Taehyung

Seguía sin creer como las palabras de un desconocido me calmaron al punto de tener valentía y tomar una decisión. Aún estaba nervioso y con algo de temor porque sentía que las cosas no iban a terminar como yo quería. Han pasado unos cuatro días desde que hablé con Jungkook sobre mis dudas del cambio repentino que tuvo Anthony. Incluso hablamos por chat mientras nos íbamos conociendo poco a poco. Él seguía diciéndome que no me preocupara, que me tomara el tiempo necesario para tomar una decisión que me haga sentir satisfecho y que recuerde que hice todo lo posible para que las cosas funcionaran en mi relación. Esto lo dijo cuando le expliqué que tenía miedo que Anthony se enojara y que me terminara solo por ser un poco insistente. Incluso le comenté un poco a papá de mi situación, pero él me dijo que me tranquilizara, ya que no todos tenían un padre como él. Lo cual sabía era cierto, aunque no le conté a Kook que Anthony tampoco quería conocer a mis padres. Según sus palabras porque quería primero salir de sus padres para así poder hablar con los míos. Seguía pareciéndome extraño, incluso Jimin me había comentado muchas veces que eso no lo haría un novio, más sabiendo como son mis papás.

—¿Pensando en el imbécil?

Suspiré al escuchar a mi mejor amigo, Park Jimin, hablando de mi novio. No era un secreto para ningún miembro de nuestro grupo de amigos que él detesta a Anthony desde que lo presenté e intenté integrarlo al grupo, acción que terminó siendo un gran desastre.

—Jimin...

—Sí, sí. Lo siento —dijo mientras se sentaba en la mesa —. Ya me has dicho que no comente cosas sobre tu novio, pero sabes que me es imposible no hablar de ese estúpido. Mira, tú aquí solo y él bien gracias a saber en dónde.

Suspiré mientras sonreía y negaba. Ambos conocimos a Anthony hace año y medio aproximadamente. Fue una casualidad ya que íbamos hablando con Park cuando sin querer ambos chocamos. Me apené, pero Smith me aseguró que no había problema, que él tampoco estaba poniendo atención. Desde ese día Anthony Smith y yo empezamos a platicar, nos fuimos conociendo hasta que él me pidió salir, yo estaba encantado porque me gustaba, y hemos estado juntos por un año. A veces tenemos altibajos, principalmente cuando él se pone algo distante, como si estuviera enojado conmigo, pero me dijo que no me preocupara, que solo eran fechas que le afectaban y que con el tiempo él iba a poder decirme.

—Mejor —observé a mi amigo mientras él sacaba unas chucherías para merendar —, cuéntame cómo van las cosas con Yoongi.

Sonreí al ver como Jimin se sonrojaba, aun teniendo dos años y medio de noviazgo, Park seguía sonrojándose como loco ante la mención de su novio, Min Yoongi. Me gustaba molestarlo, más porque ellos eran tan melosos, aunque ambos lo negaran y se comportaran serios y fríos, eran las masitas más dulces y tiernas que te podías encontrar y que en algún momento te podrían dar diabetes por lo cursis que son.

—Ayer pasamos la noche juntos —dijo mientras abría una bolsa con frituras. Tomé unas cuantas cuando me ofreció —. Estuvimos estudiando juntos y pues, ya sabes.

Sonreí aún más y moví mis cejas sugestivamente. Él solo se sonrojo más y siguió comiendo. Reí internamente, de verdad me alegraba por mi amigo, sufrió mucho por un idiota que no valía la pena durante la secundaria. Ahora que lo veo con Yoongi, la verdad no puedo estar más contento por él.

—¡Chicos!

Salí de mis pensamientos cuando escuché a Jimin hablar y vi que estaba de pie moviendo su brazo. Volteé a ver y observé a nuestros amigos acercándose.

—Hola amor — Min saludó y le dio un beso cortó en los labios a Minnie —. Hola Tae, ¿Cómo van las clases?

—Hola Yoon, van bien. Aburridas, pero ahí vamos —respondí con una sonrisa—. Hola Hobi.

—Hola Tae —respondió Jung Hoseok con una gran sonrisa en su rostro y se sentó a mi lado —. ¿De qué hablaban?

