Te creo - PinkDiamond

Donald siempre supo lo que Rico McPato hacía para recuperar a su sobrina.

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"Esto es estupendo, simplemente estupendo" - pensó Donald dentro de una enorme caja que sin querer fue a parar ahí

¡Y eso que solo estaba arreglando solamente su bote!

Intentaba salir y decirle a McQuack que lo regresara a la mansión. El por nada del mundo iba a estar en una loca aventura.

Pero secretamente escuchó a los niños hablar sobre la lanza de Selene.

¿¡Como se habían enterado!?

"Ellos lo saben" - pensó Donald con asombro, tristeza y culpa

".....¿que he hecho?......"

No podía perder más tiempo, los niños estaban interpretando mal las cosas, no conocian la verdad tal cual.

En ese momento, escuchó gritos, todos sonaban alarmantes y preocupados.

¿Que rayos sucedía allá afuera?

Fue cuando salió de su escondite para ver si los niños estaban bien, escuchó que el avión estaba balanceandose de la punta de una montaña

¡¿Como rayos el avión fue a parar ahí?!

¡¿Acaso McQuack era tan mal piloto?!

Luego sintió mareos y ganas de vomitar, alguien hacia girar el avión y si no se detenía, no regresaría limpio a casa.

Un chirrido.

El avión estaba perdiendo equilibrio. Sintió que la caja en donde estaba patinaba y peor aún, hacia las puertas del avión que estaban abiertas y le daban entrada a una muerte segura.

"¡Porfavor, alguien, balancen el avión!"

Pensó Donald aterrado.

Gracias al cielo todo quedó estable otra vez. Escuchó que Paco había salido del avión por un pedazo de papel y que Rico lo siguió. Fue cuando Paco pidió respuestas de su madre, ¿porque tantos secretos? ¿Que había pasado? ¿Donde estaba Della?

Donald reprimió las lágrimas que querían salir de sus ojos, si tan solo les hubiera dicho la verdad desde hace tiempo.

Escuchó la historia desde el punto de vista de su tío, y si, todo lo que dijo era verdad. Pero lo que dijo Paco, lo dejó helado...

"Genial, así que tu eres la razón por la que nuestra mamá se fue..."

¡No!

¡No!

¡No!

¡Los chicos, ellos no pueden...!

"¡Construiste un super peligroso y loco cohete!"

"Paco..."

"¡Luego la alentaste a seguir volando en una tormenta cósmica, pudiste llamarla para que bajara, había muchas variables!"

"Hugo..."

"¡Tu eres el pato más rico del mundo! ¿¡Porque no enviste más naves a buscarla!?"

"Luis..."

"Si claro, el viejo Rico probablemente la rescató apenas con una moneda de su bóveda"

"Paco, detente..."

Donald salió de sus pensamientos, el avión estaba volviendo a desequilibrarse, esto tenía que parar ahora...

"¡No van a hablarme de esa manera, ninguno de ustedes!"

"Tio Rico..."

"¡Despues de todo lo que hize, ustedes solo causan problemas!

¡Hasta aquí!

"¡SUFICIENTE!"

Donald salió de la caja sorprendiendo a todos los presentes incluido a McQuack que se le olvido que el avión estaba por caer.

"¡Todos ustedes basta ya!"

Nadie dijo una palabra.

Donald camino directamente hacia ellos, Rico estaba pálido, los niños estaban con lágrimas en sus ojos, Beackle estaba seria, Rosita quería llorar y McQuack comía un burrito.

"Donald..." - lo llamó su tío

"Tío Donald..." - le llamaron sus hijos

"¿Que pasa con todos ustedes? ¡Esta no es la manera de arreglar las cosas y menos cuando nuestras vidas están en peligro!"

La mirada de donald era penetrante, era rabia, era enojo, pero sobre todo dolor.

Donald fijó su mirada hacia su tío Rico.

"si vas a decirles las verdad, diles la verdad tal y como es"

"Donald, yo no se de que hablas.."

"No mientas Tío Rico, se que construiste más naves y las enviaste al espacio solamente para buscarla..."

Rico palideció de vergüenza.

"Donald porfavor...."

"Se de los gastos que tuviste que hacer para su búsqueda..."

