Secretaria de la reina, acto 2.
Hice lo que me pidió, y de inmediato supe que sería un beso, es algo obvio. El ambiente es excelente para que así sea, y realmente será un lindo detalle, por lo que no podía soportar una sonrisa, esperando sus labios...pero iban pasando los segundos y nada llegaba.
-Ábrelos. –Ok...eso no me lo esperaba en lo absoluto. Al hacerlo, frente a mis ojos Ninguang sostenía un pequeño dije que tenía la forma del elemento geo, así que igual me sorprendió. –Es de oro, pruébatelo, se te verá lindo.
-No me lo esperaba, en realidad. –Dije, asombrada. Y sí, yo esperaba un beso y recibo un dije de oro...no negaré que me siento un poquito decepcionada aunque, en realidad, no debería porque esto es más valioso.
-¿Qué esperabas entonces, querida? –Rió.
-Y-yo...hem...no lo sé, no tenía una idea concreta.
-¿De verdad? Tu cara me decía otra cosa, gesticulas mucho cuando de gestos se trata. –Malamente se dio cuenta de mi emoción de recibir un beso suyo. –Como sea, déjame ponértelo, seguramente se te verá hermoso.
-Gracias por el detalle, y en cuanto llegue a casa me veré en el espejo para darme cuenta de cómo me veo.
Ella se acercó a mí, sentándose a mí lado para ponerme el dije, lo que no tardó más de tres segundos, y apenas lo hizo, la volteé a ver. Curiosamente, y sin esperármelo, Ninguang me sujetó de las mejillas, acercándome a ella para robarme un beso, lo que me erizó todos los cabellos, abrí los ojos y casi sentí cómo es que me robaba el alma por los labios.
Sin embargo, tras la sorpresa inicial, también di el ritmo, así que la tomé de la cintura, apretándola con un poquito de fuerza, y ella me tomó por detrás de la cabeza, así que sentíamos nuestras respiraciones, y no nos detuvimos ahí, ya que el beso se hizo más y más profundo hasta que caímos en uno de los asientos del bote, el cual se mecía suavemente, alejándose más de la costa.
Ella se quitó la ropa superior, tomando mi cabeza para llevar mis labios a sus senos, así que comencé a lamer los mismos, por lo que ella gemía de forma excitada.
Su mano pasó a mi entrepierna, acariciando con una enorme suavidad mi gruta de mujer, sacándome gemidos de igual manera.
Nunca pensé que perdería la virginidad en un bote en mitad de la noche con la mujer más rica y poderosa de Liyue...pero así fue, ¿y saben una cosa? Fue completamente mágico.
Comenzaré diciendo que lo primero que hicimos fue más o menos comenzar con besos tímidos después de esa locura de beso que nos dimos, pues iríamos con un poco de calma, estamos en u bote, no nos podemos permitir tanto en este lugar.
Lo que sí es que le empecé a hacer chupetones arriba de los senos, escuchando sus gemidos suaves en mi oído, y seguidamente, al levantarme de esa posición, yo me bajé el vestido, quedando también desnuda del torso, Ninguang me tomó de los senos, tanteándolos, como si jugara con ellos. Claro que en comparación de los suyos...los míos son más bien humildes.
-Son lindos, me gustan mucho tus pezones. –Siguió manoseándolos, pero no de una forma vulgar, sino linda y con cuidado, repito, como si los estuviera tanteando o queriendo probar, más que nada.
Por la forma en que lo hacía, no dudo que ella sepa en dónde tocarme para que sea mejor, y es que justamente comencé a gemir un poco, sintiendo cosas que nunca antes sí, lo que era especialmente curioso.
-Aquí la pregunta es...¿y quién se divertirá primero?
-Yo te sirvo a ti, al final de cuentas. –Fue lo que le respondí. –Pe-pero no sé cómo hacerlo...
-Awww, qué ternura, ¿es tu primera vez? Bien, te enseñaré a cómo hacerme el amor, tienes suerte de que no soy muy especial con eso. –Me guiñó un ojo.
Ella se colocó muy cerca de mí, dejándome sus senos a la altura de la cara, por lo que los tomé y comencé a lamer, eso en realidad no tenía nada de raro, pero la cosa se puso buena para mí cuando sentí como es que sus manos se iban metiendo por debajo de mi falda, más precisamente escalando por debajo de mi ropa interior, y apenas sentí sus dedos en mi clítoris, sentí que la cosa se pondría mejor todavía.
