Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Triángulo amoroso.

Como ya era costumbre para mí, estaba buscando a la señorita Dunyarzad, pues si bien mi trabajo es cuidar de ella, ya que por eso me pagan, no está incluido en el contrato ser su niñera.

Buscaba entre las personas del mercado, quizá y por alguna equivocación podría encontrarla, pero no parecía figurar por ningún lado. Cuando me desesperé, fui a buscar en el último rincón que me faltaba, y el mismo era el gran bazar así que ahí debía de estar.

MI responsabilidad es cuidarla, su padre me lo pidió. Pero...las cosas van más allá de eso. No es que lleve mucho tiempo trabajando para ellos, el asunto aquí es que ella es un ser angelical, es una santa en todo el sentido de la palabra. Es amable, linda, solidaria.

Son cualidades de las que yo, en realidad, carezco. Pues hasta yo misma me considero egoísta, ruda, oportunista. Esas son las cualidades que caracterizan a un mercenario, y claramente yo no seré la excepción por ser mujer.

Vengo del desierto, así que sé lo que es una vida dura, y me tuve que formar en un ambiente donde debía aprender a matar o terminaría siendo la presa. Como fuera, una vez llegue al lugar en que sospechaba ella estaría, no me sorprendí de, en efecto, verla ahí.

-¡Señorita Dunyarzad! -Exclamé, no enojada pero sí con autoridad, y ella se puso más blanca que la misma leche, por lo que después la noté nerviosa.

-¡Dehya!

-Es hora de regresar a casa, debe tomar su medicina y, además, su padre no la quiere fuera de casa tan tarde, darán las 8 pronto.

-Vamos, Dehya, no seas tan cuadrada. -Y ahí apareció la mujer que me hace hervir la sangre. -Dunyarzad ya es una adulta, no creo que sea correcto que la limites tanto.

-No es tu asunto, Nilou. Yo solo cumplo mi trabajo, así que déjame hacer lo que me toca. Y señorita Dunyarzad, sino quiere hacerlo por las buenas...lo haré por las malas.

-Dehya, tranquila. Solo estamos hablando sobre la fiesta, ¿qué hay de malo en ello? Aparte, ayudaba a Dunyarzad a probarse vestidos, y también mi corona, la que hice especialmente para parecerme a la reina de las flores.

-¡¿Viste desnuda a la señorita, Nilou?!

-O-oye, no fue precisamente así. -Dunyarzad se sonrojó, yo no pude más con mis celos.

-¡Nos vamos ya!

Tomé a Dunyarzad de la cadera, echándomela al hombro, notoriamente enojada, incluso roja de los celos. Seguramente Nilou le puso sus garras encima a la señorita... ¡inadmisible!

Todos en la calle se nos quedaban viendo, a mí me daba igual, solo cumplo mi trabajo, Nilou trataba de dialogar conmigo, solo que ella tiene la culpa de todo. Si no fuera por ese detalle, hubiera dejado perfectamente a Dunyarzad quedarse un rato más en la plaza, ¡pero sabiendo que Nilou le va a coquetear, no lo permitiré!

Ella también está enamorada de Nilou, y de hecho lo descubrí por accidente, pues me lo dijo mientras platicábamos a la vez que dábamos un paseo por el mercado hacía ya un tiempo.

Lo recuerdo bien. En sus manos llevaba un ramo de rosas de Sumeru, lo que bueno, no tiene nada de malo, al final de cuentas es normal que una mujer tan bella como ella tenga sus pretendientes.

-¿Y eso? ¿Quién te lo dio?

-Fue tu jefa. -Rió. -Dunyarzad me las obsequió debido a que ayudé a vender sus vestidos y joyas para la fiesta. Es tan linda y amable. A veces me dan ganas de comérmela a besos, ¿no te pasa igual? Tú que te la pasas todo el día con ella.

-¿Y-yo? ¿Por qué lo dices? Aparte, tengo claras ordenes que nadie se le acerque, así seas tú. -La miré directamente, enchinándole la mirada. Nilou rió.

-Me da la impresión de que esos son celos más que pasión por tu trabajo. -Siguió con su risa. -¿Te gusta Dunyarzad? Pues en eso nos parecemos, socia, porque a mí me vuelve loca se forma de ser, ella es como una joya de la selva.

-¿Qué? -Sentí que la sangre se me bajó a los pies. -¿Es-estás enamorada de la señorita Dunyarzad?

-Sí, ya te lo dije. ¿Tienes algún problema con eso? Hum, no pensé que fueras homofóbica. Si te ofendí diciendo que también te gustaba ella, lo siento.

-N-no, no es eso. Es que...me agarraste por sorpresa, Nilou.

-Je. Bueno, no quiero interferir con tu trabajo pero...si nos dejas un rato a solas, te puedo dar una compensación, ¿una buena comida y buena bebida en el bar te gusta?

No dije nada, solamente me retiré de prisa, pues fui a buscarla directamente. Me llevé las manos a la frente, sorprendida.

Y así fue, de esos recuerdos amargos que tengo en la mente, Nilou ya había desistido de convencerme de dejarla con la señorita un rato más. Ella me golpeaba la espalda, enojada, pues no es la primera vez que me la llevó a rastras de esta manera.

-¡Dehya, bájame ya, te lo ordeno!

-Señorita, es por su bien y para que su padre no se preocupe, ¿de acuerdo?

-¡Boberías, esto es un abuso! -La bajé justamente como me lo pidió, de ahí trató de correr, yo la tomé de la cadera, pegándola a mi cuerpo para no dejarle escapatoria. Al encontrarse Dunyarzad en esa situación, se sonrojó mucho, por lo que se me hizo tan hermosa, tanto así que me dieron unas ganas de besarla. Pero no, me mantuve con la cabeza fría.

-Es por su seguridad. En la noche es más vulnerable, lleva todo el día en la calle. Si mañana no despierta hasta las 12 del día por la fatiga de hoy, no me sorprendería. No quiero que se lastime, ni que se esfuerce, ¿de acuerdo?

-D-de acuerdo, Dehya...

-Bien... -Al dejar de agarrarla, me mordí el labio para controlar mis deseos de besarla. La volteé a ver, y como tiene un top al estilo de Nilou, me percaté que le dejé las manos marcadas en su piel, lo que me sorprendió...cuando se trata de Dunyarzad, pierdo el control.

Llegando a su casa, su padre nos reprendió a ambas, pues no quise dar el chivatazo de que se me escapó de la vista, pues eso también me afecta mucho. Simplemente apliqué una clásica, ante de entrar, le bajé la cuerda a mi reloj de bolsillo, de ahí que pusiera de pretexto que no supiera la hora y que el tiempo se nos fue volando.

En fin, cuando ella llegó a su cama, ambas dimos una pequeña risita, como es costumbre, y pues sí que se había cansado, la ayudé a quitarse la ropa, aunque siempre he sido respetuosa con ella, pues suelo cubrirme los ojos con una venda para que no haya problema.

Como era de esperarse, Dunyarzad se rió.

-Dehya, ya llevamos un tiempo de conocernos, además de que ambas somos mujeres, no tiene nada de malo que me veas sin ropa, Nilou lo hace. -Me ahogué cuando escuché eso, así que me puse a toser por varios segundos hasta que me recuperé, ella me daba pequeñas palmaditas.

-Con todo respeto, señorita Dunyarzad...pero Nilou me parece una mala influencia para usted. Le sugiero que...mejor no se acerque a ella, ¿de acuerdo?

-Oh, ahora sí me sorprendiste. Juraría que ustedes dos siempre se llevaron bien.

-Hemos tenido un par de desacuerdos. -Dije, quitándome la venda de los ojos, ahora ella estaba vestida con su ropa de noche. -No importa, eso no afectará mi relación con usted, pero le sugiero tome mi consejo. -La ayudé a llevarla a su cama, cargándola de forma nupcial hasta la misma.

-Gracias, Deyha. Perdón por las molestias de hoy, es que estoy muy emocionada por el festival y, honestamente, quiero supervisarlo personalmente.

-Solo dígame a dónde va y con quién. Y así no tendré que repetir la escena de hoy. -Sin pensármelo, le di un beso en la frente, lo que a ella le sonrojó, e igual a yo. -Y-yo, eh-eh, lo siento, ¡no fue intencional! -Me retiré lo más deprisa que pude. Solo escuché una risita suya, yo me coloqué detrás de la puerta al cerrarla, sonrojada y con el corazón latiéndome a pura prisa. -Soy una estúpida...

Se me había salido sin querer, como estaba más concentrada en regañarla, hice lo que mi cuerpo pidió, y menos mal no fue uno en los labios, aunque seguro ahí me hubiera evitado, agh, no lo sé. Prefiero no pensar en ello.

***

Esa Dehya, siempre tan sobreprotectora. Me pregunto qué rencillas tendrá con Nilou como para que quiera prohibirme verla, lo que se me hace particularmente raro.

Las chicas solo quieren divertirse, y también me incluyo. He estado mucho tiempo recluida por mi enfermedad, y ahora que puedo salir y hacer todo aquello que se me estuvo prohibido tanto tiempo, ¿por qué no?

No importa ya en realidad, simplemente apagué la luz de mi cuarto, disponiéndome a dormir, y así lo hubiera hecho...pero un imprevisto me arrebató el sueño.

***

Pasaba por la casa de Dunyarzad, el hecho de que Dehya haya pasado por ella de esa forma tan ruda y grosera me puso un poco de mal humor. Lo digo porque quería pasar más tiempo con ella, y sigo teniendo la impresión de que ella está celosa de mí.

Dehya sabe de mis sentimientos por Dunyarzad, ¿pero por qué ella los negó? Eso es cobardía, y si de verdad amas a una persona, no negarías eso que sientes solo quedar bien ante los otros. Como estaba decidida a tener una buena noche con ella, por lo que, silenciosamente, subí hasta la ventana de su habitación, la que estaba abierta.

Me escabullí lentamente hasta entrar, y al abrir la ventana, tuve el cuidado de no hacer mucho ruido, así como además de ir hasta su cama, tapándole la boca para luego susurrarle.

-Dunyarzad...despierta, vámonos a al gran bazar.

Ella me miró con unos ojos de sorpresa, y cuando le destapé la boca, ella me miró con cuestionamiento.

-¿Estás loca? Me matarán si me descubren.

-¿Quién sospecharía que te escapaste para ir de fiesta?

-... Touché.

Ahora sujetándose de mí, ambas bajamos por donde yo subí, escabulléndonos de inmediato hasta ir a nuestro destino. Ahí todo era diversión, musica y ocio.

Nos servimos una arak, que es una bebida alcohólica de Sumeru, Dunyarzad pareció alarmarse.

-¿Estás segura que es buena idea? El arak es fuerte, y si mañana despierto con resaca, mi padre me matará.

-Take It Easy. -Sonrí. -Solo un poco para entrar en calor.

Ambas nos bebimos nuestro vaso de arak, con ese sería suficiente, pues inmediatamente después de eso, nos fuimos a bailar, o mejor dicho, la lleve a rastras para tal, jeje.

Nos tomábamos de las manos, el baile era animado, y como no es raro, yo me lucía con mis mejores danzas sumeranas (ni idea de si ese es el gentilicio de Sumeru...pero no queda mal xd).

Dunyarzad me aplaudía y trataba de seguirme el ritmo, y cuando me pareció suficiente, me regresé para tomarla de las manos, cortejándola con mi baile (jeje, baile de apareamiento 👀) por lo que ella se sonrojaba de la manera en que unía nuestros cuerpos y mis manos se pasaban por sus caderas.

-¿Ni-Nilou? -Su voz era temblorosa y notoriamente intranquila.

-Shhh, déjate llevar. -Quizá por efectos del alcohol o porque de verdad ya no me pude controlar, le di un beso en los labios, causándole un sonrojo gigantesco, yo solo sonreí mientras lo hacía.

Cerré mis ojos, así que no pude saber más, solo alcancé a ver qué los párpados de Dunyarzad eran inexistentes en esos momentos, la abracé fuerte, incluso tomándola del trasero, pues me sentía sin alguna clase de vergüenza en ese momento.

***

Iba a ir directo al bar para olvidarme de lo que había pasado, aparte un poco de cerveza me vendría bien después de este día tan pesado.

Suspiré pesadamente, pues apenas entré, mis camaradas me notaron bajoneada, así que por lo mismo no me molestaron, e igual el jefe me dio la primera ronda gratis.

Amo a Dunyarzad, pero no tengo el valor de decirle lo que siento por miedo al fracaso, aunque muchos pensarán que es miedo al éxito...de verdad no lo sé.

Éxito, fracaso, ¿Qué más da? La vida es corta, y creo que debo de hacer algo al respecto sino jamás podré quitarme la espina del corazón.

Cómo solo a esta hora hay puestos abiertos en el gran bazar. Fui directamente ahí tras pagar mis cervezas, le compraría las flores más bellas que viera, y se las pondría en un jarrón frente al buró de su cama, y eso sería lo primero que viera.

