Auspiciado por: todos los que quisieron tercera parte.

-mira, este es el...- saque un lápiz de color- color rojo, como la manzana y la fresa.

-¡fresa!- tu pequeña alzó los brazos feliz, pues a la tarde venia a ayudarte con ella.

-veamos- la cargue hacia la sala a ver el reloj- Ray se está demorando demasiado...

-hmm- la morena bostezo, ella ya no podia esperar más y yo no podía dejarla.

-tienes que dormir, vamos- seguido de eso la lleve hacia su cama arropandola a lo cual solo me quedo mirando.

-Anna- la mire a sus inocentes orbes brillantes- ¿me puedes cantar una canción de cuna?

-oh ¿una canción?- aunque realmente no sabía ni una.

-si, como la de papá- y lo escuche... Aquella melodía que tarareabas luego de estar con Emma, mientras yo solo escuchaba tu felicidad hecha canción.

-... Claro- pero tenía que sonreír, como siempre tenía que hacerlo.

Y lo cante, no sentía ya nada por esa melodía, son solo recuerdos y nada más en el presente. Emma y Norman están juntos, tu tienes a Jemima y yo... Posiblemente solo este destinada a la soledad.

La vi dormir tan apaciblemente, tan dulce e inocente, de la nada el sueño me invadió también, quedándome dormida en la silla que estaba al lado de su cama.

[...]

-Anna- tu grave voz me llamó.

-ahh, lo siento, me quedé dormida- talle mis párpados.

-tranquila, te quedaste cuidando a Jemima, perdón paso un contratiempo- estabas susurrando mientras me sacabas de la habitación- duerme aquí.

-¿hmm? Pero... Esta es tu cama- de repente el adormecimiento me dejo.

-no importa, yo dormiré aquí- te sentaste en el sillón del cuarto viéndome.

-¿enserio esta bien?- y tu solo asentiste, pero a decir verdad no podía cerrar mis ojos si estabas aquí.

-¿no puedes dormir? Si hace un rato te veías cansada- al parecer te diste cuenta.

-no puedo si me estas viendo- sin darme cuenta hice un puchero y tu carcajeaste ¿cuando fue la última vez que te vi así? Se siente como si hubieran sido años.

-vaya, te ves tan tierna así- hablaste entre risas, logrando que mi cara arda ¿por qué ahora? Por favor no...

-... Hey ¿sigues amando a Emma?- de repente te lance esa pregunta con la mirada agachada a las sábanas.

-¿a qué viene eso?- lentamente tu risa se disipaba.

-quiero saber... Cuales son los pasos para olvidar a alguien... Necesito saber- sentía que en mi garganta había un nudo, que me hacía doler.

-... Los pasos... ¿A quién quieres olvidar?... Ah ¿Alex?- te dirigiste a mi y yo no pude levantar la mirada ni moverme, estaba estática- es solo darle tiempo y aceptar que simplemente lo nuestro es imposible.

-... ¿Lo nuestro?- tenía pánico ¿lo sabias? O no, solo es otra cosa.

-ahh, me refería a Emma, ahora solo es una odiosa antena ante mis ojos- bromeaste, dices eso, pero aún recuerdo como era tu semblante al verla pasar.

-claro... Tiempo...- le di más tiempo que otra cosa y aún no te superó, ni lo más mínimo- ¿cómo te fue con eso?

-supongo que bien, ahora, me interesa otra persona- ah, claro uno debe seguir con su vida, pero eso ya no me concierne.

-ya veo...- suspiré, extraño a Alex, si no fuera por estos inútiles sentimientos el aún estaría a mi lado y no lo hubiera herido.

-¿cómo fue que de repente terminaron? Si se puede saber- solo te oí, aún mantenía mi mirada abajo.

-fue mi culpa...- y estabas confundido- ¡fue mi culpa que termináramos! Culpa de mis sentimientos de adolescente, culpa de mi debilidad, culpa de mi falta de iniciativa- alce un poco la voz sin darme cuenta y luego tape mi boca callando los sollozos.

-esta bien- te acercaste a mi tratando de calmarme pero negue- no es como si tuvieras control sobre eso.

-¡pero tuve más que el tiempo suficiente! Para olvidarte y cuando soy feliz simplemente te apareces, nunca pude ser libre al parecer- me levante de la cama.

-espera Anna ¿olvidarme? ¿Desde cuándo?-  y por fin pude lograr verte a la cara.

-desde varios años... ¿Recuerdas cuando harías todo por Emma? Yo también en ese tiempo hubiera hecho todo por ti- mis lágrimas bajaban, era una mezcla entre frustración y angustia.

-¡Anna espera!- me tomaste de la muñeca.

-¿esperar? ¿Esperar más?- me safe de tu agarré- lo siento por Jemima pero yo ya no podré venir más.

