24
- No acabaré contigo de esta manera. - Yang bajó el arma. - Lo haré de otra forma, así que cuídate, porque pronto llegará el día de tu muerte. - Sonrió
- No te tengo miedo, si quieres guerra, guerra tendrás. - Retó
- Perfecto, prepárate para perder. - Sonrió
- No, prepárate tu para perder, yo siempre gano
- Ya lo veremos Kim, ya lo veremos
Yang se marchó de ahí. Ahora Jisoo debía tener más cuidado, protegerse a si misma, pero también a Rosé. Ese tipo es un enfermo, y sería capaz de cualquier cosa para lastimarla.
Más tarde, Jisoo llegaba a casa de Rosé, pues tenía que advertirle acerca de Yang.
- Hola Rosé. - Saludó
- ¿Qué quieres Jisoo? - Preguntó
- Necesito hablar contigo, es algo serio
- Tu y yo no tenemos nada que hablar
- Tienes que irte a vivir conmigo, en mi casa estarás más segura, Yang Hyun Suk te quiere para él, no voy a permitir que te haga daño. - Explicaba. - Todo fue un plan para separarnos, Nayeon es su sobrina, tienes que creerme por favor
- No te aproveches de eso para tenerme nuevamente a tu lado
- No me estoy aprovechando de nada, solo quiero que estés segura
- Lárgate Jisoo, no tenemos nada que hablar
- Rosé por favor, no quiero que te haga daño, tienes que venir conmigo, corres mucho peligro aquí en tu casa sola
- No quiero nada de ti
- Por lo menos deja que mis hombres vigilen que nada malo te pase
- No quiero que me mantengas vigilada ¿Qué te pasa?
- ¡Me pasa que te amo! - Gritó. - Y solo quiero que estés bien
- ¡Déjame en paz!
Jisoo no iba a convencerla y aunque no quisiera, se marchó de ahí. Solo esperaba que Yang no le hiciera nada malo.
***
Jennie se encontraba en una tienda de ropa, específicamente en la sección de bebés, pues quería comprar aún más ropa para su pequeña, que dentro de unos meses llegaría a darle mucha felicidad.
- Que lindo vestido. - Decía para si misma. - Estoy segura de que a Lisa le encantará. - Continuaba mirando todo tipo de ropa
- No grites y no hagas nada estúpido. - Un hombre se colocó detrás de ella y le puso una pistola en su espalda. - Acompáñame
- No me hagas nada por favor. - Pidió Jennie. - Estoy embarazada, no me lastimes
- No te haré nada, a menos que hagas algo estúpido, ahí sí, te juro que haré volar tu cabeza. - Advirtió
Salieron por la puerta trasera de la tienda, así los hombres que la acompañaban y cuidaban no la verían.
Por otro lado, Lisa se encontraba muy preocupada, pues, sus hombres le habían informado que Jennie de pronto había desaparecido de aquel lugar.
- Vine en cuanto me avisaste. - Dijo Jisoo llegando a casa de Lisa bastante preocupada
- Mis hombres acompañaron a Jennie al centro comercial, estaba en una tienda de ropa, ella no salía y entraron a buscarla, pero no la encontraron por ningún lado. - Explicó Lisa
- Se me olvidó avisarte sobre Yang, quiere hacernos daño
- ¡Maldito viejo! - Gritó enojada. - Voy a matarlo
Justo antes de salir, el celular de Lisa sonó.
Tengo a la madre de tu hija, si no haces lo que te ordene, dile adiós a las dos.
Decía aquel mensaje.
- Rosé. - Habló Jisoo. - También esta en peligro
- Ve por ella rápido, no dejes que Yang la atrape
Jisoo salió a toda velocidad de ahí, acompañada por varios hombres, fueron rápidamente a casa de Rosé. Habían llegado justo a tiempo, pues afuera de su casa, habían dos camionetas y dentro se escuchaban gritos.