"De acuerdo es suficiente..."

"Se que tu bóveda disminuyó porque la buscabas sin cesar, ¿crees que no me había dado cuenta de las medidas de la pared?"

"¡Jovencito, ¿¡como es posible que tu supieras todo eso!?"

"Siempre me dabas trabajo por contar las monedas de tu bóveda tío Rico, sabia perfectamente lo que pasaba, y también gracias a las facturas que llegaban a la mansión temprano"

Rico se golpeó la frente ante esa tonta acción que hizo que su sobrino descubriera todo lo que hizo en secreto.

El cartero iba a ser despedido.

Otra vez.

"Y en cuanto a ustedes tres" - habló volteando a ver a los niños

"Tío Donald, nosotros.." - habló Hugo excusandose

"Solo queríamos saber de nuestra mamá" - hablo Paco enojado

"¿Es que no tenemos derecho de saber que pasó con ella?" - preguntó Luis triste

Donald alzo su mano para que lo dejaran hablar.

"Quería decirles la verdad de su mamá cuando fueran más grandes, y es que, bueno, ella en cierto modo era..." irresponsable "

Los niños se enojaron ante ese adjetivo hacía su mamá.

"Cuando descubrió que los tendría a ustedes 3, ella aún seguía con sus aventuras, muchas veces fue al hospital por lesiones y fracturas, pero seguía con lo mismo, ella los ponía en riesgo y era terca a más no poder, le reclame y le advertí de lo que estaba haciendo pero no hizo caso, ella sabía que al tenerlos y al ser mamá pronto, ya no tendría más aventuras porque ustedes serian tiempo completo, ella robó el cohete y cuando me di cuenta de lo que había hecho, fui con el tío Rico. Descubrí al tío Rico hablando con ella desde la cabina alentandola, pero le hize recapacitar, y el tío Rico vio su error y me dejó hablar con Della, le dije que regresara de inmediato pero no escuchó, y se había cortado la comunicación"

"Pero...pero.. Ella...el tío Rico" - balbuceaba Paco

- "entonces para mamá nosotros solo éramos" - balbuceaba Hugo herido

Luis soltaba lágrimas en silencio.

"Della siempre amó la aventura, pero también los amaba a ustedes, solo que ella no diferenciaba ese cariño, se le hizo fácil, no les pido que la odien, solo les pido que la perdonen, ella no era mala, solo tomaba decisiones apresudaras sin pensar, además ella quería traer las estrellas para ustedes, pero ustedes ya eran estrellas desde que estaban adentro del cascaron"

Los niños lo miraban llorando, en si fue culpa de Della por preferir a las aventuras que a sus hijos, y lo que hizo tuvo un alto precio, seguir su espíritu aventurero y no volver nunca más.

Pero dejó a tres patitos, para que tuvieran una vida normal y la vivieran al máximo.

Un tío que sabría que los cuidaría y daría su vida por ellos y a un tío abuelo que les daría aventuras.

"Niños, tío Rico, hize mal en separar a la familia, pensé que lo que hacía era para protegerlos, para que no les pasará lo mismo que a su madre...a mi hermana, pero me equivoqué y solo los lastimé, se que Della querría que tuvieran sus propias aventuras en familia...pero los detuve, a todos nosotros...¿creen..... que podrán perdonarme?

Donald sollozaba, un peso se había quitado de encima, pero ahora solo faltaba la respuesta.

Sintió un par de brazos pequeños, eran de Luis, luego Paco, después Hugo y un abrazo enorme de su tío.

"muchacho, al que deben perdonar es a mi"

"No tío Rico mamá tomó malas decisiones - hablo Hugo mirándolo

"solo cuidaban que no saliéramos dañados" - habló Paco

"Lo que importa es que ahora todos estamos juntos" - habló Luis

Los tres patitos se miraron y miraron a su tío.

"Gracias por ser nuestro papá"

Algo se movió dentro de Donald. Vio a Rosita quien quería unirse al abrazo, estiró su brazo y la niña inmediatamente también fue abrazada por Donald.

Todo estaba bien ahora.

"¡Chicos, les habla su capitán, estamos cayendo!"

"¿¡Estamos que..!?

Bueno, casi bien. ¯\(°_o)/¯

Fin