Por lo mismo que jugó con mis senos, estaba un poco húmeda, pero el estar besando sus senos, además de sentir sus suaves manos en mi piel, en realidad no pudo más que mejorar, así que dejé de centrarme en besarle el cuerpo, pues estaba gimiendo al sentir sus dedos tocar mi intimidad.
Movía sus dedos índice y corazón de adentro hacia afuera, metiéndolos de una forma que, evidentemente, me tocaban mi punto especial, pero es que ella lo hacía de manera que simplemente perdía la cabeza, además de que comenzó a besarme el cuello, lo que solo mejoró la situación.
Lo hacía de forma muy exterior, cuando sus dedos se metieran de lleno, la cosa se pondría perfecta, pero no era la situación. Sin que yo me lo esperara, ella se arrodilló en el bote, más que nada en la zona donde se ponen los pies, y de inmediato Ninguang me abrió las piernas, lo que me sacó un gesto de sorpresa, acto seguido, llevó sus labios a mi intimidad.
-Buen provechó. –Rió con gracia, para darle una buena lamida a mi υαgiηα en general, introduciendo su lengua en la misma sin miramiento alguno, y cuando alcanzó ese punto especial, lo empezó a lamer en círculos con la punta de su lengua.
Todo el cuerpo me temblaba, era algo magnifico, nunca en mi vida había sentido algo así, y es que para ser mi primera vez, sin duda estoy recibiendo más de lo que mi cuerpo acepta, por eso de que...no tengo tolerancia alguna, por lo mismo es que acabé rápido, y ella se dio cuenta al escuchar mis gemidos que parecían más como si ya no pudiera más de reír.
-No creas que hemos acabado, eh. –Me avisó, pues siguió lamiéndome, sujetando bien mis piernas, aunque por lo mismo de mi orgasmos, éstas apretaban su cabeza, seguramente lo suficientemente fuerte como para que ella apenas escuchara mis gemidos.
Su lengua se fue introduciendo más y más en mi interior, alcanzando la zona más especial, esa que está adentro, ya de mí, y sorpresivamente la seguía lamiendo de forma muy buena, ahora me tomaba de la cintura, el movimiento que hacía su lengua lo definiré que lo hacía como si se relamiera en su totalidad los labios, así es que se movía, y eso dentro de mi vagina, evidentemente me ponía como loca.
Podía sentir la saliva mezclada con los líquidos que salían de mi interior deslizarse por mis muslos hasta llegar a la madera del asiento donde me encontraba, vaya que la lengua de Ninguang es bastante resistente, ya lleva su rato haciendo esto.
Cuando terminó, simplemente tragó saliva, limpiándose los labios con la mano, sonriendo de manera satisfecha, pero no creo que ella ya haya quedado satisfecha de mí. No me equivoqué, pues me bajó la ropa interior para tener vía libre a mi intimidad. (en este párrafo en particular llegamos a las 200 mil palabras dentro del fic, al menos en cuanto a historia escrita se refiere...vaya que he escrito mucho y todavía me queda una santa barbaridad de ships que escribir, si lo ponemos en perspectiva, eso equivale a más o menos Harry Potter y el cáliz de fuego, 32 mil palabras más que El retorno del Rey)
Ambas quedamos recostadas en el bote, más que nada era a lo largo, pues el mismo era considerablemente ancho y nos permitía acostarnos de lado, de ahí que de inmediato, ella llevara sus dedos corazón y anular dentro de mi vagina, comenzando la faena que, sin duda, comenzaría bien para mí, más que nada lo digo por el hecho de que estaba completamente mojada por dentro, así que los mismos se deslizaban por todo lo profundo de mi interior.
Sus dedos llegaban a esa zona tan en especial que no podía terminar de gemir mientras ella hiciera ese movimiento, y cada vez los comenzó a meter más adentro, ambas nos besamos, eso fue lo único que me calló, pues de ahí en fuera nada lo haría, apretaba con fuerza mis ojos cada que sentía que el cuerpo me dejaba de responder solo para que comenzara a sentir un calor en mi entrepierna.
-Tus gemidos me provocan mucho, Lumine. No tienes una idea de lo feliz que me hace que sea yo la que te hace gemir por primera vez.
-E-estoy tomando notas mentales de cómo lo hace...pe-pero mi mente se pone blanco en situaciones...
