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Poniendo todo en orden

Con Mystoria.

Mystoria abrió sus ojos, encontrándose con que estaba en un cuarto de hospital, se levantó hasta sentarse en la cama, sintiéndose muy mal por lo que había escuchado, pero estaba mucho más preocupado porque su pequeño haya presenciado aquel hecho tan lamentable. Por lo cuál comenzó a llorar. Pero se dio cuenta de que no era momento para eso, su hijo lo necesitaba, por lo cual rápidamente se puso de pie y comenzó a caminar, regresando a la habitación de su hijo.

Mientras tanto.

Con Milo.

Ayudando a su tío, volvió a entrar al hospital para que lo revisaran, también se había llevado a Krest y Zaphiri los seguía, desde muy atrás.

Milo: realmente me sorprende que estén Juntos - le susurro a Krest.

Krest: agh... créeme, no eres el primero - aseguró.

Milo: pero veo que esta feliz por tenerlo de regreso - dijo mientras vio al mayor verlo, para después girarse a ver a su esposo, quien estaba molestando aún enfermero que al final, terminó echándole un vaso de agua encima. El castaño suspiró para después sonreír, dirigir su vista al frente y decir.

Krest: si, tienes razón. Me alegra mucho saber que mi esposo está bien, dentro de lo que cabe - respondió, para después ver a Écarlate y Asmita acercarse corriendo a ellos. Aunque paro de golpe al reconocer a Cardinale, que por su parte, se veía confundido. Écarlate de igual forma se acerco rápidamente a ellos.

Écarlate: Milo, ¿a dónde te habías ido? - preguntó mientras veía de forma disimulada a rubio - ¿acaso será un zombie? - eso fue lo que se preguntó mentalmente, para después ver al otro - ¿y el quien es? - preguntó con bastante desconfianza.

Milo: oh, Papá, te presento a Krest, él estuvo conmigo en ese lugar y también, descubrir que es el abuelo de Camus - reveló mientras el otro asombrado lo volteo a ver.

Cardinale: Oye Écarlate, ¿podrías explicarme que estoy haciendo yo en un hospital? - preguntó mientras el pelirrojo confundido con todo, solo vio a Milo.

Milo: te lo explico luego - respondió al ver que su padre lo estaba viendo con cara de ¿que esta pasando aquí? - pero, ¿podrías ayudarme a llevarlos? Tienen que revisarlos - dijo a lo que Écarlate asintió para después ayudarle con Cardinale.

Écarlate: espero tengas una muy buena explicación para esto jovencito - le susurro mientras comenzaba a caminar con Cardinale que parecía como que se hubiese drogado o algo.

Milo por su parte siguió con Krest y Asmita. Únicamente suspiró mientras se ponía a caminar de regreso, tomaría a sus hijos y se largaría de ahí, suspiró un poco triste, pero como siempre, la culpa de sus desgracias las tenían Aspros y su esposa, ahora entendía porque su suegra la odiaba desde los comienzos de esa relación.

Mientras tanto.

Con Deuteros y los demás.

Deuteros veía como después de haber hecho que una enfermera revisara que Chris no tenía nada grave, asomaba una vez más sus caras a la sala de espera, aunque, se preguntaba que rayos estaba haciendo esa mujer en la habitación de Milo después de todo, su hermano le daba muchas libertades a esa tipa.

Aspros: bien. Dile a tú esposo que de gracias a los dioses que Chris y el bebé están bien - le comento mientras los hijos de Deuteros voltearon a ver a su padre al escuchar eso.

Deuteros: en su defensa, esa mujer le a de ver dicho algo que no le gustó. Sabes muy bien que Asmita siempre es calmado y pocas veces se llega a alterar a tal punto de querer golpear a alguien - rápidamente respondió mientras los gemelos y Shaka voltearon a ver rápido a su tío.

Aspros: so Chris le dijo algo, no fue más que la verdad. Recuerda que nada de lo que dijo allá fue mentira - comentó mientras el otro irritado se puso de pie.

E iba a hablar, hasta que Asmita apareció, el rubio ni siquiera les dirigió la mirada a los hermanos, únicamente se acerco a sus hijos y los puso de pie.

Asmita: tenemos que irnos niños - fue lo único que ordenó, mientras se llevaba de la mano a Shaka. Los gemelos confundidos por su parte solo siguieron a su madre y hermano.

Deuteros por su parte rápidamente se alejó de su hermano y corrió para ponerse frente al camino del rubio mayor, mientras que serio le hablo.

Deuteros: no puedes irte, nosotros aun tenemos mucho de que hablar - fue lo que le dijo.

Asmita: yo no tengo nada de hablar con usted señor Gemini, ya lo dijo todo allá ¿no? - respondió serio también.

Kanon: esto es más serio de lo que creí - le susurro el gemelo menor a su hermano, el cual solo veía de forma confusa la escena.

Deuteros por su parte, al escuchar eso solo suspiró, era obvio que no iba a aceptar esa respuesta, si Asmita creí que así sería estaba equivocado, por lo cual tomó su brazo y jalando de él, acerco al rubio hasta su rostro.

Deuteros: ya dije que no te puedes ir - repitió. Mientras el otro solo suspiró, estaba cansado de esto.

Aspros: típico. Les recuerdas sus errores y lo mejor que pueden hacer es huir. Realmente me pregunto ¿que fue lo que mi hermano vio en ti? - hablo en son de burla.

Asmita solo bajo la mirada, pero para su sorpresa solo sintió como Deuteros lo jaló, lo hizo caminar hasta llegar hasta donde estaba Aspros, para después soltarlo, al mismo tiempo que le propinó un buen golpe, que hizo al mayor caer de inmediato al suelo. Asmita estaba sorprendido, jamás había visto algo así, jamás había visto a Deuteros golpear a su hermano por un comentario hacia su persona. Tan sorprendido estaba, que cuando pudo reaccionar vio a Deuteros con sus tres hijos, a los cuales uno por uno tomó del rostro, acercándolos al de su tío, mientras molesto decía.

Deuteros: ¡míralos, míralos bien! ¡míralos y sigue diciendo que no son míos! ¡te reto a decir una vez mas que no son hijos míos y Asmita me engaño! Lo que a ti te duele es saber que al primero que trajiste ni siquiera te conozce y de mi cuenta corre de que nunca lo hará - fue lo que le advirtió al mayor que molesto lo veía desde el suelo.

Continuará...

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