'Sometimes it all gets a little too much
But you gotta realize that soon the fog will clear up'

A LITTLE TOO MUCH | SHAWN MENDES

PEDIDO POR: CherrxByebye--

CONTEXTUALIZACIÓN: Chica Ravenclaw. Has estado agobiada estudiando y Draco está preocupado por tu estrés.

Soltaste un bufido mientras ponías sobre la mesa un libro bastante grueso sobre la Historia de la Astronomía. Draco se sobresaltó a un metro tuyo, pues el golpe del libro estrellándose sobre la mesa lo había tomado por sorpresa. Al levantar su vista y ver tu rostro, dudó dos veces antes de hablar, pero finalmente lo hizo.

—¿No crees que estás algo...agobiada, amor? —Preguntó en voz baja. No habían muchos alumnos en la biblioteca, y la Señora Prince no estaba cerca, así que eso demostraba que Draco estaba más asustado de tu reacción estando estresada, que de la idea de ser regañados por hacer ruido.

—No. estoy. agobiada.—Respondiste haciendo énfasis al término de cada palabra.—Sólo estoy preocupada por este exámen, me lo estoy tomando muy en serio, sólo es eso.

—Yo creo que quizá es demasiado estudio por hoy—Respondió mientras se ponía de pie y rodeaba la mesa hasta llegar a donde tu estabas sentada. Draco se colocó detrás tuyo, poniendo sus manos en tus hombros, mientras hacía pequeños movimientos en tu piel.—Llevas semanas estudiando sin parar, ya te has adelantado mínimo siete clases, si es que no más.

—¡No es suficiente Draco!—Soltaste. Una parte de ti quería perderse entre las maravillosas manos de tu novio dándote masajes en tu espalda, pero la otra quería quedarse toda la tarde leyendo y tomando apuntes.—De verdad necesito una buena calificación.

—Y la tendrás, pero si sigues así, lo primero que tendrás será un colapso por estrés—Dijo mientras bajaba su rostro y te susurraba detrás de tu oído.—Porfavor, cielo..

Habías perdido tu paciencia. De verdad estabas bien, o intentabas convencerte de ello. Te escapaste de su agarre, levantándote de la silla y tomando los libros rápidamente.

—Iré a estudiar a mi sala Común, nos vemos luego—Dijiste cortante, alejándote de Draco.

—Pero...—Draco suspiró viendo como te ibas del lugar. Ignoró el hecho de que le habías respondido de manera tan borde, sólo porque la preocupación por tu estrés era más importante para él.

[...]

Ya había anochecido, y no se escuchaba ni un fantasma en la Sala Común de Ravenclaw. Todos habían ido a dormir y tu seguías en un escritorio intentando entender el trazado de las lunas y estrellas de Saturno. Hace bastante habías dejado de entender lo que leías, tu cabeza zumbaba y tu cuello dolía. Te habías propuesto terminar aquel libro ese día, pero ya sería imposible debido a tu cansancio, y todo tu itinerario de estudio ya se había atrasado.

Debido a la frustración por tu cansancio físico y mental, comenzaste a llorar mientras cerrabas el libro con fuerza. Quizás debiste escuchar a Draco cuando dijo que ya habías estudiado lo suficiente. Lo único que querías en ese momento era un abrazo, pero también eras demasiado orgullosa para admitirlo.

—¿____(t/n)?—Una dulce voz te asustó. Parpadeaste para aclarar tu vista entre las lágrimas. Luna Lovegood te miraba en su pijama de colores.—¿Necesitas ayuda?

—N-no, gracias, pero estoy bien—Respondiste mientras llevabas tus manos a tu rostro para quitar el llanto de tus ojos.—Gracias por preocuparte.

Luna asintió mientras se alejaba a saltos del lugar. Ni siquiera notaste que en vez de dirigirse a la torre a de las habitaciones de las chicas, sino que iba a la salida de su sala común.

[...]

Tu cuerpo dolía y sentías como cada músculo estaba tenso. No tenías ni la más mínima idea donde estabas ni qué hora era.

—¿Amor?—Escuchaste frente a ti.—Amor despierta.

Confundida levantaste tu rostro, topándote con la un Draco con el cabello despeinado y su pijama negro. Estaba apoyado en sus codos, que yacían en la mesa del escritorio.

—¿Draco?—Murmuraste adormilada.—¿Qué haces aquí?

Recién en ese momento caíste en cuenta de que te habías quedado dormida sobre tus libros. Un reloj al fondo te daba a entender que eran pasada las tres de la mañana, y los colores azules que te rodeaban te terminaron de afirmar que seguías en medio de tu Sala Común. ¿Qué diablos hacía Draco allí a esa hora?

—La chica Lovegood fue a buscarme, dijo que estabas...—Tomó una pausa antes de seguir hablando.—Algo mal.

Inmediatamente bajaste tu mirada avergonzada. En el fondo estabas agradecida de Luna por haber ido a buscarlo, pero también te daba culpa el hecho de que lo despertara a mitad de la noche porque tu necesitabas ayuda por algo que Draco ya te había advertido.

—Tenías razón, colapsé por estrés—Dijiste mientras tus lágrimas volvían a salir. Haber dormido en la dura superficie de los libros había provocado que tu dolor de cabeza aumentara y ante la sensación te quejaste.—No puedo más

Draco sonrió levemente, su lado orgulloso estaba satisfecho, pues había acertado en su pronóstico, pero también le dolía verte así de vulnerable.

—Necesitas descansar, vamos, te llevaré a la cama—Draco se acercó a ti, y en menos de cinco segundos te tenía cargada entre sus brazos. Tu te encogiste en su pecho y escondiste tu rostro en su cuello. Estabas realmente agotada pero te sentías en paz y protegida con él. Justo en ese momento vino el recuerdo de cómo le habías hablado horas atrás en la biblioteca y el remordimiento te ganó.

—Lo siento por lo de antes, no debí responderte así—Hablaste en un hilo de voz.—Estabas preocupado, y yo actué como una tonta...

—Shh, silencio amor—Dijo dulcemente. Ya estaban cerca de los cuartos de las chicas, y Draco era realmente cuidadoso mientras caminaba y te cargaba al mismo tiempo.—No te disculpes, está todo bien.

Draco entró en silencio a la habitación intentando no hacer ruido y así no despertar a tus compañeras de habitación. Contigo a punto de caer rendida y dormirte, te ayudó a colocarte la pijama y finalmente te recostó. Te arropó con tus mantas y dejó un beso en tu frente.

—A partir de ahora me harás caso cuando te digo que estás estresada ¿Si? —A regañadientes asentiste.—Porfavor, no me gusta verte así.

—Vale, te haré caso—Justo al terminar de hablar, bostezaste.—Gracias por cuidarme Draco, te quiero.

—Te quiero mucho más, amor.—Draco pasó su mano por tu cabello.—Descansa, mañana vendré a primera hora a ver cómo estás.

Finalmente te dejaste ganar por el cansancio y te quedaste profundamente dormida. Draco se quedó unos minutos más asegurándose que estabas bien, y no fue hasta media hora después que decidió irse las mazmorras .

me muero de amor quiero un draco que me cuide::((