-¿Cómo esta? –Preguntó ella, traviesa, tocándome el punto g, de ahí que mis gemidos se hicieran más intensos.
Yo, como pude, le dije que sí, moviendo mi cabeza, pero estoy casi convencida de que estaré haciendo gestos obscenos, por la clara razón de que estoy a nada de tener otro orgasmo causado por Ninguang, la que parecía disfrutar de tenerme, literalmente, en la palma de su mano.
Tras recuperarme, llegó el momento de cambiar la situación, y lo mismo es que ahora quien se sentó en el bote fue Ninguang, abriendo las piernas para tomarme de la cabeza con delicadeza, razón por la cual empecé a lamerle justo como ella lo hizo, aunque claro, con mi toque personal.
Movería la lengua como ella me pidiera, le acariciaba los muslos y también le tomaba el trasero con mis manos, pues es bastante voluminoso, y el que yo la tocara me doy cuenta que le excita bastante.
-Lu-Lumine... -Gimió, apretándome un poco la cabeza. –Aprendiste bien.
Seguí lamiéndole ese punto en específico, el sabor no es para nada desagradable, lo que me indica una buena alimentación, pero esos son asuntos demasiado personales para ella, no viene al caso, razón por la cual seguí con mi movida, ahora adentrando mi lengua en su interior.
La humedad escurría literalmente hacía mi lengua y bajaba por la misma, al menos yo tengo una lengua redonda y no afilada como la suya, por eso mismo es que si lamia en el interior, más que llegar profundo, abarcaba una zona considerable, lo que se vio plasmado de forma clara en el temblor de sus piernas.
El bote se perdía a la deriva mientras podía ver cómo es que ella curveaba su espalda para atrás, tirando su cabeza hacía la misma dirección, mirando las estrellas y la luna presentes en esa situación, y no puedo quejarme de eso, pues sus senos se miraban preciosos, como si fueran dos pequeñas estrellas en el basto cielo de su piel, la que quería besar y morder por lo suave que me parece.
Sin embargo, sus manos me amarraban a esa posición, yo daba lo que podía, lamiendo como me era posible ya fuera su punto especial o su interior, y fue que, tras hacerla llegar al orgasmo, escuché sus bellos gemidos, que eran una cosa maravillosa en su totalidad.
Yo, por excitarme al escuchar sus gemidos, comencé a masturbarme de forma tranquila y sin prisas, cuando Ninguang se dio cuenta de ello, no soportó una pequeña risa.
-Me doy cuenta que también sigues queriendo más a pesar de todo lo que te di. No te preocupes, todavía falta lo mejor, querida.
Cuando ella se enfadó de que yo le hiciera sexo oral, lo que se le ocurrió fue tomarme de la cabeza para indicarme que parara, y seguidamente de eso, nos comenzamos a besar con bastante pasión, tocándonos el cuerpo, desde la cintura hasta los muslos, o también los hombros y la espalda, su piel era como de seda, lo que me prendía bastante, especialmente por el hecho de que se nota el olor de su colonia, y es un olor que me embriaga de ganas de hacer el amor con ella.
Arrodilladas en el bote encima de nuestras ropas para no lastimarnos las rodillas, nos veíamos a los ojos, frente a frente, introduciendo nuestros dedos en nuestras υαgiηαs, naturalmente, continuando con el beso que teníamos, así como los toqueteos que no faltaban y que eran exquisitos ya que si es que ella me tocaba en una parte sensible para mí, continuaba el juego al verme sumisa.
Al dar un gemido, me incliné un poco hacia ella, sus dedos salieron de mí, pero los volvió a introducir de forma lenta, tocando con más ahínco mi espalda, que es un punto donde me siento muy sensible, y así es que, al besarme en el cuello, yo solo torcía los ojos del placer, mordiéndole suavemente el hombro por lo excitada que estaba, y esa mordida se hizo más fuerte conforme llegaba al orgasmo, al pasar, quedé temblando como el bote mismo.
-Mi niña, y pensar que era yo la que tenía que quedar complacida, no te preocupes, el verte así me llena de alegría como no te haces una idea.
-To-todavía no acabamos, Ninguang. –Reté con la voz temblorosa, seguí mi juego, quería terminar de complacerla aunque sé que no lo he hecho nada mal, pero no quería disfrutar más que ella, deseaba la igualdad en ese sentido.
