Entre broma y broma...
Eula vino a casa al tiro 78 :3 de cualquier forma ya la tenía asegurada y ahorré para ella desde que me salió Rosaria, tenía todo preparado. Gracias por sus buenos deseos uwu.
Ahora sí, la historia:
Serían más o menos las nueve de la noche, corría a toda prisa, ya se acercaba la hora y no podía retrasarme ni un solo momento ya que, de lo contrario, tendría que esperar más tiempo, y me sentía tan desesperada que no podría lograrlo.
Era la segunda cosa más importante del día que debía hacer, no tenía que faltar ni por error, y conforme me fui acercando al lugar donde tenía esa cita, me iba tranquilizando. Ya no llegaría tarde.
He esperado tanto por este momento del día, nada puede arruinarlo o me enojaré mucho, ni siquiera le presté atención a Qiqi, me di cuenta que, apenas pasé, ella se escondió rápidamente, enchinando los ojos, pero ella no era mi prioridad por ahora, lo será mañana por la mañana.
Llegando a la calle que da para el muelle, sonreí, todo el barrio olía delicioso, como no podía ser de otra manera, y ahí fui bajando mi velocidad, no solamente para tomar aire y limpiarme el sudor, sino más que nada para ser silenciosa.
Estando ya cerca del restaurante del chef Mao, sonreí, tirando a propósito una piedra, la que me aseguré que hiciera ruido suficiente, era en la parte obscura de esa calle.
-¿Hum? ¿Gouba? ¿Qué haces afuera? –Dijo una voz muy en particular, ahí reí a muy bajo volumen, así que en cuanto la persona dueña de esa voz se asomó para ver qué pasaba, yo salí de mi escondite justamente para tomarla de la cadera.
-¡Bu! –Ante aquellas dos letras que exclamé, lo que siguió fue un grito de espanto que se escuchó por toda la calle, seguramente hasta el muelle, así que evidentemente me comencé a carcajear a todo pulmón, poniéndome roja de la cara.
-¡Hu Tao! –Xiangling se veía muy enojada, aparte de que iba recuperando el color de su piel, así como se secaba unas pequeñas lágrimas. –¡Debí sospechar que eras tú! ¡Te juro que algún día dejarás de asustarme de esa forma tan vil!
-Ay, a otro perro con ese hueso. –Tomé aire para después arreglarme el sombrero. –Eres super asustadiza, y eso es lo que más me gusta de ti, je, je.
-¡Hum! Al menos esta vez no me agarraste el trasero. –Ella se llevó las manos al mismo, yo me reí un poquito.
-No sé si te asusta más que te tome de la cintura o del trasero, la primera vez que lo hice me diste una bofetada pensando que fue un cliente.
-¡Lo tenías merecido! ¡Y como sea, tengo cosas que hacer, no me distraigas! –Ella se fue refunfuñando, yo reí nuevamente, simplemente para seguirla de cerca.
Le pedí disculpas tras darle algunos chiles que había recolectado mientras caminaba por las montañas para despejarme un poco del trabajo, eso la hizo relajarse un poco, por lo que, inmediatamente después de ese altercado, ella volvió a su estado de ánimo normal, preparando comida y sirviendo platos, siempre con esa sonrisa tan linda que tiene.
Justamente me encontraba recargada en la barra viendo cómo es que ella se apresuraba a ir de aquí para allá, siempre sonriendo, otras mostrándose más bien concentrada, y lo que más le veía, además de su sonrisa, eran sus piernas, las que son largas y torneadas.
Suspiré de una forma que pasara por un suspiro de cansancio, pero era por aquella chica tan bella que tenía ante mis ojos. Lo más divertido de asustarla, además de su expresión, es que se enoja, y me parece tan bonita cuando se enoja.
Sirviéndome mi plato, me dedicó una sonrisa a boca abierta, ya no quedaban muchos clientes.
-Chef, podría hacerme un favor.
-Dígame, directora.
-¿Podría darle un descanso a Xiangling? Quisiera platicar un rato con ella.
-Ya son casi las 10, no hay muchos clientes ya así que...de acuerdo.
Ambas nos sentamos en el techo del restaurante viendo las estrellas, yo me tomaba mi caldito picante en un vaso de cerámica, así que lo disfrutaba enormemente.
-¿Qué querías decirme?
