Tocar el cielo en la mas dulce armonia...
—¡La isla de Jeju!
Jungkook corría por el hotel donde se hospedarían, todos los demás solo lo observaban.
—¿Siempre tiene esa energía?
El padre de los mellizos, miraba al pelinegro con curiosidad.
—Es peor, en la escuela me hace ejercitarme con él.
—No solo tiene mucha energía también hace milagros —agita el cabello de su hijo —iremos a registrarnos, vigila a tu hermano.
—Ya no tenemos cinco años.
Seokjin, la madre de Jungkook, y los padres de los Min fueron descansar un rato, Yoongi los iba a seguir pero Jungkook no lo permitió.
—Te advierto que me dejare caer al piso y tendrás que llevarme arrastrando.
—Te llevare como una princesa si haces eso, igual hacemos bonita pareja.
—Anda hermano, quiero ver la playa, podrás tirarte en la arena, pero vamos.
Se lo llevaron contra su voluntad, la playa no estaba muy lejos desde el hotel, llegaron a una tienda de conveniencia a comprar un par de gaseosas y helados, el clima era demasiado agradable. Jungkook entablaba muy rápido conversación con los turista y otros habitantes de la isla.
Llegaron a un prado donde podías bajar directamente a una de las playas, había montones de flores y todo el lugar era de un verde intenso.
—Debo admitir que fue bueno acompañarlos, el lugar es hermoso.
—Lo se, tu hermano no ha dejado de ver todo como si estuviera metido en alguna especie de fantasía, ha estado muy callado, empiezo a preocuparme.
—Nunca pensé que vendría aquí tan pronto, es que simplemente es hermoso.
—Aaah, mejor me adelanto, Jungkook ya tiene esa mirada de idiota mientras te ve.
Aunque ambos habían dicho lo que sentían el uno por el otro, seguían siendo algo tímidos entre los dos, leves roces de las manos, caricias suaves, pero el primer beso no se había dado. Y no es porque Jungkook no lo deseara, si no mas bien el hecho de que temía abrumar a Jimin con algo así.
El podría ser un descarado pero era un caballero.
—Parece que habrá como una especie de festival.
Yoongi ya estaba de nuevo a su lado, mirando el escenario que estaban armando.
—¿Qué irán hacer? —los mellizos hacían los mismos gestos mientras veían como Jungkook ya estaba con el personal —debería de ponerle una correa.
—Deberíamos haberlo previsto —Yoongi parpadeo —esta subiendo al escenario.
—¿Está encendido? —el eco de su voz se escuchaba por el lugar —perfecto, bueno me dejaron ayudar con la prueba de sonido y se la manera perfecta de hacerlo.
Una pista de fondo inicio, la gente ya se acercaba a mirar con curiosidad, Jungkook acomodo el micrófono y empezó a cantar.
https://youtu.be/dfWBVn4P3-M
Uno, dos, uno, dos, tres.
Oh, sí, sí
Oh, sí, sí, sí, sí (¡ooh!)
Oh, sí, sí
Oh, sí, sí, sí, sí .
Nunca tuve mucha fe en el amor o en los milagros (¡ooh!)
Nunca quiero arriesgarme a perderte (¡ooh!)
Pero, nadar en tu mundo es algo espiritual (¡ooh!)
Porque tú me haces sentir como que
Me han echado del cielo
Por mucho tiempo
Por mucho tiempo
Sí, tú me haces sentir como que
Me han echado del cielo
Por mucho tiempo
Por mucho tiempo
Si Jimin tenía alguna duda, con lo que Jungkook acaba de hacer se había esfumado. Los murmullos de otras omegas empezaron a aumentar.
Es demasiado lindo.
Tiene una voz preciosa.
Deberíamos de pedirle el número...
Era la primera vez que sentía celos, quería ir y gritarles a esas omegas, que la canción era para él pero no fue necesario ya que Jungkook se habría paso entre la gente para llegar hasta enfrente de Jimin.
—¿Te gustó la canción Bunny?
—¿Con esto me estás pidiendo algo? —él omega sonrió haciendo que el corazón del pelinegro quisiera salirse del pecho —creo que no me quedo claro el mensaje.
—¿YA ERES MI OMEGA?
—Sobre mi cadáver Jungkook Raúl —Yoongi toma la mano de Jimin y sale corriendo con su hermano —¡Me juraste amor primero a mi!
—¡Eres un coqueto! ¡Le rompiste el corazón a Yoongi!
Los mellizos corrían mientras se reían por haber dejado al pelinegro en shock, pero este les daba un poco de ventaja, sabía que los hermanos no eran muy atléticos....
—Me encanta el clima de la isla, es una pena que debamos irnos mañana.
Jimin jugaba con las olas del mar mientras recorría la playa con Jungkook.
