Saga Ize-parte 1
Entre la infinidad del basto cosmos, entre el renacer de supernovas y la implosión de cuerpos celestes, entre todo ese desconcierto de muerte inevitable, era que se encontraba lo que aparentaba ser un cuerpo flotante y desgarrado entre sus heridas.
Su apariencia era deplorable, repugnante entre el baño de su sangre, faltándole la mitad derecha de su rostro, conservando solamente su torso y con una expresión ''somnolienta''.
-Ahh... - Entre sus adentros se encontraba lo último que había visto antes de quedar en ese estado, algo que lo traumaría de por vida y marcaría un punto irreversible para su mente, un Saiyajin le había concedido piedad, una piedad que el rechazo y eso mismo lo llevo a quedar atrapado entre la explosión del planeta Namek - Goku... - Susurro con cierto desagrado. En el presente que aireaba su alma, un milagro sería beneficioso para sobrevivir. El no poder respirar no le era un problema, puesto que su raza (Los Demonios del Frío) no necesitaba del oxígeno, como si era requerido para muchas especies.
Entre su expectante deseo de vivir, parece que el capricho del Universo fue actuante, siendo localizado por una nave de grandes amplitudes, solo un rey o emperador podría ser quien la maneje, puesto que su elegancia e imponencia era denotadas entre todos los planetas.
-Señor, lo encontramos... - Hablo lo que parecía ser un subordinado, soldado o simple marioneta, un trabajador entre el miedo y respeto dirigido hacia su rey.
-Muy bien... - Recostado en su trono, con una capa de alteza, era que se podía encontrar (Quien hasta el momento) había sido denominado ''la cúspide de su raza''. Resaltante y extravagante, imponente en su aspecto de soberano, con sus manos cargando más de incontables vidas - Freezer... ¿Como terminaste en un estado tan deplorable? - No le hacía ninguna gracia ver a su hijo (El emperador del Universo) como un simple pedazo de carne vagante en el espacio - Abran una de las compuertas y tráiganlo ante mi - Exigió King Cold, siendo escuchado al instante.
-Co-Como ordene, señor Cold, ¡Rápido, abran las compuertas! - Se apresuro a decir uno de los tantos soldados de Cold, siendo obedecido al instante, logrando rescatar a Freezer antes de que fuera consumido por su propio ego, el mismo que lo llevo a su condición actual.
Los minutos podían sentirse como horas, la ''desesperación'' inundaba la cabeza del ''Demonio primigenio'', no le cabía el hecho de que su hijo terminara de esa forma, aunque ciertamente conocía especies muy poderosas y algunas deidades, bien le había dicho a su hijo que se mantuviera alejado de las mismas. Freezer podría ser un egocéntrico, pero no era estúpido.
Luego de que la espera se hiciera eterna, fue que finalmente ambos quedaron cara a cara.
-¿Quién te hizo esto...? - Le cuestiono su padre, esperaba cualquier respuesta, menos lo que se avecinaba.
-El Super Saiyajin Legendario... Son-Goku... - Tras refutar tales palabras, su consciencia dejo su cuerpo, quedando momentáneamente en ''coma''.
-¿Un Saiyajin...? - No daba crédito a las palabras del ya moribundo Freezer, pensaba que eso era solo una leyenda estúpida que se rumoraba entre esa raza de Monos - ¿Tu qué piensas de todo esto, Lyra? - Se debía aplaudir su calma y percepción, realmente se encontraba tranquilo y analítico, pues una impulsividad sería algo patético y estúpido, más en un momento así.
-No pensé que me notarías... Te felicito eso... - De entre las sombras se hizo presencia una figura encapuchada en un manto de tela marrón.
-Aunque quisiera, sería imposible ignorar tu presencia... - Sus palabras eran la realidad absoluta, esa figura encapuchada liberaba un instinto aterrador y respetable, tal cual una deidad debía hacer - Pero supongo que es normal, ¿Verdad? Ex-Kaioshin del Oeste
-Hmm... - Tras lo dicho, la mencionada procedió a destapar su bello rostro, dejando a relucir su tez blanca, la cual se adornaba entre sus ojos de oscuridad total, bajo el manto de algunos mechones de su lila y albina cabellera - Te lo dije muchas veces, Cold... No te dirijas con este terminó hacía mi... Lyra me es suficiente - Su tono daba a relucir su repulsión hacia la mínima mención de la palabra ''Kaioshin''.
-No es momento de esa llamada de atención... Te hice una pregunta y me gustaría que fuera respondida... ¿Qué piensas ante todo esto? - Volvió a reiterar, aumentando el tono de su voz y dejando relucir su aura de tonos magentas.
-Pff... - Su respuesta fue el simple hecho de limitarse a hacer una expresión de repudio, mientras que estaba ahogada entre sus pensamientos - ¿Son-Goku? Sería muy difícil que Freezer quedará así tras un combate... ¿Acaso ese Saiyajin será tan poderoso? Porque de ser así... - Había llegado a una rápida conclusión, su plan iba perfecto y aunque le repudiaba ver como había quedado su ''hijo'', le debía agradecer el ser tan patético y confiado, eso le daría ventaja - Muy bien, Cold, quiero que escuches atentamente lo que voy a decir, ¿De acuerdo? - Él mencionado asintió levemente, no iba a cuestionarle algo a esa Ex-Diosa - Bien, lo primero será llevar a Freezer a una capsula de recuperación, posiblemente quiera venganza cuando sus heridas ''sanen'', dejaremos que vaya en búsqueda de su ansiado deseo de matar a quien lo dejo así - Todo lo que se mencionó hasta el momento, solo dejaba con más intrigas a King Cold.
-¿Y nosotros iremos con él? - Su pregunta fue recibida por un leve rechazo.
-No, lo mejor es que nos quedemos alejados de esta situación... Tengo otro plan mejor, confía en mí... Si todo esto sale bien, ya no habrá ni una sola Deidad en el Universo que pueda interponerse a nosotros, solo te pido que retengas el tiempo que Ize y Kuriza estarán en estado de hibernación, también me serviría que contactes a Cooler y le cuentes todo lo sucedido... - Tras haber hecho tal petición, se retiró por completo del centro principal de comando, dejando pensativo a la cúspide de los Demonios del Frío.
-Ya veo lo que planeas... Será interesante - Cold se quedó estoico en su posición, esto le podría beneficiar bastante, pues si su teoría era cierta, una vez sus hijos despertarán, lo harían con un poder abrumador, lo suficiente para someter a todo el Universo y a su debido tiempo, se desharía de esa Kaioshin tan molesta.
Mientras esos eran los pensamientos que transcurrían en la mente del ''Gobernante'', los de la Diosa eran muy diferentes, similares, pero diferentes.
-Ize y Kuriza... Se que ustedes serán más dignos de tener el título de ''hijos'', pero no será suficiente, necesito a alguien más... Debo encontrar a Son-Goku... Los Saiyajines son el inicio y la destrucción de todo... - Su pensamiento iba más allá de querer el Universo, ella buscaba acabar por completo con las Deidades y conquistar los Multiversos. Es sorprendente a lo que puede caer una Diosa entre su abandono y desesperación - Escúchenme... - Su paso se había dirigido hasta la sala de las naves, donde se encontraban dos soldados de un rango muy inferior.
-Se-Señorita Lyra, es un gusto tenerla en nuestra presencia - Ambos se apresuraron a hacer una leve reverencia, temían por sus vidas, pues había algo que se rumoraba entre todos los planetas y eso era ''King Cold es muy compasivo, su acompañante encapuchada no lo es''.
-No tengo tiempo para reverencias, solo preparen una nave lo más rápido que puedan y si comentan algo de esto a Cold... Los asesino - No desprendía un aura amenazante, es más, lo dijo todo con una tranquilidad tan relajante que podría congelar la sangre, ''¿Como puede amenazar de muerte con una sonrisa tan dulce?'', era lo que se cuestionaban los soldados, quienes no tardaron en seguir las ordenes de su superior.
ACTUALIDAD (Años 795)
En el planeta Tierra, específicamente en una montaña alejada de toda la sociedad
-Mantengan la calma... - Ordeno un hombre fornido de tez blanca, con un cabello Ónix puntiagudo de peculiar apariencia, pues parecía desafiar las leyes de la gravedad. Su vestimenta consistía en un traje de entrenamiento azul, bastante elástico o al menos así se veía a simple vista, con lo que parecía ser un cinturón marrón enrollado a su cintura.
-Necesitan controlar a la perfección su energía, no se pueden permitir ni un solo desgaste - Su mirada se centraba en dos chicos, siendo los denominados ''Hijos de los guerreros más poderoso'', Goten y Trunks. Dos prodigios con un potencial alucinante, posiblemente una esperanza para todo el Universo en caso de una emergencia.
Ninguno de los mencionados decía palabra alguna. Se encontraban sentados, de piernas cruzadas, mientras sus ojos estaban cerrados y dejaban que la energía fluyera por su cuerpo - La energía se desborda con facilidad, incluso en estado base... Lo que hay que hacer es mantener la energía dentro de uno e ir liberándola poco a poco, en caso de hacer un gasto excesivo... Bueno... - No fue necesario que dijera otra palabra, pues sus ''Discípulos'' asintieron entre su concentración.
Habían pasado aproximadamente 3 años desde que Goku derroto a Lin Shenron con la Genkidama Universal, restaurando la vida en la Tierra y yéndose con Shenlong a un lugar, qué por el momento, es desconocido. La feroz batalla y las consecuencias de la misma provocaron un cambio de mentalidad en los guerreros Z, siendo en Gohan, Goten, Trunks y Pan donde más se vio reflejado, pues sin importar que su nivel era considerable en aquellos momentos, no pudieron hacer nada relevante en lo que sucedía, hasta Vegeta se sentía así, Kakaroto había hecho casi todo.
-Muy bien... - El príncipe Saiyan era testigo de cómo ambos chicos comenzaban a liberar la energía del Super Saiyajin, para absorberla dentro de sus cuerpos, evitando un desgaste, que aunque fuera mínimo, en una batalla podía ser decisivo - ¡Ahora! - Tras recatar su orden, el cabello de los híbridos comenzaba a erizarse con euforia, titilando entre un dorado opaco y sus respectivos Ónix y Lila. Las rocas a sus alrededores eran elevadas por un capo gravitacional que sus propios cuerpos generaban, mientras el suelo era quebrantado y el aire estaba en armonía total - Je... Nada mal - Sonrió el Príncipe, puesto que frente a sus ojos se encontraba la perfección del Super Saiyajin primario, una fase que no necesitaba emitir aura o requería algún tipo de sobreesfuerzo, solo una concentración total y una vez se dominara, acceder a ella sería tan fácil como lanzar una ráfaga de Ki.
-Hmm, no noto mucha diferencia - Comento el menor de los Son, mientras cerraba y abría su mano.
-Digo lo mismo, aunque si se siente más tranquilo, es como si ni nos hubiéramos transformado - Trunks era capaz de sentir como su Ki estaba en completa calma, sin ninguna fluctuación o desgaste presente.
-Insectos, no se nota a simple vista, pero ahora mismo están a un nivel bastante aceptable - Era un cumplido muy gratificante viniendo de alguien tan orgulloso como Vegeta - Pero si aún les quedan dudas - Rápidamente se posiciono en su particular pose de pelea, esa misma que había mostrado contra Kakaroto en su primer y más recordado enfrentamiento - Atáquenme los dos al mismo tiempo, en el momento donde mi pelo cambie de color, perderé - Su sonría era la representación de la confianza que poseía en pensar que ya tenía garantizada la pelea, aun con esa apuesta bastante arriesgada, no mostraba signo de preocupación alguna.
-Es bastante arriesgado, ¿No lo cree, señor Vegeta? - Goten le mostro una sonrisa de arrogancia al más puro estilo de Son-Goku.
-No nos subestimes, padre... - Trunks se mantenía sereno, esperando alguna señal que le diera inicio al combate.
...Crash... - Y el resonar de una piedra fue el inicio...
Goten sería el primero en lanzarse, mientras que parecía ser seguido por la sombra de Trunks, el cuál a simple vista, estaba posicionado en el mismo lugar de hace 5 segundos. El más joven de los Son lanzo el primer golpe, el cual era un derechazo hacia la mejilla del príncipe, algo que fue bloqueado fácilmente por el antebrazo de Vegeta, quien ni se movió ante lo acontecido, contrario al ambiente, el cual resonó y contorsiono por la gran explosión de viento que provoco ese mini impacto.
-¡Sorprendente! - Había cargado una gran parte de su energía en ese golpe y ni había logrado moverlo, pues podía notar como esa expresión de serenidad total no abandonaba su rostro, ni tras haber bloqueado su ataque. Vegeta extendió su mano izquierda hacia adelante, lanzando una pequeña ráfaga de Ki que impactaría contra Trunks.
-¡Ahh...! - Su grito fue acompañado de un leve pensamiento - ¿Cómo pudo sentirme? - Cuando Goten se lanzó al inicio, Trunks disminuyo su poder por completo, dejando una imagen residual en su lugar, siendo solo su velocidad más allá de la luz la que se movía entre la sombra del Son, algo que a su padre no se le paso por alto.
-Así no conseguirán nada - Tras sus palabras, movió levemente el antebrazo con el que bloqueaba al hijo de Goku, generando una presión tan potente que lo mando a volar contra algunos árboles, sin darle oportunidad alguna de recomponerse en el aire - Ni consiguieron moverme...
-Es un poder abrumador - Pensaron los chicos, no habían hecho muchos movimientos, pero con ver que Vegeta se tomaba con total serenidad el poder que poseían en esa fase, supusieron rápidamente que ni en su máximo le harían algo, viéndose en la obligación de pasar al siguiente nivel. Sin mediar palabra alguna, rápidamente comenzaron a liberar un gran cúmulo de energía, la cual era expresada entre potentes rayos que salían de su cuerpo. Una energía peligrosa que se mantenía calma entre sus adentros, usando el mismo método que anteriormente se había usado en el Super Saiyajin, el de mantener la energía dentro de su cuerpo y sacarla lentamente para usar el verdadero poder de dicha fase - ¡Ahhhhhhh! - Tras un grito compartido entre los jóvenes, un gran destello los cubrió por leves segundos, el cuál a dispersarse, dejo la notoriedad que el cambio no había sido mucho, sin contar que sus cabellos estaban más erizados que antes, con un mechón que les resaltaba y un manto de rayos que eran acompañante de tal abrumador poder.
-Ahora no será tan fácil - La arrogancia de Trunks se daba a relucir, mirando a su amigo, él cual asintió para que ambos se lanzaran directamente contra su oponente.
-No sean tan engreídos - Vegeta tenía a los dos chicos frente a él, los cuales comenzaron una avalancha de golpes en perfecta plenitud y armonía, ninguno interrumpía al otro y sus ataques eran simplemente perfectos, yendo solo a los puntos vitales del Saiyan, quien usaba sus dos manos para bloquearlos en completa plenitud - No lo hacen mal - Pensó para sus adentros, estarían muy lejos de su nivel, pero era un inicio decente - ¡Hmm! - Rápidamente tuvo que agachar su torso, sus pensamientos lo habían distraído por un milisegundo, tiempo que fue aprovechado por Trunks para crear una espada de Ki en su mano e intentar cortar a su padre por la mitad.
-Supuse que lo esquivarías, pero... - El simple intercambio de miradas con Goten, era como hablar para ellos, pues el ya mencionado había aprovechado para elevarse hacia el cielo, comenzando a aumentar su poder en lo que solo fueron segundos.
-¡¡AHHHHHHH!! - Un grito que hizo resonar a todo el planeta y la vía láctea era emitido por el Son, quien era rodeado por un brillo enceguecedor para todo ser vivo, inclusive para el príncipe Saiyan, obligándose a entrecerrar sus ojos por un leve momento, el cual aprovecho por su hijo para agarrarlo por detrás y hacerle una llave a sus brazos, ''sometiendo'' al Saiyan e ''impidiéndole moverse'' - ¡Ahhhhhh! - Cuando su despliegue de poder finalizo, se dejó ver como ahora era poseedor una larga cabellera que le llegaba hasta los muslos, mientras los rayos se volvían más agresivos y sus cejas desaparecían entre su frente.
-¡Goten, ahora! - No fue necesario más que eso, para que el nombrado comenzara a cargar él ataque insignia de la escuela de la Tortuga.
-¡Kamehameha! - Anteriormente había posicionado sus manos a un costado de su cintura, concentrando una gran cantidad de energía que era liberada en una esfera azul, la cual lanzo en un potente ataque hacia Trunks y Vegeta, con ese plan tendrían la posibilidad de hacerle algo al Saiyan.