—Del idiota

Vi a Jimin de manera asesina al escuchar su respuesta. Aprecié como Yoon fruncía el ceño y Hobi solo mantenía su sonrisa con algo de tensión. Ninguno soportaba a Anthony, siempre que podrían me aconsejaban que lo mejor era alejarme de él, pero siempre logramos llevar la relación de la mejor manera.

—Mejor hablemos de cosas agradables —comentó Jung

—Estoy de acuerdo —dijo Yoongi y me observó —. ¿Cómo ha estado Amelia? ¿Ha tenido problemas con el imbécil que intentó agredirla?

—No —respondí automáticamente —. Me contó que ahora sí encerraron a ese malnacido en la cárcel después de haberlo perseguido durante bastante tiempo. Después de qué intentó atacarla en un callejón pudieron echarle mano y ahora ya está en proceso judicial. Papá está al tanto de todo el proceso y esperamos que llegue a pagar.

—Al menos —soltó Hobi —. Ya han sido muchos años de soportarlo.

Asentí ante las palabras de Hoseok. Amelia era una gran amiga de la secundaria y mi vecina. Desde hace unos años ha sido acosas por su ex novio quien la amenazó e intentó abusar de ella. La policía al fin había logrado capturar al desgraciado y ahora está esperando por su condena bien merecida. Definitivamente hay personas que no comprenden cuando es el momento de cerrar un ciclo por las buenas. Este era un caso, porque a pesar de las negativas de mi amiga, el tipo seguía insistiendo como si su vida dependiera de ello. Brinqué un poco al sentir una mano sobre mi hombro. Volteé y vi a mi novio, Anthony, sonriéndome mientras extendía un café helado para mí.

—Gracias amor —respondí mientras estiraba mis labios y recibía un beso.

—No es nada Tae —dijo a modo de respuesta —. Hola chicos.

Todos respondieron con poca energía solo para no ser descorteses con mi pareja. Me moví un poco para que él se sentara, pero negó.

—Vine rápido bebé porque tengo algo que hacer, pero solo venía a confirmar la comida que tenemos hoy en la noche en mi casa.

—Claro —mencioné sonriendo —. Como habíamos quedado, nos vemos hoy en tu casa.

Asintió y se retiró después de darme un beso en mi mejilla. Mis amigos me observaban como si estuvieran evaluando mi actitud.

—¿Qué pasó?

—¿Cómo está eso de que se ven en su casa hoy? —preguntó Jimin bastante desconcertado —. ¿Qué harán en su casa?

—Me presentará como su novio frente a sus papás.

—¿En serio?

Yoon tenía sus ojos abiertos por la sorpresa. Entendía lo extraño que podía parecer, hasta a mí me pareció raro el repentino cambio, pero al ser mi pareja debía darle confianza. Por eso, después de charlar con Kook y que este me siguiera aconsejando, decidí simplemente aceptar y organizar la cena en su casa. Al fin me presentaría y eso era lo importante para mí porque ya llevábamos un año escondiéndonos de su familia y era momento para que ellos lo supieran. Tenía miedo, sentía que no todo saldría como quería, pero iba a estar ahí para mi novio porque sabía que necesitaría mi apoyo por si sus papás mostraban una negativa. Tenía esperanza de que no ocurriera algo malo. Suspiré y vi que todos me observaban.

—¿Qué?

—Es raro —mencionó Hobi —. Ha estado renuente a que conozcas a sus padres durante mucho tiempo, que ahora quiera preséntate solo así, me parece sospechoso. Ni siquiera los conoces.

—Debo estar de acuerdo con Hobi —continuó Yoongi —. Me parece demasiado extraño que ahora quiera presentártelos. Es más, hace unos cuantos días dijiste que se negó rotundamente y hasta discutieron por ello.

—Lo sé —dije rápidamente —, pero debo darle el beneficio de la duda. ¿Qué buen novio sería si no confío en mi pareja? Debió haber tenido alguna razón, la verdad necesito confiar en él. Si vuelve a querer arrepentirse, tranquilos, terminaré la relación.

—¿Seguro? —cuestionó Jimin —. No queremos que te sientas forzado a terminar con él. Sí, nos cae como patada en donde más nos duele, pero no me gustaría que te sintieras presionado por nosotros.

