YoonGi lloraba escondido detras de su piano, vestia completamente de negro, su abuelo se habia ido y el realmente no podia terminar de creerselo, aunque este le habia dicho hace un tiempo que quizás muy pronto no estaría, pero el no entendía, ¿por que se había ido al cielo sin llevarle con el?

-Yoonie- Jimin estaba frente a el con su traje negro y una mirada triste y a la vez preocupada. YoonGi solo atino a morderse el labio aguantando un sollozo. Jimin sintio su corazón doler más de lo que ya dolia.

Se agacho hasta quedar a la altura de YoonGi y le acaricio la mejilla viendo como el palido suspiraba por el contacto. Jimin comprendió que su pequeño novio no podia hablar por todo lo que estaba pasando, sabia que no tenia fuerzas. Sus ojitos estaban hinchados y su cara roja por el llanto, incluso sus labios estaban dañados por tanto morderselos.

-Ven aquí- Entonces como pudo tomo a YoonGi en brazos y este se dejo hacer pegándose en el cuello y hombro de Jimin soltando a llorar.- No has comido nada, bebé...

-No quiero comer... Quiero a mi abuelo-Jimin apretó los labios suspirando.

-Yonie, el ahora esta en un lugar mejor -le susurro al oido mientras rozaba sus labios con este. YoonGi se removió y le dio la cara.

-Mi mamá me dijo que...que él se habia muerto y no me dejo verlo más, yo queria verlo, Jimin-Sus ojos se volvieron a aguar. Jimin endurecio la mirada.- Despues lo vi, en esa caja negra...

Jimin se maldijo por no haber estado ahí.

-Ya bebé- le beso en la mejilla- Necesitas comer y dormir...- YoonGi hizo una mueca y negando volvio a llorar, a Jimin se le aguaron los ojos.

YoonGi se aferro a Jimin, sintiéndose protegido por sus brazos.

<<Cuando yo no este, entonces Jimin sera el que cuide debidamente de ti, el te quiere mucho, Yoon >> YoonGi lo sabia.

Jimin amaba demasiado a YoonGi y de ahora en adelante las cosas cambiarían, YoonGi aún era menor de edad no podia sacarlo de su casa, no en un año y medio al menos, entonces ¿que podia hacer mientras tanto?...

-Iremos a mi casa, ¿eso te gustaría? - YoonGi asintió-Comerás algo y luego...luego te daras un baño y dormiras en mi casa, ¿si?

Aunque Jimin se llevaba a YoonGi casi todos los días a su casa, no pudo evitar la soledad que sintió este durante aquellos casí dos años ahí, la nada de atencion que sus padres le daban y algunas veces los comentarios hirientes de su hermano Jihoo, nadie de su familia, exceptuando a Taehyung le consoló, nadie vigilaba si comia bien, nadie iba a su habitación cuando lloraba. Solo Jimin.

Taehyung regreso de Estados Unidos un par de meses antes que YoonGi cumpliera dieciocho, pero era un poco tarde para controlar la ignorancia y el poco estimo que sus padres tenian con YoonGi, Jihoo se fue, ni bien regreso Tae, queria estudiar un tiempo fuera y eso hizo. Con el se fueron los malos comentarios, pero más de alguno quedaría grabado en YoonGi.

-¿Te quieres casar conmigo?- YoonGi abrio en demasia sus ojos y miro a Jimin inclinado a sus pies y una pequeña cajita aterciopelada color vino y un anillo platenado descansando en él.

El enorme restaurante estaba totalmente desolado, únicamente estaban ellos dos, pues Jimin lo había alquilado en su totalidad.

-Pense que estabamos casados...- YoonGi lo penso un poco, ellos eran novios, vivian juntos, pero casarse era algo totalmente diferente. Jimin rio por la inocencia de su tierno bebé.

-Cuando nos casemos, seras igual de mio, solo que.. De manera legal- Entonces YoonGi comprendió.

-¿Tendremos una fiesta?, ¿como la de Hobi y Taehyung hyung?- Pregunto con ilusión.

-Una mucho mejor, bebé.. Pero debes darme tu respuesta - sonrió con dulzura.

-Si quiero - Y le abrazo, el corazon de Jimin palpitaba fuertemente y quizo llorar de felicidad.

-...Jimin- Abrio los ojos y vio a su bebé sentado en la cama tocando su pancita- Estabas llorando...

Siempre que soñaba con aquello Jimin termiba llorando por todo y por nada.

-No es nada bebé-Le sonrio transmitiéndole tranquilidad.- ¿sabes que te amo más que a mi vida?
- YoonGi asintió sonriendo, una pequeña mueca se hizo presente.

Jimin lo supo.

-¿Llevas rato despierto?- YoonGi asintió mientras Jimin sobaba su pancita- ¿Por que no me despertaste?, ¿Te duele mucho?

YoonGi nego lentamente.

-Es que estabas cansado... -Y es que hacia menos de seis horas habian llegado a casa.

Jimin negando le beso en los labios.

-Tienes que despertarme siempre que me necesites, ¿si? -Metio su calida mano debajo de la bata de YoonGi y acariciando mejor su pancita siguio su recorrido y delineó con suavidad la espalda de este.

YoonGi suspiro agusto, su espalda también dolia un poco.

-Te amo demasiado, mi amor - Suspiro enamorado- Gracias por dejarme estar a tu lado..

Y es que Jimin amaba a su dulce bebé.

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~Nos leemos~