Sus nombres - LittleSunset2654

Della trata de encontrar nombres para sus bebes trillizos.

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Se sentó allí, mirando los huevos con emoción.

Della estaba emocionada como un niño pequeño esperando que llegue el día de Navidad. No podía esperar a que los huevos eclosionaran, pero sabía que tenía que pensar en nombres para los trillizos. Ya había pensado en nombres para saber si los dos primeros nacieran primero, pero nada para el tercer triplete nacido aún.

Hubert y Paulo fueron los dos primeros nombres que pensó. A ella realmente le gustaban esos dos nombres en particular, por lo que estaba nombrando los primeros dos nombres. No se molestó en pensar en otra cosa para sus primeros nombres, solo se fue con los que no lo pensarian. Ella sabía que todos iban a ser bebés varones, por lo que tuvo que pensar en nombres como esos.

Della pensó en pedirle a Rico o Donald ideas sobre los nombres, pero aún no quería hacerlo. Quería esperar un poco más para ver si podía pensar en algo. Si ella no podía, iría a preguntarles.

Donald no era demasiado fanático del nombre de Paulo, pero no iba a discutir. No era como si fueran sus hijos, de verdad. Tampoco era como si él mismo los estuviera criando. Sin embargo, le gustó el nombre 'Hubert'.

Della no estaba segura de cuánto tiempo había estado allí mirando los huevos. Solo sabía que estaba allí por un tiempo, incluso si no tenía ganas. Una hora o dos podría ser posible, pero todo lo que podía hacer era adivinarlo. A ella realmente no le importaba mucho, pero si alguien preguntaba, realmente no lo sabía.

Oyó que se abría la puerta, aunque no miró para ver quién entró por la puerta. Todo lo que sabía era que después de quienquiera que entrara en la habitación, la alzaria del suelo. Della miró al hombre que la alzó.

"¡Adivina quién se queda por un mes!" Harold exclamó.

"¿Te vas a quedar por tanto tiempo? ¡Eso es genial!" Ella dijo.

Harold era un hombre en el ejército, un comandante para ser exactos. Fue por eso que no pudo quedarse por mucho tiempo, por lo que quedarse por al menos un mes fue fantástico para ellos. Él pudo ver a su esposa y estar cerca de ella un poco más que antes. También pudo ver a Donald y a Rico también.

Pasaron una buena cantidad de tiempo juntos, pero él no creía que hubieran gastado lo suficiente. Cada vez que venía a visitarla, hacía todo lo posible por pasar el mayor tiempo posible con Della. No importaba si solo estaban hablando, él quería estar con ella en todo momento que pudiera, siempre que fuera posible.

Él apreciaba cada momento que tenía con ella sabiendo que no podía quedarse mucho tiempo. Por mucho que odiara estar lejos de ella, fue bueno saber que estarán bien financieramente gracias a su trabajo.

Harold puso a Della de nuevo en el suelo y se sentó de nuevo. Ella continuó mirando a sus pequeños niños no nacidos sentados justo frente a ella. Él también los miró.

"Entonces, ¿has pensado en nombres para ellos?" Preguntó.

"Solo para que los dos primeros eclosionen". Ella respondió. "Hubert para el primero y Paulo para el medio".

"...Nada para el último, ¿eh?"

"Aún no."

"Hmm ..." Harold se frotó la barbilla. "¿Qué hay de 'Luther'? Significa 'soldado' y 'líder', en caso de que quisieras saberlo".

Ella se rió entre dientes. "Me gusta. Es muy bonito".

Él se inclinó y envolvió sus brazos alrededor de ella. Ella puso sus manos en sus brazos. Besó a Della en la mejilla.

Harold miró hacia la puerta. Oyó que alguien venía de la cocina. Donald entró bostezando, café en la mano. La taza decía 'tío #1' 'para ser' escrito en ella con un marcador negro.

Al segundo que abrió los ojos, Harold habló. "¡Baja y dame treinta!"

Donald inmediatamente dejó la taza. Bajó al piso. Estaba a punto de comenzar las flexiones, pero se dio cuenta de que estaban a punto de reírse.

Dios, él podría darle un ataque al corazón a veces con cosas así.

Harold y Della se echaron a reír al ver cómo bajaba para hacer eso. Se dieron el uno al otro cinco. Donald se burló y se levantó, agarrando su café.

Mientras estaba feliz, Della estaba feliz de estar con él, juró que juntos eran peores. Siempre se metían con él siempre que podían. Era algo mejor que cuando estaba en el trabajo donde era mucho, mucho más estricto.

Fue increíble ver cuánto se relajó en comparación  cuando estába trabajando. Todavía era un poco estricto, pero no tanto. Ambos de sus risas murieron un poco.