Al pasar por la puerta, me llevé la sorpresa de que hay fiesta y el ambiente es de lo más alegre. Quizá me compré un arak después de las flores para aprovechar la ocasión.

Vi a Nilou entre la multitud, pero después de notar a Dunyarzad abrí los ojos de sorpresa.

Deyha:

Cuando se abrazaron para bailar, se me fue la sangre a los pies, y peor fue cuando ella se acercó más y más, iba a gritarles para que no sucediera lo que pensé que pasaría, solo que antes de poder hacerlo...Nilou le dio un beso en los labios a Dunyarzad.

Ella tenía los ojos bien abiertos, sorprendida, sonrojada, y luego vi que los cerró con fuerza, tomando a Nilou de los bíceps, que, de hecho, ella se notaba más que feliz, por lo mismo es que trataba de profundizar en el beso, haciendo su cuello incluso para adelante.

Lo vi, sentí mi corazón hecho pedazos, llevándome las manos a la boca, sin poder creer lo que veía.

Las sucias garras de Nilou profanaban el cuerpo de Dunyarzad, quién se notaba estupefacta aparte de todo. Al separarse, ambas me vieron, sorprendiéndose. Dunyarzad se separó rápidamente de Nilou, caminando hacia mí.

-Deyha, te lo puedo explicar, e-esto, aunque no lo parezca, no es lo que piensas.

-L-lo siento, no la interrumpo más, señorita. -Me fui rápidamente, dejándola atrás, y no quise voltear a ver qué pasaba. Escuché que ella me llamaba, seguramente piensa que iré de chivata con sus padres, pero lo que ella haga ya me da un poco igual.

Lo suponía, no tenía oportunidad, traté de mostrar un poco de afecto y todo se fue por la borda. En fin...ya no sé por qué pensé que sí podía lograr algo.

***

Vi cómo Dehya se iba lo más aprisa que podía, y claramente yo, por mi estado de salud, no podía seguirla. Nilou me sujetó de los brazos para que no cayera, de inmediato nos fuimos a sentar. Estaba muy alterada, ella solo me miraba con cierta intranquilidad. Ahora sí estoy en un verdadero problema.

Puede que Dehya, quien sospechaba está enamorada de mí, para desquitarse de esto me acusé con mi padre y...auch, eso sería lo peor, no me volvería a dejar salir en toda mi vida.

Simplemente me levanté, tenía que ir a buscarla, y tengo la leve impresión de dónde puede ser.

-Nilou, ayúdame a llegar a la taberna, pero por favor quédate afuera, no quiero más problemas con Dehya.

-Vamos, olvídala un poco. No creo que le diga nada a tus padres, y si lo planea, mejor compramos su silencio.

-Eres tan maquiavélica, aunque eso es algo que yo misma haría. Hablo en serio, creo que Dehya está enamorada de mí y siento mal por ella, quisiera decirle algo.

-No, en eso estás mal. -Respondió Nilou, alzándose de hombros. -Le pregunté hace tiempo y me dijo que no. Bueno, no me dijo nada, en realidad, es solo que, si de verdad te amara, no te negaría, ¿o sí?

-Sí, eso tiene sentido, pero hay personas a las que les cuesta hablar de sus sentimientos. Quizá ella sea de esas personas. Por favor, Nilou, llévame a la taberna.

-Sigh. Está bien.

Ambas fuimos a la taberna, yo era prácticamente cargada por Nilou, lo que me recuerda a lo de hace rato con Dehya. Íbamos platicando de lo que acababa de pasar entre nosotras, pues no me esperaba para nada el recibir un beso de ella en una situación así. De verdad, hasta el efecto del arak se me bajó de golpe.

-¿Te gustó? Je, je. La verdad es que pienso que soy buena besando, ¿qué opinas tú?

-Y-yo...pues yo, la verdad es que no sabría decírtelo. Me agarraste por sorpresa, mínimo me hubieras dicho.

-Eso le quita la diversión. Al menos sé sincera, si te disgustó, me partirás un poco el corazón, pero así ya sabré que no debo de hacer para evitar molestarte. No es algo que te esté achacando si no te gustó, es solo que...bueno, esperaba que sí te gustara.

