¡Anima a Donald!
¡Ellos me encantan! ^_^
Los trillizos se asomaron, viendo con preocupación como su tío Donald se hundía un poco más en el sofá de la sala y dejaba escapar un suspiro, una mueca de tristeza presente en su rostro. Ellos fruncieron el ceño, volviendo a esconderse tras la pared.
-Ya lleva tres días así- murmuro Huey, mirando a sus hermanos.
-Si...- Louie metió las manos en el bolsillo de su buzo. -...nunca he visto al tío tanto tiempo sin enojarse-
-Prefiero verlo enojado que triste- bufo Dewey. -Esto no puede seguir así, debemos animarlo o al menos intentarlo-
-Lo sé pero...¿qué podemos hacer?- pregunto el de verde, enarcando un ceja.
-A mi no se me ocurre nada- negó el de azul.
-Esperen un momento...- el de rojo se quedo pensativo. -...¡pero claro!- se golpeo la frente. -Es "esa semana"- los miro fijamente.
-Hooooo...- los otros dos se rascaron la nuca.
-Olvide por completo eso- murmuro el menor de los tres.
-¿A qué se refieren a que es "esa semana"?- Webby se les acerco, mirándolos con curiosidad. Scrooge la siguió en silencio, asomándose y haciendo una ligera mueca al ver a su sobrino con expresión triste, para después dirigir su mirada a los patos menores.
-Pues...- Huey se rasco la nuca. -...una semana al año, el tío Donald nos dejaba con el tío Mickey y se iba de viaje-
-¿De viaje?- Scrooge enarco una ceja, curioso. -¿A donde?-
-A visitar a unos amigos- Louie se encogió de hombros. -Él nos contó mucho de ellos y nos mostró fotos pero nunca los conocimos en persona...además...-
-...el tío Donald se veía muy emocionado al irse y feliz cuando volvía- sonrío Dewey. -El año pasado no pudo irse y este años tampoco, quizás...es por eso que este triste-
-¿Algo que podamos hacer?- pregunto la pata.
-¡Ya sé que podemos hacer!...- sonrieron los trillizos. -...pero necesitaremos de tu ayuda, tío Scrooge- miraron con sonrisas divertidas al pato mayor.
-Mi billetera tiene miedo...- murmuro. Miro una vez más a su triste sobrino y suspiro, tragando. -...díganme que tienen en mente antes de pensarlo mejor-
... ... ... ...
-¿A donde me llevan?- pregunto Donald caminando con los ojos vendados y agarrando firmemente la mano de Huey y Webby.
-Espera un poco tío Donald- rió el pato. -Solo unos pasos más y...¡listo!- Donald chillo, casi tropezándose pero logran mantener el equilibrio y quedarse parada derecho. -Espera ahí un momento- pudo escuchar como se alejaban un poco, moviendo un par de cosas y luego, nada más.
-¡Puedes ver ahora!- pudo escuchar la vos de Dewey. Donald se saco la venda, rascándose ligeramente los ojos antes de abrirlos.
-No...puede...ser...- el pato no podía creer lo que veía.
-¡Donal!- sonrío el pájaro verde con saco amarillo y sombrero del mismo color, con un paraguas cerrado colgando en su brazo.
-¡Donald!- rió gallo rojo, vestido con un traje y un gran gorro mexicano color rojo.
-¡José! ¡Panchito!- sonrío, feliz de verlos. Abrió los ojos, riéndose al sentir como ambos prácticamente lo alzaban y lo apretaban entre risas.
-¡Misión cumplida!- sonrieron los trillizos, chocando las manos entre ellos. Webby simplemente rió, mirando con cariño la escena frente a ella. Scrooge suspiro al sentir la billetera guardada en el bolsillo un poco más liviana pero termino por sonreír al ver a Donald feliz con sus amigos. Los gastos habían valido la pena.
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