-Je, no fue una mala estrategia - Comento el pelinegro, quien fácilmente pudo liberarse del agarre de Trunks, haciendo que entre en Shock.
-¿¡Co...!? - Antes de poder acabar su pregunta, su padre le dio un leve toque en la frente, destransformándolo al instante y dejándolo en estado de inconsciencia.
-En cuanto a ti - Su mirada volteo levemente al ataque que estaba a centímetros de impactar en su cuerpo, estirando su mano abierta hacia el mismo, lanzando una pequeña esfera qué tras impactar con el Kamehameha, generaría una explosión que arraso con todo a 10 kilómetros del alcance. Era inevitable la formación de una nube de humo, algo bien aprovechado por el Saiyan, quien se posiciono tras las espaldas del Son.
-¿¡Dónde está!? - Se preguntaba Goten, sin percatarse que Vegeta ya estaba tras sus espaldas.
-Sin importar que estén en fase 1, 2 o 3... No son rivales para mi estado base - Esas palabras fueron las últimas que escucho el joven, antes de que sintiera como su cuerpo caía en plena inconsciencia, al mismo tiempo que esa transformación tan fulminante lo abandonaba. Su cuerpo fue atrapado segundos antes de impactar contra el suelo quebrantado de las montañas, siendo arrojado con algo de brusquedad al lado del moribundo Trunks, quien perecía ser el único afectado por la explosión que había ocurrido anteriormente - Bueno, parece que el entrenamiento si les ha servido bastante - Su mirada estaba centrada en los híbridos, los cuales, aunque le costará admitirlo, tenían un poder devastador - A todo esto, me pregunto ¿Cómo le estará yendo a Gohan? - Su expresión de calma fue remplazada instantáneamente por una pensativa, el primogénito del Son era quien tenía el mayor potencial que había visto hasta el momento, si lo aprovechaba de la forma correcta, daría nacimiento a el guerrero más poderoso de todo el Universo.
En lo más alejado del universo, específicamente en el planeta de los Kaioshines
Ciertamente era él planeta más hermoso y maravilloso que él Universo había podido llegar a conocer hasta el momento, estando en los confines más alejados del mismo y creyéndose solo una leyenda que recorría por algunos planetas, una historia contada por gente que era considerada loca, puesto que en ese mismo lugar habitaban, hasta el momento, los dioses con el rango más alto de todos, las entidades o seres divinos de la creación, conocidos como ''Kaioshines''.
-¿Esta seguro que esto funcionara? - Cuestionaba un joven de cabello erizado, quien sorprendentemente era un mortal en reino divino, algo que debía ser inadmisible.
-Confía en mí, una vez este entrenamiento terminé, tú, Gohan... Serás el guerrero más poderoso que el universo haya podido llegar a conocer, aún más de lo que fue tu padre alguna vez - Las palabras del supremo Kaioshin de hace 15 generaciones ocasionaron un semblante bastante serio en el muchacho.
-Entonces no hay tiempo que perder - Ya hacía más de 10 años que no se sentía motivado de ninguna manera para entrenar, pero luego de todas las situaciones que tuvo que enfrentar, de tener que aceptar la cruda realidad de que jamás podría vivir en paz o en completa plenitud de lo que le gustaba y de que su padre ya no estaba para defender la Tierra, es que se resignó a hacerse más fuerte. Pero no era por una razón egoísta o de mera diversión, nada de eso, el odiaba las peleas, siempre las odio y las detestaba con todo su corazón, más si así podía proteger a su familia, entonces lo haría.
Gohan no se equivocaba en lo más mínimo, parecía ser que su Universo se había resignado a no dejar que la paz florezca, era raro, pero se le podría llamar un capricho del destino, o de la misma vida. De cierta forma también era una evolución constante, la energía de los planetas, estrellas, de todos los sistemas, galaxias, inclusive la de cada Sol y Luna existente se tenía que acoplar a los niveles de poder que se desarrollaban, aumentando su resistencia, capacidad y evolucionando de manera magistral, era un balance y desbalance perfecto, como una cadena alimenticia donde todos se brindaban lo que necesitaba y el despertar de otra amenaza, solo era la confirmación de lo ya dicho.
Planeta Freezer N°79
Pese a la caída del Emperador del Mal hace más de 10 años, aún quedaba el mandato del Rey Cold, Lyra, Cooler y próximamente, uno de los 5 hijos de la Ex-Kaioshin.
La elegancia siempre fue referente de esa raza, siendo que ahora mismo nos debemos acontecer en una gran base que ostentaba la forma de un bello palacio de gran vanguardia.
''PIPIPIH PIIIIIH''
Era el chillido que resonaba con eco en la recamará de vigilancia, eso solo podía anunciar una cosa, algo que no se había escuchado desde el nacimiento de Freezer... El despertar de un nuevo demonio del frío, el fin de una hibernación.
-¡Esta señal! ¿¡Podría ser...!? - Claramente eso no tardo en llamar la atención de uno de los miles de soldados que poseía ese imperio, tomando medidas preventivas con desesperación - ¡Este es un mensaje urgente para todas las tropas! ¡El señor Ize está a punto de salir de su hibernación, avisen al señor Cold y a la señorita Lyra! ¡Repito! ¡Está a punto de salir de su hibernación, todas las tropas a sus puestos! - Hablaba con algo de miedo hacia un micrófono que transmitiría el mensaje en todo el cuartel, siendo la reacción de la Kaioshin la que no se hizo esperar.
-Tardo bastante, pero es perfecto... - Comento la susodicha, quien en un pestañar ya se encontraba frente a la capsula de hibernación.
-Se-Señorita Lyra - Se arrodillo uno de los soldados que habían acudido al llamado, siendo ignorado por la Diosa, quien solo veía como se habrían las puertas de la capsula, con una leve sonrisa que adornaba su bello rostro.
-Es un poder increíble... - Ahora si podía sonreír de Orgullo, incluso antes de que saliera, ya era capaz de hacer estremecer a las galaxias cercanas, la sangre de una Kaioshin y un demonio del Frío como lo era Cold, realmente daban muy buen resultado. Cuando las puertas finalmente se terminaron de abrir y el tercer hijo de la Diosa dio paso para que admiraran su apariencia, fue donde recibió el primer saludo de su madre - Hola, hijo, que bueno que despertarás - Su sonrisa remplazaba el gran deseo de maldad que poseía en su interior, observando con orgullo a uno de sus herederos, él cual solo mantenía una expresión fría que hacía temblar a los soldados que se acercado para ver su ''esplendido'' despertar.
-Hola, madre...
Ize, finalmente había despertado, esto solo era el inicio de una nueva amenaza para todo el Universo.
FIN DEL CAP
¿QUE LES PARECIO? ¿LES GUSTO EL INICIO DE ESTA NUEVA HISTORIA? :D
SINCERAMENTE ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO O QUE LO DISFRUTARAN >:3, LA VERDAD ME GUSTO BASTANTE ESCRIBIRLO
ME GUSTARIA ESCUCHAR SI TIENEN UNA SUGERENCIA PARA ESTA HISTORIA Y AUNQUE SE DEJA CLARO EN EL CAP, IGUAL ESPECIFICARE ALGUNAS COSAS
1 - COLD NUNCA FUE A LA TIERRA CON FREEZER
2 - IZE NO ES HIJO DE FREEZER, ES EL TERCER HERMANO, HIJO DE LA SANGRE DE LYRA (La Ex-Kaioshin del Oeste) Y KING COLD.
3 - LYRA SI FUE POR GOKU PARA TOMAR PARTE DE SU SANGRE
4 - NINGUN ACONTECIMIENTO DE SUPER TRANSCURRIO EN ESTE UNIVERSO, SIGUE LA LINEA DE GT, GUIANDOSE POR AF
IGUAL ME PARECE BUENO ACLARAR ESTAS COSAS, ES UN BUEN SEGUIMIENTO >:3
NO SE OLVIDEN DE COMENTAR Y DEJAR SU ESTRELLITA >:3, QUE ENSERIO ME GUSTA LEER SUS COMENTARIOS Y XD, MAYORMENTE SUELEN HABER MUCHAS DROGAS EN MIS HISTORIAS DE DRAGON BALL, PERO LE BAJE A LA DOSIS. SI QUIEREN PEDEN SEGUIRME Y UNIRSE A LA FAMILIA DE PANQUEQUES CON FLAN >:3!!!! SON PANQUEQUES Y FLAN, QUE MÁS QUIEREN?
SIN MÁS QUE DECIR, BYE BYE :3
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