-Me siento en duelo. -Le hice una señal de que me bajara. -Nilou, también estoy enamorada de ti, y no niego que me gustó el beso que me diste. Es solo que...mi corazón también le pertenece a Dehya. Por eso no me puedo decidir, sé que, si lo hago, le romperé el corazón a alguna de las dos, y no quiero que se odien entre ustedes, si me odian a mí, me dolerá, pero no importa, no quiero enemistarlas a ustedes.

-Dunyarzad...sí que te lo tenías bien guardado. No te presionaré, elige a quién tú desees, ¿sí? Si no soy yo...no niego que me romperás el corazón, pero nadie muere por eso, ¿lo sabes? No odiaré a Dehya tampoco, respetaré lo que sienta tu corazón. Solo que...antes que nada. -Ella me tomó de las mejillas, sorprendiéndome, aunque claro que lo que hizo después fue darme otro beso en los labios, el que le respondí, pues si será el último, que al menos sea especial para ella.

De ahí mismo que Nilou se emocionara, rompiendo ella el beso a los 20 segundos, sonriendo y regresándome un beso en la frente.

-Suerte con ella. Gracias por esto último, no tenías la necesidad de corresponder. Eres un alma muy noble, Dunyarzad.

-No más que tú, Nilou. -Sonreí, adentrándome a la taberna. Estoy casi que segura que ella estará aquí.

Fui buscando con mi mirada a Dehya, supongo que estará en un rincón obscuro, de todos modos pregunté al cantinero, el que me hizo un gesto de que se llevaba una buena sorpresa.

-¿Qué pasó? ¿Tus padres la despidieron? Se ve mal.

Solo pude sentir cómo mi corazón se hacía pequeño, así que fui a donde el mesero me dijo, viéndola voltear a la pared, recargando su mano en su mejilla, a la vez que también tenía una botella de arak en la mano, la misma llevaría un cuarto, por lo que no había bebido mucho, así que la agarraba en buen estado.

Fui caminando apresuradamente hacía ella, tomándola de un hombro.

-¡Dehya, ¿qué pasó?! No me diste tiempo de explicarte nada.

-¡Largo de aquí! Vete a besuquear con tu noviecita. -Tenía los ojos rojos y llorosos, se nota que estaba mal. -Si vienes burlarte de mí, te romperé en dos aunque mi trabajo sea protegerte. -Le dio un trago a su arak.

-Dehya, relájate. Sé que lo que viste seguramente te lastimó, Nilou me comentó que le dijiste que no sentías nada por mí, ¿es eso verdad? Dímelo, y dime la verdad, de lo contrario no podré estar tranquila.

-¡Te amaba! Ahora ya no...y lo dicho, vete con Nilou si tanto te gusta hablar de ella. Ya no tienes nada que hacer. Y mañana presentaré mi renuncia, no les pienso estorbar.

-¡Por un carajo, Dehya, déjame hablar! -Respondí, enojada. -Ella fue quien lo hizo, pero yo te amo a ti. -Su rostro pasó de enojo y tristeza a uno de asombro, y aquello fue sumamente rápido. -Sí, te amo, me gustas, es que a pesar de tu apariencia y actitud ruda eres linda, amable, tienes un corazón de oro y por eso me enamoré de ti, por lo que eres, por lo que es tu corazón. Sin embargo, también me gusta Nilou, estoy en un duelo por saber a quién le daré mi corazón, y ese beso no terminó de conquistarme, así que...te daría uno a ti, pero sería horrible. -Me reí dulcemente. -Apestas a arak y a Al-Fhaker, (tabaco árabe), eso fue completamente un apagón de pasión.

-Oh...supongo que puede arreglarse. -Se sonrojó, llevándose unas hojas de menta a la boca, masticándolas para ir aliviando ese asunto. -Y-yo...creí que jamás había tenido oportunidad de poder tener tu corazón, y aunque la encrucijada que tienes es en realidad difícil, sé que podré ganar, pues jamás he sido derrotada.

-Vamos, Dehya. Por favor, prométeme algo.

-Sin problemas.

-Si Nilou se queda con mi corazón...no la odies, y tampoco le guardes rencor de ninguna manera. Y no me odies a mí, ya me demostraste que, con el corazón roto, eres capaz de mucho.

-De verdad lo siento. No sabía muy bien qué hacer. Soy un poco torpe, de verdad haría lo que fuera por ayudarte, no para perjudicarte.

-Demuéstramelo con acciones, Dehya. No con palabras, al igual que tu amor.