-Discúlpame por lo de hace rato.
-No te preocupes, ya lo hiciste. Aparte esos chiles ya no están frescos, pueden servir para molerlos y hacer polvo picante, ese condimento es mi favorito.
-Por eso mismo los escogí lo más viejos que pude. Los vi y pensé en ti, que seguramente te gustarían.
-Acertaste bien. –Ambas reímos un rato, quedando en silencio.
Yo tomé de mi caldito y, tras acabármelo todo, simplemente me quedé chasqueando la lengua para después gritar "bu", causando que Xiangling se volviera a asustar, si bien ya no tan fuerte como hace rato, su expresión valió oro.
Para el día siguiente, y mientras ella cortaba ingredientes, me acerqué a ella para acariciarle el trasero, haciendo que se sobresaltara, un poco asustada, pero en cuanto escuchó mi risa, me enchinó los ojos, volviendo a lo suyo.
-Oye Xiangling, adivina qué. –Canturreé.
-No sé. –Exclamó, molesta.
-Hay una prueba de valor en la colina Wuwang. –Reí apenas dije eso, ese lugar es el que más le aterra a ella, así que apenas lo mencioné, hizo que ella tuviera una expresión de que tenía recuerdos de Vietnam. –Me invitaron a participar y el premio es nada más y nada menos que un banquete en el pabellón Huhai. (Creo que se llama así, pero siento que lo estoy confundiendo con una zona del mapa :c)
-E-en el pabellón Hu-Huhai... -A Xiangling de inmediato se le hizo agua la boca, por lo que se limpió con el dorso de su mano. –Pe-pero en la prueba de valor no hay fantasmas reales...¿o sí?
-No lo sé, lo que sí te puedo decir es que puede haber espectros en la zona, aunque muchos son tímidos, otros son territoriales y agresivos.
-Glup...
Era evidente que ella quería comer en el pabellón, no todos los días se puede comer en un sitio tan caro como ese, y no cualquiera se puede dar el lujo...así que resultaba tentador para cualquiera.
Sin embargo, la noté indecisa, ella sabe de sobra que yo me llevo muy bien con los fantasmas, y que cualquiera que trate de asustarme termina, de hecho, asustado. No sería de extrañar que se sintiera más confiada al ir conmigo. Al final de todo, a ambas nos convendría.
-So-solo prométeme que no hay fantasmas...
-Cualquiera que se acerque, se las verá conmigo. –La abracé por la espalda, pegándola a mi cuerpo. –Je, no dejaré que alguno de ellos te haga daño.
-Está bien... -Xiangling tomó mis manos, como dando a entender que confiaba en mí.
Ese mismo día, y siendo ya de noche (que de por sí esa zona siempre está obscura), ambas caminábamos con tal de llegar a la meta. Caminábamos lentamente...lentamente...muy lentamente.
Xiangling me tenía agarrada de la mano, aferrándose a mi brazo de manera fuerte, yo tomaba su mano con tranquilidad pero segura de que nada nos pasaría, al final, un tonto fantasma no podrá hacerle nada mientras yo esté con ella. (Hu Tao: nadie molesta a mi reina >:v)
Sin embargo, quería divertirme un poco, como no podría resultar de otra manera. Me detuve en seco, anclando a Xiangling a mi posición.
-Creo que vi una sobra entre los árboles de allá. –Señalé con mi mano libre, sentí que a ella se le pusieron frías las manos además de que su semblante se ponía blanco como un papel.
-Era otro árbol, ¿verdad?
-No...de verdad parecía un humano...creo que algo se movió. –Agrandé mis ojos, fingiendo que me temblaba la mano.
Noté de inmediato que la respiración de Xiangling se aceleraba muchísimo, casi podía escuchar el fuerte latido de su corazón, así como que sus piernas le temblaban, y casi arrastrándola la seguí llevando al otro extremo de la colina, pues teníamos que subir y bajar para ganar el premio.
En cuanto me clave de nuevo en el suelo, volví a lo mismo.
-Vi una sombra...
-N-no juegues, Hu Tao, no es gracioso. –Me pidió ella con un hilo de voz.
-Te juro que vi algo, no juego. –Seguimos caminando unos pasos más, y al escuchar que algo se movía entre los árboles, ambas nos volteamos, encontrándonos de verdad con una figura humana.