—Siempre podemos volver después —se acerca a él y le toma de la mano entrelazando los dedos —pero me alegra pasar el último día contigo a solas, solo no sé lo digas a tu hermano.
Él lindo pelinegro se acerca más a Jungkook, rodeándolo con los brazos por el cuello.
—Igual está dormido, además de que mis padres también están en una especie de cita y tu madre y Jin..
—Ni lo menciones aún no lo asimiló, me agrada Jin pero será raro tenerlo como mi padrastro.
—¿Quieres ir a cenar a algún lado? —Jimin se acerca a sus labios de manera lenta —¿Tal vez una hamburguesa?
Jungkook sonríe y le atrae más a su cuerpo.
—Te tengo una sorpresa más.
Se aleja de él para tomarlo de nuevo de la mano empezando una especie de carrera hacia el otro lado de la playa. Llegan a unas pequeñas cabañas.
—¿Qué es esto?
—Me enteré de este lugar y pensé en ti —le ayuda a entrar —cenaremos aquí.
Había una mesa adornada con velas y un par de copas, ayudó a Jimin a sentarse que no dejaba de ver maravillado el lugar.
—Cada vez me sorprendo más, no se a que horas planeas todas estas cosas.
—Mi ventaja de que tú y tu hermano tengan el sueño tan profundo, tu duermes y yo cumplo tus sueños.
Lo dijo de manera tan tranquila que no sonó cursi o meloso, Jungkook estaba orgulloso de poder mimar al pequeño omega, jamás había sentido nada igual por nadie y estaba seguro que se aferraría a ese sentimiento lo más que pudiera. Así que quería externarlo con él, mostrarle lo mucho que le gustaba. Se fue por una canasta de pic nic sacando, un par de termos.
—No se me ocurrió otra manera de mantener caliente el estofado.
Jimin rio mirando la expresión de cachorro de Jungkook.
—Me parece una manera ingeniosa, y creo que incluso frio sabrá delicioso.
—Eso es verdad, no conozco a nadie que cocine mejor que yo, incluso supere a madre en esto, siento que, si la música no llega a ser mi destino, abriré un pequeño negocio de sopas y sándwiches.
—Perfecto, así me darás trabajo como tu mesero.
—De ninguna manera tu serás mi socio, ponemos a tu hermano a meserear.
El ambiente era relajado para ambos, comían mientras imaginaban sus futuros trabajos lejos de la música, era una de las razones por la cual podía estar al lado del pelinegro, era divertido y sus platicas nunca eran de un solo tema, pasaban de lo mas simple a lo mas complejo y terminaban con ejemplos absurdos siempre dejando a Yoongi como comodín en todo.
—Hablando de música —se levanto y le tomo de la mano —tengo algo más que mostrarte.
Pasaron al fondo de la cabaña donde estaba un piano, Jungkook se sentó y palmeo a su lado para que él pequeño pelinegro se sentara.
—Una de las pocas maneras que puedo expresarme de manera mas abierta, es esta —comenzó a tocar algunas teclas —Se que conoces la canción.
https://youtu.be/6q-sPyguOe0
Nunca me sentí de esta manera, no es suficiente, así que quédate conmigo.
Jimin en una de sus bandas favoritas y aunque era el cover de la canción original, la tonada era de la banda.
No es como si tuviéramos grandes planes.
Continuo él pelinegro, Jungkook sonrió de manera amplia.
Vamos manejando por el pueblo, tomados de la mano y necesitas saber que eres él único. Está bien, Esta bien.
Y necesitas saber que me mantienes despierto toda la noche, toda la noche.
Dicho esto, junto su frente con la de Jimin, ambos cerraron los ojos dejándose llevar por la música, empezaron a cantar al mismo tiempo, de manera lenta y sincronizada.
Oh, mi corazón duele tan bien, te amo cariño, tan mal, tan mal.
Unieron sus labios en un tierno beso, dejando que lo acompasado de sus respiraciones fuera lo único que se escucharan junto con la humedad de la acción, Jimin se abrazo del cuello de Jungkook profundizando aún más el beso.
—Espera —Jungkook le separo y se quedo con su frente unida a la de él —no sé qué me pasa Jimin, deseo tanto estar contigo, que temo arruinarlo —le beso la nariz — estoy cayendo tan rápido ante ti, que debo admitir que estoy un poco asustado, jamás había sentido nada así, es intenso, es enorme, siento que el corazón me quiere explotar cada que te veo, sonríes y me derrito.
La risa de Jimin lo hizo abrir los ojos por la sorpresa.
—Bunny te estoy expresando mis emociones y tú te burlas.
—¿Cómo es posible que alguien de tu tamaño me tire con facilidad? —trato de imitar el tono de la voz de Jungkook —ya estaba destinado que caerías por mí.
