La fogata había ayudado a cocinar tanto la panceta de cerdo como otros ingredientes que añadieron. JungKook se había encargado de cocinarla bien mientras que YoSun tomó algunas fotos del chico y del paisaje, sirvió el vino en vasos de plástico disculpándose por no tener copas para servirlo en ellas. En un momento, el silencio reinó entre la pareja, sus manos estaban juntas mientras veían al lago en total calma. JungKook miró a YoSun quien tenía la vista en el cielo que comenzaba a oscurecer dando paso a la noche. La chica tomó una bocanada de aire encontrándose con su mirada, algo que la hizo sonrojar.

—¿Por qué me ves así?, ¿Tengo algo en la cara?—apartó la vista un tanto avergonzada.

—Me gusta como te distraes con facilidad.

—Oh, así que me dices distraída.

—YoSun—ella volteó a mirarlo. A JungKook le gustaba como su cabello crespo siempre tenía un toque despeinado, acomodó algunos mechones sintiendo que no tenía la valentía de decirle. ¿Y si lo rechazaba?, ¿Y si todo terminaba allí?, ¿Y si la perdía?

YoSun ladeó su cabeza de lado al quedarse callado mucho tiempo.

—Hay algo que debes contarme, ¿No es así?—el chico alejó su mano aclarando su garganta. Esto hizo que la joven comenzara a hacerse la idea de que tal vez él quería terminar la relación. Una pequeña punzada en su pecho intentó traer las lágrimas a sus ojos, YoSun se levantó de repente recogiendo lo que habían ensuciado para la comida.

Encontrar el momento perfecto estaba siendo complicado por culpa del miedo y los nervios.

JungKook estaba teniendo una pequeña crisis que amenazaba con volverse grande. Revisaba su bolso sin encontrar la caja del anillo, ¡¿Dónde demonios estaba?!, estaba seguro que la había guardado allí luego de quitársela a SeokJin.

—¿Tus cosas?, eso estaba a la vista en tu cama. ¿Vas a comprometerte con YoSun?

—Pienso hacerle la propuesta—dejó dicha cajita en la mesa de noche. Regresó al armario encontrando esta vez lo que buscaba.

—¿No es un gran paso para tomarlo a la ligera?

—Ay, no—llevó sus manos a su cabeza. No la había guardado, por estar hablando con Jin había dejado la caja en la habitación—Maldita sea—quiso gritar con fuerza detestándose por ser tan idiota—¿Cómo es que lo olvidé?—murmuró preso del pánico.

YoSun entró a la tienda encontrando al chico nervioso y ansioso, supo identificar su molestia malinterpretando todo.

—¿Estás bien?—tomó asiento en su saco de dormir. Afuera había anochecido comenzando a lloviznar sobre la tienda, una lámpara colgando del techo de ésta mantenía iluminado el espacio.

—Sí, estoy bien—JungKook guardó sus cosas de nuevo queriendo golpearse así mismo.

—Pareces molesto—ladeó su cabeza. Al no obtener respuesta decidió hablar—Lo siento—aquello hizo que se detuviera colocándole atención a su novia. ¿Por qué lo lamentaba?—Has estado muy extraño el día de hoy, siento que estoy obligándote a algo que no quieres hacer y...lo siento—bajó la mirada—Si quieres romper conmigo, sólo dilo, JungKook.

Y eso lo asombró dejándolo atónito.

—¿Romper?

—Al principio me parecía perfecto venir a acampar contigo, ahora entiendo porque querías hacerlo...

—No, no—tomó sus manos encontrando sus ojos—No te pedí que vinieras para romper, YoSun.

—Pero has estado un poco distraído...

—Es debido a la propuesta, no por ti. Sé que la propuesta tiene que ver contigo, pero no tiene que ver exactamente contigo, ¿Se entendió?—apenas terminó de hablar su rostró mostró pánico. Había dicho mucho.

Tanto él como la pelinegra se miraron fijamente con una expresión de susto y sorpresa.

—¿Propuesta?—YoSun tenía sus ojos bien abiertos. JungKook retrocedió cuando ella se acercó peligrosamente—¿Qué dijiste?

—¿Dije propuesta?, no, escuchaste mal...