-¿mamá?- su dulce voz de infante se escucho y los dos volteamos al final del pasillo en la entrada del cuarto de Jemima, la cual veía nuestra discusión, esto no está bien, ella no debe ver esto, me debo de ir.

-no...- mi voz temblaba- perdón pero no soy tu madre, solo fui una amiga de los dos, adiós Jemima, adiós Ray- y me fui rápido de ahí, aunque a decir verdad todo estaba oscuro, daba miedo y de alguna forma llegué a mi hogar.

[...]

Ya habían pasado varios días desde ese terrible suceso y la soledad creo que me comenzaba a gustar, hasta escuchar el timbre y tuve que ir a atender.

-... Ray...- te mencioné desanimada.

-Anna, tenemos que hablar- pero negué rotundamente, ya no servía de nada hablar.

-¿dónde está Jemima?- te pregunté.

-esta con Norman y Emma, tenemos que hablar, por favor- volviste a insistir, tal cual como el destino en mi tortura, pero lo siento tanto, realmente no tengo ganas de llorar más, así que trate de cerrar la puerta pero te interpusiste- ¡demonios, solo quiero hablar! Así tenga que forzarte aunque sea un poco.

Abriste la puerta y me cargaste en tu hombro, más vergonzoso no podía ser.

-voy a llamar a la policía.

-hazlo, si quieres que Jemima se quede sola- por fin me bajaste.

-... ¿De qué quieres hablar?- me cruce de brazos un tanto molesta y avergonzada.

-primero... Lo lamento, de no haberme dado cuenta antes y haber arruinado tu vida con mi presencia- ahora me hacias sentir culpable, nunca dije que fuera tu culpa... Al menos no tanto.

-ya... No importa, fue más culpa de la persistencia de mis sentimientos- tal vez es como dicen- el primer amor es difícil de olvidar...

-quien sabe, lo segundo es que... Yo... No se si sea correcto luego de haberte hecho tanto daño... Pero realmente te amo, no como una amiga o una hermana, si no como tu lo hacias conmigo- ¿por qué ahora? Cuando por fin sentía que ya te estaba olvidando, vienes con tus sentimientos a hacerme volver.

-no... Lo siento, no puedo- voltee mi mirada- por fin logre comenzar a olvidarte, no me lo vuelvas a decir porfavor.

-... Te amo, te amo, te amo mucho- sostuviste mis manos con firmeza, cada palabra tuya es como si retrocedieras el tiempo y con ello mi sentir.

-¡pero yo ya no!- traté de huir pero no me dejaste atrapandome entre tus brazos, eres muy cruel.

-¿estas segura?- a decir verdad no lo estoy-... Lo siento tanto, por favor perdoname, es mi culpa y lo acepto, odiame todo lo que quieras, pero al menos dame una oportunidad de conseguir tu cariño apropiadamente.

-...- suspiré, pensé que eras de los que se deciden y se rinden rápido-... Esta bien- pues pronto te rendirías.

[...]

-¿¡Ray cantando!?- exclamó Emma sorprendida.

-si, bueno, es una de las cosas que hizo- seguí tomando de mi bebida con total tranquilidad.

-¿y sigues sin querer aceptarlo, a pesar de que ya pasó mucho tiempo?- Gilda ahora tomo la palabra.

-no es que sea cruel, pero me agrada ver como se esfuerza en querer regresar mi amor hacia el- y de repente mis mejillas se pintaron de rojo-... No estoy segura.

-y nunca lo sabrás si no le das una oportunidad- la pelinaranja mostraba determinación, pero tenía razón ¿cómo sabría si estaría bien o mal si no te doy una oportunidad?

-piénsalo, cualquier cosa que decidas te apoyaremos- la peliberde tomó mi hombro y me levante del asiento- ¿a dónde vas?

-tengo que ir con Ray- y ellas sonrieron, salí corriendo del lugar hacia tu encuentro, posiblemente estés con Jemima en tu casa.

Toque la puerta y abriste, sorprendido de mi repentina visita, seguido de eso me lance a tus brazos siendo correspondida por ti en confusión.

-¡lo siento tanto, pero te amo!- grite entre lágrimas y cerraste la puerta.

-¿enserio?- asentí y feliz me besaste la frente, pero, yo no había esperado tanto solo para esto, así que rápidamente bese tus labios, los mismos que nunca pensé que mis labios tocarían, el abrazo que nunca pensé que me darías de la misma forma de la que yo te daría y el amor que nunca pensé que me corresponderías.

Si así se siente ser pedida en el amor, me encantaría solo si fueras tu.

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:D

Porque si lo dejo triste me mató, ya me basta con lo del anime :I.

Espero les haya gustado, nos vemos.

Otra vez disculpen la hora pero... Nah, ni yo se que estuve haciendo todo el día.