Xiangling ni siquiera gritó, simplemente cayó desmayada, derribándome con ella, incluso yo misma me había asustado, pero fijándome qué era esa silueta humanoide, resultaba ser...un árbol.
Era un árbol que de verdad parecía un humano sentado en una piedra, yo me llevé una mano a la frente, suspirando de alivio, pero apenas vi que Xiangling estaba blanca como muerta, me asusté de nuevo.
-¡Xiangling, Xiangling! ¡¿Estás bien?! –Comencé a darle pequeñas palmadas en las mejillas, pero no despertaba, llevé mi oído a su corazón y sí parecía latir, pero no parecía respirar. –¡Xiangling, ni se te ocurra!
Inmediatamente le tapé la nariz y puse su cabeza en la forma adecuada, así que, sonrojándome bastante, llevé mis labios a los suyos para darle respiración de boca a boca, lo que me ponía muy nerviosa, ni siquiera me di cuenta cuándo es que ella comenzó a toser, yo únicamente estaba centrada en que volviera a respirar.
-¡Oye, oye, ya basta, ¿por qué me estás besando, Hu Tao?! –Exclamó ella, tomándome de los hombros.
-¡Ah, respiraste! –La abracé con fuerza, derribándola de nuevo al suelo, ella seguía tosiendo en mi hombro, palmeándome el brazo para que me quitara de encima suyo.
-¿De qué hablas? –Sus mejillas estaban prendidas, uno de sus dedos reposaba en sus labios.
-¡Te desmayaste del susto, pensé que no estabas respirando, entré en pánico y comencé a darte respiración de boca a boca!
-Oh...eso lo explica. ¡De cualquier modo, ¿ya se fue el fantasma?! –Ella se puso detrás de mí, temblando un poco de miedo.
-Era un árbol. Incluso yo me asusté. –Le señalé el árbol, ella se asustó un poquito, pero al verlo bien, suspiro de alivio.
-De verdad parece un humano...
(Anécdota graciosa: ¿ven mi foto de perfil? Ese día fui a la montaña con unos amigos, y regresamos por una senda que está más sola que cualquier calle a las tres de la mañana, yo iba hasta el frente y vi un árbol que, como no se veía desde más atrás, me lo topé de frente y me llevé un pequeño susto al parecer una persona, y dicen que en esa montaña se ha muerto gente y aparecen fantasmas, lo típico, ya saben, aparte de que mis amigos discutían ¿prefieren encontrarse un cadáver o un fantasma? :v)
-No sabes lo tranquila que me siento de que estés bien. –Sonreí, abrazándola apenas nos levantamos, ella hizo lo mismo. Pasados unos segundos, le toqué el trasero.
-¿Me agarraste las nachas?
-Eh...no.
-¡Hu Tao! –Me comencé a reír apenas dijo eso.
Seguimos avanzando como hasta antes de ese incidente: abrazadas y tomadas de la mano, a petición de Xiangling, claro.
Si bien no ganamos por el retraso que nos conllevó el que ella se hubiera desmayado, sí que ganamos un pan recién horneado (denle un bolillo pal' susto :v), que a Xiangling le encantó, devorándoselo de inmediato.
Yo fui más medida, comiéndome primero un trozo que arranqué, pero apenas vi que ella me puso ojos de perrito, reí para darle la mitad, ella sonrió con un poco de saliva bajándole de los labios.
Llegando a la ciudad, ambas descansamos en mi casa después de esa pequeña gran aventura, las dos estábamos acostadas en mi cama, que era grande, así que no había problema alguno. Sin embargo...quería estar más cerca de ella.
-Wow...tienes muchos libros de poesía, ¿alguna vez has escrito?
-Tengo unos, pero no me terminan de convencer para nada, no vale la pena mostrártelos. –Dije, fingiendo desinterés, pero la realidad es que son poemas que he escrito pensando en Xiangling, por eso prefiero guardarlos.
Sin embargo, tomé uno que no especificaba que era para ella, aunque lo había escrito unos días atrás, y claro que describía a una chica muy guapa, y que la amaba mucho, pero nada más.
Lo leyó con bastante curiosidad, sonriendo más de una vez y exclamando un enorme "awww" cuando lo terminó.
-Qué lindo, Hu Tao. Es muy bonito, te quedó de maravilla. Solamente que no sabía que te gustaran las chicas. –Exclamó ella, sorprendida.
