64. Último deseo
Magnus se había sorprendido y emocionado tanto por la pregunta de Alec. Se sentía como un niño. Y es que, incluso cuando aprendió a tener su alma dentro de él, incluso cuando fue completamente azul, sus padres nunca lo dejaron salir demasiado.
-¡SÍ! -se puso de pie de un salto, ofreciendo su mano al alma gris sin darse cuenta.
¿Qué pensaría Alexander si lo viera tomar la mano de su alma?
¿Sentiría todas esas veces que se habían tocado, aunque nunca se atrevería a lastimarla o usarla?
Bajó rápidamente su mano, entrelazando ambas, dudando un momento. ¿Alec dejaría a su alma? No se creía capaz de irse si el alma gris se quedaba sola sufriendo.
Alec sonrió un poco. La reacción de Magnus le recordó a su vida antes de Edward. -Bien. Vamos.
Alec salió, y Magnus tras él, no sin antes decir un "¡Vamos!" al alma gris.
Tal vez esto podía servir para todos. Él disfrutaría un poco antes de morir, Alec y su alma convivirían y tal vez podría darle buenas razones para liberarla.
El alma dudó, hizo una mueca, seguramente preguntándose si Alec la regresaría, pero al final fue tras ellos. Pensaba quedarse atrás, pero Magnus no lo permitió, le habló en un susurro: -No eres una mascota, si alguien tendría que ir atrás sería yo. No tú.
Alec no dijo nada cuando vio a su alma, aunque tampoco intentó acercarse a ella. Manejo en silencio, sin saber qué decirle a Magnus, pero no importaba, Magnus iba mirando los edificios que pasaban como si fuera la primera vez.
El alma encontró su mano un breve momento y le habló en su mente: "No te sientas mal si alguien es ignorante contigo, Magnus".
Magnus frunció el ceño. ¿Por qué se sentiría mal?
Pero no podía preguntarle frente a Alec. Así que lo dejó pasar.
Alec los llevó a un centro comercial. Caminó ignorando las miradas que les daban quienes lo reconocían, era Alexander Lightwood, aunque habían pasado años la gente aun recordaba. Además iba con su alma gris y un impuro.
Magnus sintió que su corazón dolía. La gente era tan injusta, ¿por qué veían así a Alec y al alma? ¡Ellos no tenían culpa de nada!
Magnus no veía, o no le importaban, las miradas que le daban a él. Con desprecio y asco. Era un ser sin alma.
Alec sí lo vio y le molestó. ¿Por qué lo juzgaban sin saber, sin conocer su historia? Magnus era, probablemente, la persona más buena que había conocido y ahora se arrepentía de no haberse dado el tiempo para conocerlo, ¿cuánto tiempo le quedaba? ¿Tal vez una semana o menos? Sus ojos eran más oscuros cada día...
Los llevó a librerías, a un café, a tiendas de música. Magnus veía todo emocionado, le recomendaba viejos libros a Alec -libros que él leyó en la biblioteca cuando lo dejaban salir-, le preguntó a Alec por su música favorita, bebieron juntos un capuchino en silencio. Se miraban de vez en cuando, Magnus no dejaba de sonreír, era tan bonito todo, esperaba que Alec y el alma gris disfrutaran de esto cuando él se fuera, que fueran felices.
Alec sonrió un par de veces, viendo a Magnus. ¿Cómo alguien podía pensar que era un monstruo?
-¿Magnus?
Magnus dejó el libro que tenía en sus manos y miró a Alec.
-Y-yo... Y-yo... Yo quería disculparme...
Magnus miró al alma gris y sonrió. Tenían una oportunidad, Alec estaba entendiendo. -Ya te dije que no es tu culpa, Alexander. Tu papá fue quien compró mi alma y mi papá la vendió -se encogió de hombros como si no fuera nada, como si no hubiera sido su sentencia de muerte.
Pero Alec negó. -No por eso. Por aquella vez que... -él miró a otro lado cuando habló-, por aquella vez que te golpeé, por las veces que te grité, por...por tratarte como lo hice. Por cuanto has sufrido...
Alec quería disculparse por los diecisiete años que sufrió aunque no fueron su culpa. Por el bebé que lloraba. Por el alma maltratada.
Magnus abrió los ojos sorprendido. Él quería que Alec tratara de seguir adelante, que dejara de sufrir, que liberara a su alma y soltaran ambos el pasado, no esperaba una disculpa para él.
-Por favor, perdóname, Magnus -Alec gimió un poco cuando el alma azul se movió dentro de él y el alma gris se quejó cuando algo cambió dentro de ella.
Magnus se asustó. No sabía a quien ir, al alma o a Alec. Miró al alma gris y ella le señaló a su dueño. Magnus llegó hasta él, puso sus manos en su brazo. -¿Estás bien?
Alec parpadeó un par de veces hasta enfocar a Magnus. Aquellos ojos azules, como su vieja alma, mirándolo fijamente, mirando su reflejo en los oscuros de Magnus. -Un mareo, nada grave. Tú...Magnus...
¿Alec sufría sólo por un perdón?
-Yo te perdono, Alexander -se apresuró a decir. Y lo decía de verdad. No le guardaba rencor, no lo odiaba, si algo podía reprocharle era sólo por el alma gris.
Alec lo miró en silencio un momento. Sus almas seguían agitadas, lo sentía. -Tú no mereces morir.
Magnus lo soltó. -Sí, bueno, hay cosas inevitables. Viví lo que tenía que vivir, no siempre es justo.
-¿No te da miedo? ¿La muerte? ¿Lo que haya después? No entiendo por qué pareces tan tranquilo.
-No puede ser peor que vivir sin alma. Duele, ¿sabes? Duele mucho. No porque no me queje quiere decir que no lo hace. Duele, Alexander. Sólo quiero que deje de doler.
-¿Si pudieras pedir algo antes de morir, un último deseo, sería que deje de doler? Yo puedo hacerlo, puedo llevarte a una de esas clínicas...
Alec le estaba ofreciendo lo mismo que su hermana, pero Magnus no quería eso, él debía usar hasta su último minuto para intentar liberar al alma gris y lejos no podía hacer eso. ¿Qué era otro poco de dolor a cambio? Ya había dolido toda su vida. Primero resistió porque fue un niño fuerte, después porque supo que su alma tenía algún destino, algo azul, y ahora podía hacerlo por Alec y su alma.
Sería tan fácil aprovecharse de Alec, pedir como último deseo que liberara al alma, pero eso no sería justo para nadie, no daría más que dolor a Alec al sentirse usado, y el alma gris no merecía la libertad así, no sería feliz si Alec no la liberaba porque se sentía listo...
-No, sólo déjame seguir cerca estos últimos momentos. Sólo eso pido.
CONTINUARÁ...
Les aviso, aunque creo que es obvio 😂, estamos en la última parte de la historia 🙈 ¿qué final imaginan? Yo tengo dos, todavía no me decido 🙊
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