—Escuché perfectamente—tomó su chaqueta jalando de ella—¡¿Ibas a proponerme...?!—su voz disminuyó para susurrar una palabra que se sentía delicada para ella—¿Ibas a proponerme matrimonio?—sus ojos pasearon rápidamente por su rostro—¿Por qué te quedas callado?

—Ahora tú...pareces enojada...

—¡No estoy enojada!

—Tu ceño...fruncido no lo dice...—YoSun aferró sus manos a su chaqueta y se apresuró a hablar—Yo...quería aprovechar este momento para decírtelo, había comprado el anillo, pero lo olvidé en casa por culpa de Jin hyung...

—¡¿Compraste un anillo?!

—YoSun, baja la voz por favor...

—¿Sabes lo asustada que estaba pensando que ibas a romper conmigo?

—¿Qué?

—Sólo tú juegas con mis emociones de esa manera—lo soltó—No quiero hablar más, ahora si estoy molesta—se acomodó en su saco de dormir—Apagas la lámpara, buenas noches—le dio la espalda.

El pobre chico quedó en la misma posición sin entender esos cambios drásticos. ¿Estaba molesta por pensar en proponerle matrimonio o estaba molesta por haberle hecho creer que iban a romper?, siempre había escuchado que las mujeres eran complicadas, ahora entendía su significado. Pensó en tocar su brazo para hablar sobre ello y quedó con su mano extendida, sería mejor esperar por la mañana cuando todo estuviera más tranquilo.

JungKook miró a su novia beber de su café de pie cerca del lago, tomó una bocanada de aire decidiéndose a iniciar la conversación. Se acercó guardando sus manos en su chaqueta, la mañana estaba un poco fría. Se detuvo a su lado mirando el agua en calma.

—¿Podemos...hablar?—no hubo respuesta afirmativa ni negativa—Lamento haberte dado la impresión incorrecta, realmente nunca ha pasado por mi mente romper la relación, estoy muy a gusto con ella y contigo, YoSun—volteó a verla cuando ésta lo hizo—Por esa razón quería dar el siguiente paso contigo.

—Pero olvidaste el anillo.

—Compraré otro si quieres...

—¡No quiero eso!—inhaló profundo controlando el nivel de su voz—No me molesta que quieras proponerme matrimonio, me parece dulce y tierno viniendo de ti, lo que me molesta es tener miedo de que eso nos separe.

—¿Qué quieres decir?

—Algunas parejas acaban separándose luego de proponerse matrimonio—indicó—No quiero eso para nosotros, me gusta nuestra relación, me gustas tú, te amo y estoy enamorada de ti como nunca lo estuve de algún hombre—le gustó escuchar eso—No quiero que dar el siguiente paso sea muy pronto o sea el error de nosotros.

—Oye—tomó su rostro entre sus manos.

—Estás helado—se estremeció. Llevó sus manos a la taza tibia brindando calor a sus dedos, ambos se miraron fijamente con una pequeña sonrisa, especialmente de él.

—Tienes razón, algunas parejas terminan luego de la propuesta o incluso desde antes. A este punto no creo que podamos romper algo que nos hace sentir bien y completos—acarició sus manos sobre la taza—YoSun, quiero casarme contigo, estuviste a mi lado cuando más lo necesitaba, mis sentimientos estuvieron más claros que nunca en todo ese tiempo, te quiero en mi vida y me encantaría decir que esa mujer gruñona es mi esposa.

—Ya—se quejó escuchando su risita—No soy gruñona, me enojé por pensar cosas que no eran ciertas.

—¿Aceptarías casarte conmigo?

YoSun chasqueó la lengua admirando el brillo en los ojos de su novio.

—¿Sabes lo afortunado que serás de tener una esposa como yo?—sonrió divertida. Depositó un corto beso a sus labios—Acepto, señor Jeon.

Éste la abrazó levantándola del suelo. YoSun se echó a reír teniendo cuidado con el café en sus manos, el momento tierno se selló con un beso amoroso entre ambos.

JungKook debía admitir que había sido el mejor momento con anillo o sin él.

Este one shot resultó más dulce de lo que esperaba. Lamento la tardanza :'D