-Jum, realmente no lo sé...
-¿Quién es? ¿Alguna de tus secretarias? ¿O lo escribiste por encargo?
-Es secreto, no te lo puedo decir...a cambio de un beso. –Reí, ella me rodó los ojos.
-Tan bromista como siempre.
-Je, supongo que si te dijera que es para ti, pensarías que bromeo. Porque lo escribí pensando en ti.
-Hum, ¿no te basta con asustarme, Hu Tao? Algún día dejaré de ser tan miedosa y ya no podrás jugarme bromas nunca más, te lo apuesto.
-Ya lo veremos, pero eres encantadora así de asustadiza.
-¡Hu Tao!
Hay un dicho bien dicho que reza: "entre broma y broma, la verdad se asoma". Ciertamente puedo bromear con ella diciéndole que me gusta, que le escribo poemas...pero esa es la verdad.
Lo único malo es que ella nunca lo dejará de ver como una broma.
Al día siguiente, ella me propuso que fuéramos el fin de semana de nueva cuenta a la colina Wuwang ya que estaba comprometida a dejar de ser tan miedosa, y solamente lo lograría afrontando su temor.
Por una parte no quería ya que el que sea tan asustadiza es lo que me enamora de ella, simplemente me encanta, y lo uso como pretexto para darle regalos que le gustan, que podamos ir a comer juntas, abrazarla y tocarle el trasero...que me encanta al igual que ella.
En fin, no perdamos la cabeza por asuntos carnales, no quería, pero al ver que ella no dejaba de insistirme, y que incluso seguía con eso durante mis horas de trabajo en la funeraria, es que me di cuenta que ella jamás pararía.
Sería un 50/50 qué resultaba de eso, y lo único que tenía seguro es que podría abrazarla, consolarla, tomarla de la mano e incluso darle respiración de boca a boca en caso de que se volviera desmayar por un susto, así que acepté finalmente.
Esa noche nos quedamos a acampar ahí, yo estaba muy a mis anchas, como si nada, mientras que Xiangling temblaba de miedo y apuntaba su lanza ante cualquier cosa que hubiera cerca, lo que me dio mucha ternura.
-Suelta eso o podrías sacarle un ojo a alguien. –Mencioné, tomando su lanza para dejarla en el suelo. –Tranquila, no pasará nada...pero dicen que el fuego atrae a los fantasmas.
Ella gritó, intentando apagar la fogata que habíamos hecho, yo me solté a reír para detenerla; y, como era de esperarse, se enojó conmigo.
-No hagas esas bromas...
-Dijiste que querías ser más valiente, pero te asustas con todo, Xiangling. –Me levanté, bostezando, ya tenía bastante sueño. –Iré a dormir, ¿te quedarás un rato más?
-N-no...iré contigo.
Ambas entramos en la tienda, acostándonos, dándonos la espalda, yo bostecé de nuevo, muy cansada, y apenas cerré los ojos, algo me hizo abrirlos.
-Hu Tao...
-¿Si?
-Po-podemos dormir abrazadas...
-Claro que sí, Xiangling. –Sonreí, estando muy alegre. Ambas nos volteamos para mirarnos a los ojos, su rostro estaba muy angustiado y los labios le temblaban, así que la tomé de una mano y la abracé con la otra, sonriéndole. –Tranquila, no te pasará nada, ¿sabes por qué?
-¿Por qué...?
-Porque estoy contigo, y te protegeré de cualquier cosa que te quiera hacer daño, sea o no un fantasma...
-Gracias, Hu Tao. –Ella me abrazó más fuerte, unas pequeñas lagrimitas se asomaron por sus ojos, yo cerré los míos, abrazándola más fuerte.
Tras un rato desperté, sin realmente saber por qué, pero vi a Xiangling dormida de forma tranquila, tomando mi mano con suavidad, mi corazón se sintió tan alegre como nunca antes, pues veía a Xiangling tan de cerca, con una expresión relajada, como si supiera que nada le pasará estando a mi lado.
-Oye...te amo. –Le di un beso en los labios que fue cortó, pero que me llenó de emoción y felicidad. Quizá fue el primer beso de ambas, no lo sé. Solo sé que sus labios es lo mejor que haya probado alguna vez.