—Tranquilo Jimishi — sonreí —. He estado hablando con... Jungkook y me ha dicho que no debería soportar que mi pareja me haga a un lado. Si he tenido problemas similares significa que él no me quiere en realidad. Por eso, tomé la decisión de que, si no cumple esta vez, todo termina aquí. Me duele, porque lo quiero, siento que lo amo. Sin embargo, debe darme mi lugar como su pareja y me lo ha hecho varias veces.

—Vaya, ese tal Jungkook te ha dado buenos consejos —dijo Yoongi con un tono burlón mientras mueve sus cejas con su sonrisa algo maliciosa.

—¡Oye! Solo somos amigos

—Y si solo son amigos... —mencionó Hoseok —. ¿Por qué te estás sonrojando?

—Yo no me estoy sonrojando

Gran mentira, mis mejillas estaban calientes y me sentía algo abochornado. Era extraño, porque Jungkook solo era mi amigo. Sí, no podía negar que es guapo, pero tenía y quería a mi pareja. Además, Kook ha de ser hetero, o si fuera gay posiblemente ha de tener alguna pareja o simplemente quería disfrutar su soltería. Las opciones eran muchas, pero él y yo no llegaremos a más.

—Bueno, pero al menos cuéntanos qué planeas para esta noche porque quiero estar al pendiente por cualquier cosa.

Sonreí agradecido con Jimin. Le conté lo qué planeaba hacer Anthony para la noche, porque parecía sencillo, pero muchas cosas podían ocurrir. Hablamos un poco en lo que el descanso terminó, esperando que las clases pasaran rápido.

—¡Ya llegué!

Anuncié mientras cerraba la puerta y me quitaba los zapatos. Mis padres venían de culturas asiáticas y tenemos esta costumbre, no me quejo, era más cómodo estar en pantuflas que con los zapatos con los que uno sale. Escuché pasos detrás de mí, observé sobre mi hombro y sonreí al ver a mi padrastro observándome con una sonrisa.

—¿Cómo te fue?

—Me fue muy bien, mamá —dije y él frunció su ceño. Reí al ver su reacción —. Perdón, pero sabes que me gusta molestarte papá Jin. Me fue muy bien, las clases aburridas en algún punto y mis amigos molestando por lo de esta noche.

—¿Sobre la reunión con tus suegros?

Asentí ante su pregunta. Avanzamos por la casa hasta la cocina. Por el camino dejé mi mochila en el sofá para después subirla a mi habitación y ver las tareas que me quedaban pendientes para el día siguiente. Kim Seokjin, mi padrastro, me pasó unos sándwiches que al parecer tenía preparados desde antes, aunque ahora que lo pienso...

—¿No tenías que estar trabajando papá Jin? —cuestioné al ver la hora, era un poco pasadas las dos de la tarde.

—Salí temprano —dijo rápidamente —. El jefe me dio el permiso ya que pude terminar la campaña para el siguiente producto antes de tiempo, lo cual me da muchos puntos.

Negué sonriendo ante su comentario. Su jefe, Park Jaesong, el padre de Jimin, quien amablemente le dio oportunidad en su empresa. Aunque empezó desde abajo, siendo parte del equipo de limpieza, cuando terminó sus estudios hace un tiempo él pudo escalar hasta llegar a donde está.

—TaeTae — me llamó y le observé —. No quiero que pienses que busco ponerte nervioso o algo, pero tengo un mal presentimiento.

—¿De qué? —cuestioné mientras levantaba una ceja. Papá también estaba algo dudoso de mi relación, principalmente porque Anthony no le daba una buena vibra. Hemos hablado mucho sobre el tema, pero ellos siempre me dijeron que no se meterían de más en la relación, pero que esperaban que su sentir fuera algo pasajero.

—De tu reunión está noche. Sé que dije que no me metería, pero ten cuidado. No sé si es porque tal vez sus padres vayan a negarse a apoyarlos, pero sabes que siempre he-

—Lo sé — le interrumpí mientras observaba el sándwich a medio comer —. Sé que mi novio no te da buena espina, y comprendo que tanto tú como mis amigos estén preocupados. Pero créeme que no dejaré que pase de esta noche. Les dije a todos que, si hoy no cumple con decirle a sus padres, terminaré la relación; aunque sé que me dolerá como el infierno.