-Oh...esa parte quizá se me da un poco mejor. -Se sonrojó, llevándose una servilleta a la boca. Posteriormente, me abrazó, y como ella es bastante fuerte, me abrazó de una manera tal que me dificultaba la respiración.

-Deh-Dehya...me estás ahogando.

-Y apenas vamos comenzando. -Seguidamente me dio un beso en los labios, uno con mucha pasión y claramente bastante amor, por lo que lo sentí auténticamente como algo maravilloso, el que sus manos acariciaran mi espalda, el que sus labios se rosaran suavemente con los míos, y más que eso...el latir de su corazón.

Era mejor de lo que me lo imaginaba, más animado, con la fuerza misma de Deyha, pero a la vez su dulzura y su tranquilidad. Abrí un poco los ojos, decir que está sonrojada es poco. Y ella misma me lo ha dicho, que se sonroja fácilmente, ¿quién lo pensaría de ella? 

Yo me abracé igualmente a ella, con las pocas fuerzas que tengo, pero seguramente servirán de algo, y más que nada por el asunto de que su sensibilidad es tan grande como su fuerza.

Solo nos separamos porque me comencé a sentir un poco débil, las emociones fuertes me ponen así, no creí que esta sería una de ellas. Solo sonreí alegremente.

-No conozco casi nada del mundo exterior, pero con ese beso tuyo descubrí hasta las ciudades perdidas que hay en el planeta.

-Se-señorita Dunyarzad...qué hermosas palabras. Le agradezco eternamente la oportunidad y...espero pueda haber encendido su corazón. Porque el mío sí. No lo digo para mortificarla o algo así. Simple y llanamente, ahora la amo más que nunca. 

-Hasta la más ruda de las mercenarias tiene un corazón de poetiza. Si me escribes poemas que salgan de aquí. -Toqué su tórax con mi dedo índice. -Quizá ese fuego pueda nacer en mí. Pero...las danzas de Nilou...esas me vuelven loca. -Me sonrojé, ella rió.

-Lo que sea necesario para poder tener feliz a mi ama. -Tomó mi mano para agacharse y tocarla con su frente en señal de respeto. -Gracias de nuevo...no la negaré nunca más. Yo la amo a usted, señorita Dunyarzad.

-Y yo a ti, Dehya... -La abracé ahora, dándole un pequeño beso en los labios. -Llévame a mi casa, por favor. Ahora estoy más que agotada. 

Al salir de bar, nos percatamos que Nilou estaba esperando afuera del bar, al vernos, vino caminando directamente hacía nosotras. Noté que Dehya inmediatamente le enchinó la mirada, pero de un pellizco le recordé la promesa que me hizo.

-Pensé que estarías muy ebria para llevar a Dunyarzad a casa. Por eso me quede. 

-No te preocupes, yo la puedo llevar sola. -Dehya me cargó de forma nupcial. 

-Vamos, si la cargas así la lastimaras, solo deja que se apoye de tus hombros. -Nilou la obligó a bajarme. 

-¿Por qué no mejor me acompañan ambas?

-Esa es una buena idea...¿por qué no se te ocurrió antes, Nilou?

-Lo mismo te digo...Dehya.

-Touché...como sea...señorita Dunyarzad, ¿necesita algo? -Dehya me abrazó, colocando su mano izquierda en mi hombro derecho.

-¿Necesitas de alguna cosa? -Ahora Nilou me abrazó por la espalda, tomando mi hombro izquierdo con su mano derecha. 

-¿Are? -Me comencé a sonrojar al sentir el cuerpo de mis dos amores pegarse al mío, aparte de hacer un buen contacto con ellas.

Ahora es la parte donde me pregunto, ¿cómo diablos me metí en esto? Pero eso es lo de menos...la verdadera pregunta es, ¿y cómo rayos salgo?

______________________________________

Joder, vaya triángulo amoroso nos dejan caer en la presentación de Sumeru JAJAJA
Dunyarzad es un pan de dios uwu no me sorprende que la mamasota de Dehya tenga tensión amorosa con ella, es que no manchen, hasta se sonroja :0 y luego luego se le ve que es una simp :v

Yo siento que Dunyarzad está enamorada de Nilou, así que la teoría dice que Nilou está enamorada de Dehya...vaya lío JAJAJA

En fin, esas son supocisiones mías, ya veremos qué tal pasa en la siguiente actualización, esperemos que Dunyarzad no haya hecho debut y despedida

Nos vemos uwu

Siempre tuyo:

-Arturo Reyes.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro