JungKook había entregado las fotos a EunHa en la tienda del centro comercial, para mañana por la tarde tenía más trabajo, cuando la noche comenzó a caer YuGyeom le pidió verse una última vez antes de su viaje, habían invitado a Tae, pero éste colocó una excusa para no ir, YuGyeom no necesitaba escucharlo, sabía que su primo estaba molesto. El restaurante de hamburguesas y pizzas estaba lleno, JungKook y YuGyeom habían pedido una pizza grande con algunos ingredientes extras para darle más sabor.

— Creo que es evidente lo mucho que me odia, ¿No es así? —YuGyeom dio un mordisco a su pedazo. JungKook masticó dando un sorbo al refresco en vaso que había pedido.

— Sabes que Tae no te odia y sabes que no pude hacerle decir nada—mintió. Había dado su palabra a Tae que no diría nada—Luego hablaré con él.

Tomó una servilleta limpiando su boca, YuGyeom lo miró con atención queriendo tocar un tema.

— ¿Estuviste con Hwang SooBin? —JungKook rodó los ojos, listo para responder—Estás como Tae, niegan que les gusta alguien.

— ¿Ahora ser amable con nadie significa que es señal de una relación? —preguntó con ironía—Lo de Tae es diferente, él le respondió el beso a su compañera.

— Entonces si esa chica te besa...

— ¿Puedo disfrutar mi pizza en paz y en silencio?

— Tengo curiosidad.

— Lamento no poder calmarlo por ti—dio un mordisco a su pizza. Su celular vibró en la mesa, era un mensaje de SooBin preguntando a qué hora debería estar lista para la boda, YuGyeom sonrió ladinamente y el pelinegro lo notó—No es nada.

— Es ella, mentiroso. ¿Vas a verla?

— No, es...—no debió decirlo—Iremos a una boda. Me ayudará con las fotos.

— El siguiente paso es conocer a tu madre.

"Si supieras"

— Necesitas socializar más, YuGyeom, tu mentalidad es...—chasqueó la lengua respondiendo el mensaje y guardando el teléfono en su bolsillo.

— Lamento lo que dije sobre ella, pero sabes que es verdad, luce mucho mejor que hace seis años.

— ¿Será porque la chica tenía problemas con su peso? SooBin sólo tenía algo de sobrepeso, pero el resto de la escuela se empeñó en decir que estaba obesa.

— ¿Por qué no la defendiste en ese entonces?

A la mente de JungKook vinieron las palabras de SooBin.

"Nunca puedes cambiar la manera de pensar de las personas. He aprendido eso de la peor manera, no tienes que disculparte, no tengo rencor hacia ti"

— Se supone que será la última vez que nos veamos, ¿Podemos hablar de algo que no sea ese tema?

— Está bien—suspiró—¿De qué quieres hablar?

— Tienes que llamar a TaeHyung, de hecho, sería buena idea que fueras a verlo.

— Dijiste que no lograste sacarle nada.

— Y por esa razón deberías ir, despedirte de él al menos.

YuGyeom respiró profundo masticando despacio, JungKook no podía hacer mucho entre ellos, algunas cosas de familia se solucionaban entre familia.

...

Al día siguiente SooBin había ido con Jiwon para ver vestidos aceptables y disponibles para ir a una boda, pues, aunque acompañaría a JungKook no podía asistir con cualquier cosa, además el chico le había pedido ir formal.

— ¿Debería usar blanco? —preguntó viendo las opciones de la tienda.

— ¿Quieres hacerle competencia a la novia? No, necesitas otro color.

— ¿Qué te parece rojo?

— Muy zorra.

— Jiwon—reprochó. La rubia sonrió con inocencia revisando entre la ropa, la tienda estaba llena de trajes y vestidos para eventos, SooBin nunca había asistido a una boda, cuando nació sus padres ya estaban casados, lo que sabía lo había visto en dramas o películas—¿Negro?

— ¿Irás a un funeral?

SooBin rodó los ojos, su amiga estaba siendo muy estricta. De repente Jiwon sonrió ampliamente sacando un vestido rosa pálido, era de cuello alto, la falda caía suelta hasta las rodillas, unos centímetros sobre la rodilla realmente, tenía un delgado cinturón que quedaba perfecto con el vestido, sus mangas eran cortas. En el torso tenía pequeñas florecitas blancas dibujadas.

— Pruébatelo.

— No me gusta mucho.

— Ya, el vestido es muy bonito.