- ¡No te la vas a llevar hijo de puta! - Gritó Jisoo bajando de su camioneta cargando su arma
- Si disparas la mato. - Salió Yang de la casa, apuntando con su arma a Rosé
- ¡Déjala imbécil!
- Perdóname Jisoo, debí hacerte caso. - Dijo Rosé llorando
- ¡Cállate y deja de llorar! - Gritó Yang. - ¡Escúchame Kim! ¡Vas a dejar que me vaya o Rosé pagará las consecuencias!
- ¡Te voy a matar maldito desgraciado!
- ¡Baja tu arma y también dile a tus hombres que lo hagan! - Ordenó. - Hazlo o te juro que la mato
Jisoo bajó su arma, sus hombres también lo hicieron. Yang siguió caminando hasta su camioneta junto con Rosé. En cuanto se marcharon, Jisoo subió rápidamente a su camioneta y fue tras ellos.
- ¡Por la derecha! ¡Dio vuelta a la derecha! - Le informaban sus hombres por la radio
- ¡Disparen! - Ordenó
- ¿Esta segura?
- ¡Sí! ¡Disparen! ¡Hay que detenerlos! ¡No hay que dejar que escapen!
Jisoo continuaba persiguiendo a Yang a toda velocidad. Había logrado alcanzarlos, iba detrás de ellos, así que tomó su arma y comenzó a disparar, necesitaba darle a una de las llantas para lograr detenerlos. De inmediato los hombres de Yang también comenzaron a disparar. Una bala rozó su brazo izquierdo y otra de ellas impactó en una de las llantas de su camioneta, haciéndola perder el control impactándose con un árbol.
- ¡Maldita sea! - Bajó rápidamente de su camioneta y comenzó a disparar, pero fue inútil, pues ya estaban muy lejos
- ¿Esta usted bien? - Le preguntaron
- Sí, no te preocupes
- Nuestros hombres continúan con la persecución, esperemos que logren alcanzarlos
- O por lo menos saber dónde pueden estar para atacar, investiga eso, por favor. - Ordenó Jisoo
- Perfecto señorita Kim, ahora tiene que curarse sus heridas, acompáñeme
Más tarde
- ¿Cómo estás hija? - Preguntó su padre
- Bien papá. - Respondió. - Pero muy preocupada porque ese maldito tiene a Jennie y a Rosé
- También estoy muy preocupado
- ¿Sabes algo?
- Sí, nuestros hombres lograron localizar el lugar donde se encuentran. - Informó
- Hay que ir papá
- Es muy peligroso hija, primero hay que planear algo
- Es mi hermana y el amor de mi vida quienes están ahí corriendo peligro, con tu autorización o sin ella, yo iré a atacar a ese hijo de perra. - Habló con rabia la pelinegra
- Jisoo espera. - La detuvo. - Iré contigo, se como hacer esto, las vamos a recuperar, tranquila
Ya mas tarde, se encontraban cerca de la casa donde estaba Yang. Observaban desde lejos a todos los hombres que cuidaban la casa, necesitaban idear un plan para poder entrar.
- Yo voy a entrar. - Dijo Jisoo. - Necesito buscar a mi hermana y a Rosé
- Yo te acompaño. - Dijo Lisa. - Voy a matar a ese imbécil
- Tu aun no estas bien Lisa, deja que vaya yo sola, prometo traerlas a las dos
- Hay que ser discretos, si te descubren, no dudarán en disparar. - Habló su padre preocupado
- Hemos encontrado una forma de entrar. - Avisó uno de los hombres. - Pero hay que ser muy cuidadosos
- Iré yo, no se preocupen, todo saldrá bien. - Dijo segura Jisoo. - Aún así, vigilen y si pasa algo no duden en atacar
- Confío en ti Jisoo, trae a Jennie y a Rosé a salvo, por favor, Jenn esta embarazada, no quiero que le pase nada ni a ella ni a nuestra hija
- Prometo traerlas Lisa, voy a protegerlas con mi vida si es necesario, tranquila
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro