¿Qué tal ahora?
Facción: Científicos.
Personaje protagónico: Chrome.
Tema: Romance / Familia / Humor.
Después de haber pasado seis semanas encerrado en el laboratorio con Senku y los demás científicos trabajando como locos en el primer Smartphone verdadero, Chrome finalmente fue libre de tomar un descanso ahora que habían vuelto a sus proyectos a largo plazo y Senku quería esclavizar más a Sai y otros científicos expertos en computadoras.
Como tenía tiempo libre, por supuesto que lo primero que Chrome hizo fue dejar Tokio e irse directito a la aldea Ishigami.
Ahora tenía su propio auto, uno color azul súper malote que él mismo ayudó a fabricar junto a Kaseki y los mismos expertos que hicieron el auto de Senku (que era mucho más avanzado, Senku estaba obsesionado con estas cosas).
Condujo por los caminos ya totalmente pavimentados de Tokio hacia la aldea, encontrándose con un poco de trafico ya que cada vez más personas tenían autos, aunque no muchas, lo que más había eran autobuses llevando a los obreros que iban de aquí para allá para trabajar en reconstruir la civilización.
En un punto, la carretera se vacío por completo, y él decidió probar la máxima velocidad de su auto, abriendo un poco la ventanilla para sentir el viento, riendo emocionado ante la sensación.
Sin embargo, pronto unas luces azules y rojas lo hicieron maldecir y bajar la velocidad.
Rayos, desde que habían más policías tuvo que tomar otro montón de clases para conducir solo para aprender a lidiar con ellos.
Estacionó el auto en una orilla como le dijeron en sus clases y esperó a que el policía se le acercara.
Escuchó el sonido de una motocicleta y luego una risa muy conocida.
—¡JA! ¡Apuesto que te asuste, Chrome! —Kohaku le sonrió burlonamente, bajando una pierna al pavimento para inclinarse más hacia su auto—. ¡Mira lo que me dieron en la jefatura! ¡¿No es grandiosa?! —Le presumió su motocicleta con orgullo.
Ella estaba vestida con un uniforme de policía, aunque ya tenía la chaqueta y la falda rasgada, típico.
—Agh, tenía que ser la gorila...
—¡Vuelve a decirme así y te multare!
—¡Eso es abuso de poder! —recriminó, aunque no estaba seguro de qué significaba eso, pero lo oyó en una de esas películas que le pusieron en su clase de cultura general.
—Como sea, ¿vas a volver a la aldea hoy? Yo también iba para allá, ya terminé mi turno. —Sonrió entusiasmada—. ¿Irás a ver a Ruri-nee? —Sus ojos chispearon con emoción.
—Sí, de hecho. —Sonrió, volviendo a mirar al frente, en dirección a la aldea—. Iré a verla. —Kohaku casi se cae de la motocicleta.
—¡¿En serio?! —Tuvo que recoger su mandíbula del piso, pero luego sonrió emocionada—. ¡Ja! ¡Veo que por fin has madurado, Chrome!
—¡No era inmaduro! —Infló las mejillas, luego pestañeó y se dio una palmada a cada lado de la cara—. ¡Bien, mejor sigo mi camino! ¡Si vas a ver a Ruri también supongo que nos veremos allá!
—¡Ja, más bien yo te veré allá! —Sonrió altaneramente antes de acelerar a toda velocidad y salir disparada lejos de su vista.
Wow, esa motocicleta si que era rápida, a Chrome le gustaría saber más de su construcción, ¡pero no ahora! ¡Tenía que concentrarse en su misión!
Después de otros veinte minutos conduciendo, por fin llegó a la aldea Ishigami, que ahora era mucho más grande de lo que fue antes de la llegada de Senku. La mayoría de los aldeanos se había mudado a las lujosas casas modernas, otros seguían viviendo en sus casas, pero modificadas. Eso último era el caso de Kokuyo y por tanto de Ruri y Kohaku, aunque la menor ya se había mudado casi por completo a Tokio.
Llegó a casa de Kokuyo y tragó saliva, antes de juntar valor y entrar.
Para su sorpresa, solo encontró a Ruri allí, cociendo la chaqueta rota que le había visto a Kohaku antes.
—Chrome. —Ruri se sorprendió de verlo, pero no tanto, más bien rápidamente sonrió—. Ah, ya veo por qué Kohaku llegó tan insistente en hacer que papá, Jasper y Turquoise se vayan a ver su motocicleta. —Rio por lo bajo, dejando de lado la chaqueta para acercarse a él y darle un breve beso que hizo que los dos se sonrojaran levemente—. Me alegra verte de nuevo... Lamento no haberme podido quedar en Tokio cuando regresaste.
