—Bebé—YoonGi aparto la vista de su celular y se volteo en dirección a Jimin quien se estaba abotonando la camisa, este le sonrió y continuo — ¿Que se te atonja comer?—YoonGi lo penso un momento.

—Brochetas de cordero... — Jimin le sonrio ladillamente.

—Ya sabia que dirias eso— Se dirigió hacia el menor, quien frunciendo el ceño le dijo;

—¿Entonces para que Jimin me pregunta?— El mencionado no supo reaccionar ante aquello, así que simplemente se río besando la frente de su bebé, a la vez que susurraba:

—Alguien esta algo gruñonsin — YoonGi abulto el labio continuando con aquel ceño más que fruncido.

—¿Donde esta mochi bebé?— Cuestiono el castaño, Jimin suspiro abrazando a su esposo.

—Esta dormido...— YoonGi quizo ir escaleras arriba, pero Jimin no se lo permitio — No, no no, quedate entre mis brazos.

—¿Por que dejaste a Youngjae solito?— El palido pregunto con pena. Jimin lo apreso más asi mismo y respondio:

—Esta dormido, mi amor— Repitió formando un pronunciado puchero en sus labios— No lo quice despertar... Estaba muy casansado de tanto jugar— YoonGi pareció comprender su punto porque rodeó sus manos alrededor del cuello de Jimin y le plantó un beso en los labios, haciendo sonreir al otro.

—¿Lo arropaste?— Pregunto aún de puntillas para alcanzar el rostro de su esposo, Jimin asintió lentamente pasando sus labios por las mejillas del pálido.— Que bonito— Susurro el menor capturando el rostro de Jimin y dejando de estar con sus pies en puntillas, para así, atraer la cara del otro hasta su baja altura y plantarle un gran y prolongado beso en los labios, moviéndolos con parsimonia, sintiendo como Jimin sonreía cada que podía en cada movimiento del beso.

YoonGi habia estado más cariñoso que de costumbre y cabe decir, que aquello tenia a Jimin como pendejo, hipnotizado por su bebé. No era como si eso fuera algo nuevo, pues cada dia Jimin se enamoraba de todo el ser de YoonGi, de sus rabietas, sus ojos de gatito, de sus poco comunes celos y básicamente hasta la forma en como respiraba su esposo. El estaba perdido y le encantaba estarlo, siempre y cuando sea a causa de su bebé.

—Jimin dijo que haria brochetas de cordero...— Jimin contempló unos segundos al otro y acercándose a besarle de nuevo, dijo:

—Yo no dije eso, bebé— Le volvio a besar— Yo pregunte, lo que querías comer— Acaricio las mejillas algo sonrosadas de su bebé y entonces sonrio por el ceño fruncido que se comenzaba a formar entre sus cejas.

YoonGi habia estado algo sensible a molestarse, sin embargo eso no le afectaba a Jimin, quien más que contento buscaba alegrarlo.

—De acuerdo, deja de juntar tus cejitas todas hermosas, así, bebé— beso su frente— Hare las brochetas, ¿si, mi cielo?— YoonGi puchereo asintiendo hacia Jimin, y este no esperó mucho para volver a besarle con delicadeza, llevando sus manos hasta la cintura de YoonGi, y prontamente bajando estas en dirección a las nalgitas del otro, o eso queria hasta que:

—¿Mami?— Habia balbuceado un pequeño niño de casí cuatro años, quien más dormido que despierto bajaba las escaleras en dirección a sus padres.

YoonGi aparto a Jimin y algo sonrojado pero más que todo  sonriente se acercaba a su hijo, quien contento extendió sus brazos hacia el.

Jimin por otro lado no sabia como sentirse, sus manos picando por acariciar el trasero de su esposo, vio algo dolido, pero más que enternecido la escena que estaba a su lado, YoonGi cargando a su otro bebé en sus brazos y este muy comodo con la cabeza recostada en su hombro, Jimin entrecerro los ojos hacia Youngjae y este le saco la lengua. Era una especie de juego entre padre e hijo cuando uno acaparaba toda la atención de YoonGi.

Suspirando, Jimin se acerco a sus tesoros y beso la frente de Jae y los labios de YoonGi, para sonriente dirigirse a la cocina, mientras su esposo e hijo buscaban alguna pelicula para ver.

Ah, Jae si que era una competencia difícil por el amor de YoonGi, y es que su hijo parecía haber salido a el, celoso y posesivo con YoonGi.

Jimin recuerda con claridad muchas veces donde su bebé era el mirar principal de algunos chicos y chicas, incluso aún ahora, y la molestia que le causaba aquello, la primera vez que sintió la ira recorrer su cuerpo, el solo era un niño de doce años, pero habría golpeado a aquel chico si tan sólo Taehyung nos lo hubiese estado sujetando.

Ese día YoonGi de diez años se encontraba coloreando como casí siempre, y Jimin observandole a una distancia prudente por la timidez que a este le daba estar cerca del pálido.

No sabia ni como habia entonces llegado un niño unos dos años más grande que YoonGi y se habia sentado a su lado, cohibiendo al instante a este, el niño que tenia el cabello negro habia sonreído hacia el pálido y este simplemente miraba a otro lado, Jimin se comenzaba a parar cuando la mano de Taehyung se poso en su hombro obligándolo a sentarse y permanecer así.

—Ni se te ocurra montarle una escena a ese chico— Había dicho el de tez más oscura— Conozco al chico, el simplemente esta siendo amable con mi hermano, relajate.

Jimin no lo estaba haciendo, ni lo haría nunca, no mientras su ángel estuviera al lado de ese mocoso sin gracia. Entonces Jimin pudo contemplar como el chico se despedida de YoonGi acariciando su cabello y fue entonces cuando YoonGi le sonrio tambien, que Jimin se puso rojo de la furia.

A decir verdad, Jimin tenia cierta posesividad con YoonGi, si, eso no era un secreto para nadie, y hasta parecia ridiculo que aún en la actualidad Jimin no logre olvidar a aquel chico que según el, estaba molestando a su ángel.

Así que aquel día a la salida, Jimin encontro al chico de nombre Jaebum caminando hacia casa y digamos que me dejo las cosas bien claras:

—Oye, No te acerques a MI YoonGi, ¿de acuerdo?— El niño se quiso reír— De lo contrario golpeare tu rostro — Espeto con tanta seriedad que el otro algo impactado simplemente asintió y Jimin se fue dandole un empujón con el hombro.

Nadie se entero de aquel suceso y Jimin lo guardaba celosamente, porque a decir verdad, ahora le da un poco de vergüenza la manera en la que hizo aquello, sin embargo el solo imaginarse que un chico se acercara a YoonGi con otras intenciones le hacia herver en viva sangre.

—Papá...— Llamó Jae jalando de su pantalon de chándal, entonces Jimin dejo su debate mental para después y prestarle toda la atención a su principio.

—Dime, hermoso bebé— Hablo agudamente hacia su pequeño, quien riendo un poco dijo;

—Mami se durmió — Abulto el labio— Esta cansado, llevalo a domi — Levanto sus brazos.

Jimin quiso comerse a besos a su hijo en ese momento, pero se limitó a besarle la mejilla y tomar de su manita para así llevarlo a la sala donde efectivamente YoonGi tenia los ojos cerrados y la boca levemente abierta, profundamente dormido, sonrio por incercia y lentamente se dirigió hacia su esposo.

—¿Bebé?— YoonGi nisiquiera se movió y Jimin le acaricio el rostro, para prontamente sin que el otro despertara llevarlo de manera nupcial al cuarto, para que durmiera más cómodo mientras la cena estaba lista,  Youngjae lo siguió a pasos apresurados y cuando su mamá estuvo en la cama, el no perdio el tiempo y se colo entre los brazos de este para dormir un rato junto a YoonGi. Jimin le miro sonriente.

—¿Planeas quedarte?— Jae simplemente cerro los ojos y Jimin suspiro contemplando la suerte de su hijo al dormir en ese momento con YoonGi.

Jimin era muy celoso y a veces ni su hijo se salvaba de aquello.

Y es que el simplemente, podria ser él pendejo más enamorado del mundo.

🍃🍂

Fin de los extras.

Bueno, muchas gracias por seguir la historia hasta aquí ;3 nunca espere llegar a tanto, y se los agradezco mucho.

Ahora, hubieron muchos, en serió muchos comentarios pidiendo segunda temporada :'v y me respuesta final es...

No, bueno de hecho planeo hacer una extensión de maximo diez capítulos en este mismo libro, con capítulos algo más largos, sobre El proximo embarazo de YoonGi y otras cosas :3

Pero, ¿que opinan?

~Nos leemos en mis otras historias~