Ella sonrió estando todavía dormida, apretando un poco el agarré de mi mano. Me pregunto qué soñará, pero no importa, luego le preguntaré. Volví a dormir, y lo hice como nunca antes en mi vida.
Al despertar, preparábamos todo para irnos de regreso a la ciudad, lo que nos tomaría seguramente todo un día.
Ella se notaba un poco alarmada, más que nada en estado de defensa ya que, a pesar de que han de ser como las ocho de la mañana, aquí la bruma permanece, haciendo que siempre parezca de noche, lo que sin duda extraña bastante.
Desayunamos lo que teníamos para comer y reiniciamos el viaje, caminando tomadas de la mano, yo calculaba que no faltaría demasiado para que acabara el ambiente tan horrífico que hay aquí.
Sin embargo, y estando completamente desprevenida, pisé una tabla de madera al seguir caminando realmente despreocupada de que no me pasaría nada...pero esa tabla tapaba un pozo de agua, y para mi desgracia, se rompió.
-¡Agh! –Exclamé, mi pie se hundió en el pozo, haciendo que cayera hasta la rodilla, Xiangling abrió los ojos de sorpresa y pegó un grito del susto, ha de pensar que una mano fantasmal me arrastra a una tumba.
-¡Espera, ya te saco! –Farfulló ella, tomando fuerte mis manos y jalando con fuerza, yo también trataba de salir, aunque Xiangling estaba completamente desesperada que, cuando mi pie salió, caí encima de ella.
Nuestras narices estaban a menos de un punto de tocarse, gran parte de mi cuerpo reposaba sobre el de ella, sentía sus respiraciones agitadas, aparte de que sus manos terminaron en mi espalda y cadera.
Era una posición que tomaríamos si hiciéramos el amor, pues nuestros genitales quedarían en contacto de no ser por nuestra ropa. Le veía a los ojos, sus curiosas cejas, vi perfectamente como sus mejillas se coloreaban al estar tan cerca la una de la otra.
Mis dos manos se apoyaban en el suelo, justamente al lado de su cabeza, tenía ganas de besarla y así lo hice, cerré mis ojos e hice que todo contacto entre nuestros labios dejara de existir, rozándolos un poco para después darle un beso.
Aquello fue como contemplar el abrir una rosa, como ver volar el capullo hecho mariposa, no pudo haber mejor sabor de fruta que el residual que reposaba en su boca, y al sentir que ella aferraba sus manos a mi cuerpo, hizo que el beso solo se prendiera en llamas.
Apagándose ese corto incendio, ambas nos miramos a los ojos, sonrojadas, ambas nos levantamos y sacudimos el cuerpo como si nada hubiera pasando, tosiendo un poco.
-¿Estás bien?
-Creo que no. –Respondí, me dolía el tobillo, aparte de que vi que tenía el zapato empapado de agua. –Al sacarlo se me debió lastimar.
-¿Puedes caminar? –Hice lo que ella me pidió completamente en vano, me dolía bastante. Ella hizo un gesto de preocupación, tomando una de mis manos para llevarla a mi hombro. –Apóyate en mí.
-De acuerdo. –Con una sonrisa, ambas caminamos, yo la tomaba del hombro y ella me tomaba de la cintura, me sentía tan feliz que no podía ocultar una sonrisa y Xiangling estaba apenada porque un sonrojo seguía en su rostro.
No dijimos apenas nada en el trayecto, el cual fue un poco más prologando de lo esperado, suerte para mí que el tobillo me dejó de doler al poco rato, así que pude caminar un poco mejor, ya sin apoyarme en Xiangling.
A pesar de que ya no estábamos en una zona aterradora, ella me tomó de la mano, con mucha duda en sus acciones, y solo fue que, tras unos segundos, las entrelazamos bien, de forma en que lo harían una pareja.
Llegando a la ciudad, de inmediato fuimos a mi casa para ver qué había pasado con mi pie, de hecho se inflamó, pero se me adormeció después de caminar, así que tuve que pasar un buen rato en cama...
Ella, al día siguiente, vino a visitarme, tenía el pie vendado y no había tomado nada, así que Xiangling me untó un ungüento que ella preparó en la cocina usando flores dulces, menta, colas de caballo y un pistilo de hielo, lo que sin duda me vino completamente de perlas.
