▌ · ̊ ༘ ミ 𝒎𝒆𝒔𝒔𝒂𝒈𝒆𝒔 & 𝒓𝒆𝒂𝒍 𝒍𝒊𝒇𝒆 𓂃⋆
❛ there is an indentation
in the shape of you. . . ❜

📍MANHATTAN, NUEVA YORK.
Viernes 10 de junio, 2O22.

HABÍA PASADO APROXIMADAMENTE una semana desde que Arabella fue a la reunión familiar. Mentiría si dijiera que no pensó sobre Liam toda la semana, quizás las cosas hubiesen terminado bien entre ellos sí la cantante hubiese hablado bien con él.

En una noche Arabella, impulsivamente, le habló a su ex esposo.

Lo extrañaba, y mucho. No necesariamente como su novio o esposo, pero como un amigo. Liam estuvo para ella en las buenas y malas durante 3 años, y Bella nunca olvidaría eso. Lo peor de todo; ella nunca lo podría odiar, ni siquiera después de lo que hizo.

Arabella
Hola, Liam
Soy Arabella.

¿Crees que podamos hablar?

Liam Bennett
Hola, Arabella.

Claro que podemos hablar,
¿Podríamos juntarnos en
una cafetería?

Arabella
Mañana puedo
Pero sí tú no puedes, está bien

Puedo faltar al estudio por unas horas
sin molestia.

Liam Bennett
Mañana entonces :)

¿En la misma cafetería
de siempre?

Arabella
Claro.

Liam Bennett
Bien, te veo mañana.

El "mañana" ya había llegado, cuestionándose la existencia y sus acciones Carter bajó de su auto para caminar a la entrada de la cafetería tan querida a la que iba diariamente ella y su esposo en ese entonces.

Entrando, examinó todo el lugar tratando de encontrar al hombre alto que se suponía que ya debía estar ahí.

Liam y su maldita puntualidad, quién pudiera.

Al localizar al hombre caminó a la mesa dónde él estaba

── Arabella, hola ── Liam se levantó de la silla con intenciones de abrazar a su ex esposa, pero se quedó cuestionando sí hacerlo o no. ── Eh, ¿puedo?

La castaña le da una sonrisa delicada y asiente, sintiendo cómo Liam envolvía sus brazos en ella. Lentamente, ella también envolvió sus abrazos en él. El olor de él entrando a sus fosas nasales, ese perfume que ella tanto amaba, él lo seguía usando.

Se quedaron así unos segundos antes de que Carter rompiera el cálido abrazo. ── Te ves... exactamente igual que antes ── suelta una risa

── Bueno, gracias. ── Liam copia su acción sentándose al frente de ella ── Tú te ves... un poco diferente.

── ¿Sólo un poco?

── Quizás es el cabello, eh.

── Supongo, he dejado de usar colas tan altas.

── Te ves bien, cómo siempre. ── dice liam en un tono comfortable

¿Cómo podía Arabella odiarlo? después de todo lo que pasó entre ellos, él seguía diciéndole cumplidos y ella no sabía que decir para romper el hielo.

Se sentía una estúpida, más que nada por que ella fue la que le preguntó sí podían hablar y ahora que estaban frente a frente, ella tenía todo y nada para decir.

Liam en otra parte, tenía temor, no quería que la mujer que amaba lo odiara por sus acciones anteriores. Quería aclararse esa duda, no sabía sí podía seguir durmiendo sabiendo que una mujer maravillosa lo odiaba.

── Arabella, yo...

── No te preocupes, no te odio. ── Respondió ella al instante, cómo si estuviera leyendo su mente.

Liam exhaló profundamente aliviado.

── Lo siento mucho, Arabella. Por todo, mis acciones, mis palabras, todo lo que hice. ── se disculpó

── Liam, sé que lo sientes. Me lo repetiste miles de veces en el tribunal.

── Fui un idiota, Arabella. No lo merecías, me culpo todo el tiempo, sí hubiese sido consciente tal vez seguiríamos casados ahora

── Por favor, no empieces. ── los ojos de la castaña se llenaban de lágrimas mientras ella sacudía su cabeza.

── He estado yendo a terapia y yo... conocí a alguien. ── suelta finalmente

Las lágrimas a punto de salir de los ojos de Carter ── ¿Estás saliendo con alguien?

── Sí, quería decirte por que...

── ¿Porque querías demostrar que tú sí pudiste salir adelante? ── arabella lo interrumpe

── No

── Liam, perdón. Nunca debí haberte pedido hablar, no tenemos nada de que hablar. ── murmuró la cantante levantándose de la silla

── ¿Que pasó con nuestras promesas? ── pregunta el mayor haciendo que arabella se detenga

── ¿Quieres saber qué pasó con nuestras promesas? ── Arabella volvió a sentarse, esta vez hablando con un tono más fuerte ── Las rompistes, y todo por ti. Y sí, tienes razón, Liam. Sí tú no hubieses hecho tus actos de celos cada vez que tenía que besar a alguien para una película o serie y no le hubieses seguido el jueguito compremetedor a esa chica en la fiesta, seguiríamos casados ahora. Pero hiciste lo que hiciste, y nunca podríamos estar juntos de nuevo.

── Bells, de verdad lo siento tanto. Sé que estuvo todo mal, te aclaré que estaba borracho en esta fiesta y ni siquiera es una excusa, pero te puedo asegurar que tú fuiste la mujer que más ame en esta vida. Me arrepentí mucho, me dolió mucho firmar el divorcio, pero todo pasa por una razón ¿bien?. quizás no estábamos destinados a estar juntos, pero te adoro, nunca deje de hacerlo. Dame una oportunidad, no románticamente, amistosamente. Te extraño, y mucho, extraño que estés ahí para mí y que yo esté ahí para ti. ── lentamente junta su mano con la de Arabella

Arabella niega con la cabeza mirando el suelo, cuestionándose a sí misma sí lo mejor que podía hacer es irse de vuelta a su casa con sus perros y tratar de olvidarse de la existencia de Liam, pero no podía ni aun que quisiera.

── Está bien, Liam, te perdoné y te perdono. ── contestó finalmente ella ──Y Extraño ser tu amiga, así que definitivamente podemos ser amigos ── ambos sueltan una leve risa ── Te quiero mucho, Liam. Te lo dije un millón de veces y te lo diré de nuevo; te mereces todo lo bueno, a pesar de lo que pasó entre nosotros en el pasado. Espero que todo esté bien entre nosotros ahora y seas bueno con esa nueva chica en tu vida.

── Lo seré, de los errores se aprende ¿no?

Arabella suelta una leve risa, para después asentir y sonreír. Estaba feliz de tener a un amigo de vuelta, quizás su matrimonio no funcionó, pero la amistad quizás sí.

── Así que... Jessica se casa, eh ── consultó el hombre

── Sí, finalmente Dylan decidió hacerlo ── aclara Bells levantando sus manos

Arabella se fue a casa feliz ese día, después de tanto tiempo sintió que se había sacado un peso de encima. Después de no hablar con ella por una semana, en la noche decidió llamar a su hermana mayor, quién se disculpó por la tensión de la última vez que se vieron, pasaron horas hablando, resumidamente hablando de la conversación de Arabella y su ahora amigo. Y por último de que Arabella iría a ver su vestido para la boda en unas semanas más.