Donald se acercó a ellos y le dio un abrazo a Harold mientras trataba de sostener su taza. Él me devolvió el abrazo. Trató de asegurarse de que no golpeó accidentalmente la taza. Por mucho que Donald odiara cómo se metía con él, lo extrañaba mucho.

Se apartó del abrazo. Luego comenzó a caminar hacia la puerta. Donald pensó que les dejaría pasar un tiempo a solas. Della miró a Donald que se estaba yendo.

"¿A dónde vas?" Ella preguntó.

Él se volvió hacia ella. "Voy a subir a mi habitación".

"¿Quieres sostener a alguno de los huevos primero?" Ofreció Della.

Ambos la miraron. No esperaban que ella dijera eso en absoluto. Ella nunca había preguntado eso antes. Era la primera vez que ofrecía algo relacionado con algo tan delicado como eso. Luego se miran.

Harold le hizo un gesto para que no fuera por eso. Tenía miedo de que, con su mala suerte, algo malo pasara. Él la amaba y confiaba en ella, pero tenía que admitir que a veces ella no tenía las mejores ideas. Solo esperaba que le negara la oferta.

Por supuesto, él y Della estaban allí en caso de que algo sucediera, pero no quería arriesgarse. Eran huevos, después de todo. Tenían que tener cuidado cuando se trataba de algo como eso.

Donald, por otro lado, lo pensó un poco. Sabía que Della no le preguntaría algo así si algo horrible sucediera. Incluso si algo sucediera debido a su mala suerte, ella estaría allí. La única razón por la que decidió pensarlo fue porque no estaba seguro de si realmente quería
sostenerlos o no.

Miró a Della de nuevo, quien le sonrió. Realmente parecía que quería que él hiciera eso. Bueno, él suponía que no estaría mal al menos hacer eso con uno de ellos. Además, el pensamiento de él sosteniendo a uno de ellos sonaba bien.

"Por supuesto." Donald dijo.

Puso la taza sobre una mesa. Harold escuchó eso, pero esperaba lo mejor. Retiró su mano inmediatamente después de eso, ya que Della lo miró. Él le sonrió nerviosamente. Ella le devolvió la sonrisa sin darse cuenta de lo nervioso y asustado que estaba.

Donald se acercó a uno de los huevos y los miró. No estaba seguro de cuál quería sostener. En cierto modo, quería sostenerlos a todos, pero al mismo tiempo no sabía si sostener uno a la vez sería lo mejor o qué.

Al final, eligió sostener el huevo en el medio. Con cuidado y gentileza, lo recogió y lo sostuvo en sus brazos. Donald lo sostuvo firmemente para que no lo dejara caer accidentalmente. Sonrió sintiendo el huevo en sus brazos. Se sentía mucho más tranquilo sosteniéndolo, en realidad. Era como si todas sus preocupaciones se desvanecieran en el momento en que lo recogió del resto de los huevos que estaban allí.

Della se levantó y le puso las manos en los hombros. Eso sorprendentemente no le hizo saltar; Estaba demasiado tranquilo y feliz incluso para reaccionar de esa manera.

"¡Mírate, Donnie, sosteniéndolo tan amorosamente! Ya puedo ..." Ella miró la cara de Donald. "¿Estás bien, Donald?"

Él solo asintió. Su rostro estaba inquieto porque estaba haciendo todo lo posible por no derramar una lágrima. No sabía por qué quería hacer eso. Había algo acerca de sostener a su sobrino antes de nacer que lo hizo sentir muy contento.

Harold estaba junto a Donald. Tenía los brazos cruzados y una expresión de preocupación en su rostro. Quería estar cerca de él por miedo.

Donald tenía sus brazos envueltos alrededor de la totalidad del huevo, sosteniéndolo con cariño. Ella notó cómo lo sostenía y se rió entre dientes.

"Ten cuidado, Donnie. ¡Más fuerte y podrías romper el huevo de Hubert!" Ella bromeó. "O a Luther, quienquiera que esté saliendo de ese huevo".

Tanto Donald como Della se rieron. No fue gracioso, pero no pudo evitarlo. Ella fue capaz de hacer algunas cosas divertidas hilarantes a veces, incluso si realmente fuera a hacer algo de lo que decía. Cuando dejaron de reír, Donald volvió a poner el huevo con el resto.

No podía esperar a ver a sus sobrinos salir de esos huevos.

Fin

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No se enojen 😶, ya sé que esos no son los nombres de los niños, solo los inventé, los nombres en inglés no parecían tener ¿eh, sentido? Lo siento si alguien se ofendió.