Jimin se levanto para sentarse ahorcajadas sobre el pelinegro, puso sus manos en los hombros de este, se le acerco a los labios.
—En mi versión del cuento, El conejo siempre es atrapado.
Jungkook sintió que el corazón se le saldría por el pecho, Jimin no solo era tierno y dulce, acababa de descubrir que tenia un lado atrevido. ¿Cómo si no pudiera enamorarse mas de él?
Le beso de nuevo pero esta vez lo tomo de la nuca, metiendo su lengua con descaro absorbiendo cualquier rastro de inocencia en el beso, se dejaría llevar, dejaría que el omega lo guiara al país de las maravillas.
Los besos descendían por su barbilla de manera lenta, saboreaba la piel salada entre el sudor, la brisa del mar, además aquel dulce aroma del omega que lo hacia lamer su cuello con necesidad de poder saborearlo de manera lenta, no pensaba que tal combinación fuera lo mejor que hubiera probado en su vida, sus manos se bajaban por las finas líneas de su cintura, escucho un pequeño jadeo.
Solo un sonido leve.
Bajo hasta los muslos, la piel tersa se deslizo por sus dedos, millones de corrientes eléctricas se esparcían por el cuerpo de Jimin, el tacto era delicado, era preciso, sentía que Jungkook la trataba como una obra de arte, algo que estuviera dándose el lujo de apreciar. El pelinegro se levanto aun con Jimin en su cintura, lo llevo hasta la cama, el short ligero que traía puesto se habia arremolinado en los finos muslos de Jimin dejando ver un poco la ereccion del omega.
Jungkook froto su rostro cuando lo vio tan indefenso sobre la cama, se relamió los labios, estaba planeando seriamente en cambiar de cuento, tal vez caperucita roja, donde el claramente sería el lobo. El pelinegro se quito la camisa dejando ver su trabajado cuerpo, Jimin sintió que todo el calor de su cuerpo se fue hacia sus mejillas, la visión que tenia frente a él era digno de cualquier sueño erótico de alguna adolescente. Jungkook fue sacado de alguna especie de fantasía, sus facciones eran tan marcadas, la mirada que tenia hacia él en este momento era intimidante, se sentía deseado, se sentía que poseía un enorme atractivo como para tener a tal hombre a su disposición. Un alfa que lo adoraría como si fuera el único omega en el planeta.
—Eres tan hermoso Jimin —bajo para besarle los muslos —eres él omega mas bello que pude haber visto —empezó a subir los besos hasta llegar a la entrepierna, beso sobre la tela del short causando un gemido leve — hueles divino.
—Siento demasiado calor.
—Debemos solucionar eso pronto — empezó a bajarle el short y quitarle la camisa —¿Aun tienes calor? —JImin asintió —es que aun queda un poco de ropa.
Jungkook deslizo su mano por el abdomen liso del lindo omega, llegando hasta la ropa interior, metió la mano para tocar la ereccion sobresaliente, su dedo rozo muy poco, pero el joven se mordió el labio reprimiendo cualquier sonido. Jungkook volvió a besarlo bajando su mano hasta dar con aquel fino anillo que ya lubricaba en deseo, los movimientos eran lentos y solo metia un poco la punta para disfrutar de los pequeños jadeos del omega, la ereccion de Jungkook se frotaba entre las piernas de Jimin, haciendo un tortuoso momento, pero demasiado intimo para ambos.
Dejo de atenderlo un segundo para poder quitar lo que quedaba de su ropa interior, Jungkook también se desnudo sacando un par de preservativos, abrió uno para colocarlo cuando logro liberar su erección, el pulso de Jimin estaba descontrolado, no dudo en admirar con algo de descaro el miembro del pelinegro.
El pelinegro regreso a los brazos de Jimin que comenzó a besarlo una vez a su alcance, rodeo con las piernas la fuerte cintura del chico ansioso por un poco mas de contacto, Jungkook se alineo para empujar un poco abriéndolo de manera lenta.
Esta vez el gemido fue un poco más fuerte.
—Ese sonido, es la armonía más hermoso que jamás había escuchado —se movió un poco mas profundo haciendo que el cuerpo del omega se arqueara y brotara un gemido más —Si, Es la mas dulce armonía.
Entre besos acalorados, jadeos y embistes lentos, se dieron cuenta de lo mucho que sus cuerpos encajaban con el contrario, Jungkook nunca había amado tan lento y Jimin nunca se había sentido tan apreciado.
Y para ambos fue lo mejor del mundo...
Les dije que seria un fic corto, asi que el siguiente capitulo es el final, la verdad no recordaba que yo pudiera escribir de esta manera, asi que apreciendolo, es como un cometa que solo sucede una vez cada tres mil años jajajajaja
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro