Momentos antes.

Xx: realmente es una verdadera lástima ¿no lo cree? - preguntó mientras Écarlate disimuladamente la vio - que una vida tan joven se apagué en un maldito instante, realmente es una pena.

Écarlate: señorita, no creo que sea prudente que diga cosas así, cualquiera que la escuche podría mal interpretar y creer que usted es la asesina a la que están buscando desde hace meses - fue lo único en que respondió.

Xx: ¿Cómo alguien podría pensar eso? Además que si en dado caso se llegan a dar cuenta, sería demasiado tarde.

Écarlate: ¿por qué lo dice?

Xx: porque esas personas terminan como usted... - le dijo mientras Écarlate vio como ella sacaba con su mano un gran cuchillo de entre su ropa - todos terminan muertos y sin lengua - dijo sonriendo de forma siniestra mientras lo veía.

Écarlate: lo que faltaba, que día de porquería... lo odio - susurro cansado y hasta cierto punto aburrido.

Mientras tanto.

Con Mystoria.

Mystoria había salido a encaminar a Dégel, la verdad por lo que ocurria en ese lugar le preocupaba que les fuera a pasar algo a alguno de los dos. Y más ahora que Camus estaba dormido, llegaron al elevador y segundos después este llego a su piso y abrió sus puertas, para después ver con bastante sorpresa como Écarlate caía de espaldas al suelo.

Mystoria: Écarlate, ¿que paso? - preguntó preocupado mientras veía que tenía unas cuantas cortadas en sus brazos y una en su mejilla.

Écarlate: ustedes dos corran - fue lo único que les dijo.

Mystoria: ¿Que? - preguntó confundido hasta que una tercera voz se hizo presente.

Xx: vaya, vaya... parece que hoy será un dia entretenido - dijo la mujer mientras enseñaba el cuchillo sonriendo de forma sádica - hagamos esto más divertido, les daré cinco minutos para correr - les dijo.

Mystoria no tuvo que haber escuchado eso dos veces, paro rápidamente a Écarlate y jalo del brazo a Dégel, para después llevárselos a ambos casi a rastras.

Xx: Uno... - dijo la mujer mientras ponía un pie fuera del elevador - dos... - contó en voz alta mientras veía a los otros correr - tres...

Para el alivio de todos el departamento de Mystoria era el primero que había en aquel piso, por lo cual rápidamente sacó sus llaves y de un empujón los metió metió todos ahí para después cerrar con seguro.

Dentro del departamento.

Dégel: ¿Quién demonios es esa tipa? - preguntó preocupado.

Mystoria: ¿estas bien? - le pregunto preocupado a Écarlate.

Écarlate: si no te preocupes, son solo cortadas sin ninguna importancia - dijo mientras veía al peliceleste revisar.

Mystoria: bueno, parece que no son heridas graves. Pero aún así debemos llamar a alguien para que te revisen - dijo mientras se levantaba para tomar su celular.

O ese era su plan hasta que escuchó que tocaron la puerta del departamento por lo cuál pidió a todos hacer silenció, escuchó uno, dos, tres... llamados a la puerta, para segundos después escuchar un suspiró.

Xx: mala elección ocultarse aquí, hubiera sido mejor que utilizaran las escaleras de emergencia para salir pero que remedio... - dijo ella - esperen un momento, ya voy a entrar - les advirtió mientras se escuchaba como se alejaba pasando el cuchillo por la pared.

Mystoria: ¿de donde salio esa mujer? ¿Será alguna ex tuya? - le pregunto al pelirrojo que solo negó.

Écarlate: claro que no, además... ya llevaba un tiempo siguiendo me, supongo que para estudiar me y así poder tomarme de sorpresa - sugirió.

Dégel: vaya... ¿y jamás te dio mala espina? - preguntó.

Écarlate: no creí que debía preocuparme. Además... solo piénsalo, jamás hubiera podido deducir que ella era la asesina que estaba merodeando estos últimos meses - aseguró.