Sentí como rodeó mi cuerpo con sus brazos. Dejé todo y le devolví el abrazo mientras ocultaba mi rostro en su hombro. Me sentía cómodo con Jin, mamá siempre estuvo bien junto a él, incluso le ayudó a sobrellevar su lucha antes de morir. Papá ha sufrido mucho, pero sabía que poco a poco lo fue superando, y siempre tenía tiempo para quienes quiere, para apoyar, y por eso agradezco que papá Nam haya escogido casarse con él.

—Espero que mi presentimiento sea una falsa alarma —dijo sobando mi espalda —. Pero recuerda que, pase lo que pase, tienes a tu familia para ti.

Suspiré frente a la puerta antes de tocar el timbre. Ya había venido varias veces a la casa de Anthony, pero solo cuando sus padres no estaban. Nunca conocí a los señores, según me dijo, ellos vivían viajando por el trabajo y lo dejaban varias veces solo. Son pocas veces las cuales he pisado la casa, pero nada se comparaba a estar a punto de conocer a mis suegros. Esperé un poco después de que el sonido de la campana resonara por la casa. Escuché algunos pasos dentro y esperé a que abrieran la puerta. Decir que me sorprendí fue poco. Frente a mí se ubicó una mujer bastante joven, quizás de mi edad o un poco más joven. Fruncí mi ceño intentando analizar quién era la fémina frente a mí.

—Hola —saludó un poco confundida —. ¿Buscas a alguien?

—Buenas noches —respondí —. Sí, estoy buscando a Anthony Smith.

—¡Ah! Tu debes ser el amigo que dijo que vendría.

La miré un poco confundido ante sus palabras, porque según mi memoria y mis pláticas con mi novio, él no tiene una hermana. Asentí mientras tanto y ella me dejó pasar. Al entrar vi como Anthony llegó hasta nosotros.

—Al fin llegas —suelta mi pareja y mi confusión aumentó al ver su recibimiento, debe ser por la chica a nuestro lado —. Ven, solo faltas tú.

Asentí, pero ellos ni esperaron a ver mi respuesta. Ambos caminaron juntos hacía un punto. Me quedé estático sin comprender qué ocurría, pero solo agité mi cabeza y empecé a caminar procurando seguir los pasos de las personas que habían desaparecido. Sentí una pesadez en mi pecho mientras recordaba las palabras de papá Jin. Calmé mi respiración, procurando ignorar el sentimiento de asfixia que sentí. Entré al comedor y quedé pasmado ante lo que veía. Estaba en un patio, había tres mesas de unos diez puestos cada una con manteles. Pude ver como tres familias en dos de las mesas, e incluso parecían conocerse porque hablaban entre sí. En la mesa más cercana había unas diez sillas con nueve puestos en total ocupados. A la cabecera había un hombre que sostenía la mano de una mujer, a su derecha otro hombre que tenía su brazo sobre los hombros de otra mujer, los cuatro de unos 40 años o más aproximadamente. A la par de la mujer que me daba la espalda estaba Anthony junto a la chica que abrió la puerta hace un momento, luego había tres hombres que no conozco, pero hablaban con mi novio y ella como si se conocieran de años.

—Buenas noches.

No más saludé, todos me observaron. Algunos respondieron mi saludo mientras otros solamente continuaron como si no hubiera dicho algo. Me sentí cohibido, no sabía qué hacer en esa situación. Sentí mi estómago revuelto y mi cuerpo tenso. Quería correr, parecía que sobraba en este lugar. Estaba a punto de voltearme, pero uno de los chicos en la mesa que hablaba con mi novio me vio y señaló la silla a su lado. Me senté, sin embargo, sentí varias miradas sobre mí. Incluso parecía que algunos sonreían con burla en mi dirección. Parecía que ya habían cenado porque vi varios platos que habían tenido comida antes, todos tenían vasos con cerveza, gaseosa o algo para beber. Mi mente empezó a trabajar, pero solo podía llegar a una conclusión: Anthony me había mentido. La reunión no era para presentarme, algo estaba mal aquí, y necesitaba respuestas. Estuve a punto de levantarme y jalar a quien se dice llamar mi novio, sin importarme el poco tiempo que estuve en el lugar para pedir explicaciones, pero Smith se levantó, llamando la atención de todos.

—Como ya todos estamos reunidos —dijo Smith y me vio de reojo —. Es momento por el cual los reuní.

Todos estaban expectantes, incluido yo. No sabía que estaba pasando, y supe que no iba a terminar bien cuando la chica se levantó y entrelazó sus dedos con los de Anthony.