Continuando, le besé el cuello, apreté su trasero y moví mis dedos así como ella lo hizo hace un rato, quería complacerla lo más que pudiera, y por suerte para mí, ella parecía dispuesta a lo mismo de manera exacta, así que al no ser tan renuente, lo fui logrando poco a poco, pero tenía que trabajar bastante.
Al llegar a un punto de no retorno, Ninguang aferró sus dos manos a mis hombros, gimiendo en mi oreja, de ahí que con mayor razón quisiera continuar, todavía faltaba para llegar al momento pico, eso lo puedo sentir, pero de cualquier manera voy bien, lo sé.
-Va-vaya que eres buena en esto, ¿no mientes al decirme que es tu primera vez? –Me preguntó.
-No te miento, es la verdad. –Ella no dejaba de dedearme, pero me centraba más en complacerla a ella que en disfrutar el placer que, sin duda, sus dedos me causan en mi interior.
Tuve una mejor idea y usé mi mano libre para tomar uno de sus senos y tomarlo con delicadeza, apretando su pezón como yo sabía que era placentero para ella, y bingo, sus gemidos fueron a la alza, así como además, su cuerpo empezó a temblarle del placer.
Llegado el momento cumbre después de que la manoseé de esa forma, ella solo me apretó los hombros con un poco de fuerza, gimiendo con desesperación, como si estuviera siendo...no sé, pero de verdad pensé que se ahogaría por tantos gemidos.
-Mu-muy bien...hice a una buena aprendiz. –Ella me tumbó en la barca, la que se meció con suavidad, podía ver la ciudad, y el plano que pasó por mis ojos fue maravilloso.
La silueta de Ninguang se obscurecía un poco por las luces de la ciudad en la lejanía, así como las estrellas se veían perfectamente en el cielo, y su cuerpo desnudo era lo primero que veían mis ojos.
Ella empezó a mover su cadera de forma delicada de arriba para abajo, nuestros clítoris se golpeaban mutuamente, de ahí que ambas gimiéramos muy bien y a buen volumen, al ser ella la activa, me tomaba de las manos, de las cuales se sujetaba para no caerse hacía el suelo de la barca.
La forma en que se movía empezó a subir de velocidad y de ritmo, naturalmente, de ahí que nuestros puntos especiales se golpearan más seguido y de forma más exquisita, nuestros líquidos funcionaban de manera ideal como lubricante y, por lo mismo, nuestras intimidades resbalaban de forma sencilla.
Podía ver su cara de gusto en sus labios, especialmente, pero en sí todo indicaba que nos estaba encantando ese momento y con creces, pues era excelente, y no nos hartábamos. Mis mejillas estaban igual de rojas que las suyas, el placer nos las puso así.
Su mano apretaba uno de mis muslos, lo que me enloquecía de igual manera, que me apriete la piel, sentir sus manos recorrerme, seguramente digo todo esto por el hecho de que estoy excitadísima, ¿pero cómo no estarlo? Solo me quedaba gemir en ese momento.
La siguiente posición que tomamos fue parecida, ella se hincó sobre nuestras ropas, tomando mi pierna para alzarla un poquito, comenzando a rozar nuestros clítoris al moverse arriba y abajo, yo me llevé las manos a los ojos, apretando los mismos por el enorme placer que sentía, y de hecho estaba segura que no faltaría mucho para que una de las dos se viniera.
Sorpresivamente para mí, fue ella, noté que se contraría, especialmente de su abdomen, babeando un poco para seguir en ese bucle donde nuestras intimidades se frotaban, y al sentir un líquido derramándose, finalmente pude lograr mi cometido: hacer que se viniera como los arcontes mandan.
Ninguang tomó uno de mis senos y lo apretó con cierta rudeza, limpiándose la saliva de su boca, gimiendo a volumen alto para seguir en ese loco movimiento que nos estaba zafando un tornillo por lo rico que era.
Cuando finalmente me vine yo, apreté su brazo, gimiendo con la poca energía que me quedaba, ella se recostó junto a mí, besándome con un poco de intensidad.
-Vayamos a mi palacio, esto no puede acabar así.
-Hecho. –Le dije sin pensarlo, y acomodando nuestras ropas y cabello, (que por cierto era un desastre), para irnos de regreso al puerto, donde le dimos las gracias a la persona que rentaba los botes...me pregunto qué pensará cuando vea manchas en el mismo, seguro creerá que es agua...pero no lo es.
En fin, ya había perdido mi virginidad y fue en ese bote después de una cita romántica con Ninguang...ok, yo reconozco que no pudo ser mejor, y apenas llegamos a su casa, pasamos de sus sirvientas y de inmediato nos metimos a su cuarto, donde, en una cama y de forma ya más cómoda, seguimos haciendo el amor hasta que tuvimos más que suficiente.
Al día siguiente, amanecía con un poco de dolor en el cuerpo, nada del otro mundo, pero eso sí, estaba desnuda, sin ella a mi lado, me pregunté por qué se había levantado tan temprano. Me vestí y tomé rumbo fuera del cuarto, y entre los pasillos la vi, despeinada, en bata, con algunos papeles en sus manos así como una taza de té caliente, pero en una bandeja tenía otra taza además de un plato de fruta picada.
-Oh, veo que despertaste. Me hubiera gustado despertarte yo y llevarte el desayuno en la cama...pero como ves, el mismo trabajo me lo impidió, como no es raro en mi agenda, siempre estoy muy atareada, incluso desde antes de despertar ya hay deberes ocupándome.
-No te preocupes, Ninguang, está bien. –Fui y la abracé por la espalda, dándole un beso en el hombro para, posteriormente, pegarme a ella.
-Lo de anoche fue...muy lindo. Quisiera repetir la ocasión pero, por ahora. –Ella me ofreció la bandeja. –A desayunar, puede ser incluso en la cama si quieres.
-Y-yo...en realidad no lo sé. –Ella me tomó de la mejilla y me dio un pequeño beso.
–Relájate, te veo muy nerviosa...vamos a desayunar, la verdad es que en la cama me gusta bastante porque después no tocaré la misma hasta la media noche. –Me tomó de la mano para ir caminando de regreso a su habitación donde nos recostamos a desayunar, una al lado de la otra...su colchón vaya que es muy grande, de ahí que no hubiera problema para ello en lo más mínimo.
La verdad es que todo eso me resultó exquisito, y al llegar el momento de despedirnos, pues ella tenía trabajo por hacer y yo también lo mío propio, nos quedamos en la puerta de su habitación, abrazándonos.
-Creo que no te lo dije pero...muchas gracias por lo de ayer, Lumine. Fue maravilloso, y no me refiero a lo que pasó en el bote, sino en general a todo, a la cena, al poema...quisiera volver a hacerlo, cuando tenga tiempo, no lo dudes ni un solo segundo.
-No hay de qué...estoy para servirle a la reina. –Le di un beso en el dorso de la mano, haciendo una pequeña reverencia para, posteriormente, besar sus labios.
-Nos vemos, pequeña traviesa... -Rió.
-Más pronto de lo que piensas...
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Jeje, esta vez no me tarde prácticamente nada en darle continuidad a este ship que quedó bien intenso jsjsjs les dije que se los traería pronto y cumplí...porque en realidad nadie me dio sugerencias para el lemmon de esta semana, y si lo hizo, se me olvidó :V
Bueno, a lo hecho, pecho xd, esta pareja la visualizo así, una Ninguang ya experimentada y madura que guía a Lumine en el setzo, y además, que también le enseña a cómo hacerlo, y con quién tiene sus primeros contactos físicos de ese tipo uwu
Yo sé que a los que se quedaron con el hype de la vez pasada quedaron convencidos y gustosos del lemmon, espero no le haya faltado nada, tal vez fue un poco corto el cap, pero tengan en cuenta que en su totalidad fue lemmon, no había mucho por contar, y tengamos en cuenta que ya estaba la parte anterior.
Yo me despido, nos vemos la próxima semana con un ship muy raro, pero que se me hace lindo y que ya me pidieron...espero que quien me lo pidió siga leyendo la historia porque no he visto sus comentarios :'v por cierto, el ship es un VenLisa, o sea VentixLisa...por alguna extraña razón los shipean, he visto imágenes de ellos y se me hacen lindos uwu
Siempre tuyo:
-Arturo Reyes.
PD: Ayyyyy cabrón, el vicepresidente de Cuba me mando solicitud en Facebook, la cuenta no es fake, esto es lo más raro que me ha pasado en la vida!
PD de la PD: Uff, mi Eula bb va a aparecer de nuevo uwu la sigo amando como desde la primera vez que la vi, ojalá los que se quedaron con ganas de tenerla ahora sí les salga, les deseo bendiciones uwu. Ok...ahora temo por su vida y por la de Albedo, el juego se volvió seinen de golpe! D:
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