- Las paredes de este lugar están muy sucias... No es lugar para una niña -dijo uno de los hombres encapuchados-

- Eso no es una niña... ¡Es un monstruo! ¿¡o acaso estas ciego!? ¡Tiene cuernos, tiene cola, tiene colmillos enormes, ni siquiera podemos verle los ojos sin sentir pavor! ¡¡NO HABLA NUESTRO IDIOMA, Y POR SI LO RECUERDAS ACABAMOS DE SACARLA DE UN BOSQUE!! -

Yo se que no me entiendes...
Se que piensas que soy un monstruo como aquellos de los cuentos...

- ¡ASÍ QUE APURATE, TENEMOS QUE PONERLE LA CADENA, LUEGO VEREMOS QUE PODEMOS HACER CON ELLA! -

Aunque creo que estoy un poco alejada de lo que tu piensas.