—Quiero presentarles a mi novia.

Sentí mi corazón despedazarse con esas palabras. ¿Novia? ¿Cómo así que quería presentar a su novia? Empecé a recordar todos los momentos que habíamos vivido durante el último año. No me lo había imaginado, ¿O sí? ¿Todo fue producto de mi imaginación? Luego recordé a Jimin, Yoongi, Hoseok y a mis padres. Todos me decían que Anthony no me convenía como novio, que algo no les cuadraba. Entonces no me lo imaginé, si había vivido todo lo que mi mente me mostraba. Había besado a ese hombre, le había dicho te quiero, te amo. Nunca habíamos tenido intimidad, pero sentía que él no estaba listo, porque se mostraba tímido. Era cariñoso conmigo cada vez que nos veíamos. ¿Qué demonios estaba pasando? Salí de mis pensamientos cuando todos se levantaron y les felicitaron por su relación y esperaban que estuvieran juntos mucho tiempo. Escuché como platicaban y le preguntaban cosas, y él dijo que ya llevaban dos años de relación. ¿Dos?

—¿Esto es una puta broma?

Todos me miraron cuando solté la pregunta. ¿Cuándo me había levantado de la silla? ¿Cuándo me acerqué a esos dos qué me observaban con confusión? Confusión que fue reemplazada por burla en el rostro de quien llamé mi novio por un año. La chica parecía no comprender, pero él, la pareja mayor que estaba sentada a su lado y los que parecían ser amigos de él me miraban con burla. Todos los demás parecían no comprender mucho qué ocurría, pero yo si lo había captado. El idiota me había visto la cara de estúpido durante un año, me logró engañar con que me quería, con que sus padres no sabían que era homosexual y por eso había hecho la reunión de hoy.

—¿Qué cosa? —preguntó y su tono burlón no pasó desapercibido para mí —. ¿El presentar a mi novia? Claro que no, para eso reuní a mi familia y mis amigos, para presentar a mi novia ante todos. La mujer que me robó el corazón desde hace dos años y con la cual muy pronto espero que logremos formalizar nuestra relación aún más. Aunque claro, eso es algo que un maricón como tú nunca podrá entender.

A una velocidad que no permitió que nadie reaccionara a tiempo, propicié un golpe certero en su rostro. Él cayó al suelo mientras su aparente novia lo revisaba. Al parecer quien es su padre quiso abalanzarse sobre mí, pero su esposa y los amigos de Anthony lo detuvieron. Vi al imbécil en el suelo que se tocaba el labio.

—En tu vida —dije mientras me giraba. Lo vi de reojo y apreté mis puños —. Vuelvas a acercarte a mí o dirigirme la palabra, porque no respondo Anthony Smith.

Corrí, salí de la casa mientras todos gritaban detrás varios insultos. Ignoré todo, solo corrí sin importar que mis piernas dolían. Mis ojos se llenaron de lágrimas mientras mis piernas me llevaban a un lado. No sabía dónde, solo quería alejarme. Cuando me detuve y vi a mi alrededor, vi mi casa. La distancia es demasiada, pero aun así corrí hasta aquí en la noche. Me acerqué a la puerta, mi cuerpo temblaba. Sollocé intentando buscar la llave, aunque no me dio tiempo de nada porque la puerta se abrió. Levanté mi vista, sentía mi rostro mojado y se me dificultaba respirar.

—Tae, ¿Qué te pasó?

Abracé a papá Nam como si mi vida dependiera de ello y lloré. Lloré entre sus brazos mientras me acariciaba la espalda recordando lo estúpido que fui al confiar en un hombre que solamente me vio la cara de estúpido. Que me usó para algo que desconozco y aun así logró enamorarme. Lloré hasta que perdí la consciencia. 

Y después de editar, recostarme, mirar al techo y deslizarme hacia la locura... ¡vengo con un nuevo capítulo! 

Esté capítulo me gusta cómo quedó, aunque la verdad es porque logré que Tae le diera un buen puñetazo a Smith. ¿Qué piensan? ¿Qué creen que pasará ahora? 

El siguiente será narrado por JK y habrá situaciones que irán acercando a nuestros protas. 

Gracias por leer, votar y comentar. Les veo en el siguiente capítulo. 

Hasta aquí mi reporte Joaquín.