Fue gracioso ya que ella me puso una manta en el cuerpo, tomó uno de los muchos libros de poesía que encontró y, sentándose en un banco, me leyó algunos de ellos, los que me sabía de memoria.
Yo sonreía teniendo los ojos cerrados, el pie ya no me dolía y la inflamación bajó muy pronto, por lo que podría estar lista para la acción el día de mañana.
-Y ese es mi sentir por ti...qu-querida Xiangling... -Dijo ella al acabar un poema. Me puse blanca como un papel ya que ese era un poema que escribí para ella hace varios meses, no recordaba la letra y por eso no dije nada hasta que finalizó. -¿E-este lo escribiste tú? –Preguntó ella, colorada del rostro.
-N-no, no. Es una complicación...pero sin duda me recuerda a ti, tienes el mismo nombre que la chica que se describe ahí.
-Pero está escrito a mano...
-Ah...respecto a eso...
-Hu...Tao... -Xiangling sonrió tristemente. -¿Es una broma, no? Seguramente lo planeaste desde el principio, lastimarte el pie a propósito, hacer que viniéramos a tu casa, que te leyera el libro de poesía que pusiste estratégicamente para que pareciera que fue al azar...lo planeaste muy bien, pero no es gracioso...
Tomé su mano, apretándola con suavidad, ella hizo lo mismo, la notaba casi cercana al llanto.
-No es una broma...de verdad me gustas, me gustas muchísimo, Xiangling. Tu forma de ser, lo buena que eres conmigo a pesar de que soy una pesada, y me enamora mucho cuando te asustas y te enojas...me pareces más linda de lo que de por sí eres.
-Hu Tao...¿sabes una cosa? –Ella sonrió ahora con alegría, soltando mi mano para ponerse a caminar en mi cuarto, mirando al techo. –Pues tú también me gustas ya que...los momentos que paso a tu lado son los mejores, y me gusta mucho estar contigo, así seas una pesada que me asusta y me hace enojar...siempre esperaba ir a la colina Wuwang para que me abrazaras y me tomaras de la mano, que durmiéramos juntas, y cuando me besaste pensado que dormía, me sentí muy feliz.
-¿No estabas dormida?
-No, tus ronquidos me despertaron, simplemente cuando vi que comenzabas a abrir los ojos yo los cerré, escuché claramente que dijiste que me amabas y me diste un beso...fue lo más lindo que alguien pudo decirme y lo más tierno que me han regalado.
-Te lo regalaré de nuevo: Xiangling...te amo.
-Je. –Sonrió ella, acostándose a mi lado para que ambas juntáramos nuestras frentes y nos diéramos un nuevo beso. –Yo también te amo, Hu Tao.
El abrazo que nos dimos fue sumamente especial, nuestros corazones estaban conectados, y estarían unidos de no ser por nuestra piel y nuestros tórax, aunque en esencia, se juntaron, latiendo a la vez mientras que otra cosa que se conectaba eran nuestros labios.
Me sentía la chica más feliz de todo Liyue en ese momento, ahora soy novia de la chica que amo con la locura y pasión con la que solo los poetas podemos amar...
No sé por qué...Pero el destino quiere que escriba yuri, y no negaré que ya me está gustando JAJAJA
Pues bien, la verdad es que yo mismo me sorprendí con lo lindo que quedó el cap ahora que lo estoy releyendo, honestamente tenía mis notas preparadas para escribir...pero malditas notas, las boté al carajo ya que, conforme iban surgiendo situaciones, me decía "oye, quedaría bonito esto" "Puedes agregar tal cosa" así que la idea original se mezcló con algunas que tuve en el momento.
En fin, ojalá les haya gustado este no muy convencional ship que se puede decir surge por un comentario de Hu Tao, pero sin duda es bonito y da mucha tela de donde cortar con lo poco que se nos da del canon oficial.
fanfics_timess ojalá hayas quedado satisfecha, capítulo dedicado especialmente para ti, gracias por la enooooorme paciencia que me has tenido ya que este capítulo te lo prometí hace meses.
Casi cualquier petición la cumplo, solo tengánme paciencia ya que hay otros ships que ya me han pedido y no he sacado, aparte de que no he podido escribir mucho últimamente y a lo mejor ese tiempo se acorta más ya que empezaré a trabajar :'v igual no creo que me afecte...pero no lo sé
Siempre tuyo:
-Arturo.
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