Mystoria: si supongo que tienes razón... - susurro mientras veía a ambos, hasta que escuchó a Milo llorar - iré a ver a Milo ahora vuelvo.

Écarlate: ten cuidado - le dijo mientras lo veía irse - ¿Kardia aún no a venido por ti? - pregunto confundido a Dégel.

Dégel: estuvimos mucho tiempo hablando y se me olvidó llamarle hasta ahora, ah... pero le dije que esperará abajo no te preocupes - dijo rápidamente.

Écarlate: Comprendo... - respondió mientras veía a Dégel mecer a su bebé para que no se despertará, pero fue en vano al escuchar la puerta abrirse de golpe y momentos después ver a la mujer aparecer. Écarlate por su parte al verla jalo del brazo a Dégel para después meterlo rápidamente a una de las habitaciones y encerrarlo ahí.

La mujer se le tiro encima rápidamente y comenzó a forcejear con el, ambos en el suelo mientras ella le decía un monto de cosas que para Écarlate, no tenían sentido.

Xx: creí que serias el indicado, pero no. Como todos los demás fuiste un completo inútil.

Écarlate: ¿de que diablos habla señorita? - preguntó confundido.

Ambos siguieron forcejeando, pero Écarlate fue sorprendido al ver que la mujer poco a poco le estaba ganando en fuerza y la punta de aquel arma blanca, muy pronto estaría tocando su cuello.

Xx: eso ya no importa. Ya que muy pronto tú también seras uno de los tantos muertos que an encontrado en este maldito edificio - dijo mientras que tomando de un momento para otro las muñecas de Écarlate lo levanto y golpeó fuertemente contra el suelo, dejándolo aturdido por unos minutos mientras ella aprovechó esto para sentarse sobre el y tomando impulso levanto el cuchillo con intenciones de clavarselo en el pecho.

Pero tres disparos se impactaron sorpresivamente sobre el pecho de ella, Écarlate confundido por todo el sonido vio hacia atrás, encontrandose con que Mystoria, Con Milo en su brazo izquierdo completamente dormido había disparado con un arma de fuego a la mujer, que cayó después de unos minutos al lado de Écarlate.

Dégel que al escuchar los disparos salió de la habitación donde estaba, vio sorprendido la escena. Para después correr hasta Écarlate y ayudarle a ponerse de pie, mientras que Mystoria amecia a Milo para que no se despertará.

Écarlate: ¿estas loco? - le preguntó a Mystoria.

Mystoria: mis compañeros ya vienen, deberías sentarte iras a la comisaría a dar declaración - le dijo serio.

Dégel: ¿tienes permiso para tener eso aquí? - preguntó mientras señalaba el arma.

Mystoria: es de mi trabajo, además tenemos derecho a disparar en defensa - le respondió sin prestarle atención, mientras veía a Milo que por la platica ahora si había despertado - por favor duérmete ¿si? - le pidió.

Dégel: que estrés... - susurró. Écarlate por su parte se acerco hasta agacharse frente a la mujer, que no se movía y parecía ya no respirar.

Mystoria: si fuera tú no me acercaría ahí - sugirió.

Écarlate por su parte parecía no prestarle atención, es más... era como si en esa chica hubiera algo que le llamará la atención, por lo cual Mystoria molesto solo se dio la vuelta y se encerró en su habitación junto con su hijo, Dégel quien había comprendido este comportamiento solo se acerco a golpear la cabeza de Écarlate.

Écarlate: ¡auch! ¡¿por qué haces eso?! - grito molesto.

Dégel: idiota, ve a decirle algo, acaba de arriesgarse y arriesgarnos a todos nosotros y además de todo matar frente a su hijo por ti. y así le pagas ¿no puedo creerlo? - pregunto mientras Écarlate lo vio confundido.

Écarlate: ¿Que? - fue lo único que logro decir, sumamente confundido, mientras que las sirenas de las patrullas comenzaban a escucharse.

Continuará...

Agradezco a Osaka-Luna por apoyarme aportando sus ideas para los capítulos anteriores con la aparición de Camus y compañía, muchas gracias.