Chrome se frotó la nuca, sintiendo la culpa comenzar a invadirlo.
Luego de pasar semanas perdidos en el océano, lo primero que hizo al regresar fue ponerse a trabajar como loco en los planes de Senku, fue Kohaku la que lo arrastró a saludar a Ruri por videollamada y asegurarle que estaba bien, pero Ruri afirmó que pese a todo ella siempre tuvo fe en que estaban bien.
Al regresar a Japón, claro que Ruri fue a Tokio para visitarlo, pero como Chrome estaba tan ocupado trabajando en el laboratorio, apenas pudieron verse antes de que ella regresara a la aldea.
La culpa había estado pesando sobre él, más porque Kohaku constantemente iba a visitar a Suika al laboratorio y siempre aprovechaba la más mínima oportunidad para recordarle que tenía que ir a ver a Ruri. Ahora por fin estaba aquí, y había solo una cosa que quería hacer...
—Ruri... Sé que te dije que deberíamos casarnos luego, pero... ¿qué tal si nos casamos ahora? —Soltó de golpe, dejando a la sacerdotisa tan sorprendida que no pudo ni hablar.
Al verla tan perpleja, Chrome siguió hablando.
—Cuando estuve perdido en el mar... me di cuenta de que había una posibilidad de que... no pudiera regresar. —Tragó saliva, tomando las manos de Ruri, que lo observó muy sorprendida y sonrojada—. Pensé... que de verdad quería volver, porque de verdad quería verte otra vez.
—Chrome... —Sus ojos azules se aguaron y pronto le sonrió—. Claro que quiero casarme contigo.
Ambos sonrieron y se acercaron para besarse, pero en ese momento...
—¡JA, LO SABÍA!
—¡CHROME, SABANDIJA, VOY A MATARTE!
Kokuyo y Kohaku cayeron desde la puerta, él con gesto asesino y ella casi llorando de alegría.
Kokuyo pasó la siguiente media hora intentando perseguir a Chrome dentro de su casa, siendo contenido por Kohaku, Jasper y Turquoise mientras su futuro yerno se ocultaba detrás de una divertida Ruri.
Finalmente, se sentaron a hablar y Chrome se inclinó con la cara plana en el piso para rogarle a Kokuyo darle su bendición para casarse con Ruri.
—No eres nada fuerte, eres muy débil, de hecho, ¿por qué debería dejarte tomarla como esposa?
—Ja, por favor, papá, ya no vivimos en el mundo de piedra, eso da igual. —Kohaku lo miró aburrida.
—¡No puedo dejar que cualquiera se case con mi hija!
—Con todo respeto —Jasper carraspeó—, Chrome ha contribuido mucho al bienestar de la aldea y de la humanidad en general en los últimos años...
Kokuyo gruñó.
—Es verdad... —Turquoise suspiró, sin verse del todo contenta, pero mostrándose resignada—. Para ser justos, fue gracias a él que Kohaku no acabó años perdida en la Luna por años con los otros astronautas.
Kokuyo gruñó todavía más.
—Bueno, gracias a Suika también, ya saben... —Chrome frotó su nuca, antes de suspirar y mirar fijamente a Kokuyo—. Todos siempre han sabido lo que siento por Ruri, desde que curarla era solo un sueño imposible, hasta cuando luche con Magma y hasta el día de hoy. Y siempre será así. —Ambos se miraron fijamente—. Prometo que voy a cuidarla.
Finalmente, Kokuyo bajó la mirada y suspiró.
—Bien... Tienes mi aprobación.
—¡HURRA! —Kohaku fue la que más celebró, mientras que Ruri de inmediato abrazó a su padre, con lágrimas en los ojos, para luego abrazar a Chrome, ambos sonriendo felizmente.
¡Tendrían otra boda en el nuevo mundo!
Continuará...
Holaaaaaaaaaaaaa :D
Aquí el segundo capitulo! OwO
Muchas gracias por todo su apoyo, espero q el fic les siga gustando!
Quizás suba el siguiente cap hoy más tarde o mañana, ya veremos...
Y no se preocupen, si seguiré mis otros long fics, nomás denme tiempo xP
Gracias por su paciencia y apoyo! Me despido!
CELESTE kaomy fueraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro