'First you say you love me then you say you don't'

PATIENCE | SHAWN MENDES

CONTEXTUALIZACIÓN: Dónde Draco y tú se gustan pero él no es capaz de decirlo.

PEDIDO POR: @Ryuu_Yaxley !!

Slughorn estaba terminando de escribir una serie de instrucciones en el pizarrón antes de que la clase comenzara. Algunos alumnos estaban empezando a llegar, y entre ellos se abría paso Draco Malfoy. Él y tu no eran amigos, con mucha suerte conocidos, y te molestaba de sobremanera su actitud de fanfarrón, e incluso con lo mucho que te desagradaba, no podías dejar de verlo. Era una especie de amor y odio. Draco tenía sus encantos físicos, como sus ojos grisáceos o la forma marcada de su mandíbula, pero te esforzabas en convencerte de que su personalidad antipática, contrarrestaba cualquier otro de sus dotes.

—¿Existe alguien más insoportable que Draco Malfoy?—Soltaste en voz baja hacia tu compañera. Hermione te miraba soltando una pequeña risa, por la manera en que arrugabas tus ojos para observar con desdén al rubio.

—Ya vas a empezar—Comentó Hermione.

—Sólo míralo—Apuntaste disimuladamente a Draco, quien se empeñaba en saludar a Slughorn seguramente para intentar caerle bien y hacer valer su reputación como 'buen estudiante'.—Va por ahí con esa sonrisa arrogante y lo único que hace es imponer miedo

—Deja de prestarle atención—Pidió la Gryffindor a tu lado. Justo cuando estabas por hacerlo caso, la escena frente a tus ojos se puso aún mejor, o más bien, peor. Pansy Parkinson se acomodaba al lado de Draco, afirmándose del brazo de este y batiendo sus pestañas, admirándolo.

—Oh genial, llegó su perrito faldero—Dijiste entredientes.

—¿Sabes que creo?—Susurró Hermione.—Creo que te gusta Draco y estás celosa

—No digas tonterías—Bufaste sintiendo una parte de tus pensamientos expuesta. Jamás admitirías en voz alta que Draco te parecía atractivo.

—Te conozco como la palma de mi mano—Añadió Granger.

—De cualquier forma—Comenzaste a decir esperando defender un poco tu propio orgullo—Aunque me gustara, no quita que sea un niño mimado realmente molesto

Antes de que Hermione pudiese responderte, el Profesor terminó de escribir en el pizarrón y se volteó, mirando como la clase estaba completa y esperaban que comenzara a hablar.

—Bien jóvenes, para el siguiente trabajo los asignaré en parejas—Avisó. Una serie de murmullos llenó el salón, donde la mayoría rogaba quedar emparejados con sus amigos o personas de la misma casa.—Señorita Granger con el Señor Zabini, Harry Potter y Theodore Nott...

Un mal presentimiento te invadió cuando empezaste a escuchar los dúos que formaba Slughorn, y aún no te nombraba. 

—La Señorita t/n y el Joven Malfoy—Dijo en voz alta.Tiene que ser una broma. Pensaste.—En los estantes tienen todo lo necesario, sigan las instrucciones del pizarrón. Una vez que terminen, deberán inferir que poción crearon y escribir sus usos en un pergamino—Indicó.—¡A trabajar!

Draco se acercó a ti, acomodando sus materiales, como un pequeño caldero, en la mesa que tenías en frente. Aún no decía nada y ya estaba sonriendo de una manera orgullosa.

—¿Cómo se siente tener al mejor en Pociones como compañero?—Preguntó pasando por tu lado y caminando hacia un estante cercano para recoger algunas especias. 

—No lo sé, pregúntale a Nott, a él le tocó con Harry—Respondiste imitando su sonrisa.

—Potter no sabe nada—Respondió tranquilo. Te miraba directamente a los ojos, lo cual no dejaba de ser intimidante para ti.

—Él ganó la Felix Felicis la última clase, no tú—Agregaste intentando armarte de seguridad y ver si podías debilitar un poco su molesto ego.

—Sólo empecemos ¿Si?—Dicho esto, Draco y tú comenzaron a cortar y moler las distintas hierbas y tubérculos que las instrucciones pedían. Sentías que el rubio estaba exageradamente cerca tuyo y de vez en cuando te miraba sin necesidad alguna.

—¿Siempre te sonrojas conmigo cerca?—Preguntó.

—¿De qué estás hablando?—Preguntaste tratando de esconder tu nerviosismo. Draco se acercó aún más y llevó una de sus manos a la tuya, alejándola del caldero.

—¿También sueles temblar así?—Bromeó.

—Un paso atrás Malfoy—Amenazaste. El soltó una risa y se alejó de ti por lo menos un metro.

—No sé para qué intentas fingir que no te gusto—Dijo sonriente.

Cuando finalizaron la poción, descubrieron que se trataba de un antídoto genérico a distintos venenos conocidos del mundo mágico, que afectaban al estómago. Satisfecha y aliviada de que la clase y tu dúo terminara, estabas recogiendo tus cosas como los demás alumnos cuando Slughorn llamó una vez la atención del salón.

—¡Bien! Sólo una tarea más—Advirtió.— En las mismas parejas, redacten una investigación acerca de los venenos más letales y sus curas correspondientes

Soltaste un quejido y detrás tuyo se posó Draco, susurrando cerca de tu nuca.

—¿Nos vemos en la biblioteca después de la cena?—Preguntó.

—Como digas

 [...]

El resto del día pasó con tranquilidad y te dirigiste a la biblioteca a la hora acordada. Draco parecía que le gustaba hacerse de rogar, porque no apareció hasta al menos treinta minutos después.

—Llegaste temprano—Comentó caminando hacia ti.— ¿Tan ansiosa estás por verme?

—En tus mejores sueños—Respondiste molesta.—Llevo casi media hora esperándote, Malfoy

—¿Te han dicho que te ves muy linda estando molesta?—Draco se acercó a ti fijando su mirada en tu rostro. Te cohibía su cercanía y el hecho de que no despegase sus ojos de ti. 

—¿Por qué tardaste tanto?—Preguntaste haciendo caso omiso a su comentario anterior.

—Estaba con Pansy—Respondió sin más mientras se alejaba de ti y miraba los libros que ya habías apartado para estudiar. Draco pasaba sus manos por cada uno de ellos de manera lenta y te molestaba que hasta ese simple gesto te pareciera hipnótico de ver.

—Oh, tu noviecita no te dejaba venir a estudiar conmigo—Contestaste tratando de contener tu enojo.— Quizá me tiene miedo

—No te hagas ilusiones—Respondió Draco.

—Lo mismo digo, sólo terminemos con esta tarea y ya.

Pasaron cerca de una hora leyendo un montón de libros de Pociones y Herbología para poder empezar a redactar su tarea. Draco se había sentado frente a ti. Se veía realmente bien con su cuerpo apoyado en el respaldo de la silla, su rostro elevado y su mirada cayendo en el libro que tenía en sus manos. Te esforzabas en no distraerte viéndolo.

—También te ves linda cuando estás leyendo—Habló. Por dentro, por más que quisieses chillar por el halago, seguías pensando que no podías fiarte de alguien tan arrogante como Draco.

—Un comentario más y Pansy se entera—Advertiste.

—Deberías dejar de asumir que Pansy y yo somos algo—Respondió sonriente.

—¿No lo son?—Cuestionaste.

—¿Te interesa?—Preguntó de regreso levantando una ceja.

—No me interesa meterme en problemas con otra chica, nada más—Respondiste quitándole importancia al asunto. Draco se tardó en contestar, llenándote de duda.

—Para tu suerte, estoy disponible—Dijo finalmente.

—No tienes remedio Malfoy

[...]

Para tu mala suerte, durante las siguientes tres semanas, Slughorn continuó con su dinámica de los trabajos en parejas. Mínimo cada dos días Draco y tú tuvieron que reunirse en la biblioteca para estudiar y redactar ensayos. Sin embargo, todo el tiempo que pasaron juntos te sirvió para conocerlo mejor, donde pasaste de odiarlo a tolerarlo, hasta finalmente aceptar que te gustaba.

Luego de su trabajo final, Draco y tú se reunieron en las Tres Escobas en Hogsmeade para celebrar su excelente calificación. Ahora se llevaban increíblemente bien, y te sentías emocionada por seguir pasando tiempo con él. Una parte de ti insistía en que Draco podía también sentirse atraído por ti, por la manera en la que te trataba y sus cumplidos que cada vez eran más.

—No puedo creer que Slughorn nos tuvo casi un mes llenos de trabajos—Dijo Draco mientras recibía del mesero dos cervezas de mantequilla.—Pero lo logramos—Draco te entregó tu bebida mientras te guiñaba un ojo.—Los mejores de la clase

—Fue un placer trabajar contigo Malfoy—Respondiste satisfecha.

—Oh vamos ¿Seguirás llamándome así?—Se quejó. Tenía razón, ya podían considerarse amigos mutuamente.

—Bueno Draco—Respondiste haciendo énfasis en su nombre. Levantaste el vaso con tu mano para brindar.— Un brindis por el buen equipo que hacemos

Draco chocó su vaso con el tuyo. Se la pasaron charlando unos minutos cuando una cabellera pelirroja pasó cerca de ustedes, haciendo un ademán con su mano para saludarte. Era Ron Weasley.

—Hola t/n

—Hola Ron—Respondiste dedicándole una sonrisa. Ron se alejó con Hermione y Harry, y cuando volviste tu mirada a Draco, su expresión parecía algo más tensa.

—¿Le gustas?—Preguntó.

—No que yo sepa—Contestaste confundida.

—Le gustas—Aseguró endureciendo más su mirada.

—¿Algún problema?—Cuestionaste.

—Ninguno

—Estás celoso, admítelo—Una especie de satisfacción recorrió tu cuerpo ante la idea de que Draco pudiese estar sintiendo lo mismo que tu sentías cuando lo veías con Pansy.

—No tengo razón para estarlo—Respondió en seco. Tu estómago dió un vuelco. Parecía hasta desinteresado por siquiera mirarte, su actitud había cambiado completamente.

—¿Es en serio?—Preguntaste casi indignada.

—¿Qué con eso?—Respondió aún más borde. El Draco simpático se había ido, o quizá sólo había fingido ser amable mientras estudiaban. No sabías que pensar. Estabas dolida, una parte de ti estaba ilusionada pensando que podías gustarle.

—Me gustas Draco, eso pasa—Admitiste con el mismo tono frío que el estaba usando para dirigirse a ti.

—No estoy para relaciones—Añadió sin mirarte. Decidida a no perder más tiempo y dignidad, te pusiste de pie, tirando unos galleones sobre la mesa para pagar tu bebida y salir allí lo antes posible.

—Eres un idiota Malfoy

[...]

Al día siguiente habías empeñado en no ver a Malfoy, así eso significase pasarse todo el día en la Biblioteca para así evitar topártelo en los pasillos. Era paradójico estar en lugar donde según tu, se habían hecho cercanos, pues parecía que para él todo había sido nada más que trabajo académico.

—Hey t/n—Habló una voz conocida en tus espaldas. Al voltearte, te topaste con esa nariz puntiaguda y pecas tan rojas como su cabello, era Ron de nuevo.

—Oh hola Ron—Saludaste sosteniendo unos libros que acabas de recoger de una estantería.—¿Cómo estás?

—Bien ¿Qué tal tú?—Preguntaste.— Supe que te uniste al equipo de Quidditch, felicidades

—Gracias—Respondió rascándose la nuca algo nervioso.— Sobre eso, quería invitarte a una fiesta que haremos luego del partido del sábado, será en un salón abandonado de la torre Norte

—¿Ya se asumieron como ganadores?—Preguntaste divertida.

—Algo así—Respondió sonriéndote.— Quise invitarte ayer pero vi que estabas con Malfoy

—No te preocupes, iré encantada—Aseguraste. Ron te miró satisfecho y se alejó. Pensaste que se quedaría más tiempo contigo pero al parecer ya había logrado su cometido y con eso bastaba.

Dispuesta a llevar los libros a una mesa y sentarte a leer, tan sólo cuando diste un paso, tu cuerpo se vió estampado contra un librero nuevamente. No tuviste tiempo de reaccionar, y viste como Draco te tenía acorralada entre alto cuerpo y el estante.

—¿Qué diablos?—Apenas pudiste decir por la impresión.

—¿Te gusta Weasley?—Preguntó evidentemente molesto.

—¿Y a ti qué diablos te importa?—Preguntaste desafiante.— Veo que estás sordo, te dije que me gustabas tu y tienes el descaro de venir a hacerme escenas de celos cuando tu no sientes nada por mi—Prácticamente habías escupido tus palabras para desahogarte. No entendías que pretendía Draco preguntándote cosas como esas.—Que te jodan Malfoy

Inútilmente trataste de alejarte, pero a Draco no le tomó más de un segundo para presionar sus labios contra las tuyos en un fogoso beso. Parecía desesperado. No dudaste en seguirle el beso que llevabas tiempo esperando. Sus manos bajaron del estante y se posaron detrás de tu cuello para acercarte más. Por la falta de aire debieron separarse, y aún desconcertada, querías saber el motivo del beso.

—¿Qué?—Preguntaste.

—Considera eso como un también me gustas—Respondió soltando un suspiro y acomodando un mechón de tu cabello detrás de tu oreja.

—Pensé que no estabas para relaciones—Comentaste.

—Cambié de opinión—Admitió.—Estabas perdiendo mi paciencia al verte con la Comadreja

Al parecer Draco no era muy bueno para expresar sus sentimientos con las palabras, pero si con gestos.

hola! cómo están? últimamente me ha venido un bajón y no siento muy conforme con lo que escribo u.u, espero que no lo perciban así, y si tiene alguna crítica constructiva, todo es bien recibido (っ˘̩╭╮˘̩)っ