, pero logrando el cometido de calmar a su hermoso bebé, transmitiéndole seguridad.

Para cuando su miembro ingresó en la cavidad virgen de su esposo, Felix pegó el grito al cielo, llorando de dolor, pero sin aceptar detener el acto. Fueron algunos minutos los que HyunJin tuvo que esperar para que los músculos de su bebé se relajaran y pudiera moverse con lentitud dentro y fuera del interior de Felix.

Luego de un tiempo ya habían gemidos e inclusive algunos gruñidos por parte de HyunJin ante tal sensación. Felix, perdido en su propio mundo, solo era consciente de la dulce sensación que HyunJin le estaba proporcionando, mientras se aferraba al cuello de este.

Las palabras llenas de amor no faltaron en aquel acto, dichas con suma ternura.

HyunJin lo besaba en cortos lapsos, tratando a su bebé con todo el cariño del mundo. Sus movimientos no eran rápidos, tampoco demasiado lentos, buscaba el bienenestar de su esposo, eso era lo que le importaba. Él también disfrutaba al máximo. Trabajó el miembro del menor a la par de las estocadas y la sincronía de sus labios en los contrarios. Felix se vino por segunda vez y cuando HyunJin sintió su límite, salió de él y acabó fuera, había olvidado el condón y aunque un bebé no le molestaría, aún era algo pronto para aquello.

Felix se quedó dormido luego de eso, HyunJin lo limpió y se duchó para después dedicarse a acariciar a su dormido esposo, sonriendo como el idiota enamorado que era.

—Te amo, mi dulce bebé. —Suspiró, acurrucando al pecoso entre sus fornidos brazos.

에이브릴🌹