— Lo es, pero...la falda no me...convence—tocó la tela—Además no creo que sea de mi talla—revisó.

— Puede que te quede algo suelto, puede solucionarse.

— Te recuerdo que alquilaremos este vestido, no podemos hacerle arreglos.

— Lo comprarás, jovencita.

— Jiwon, no quiero gastar dinero—le quitó el vestido—Prefiero alquilarlo por esta noche, ¿Podrías respetar eso?

— Sólo si te lo pruebas.

La castaña aceptó complaciéndola.

...

SooBin había recogido su cabello en una coleta no muy baja dejando débiles mechones sueltos, usó unos aretes plateados, faltaba un último detalle. Aquellos zapatos de tacón habían sido un regalo de Jiwon quien dijo no usarlos desde hace un tiempo, eran plateados y quedaban con el estilo del vestido, el problema es que SooBin nunca había aprendido a usarlos. Debería ser natural en ella pues a su parecer la mayoría de las mujeres nacía sabiendo caminar en tacones, no quería hacer el ridículo y caerse frente a JungKook o los invitados.

Un mensaje llegó a su teléfono, su corazón se agitó al leer que JungKook ya estaba abajo. Corrió a su armario revisando la parte baja de éste, tomó unas Converse blancas, su pequeña cartera blanca y su teléfono junto a las llaves del departamento. Por otro lado, Jeon JungKook esperaba en planta baja con un bolso en su hombro, llevaba un traje sin corbata, algunos botones de su pecho estaban sueltos dejando ver parte de su piel, la noche estaba fresca, su cabello iba peinado hacia atrás, sus zapatos brillaban bajo el poste de luz.

Divisó a SooBin salir del edificio, una pequeña sonrisa interna se apoderó de él, SooBin vestía con un vestido rosa pálido, se ajustaba perfectamente a su silueta, lo que más le gustó fue ver que usaba Converse con ese estilo.

— Tranquila, tenemos tiempo aún—dijo algo divertido por su prisa. Soo pasó la cadena delgada del bolso por su hombro guardando su teléfono.

SooBin no llevaba nada de maquillaje y tampoco lo necesitaba según JungKook.

— Lo siento—se disculpó—¿Tienes todo allí? —señaló su bolso. Para Soo el chico se veía más que atractivo con el traje y el piercing en su ceja.

— Así es—asintió—¿Lista para irnos?

— Lista.

...

El taxi los dejó en un vecindario de alta clase, las casas eran más grandes de lo que podían imaginar, SooBin y JungKook llegaron a la fiesta de la boda en el jardín de una casa, había una fuente grande adornada con luces, arbustos llenos de rosas blancas, una mesa larga donde los invitados se servían y pequeñas mesas para que ellos se sentaran. Soo identificó a los novios en su mesa mirarse con ojos dulces y compartir algunas sonrisas, algunos del personal servían las bebidas, a ambos les sirvieron un poco de champaña.

SooBin y JungKook aceptaron las dos copas haciendo un pequeño brindis.

— ¿Qué sueles hacer primero? —preguntó la chica mirándolo.

— Siempre hay un momento donde todos avisan al fotógrafo para capturar momentos con la familia o de los novios, es algo tedioso cuando no se ponen de acuerdo y necesitan más fotos.

— ¿A quién debes avisar que llegaste?

— Mmm...—miró alrededor—Allá está la organizadora de la boda, voy a presentarme, espérame aquí.

Soo lo vio alejarse mientras daba otro sorbo a su copa, la boda era muy lujosa y elegante, el color blanco y plateado abundaba mucho. Algunos se levantaban para ir a bailar un poco, tenían su propio DJ también. SooBin vio como los novios se levantaban para su primer baile como esposos, sonrió dulcemente imaginando a sus padres. Aunque ellos no se casaron por la iglesia, según su padre, su madre fue la novia más hermosa que pudo existir. Usó un vestido sencillo pero blanco para la ceremonia.

JungKook había terminado de hablar con la organizadora, dispuesto a ir donde Soo se detuvo mirándola, veía muy enfocada a los novios con una mirada dulce y una sonrisa del mismo modo. Una vez cerca, ella volteó a verlo.

— ¿Qué te dijo?

— Quiere que capte el baile de los novios, ¿Lista para trabajar, señorita Hwang? —sonrió colgando su cámara del cuello.

— Por esta noche seré tu asistente.

— Eso me gusta.

Con una pequeña sonrisa ambos se pusieron manos a la obra.

Arriba en multimedia tienen una foto del vestido que usó SooBin