Dirigió su atención al pequeño pajarito revoloteando junto a la ventana cerrada.

Un hermoso colibrí, con sus preciosos colores adornando sus plumas. Estaba seguro de que JiMin amaría verlo, le pareció una lastima que justo acabará de salir a dirección para justificar su anterior inasistencia.

Saco su celular lo más pronto que pudo, abriendo la cámara casi de inmediato, alcanzando justamente a tomar una foto antes de que el pajarillo se fuera volando, como si fuera ese el motivo por el que aguardaba ahí.

En un mensaje de texto rápido, mando la foto junto a un pequeño emoji de besito.

No eran necesarias las palabras, sabía que su amigo lo entendería, después de todo, no era la primera vez que se comunicaban de ese modo.

Y claro que el menor entendía esos mensajes solo significando una cosa. Su hyung estaba pensando en el.

—Volví. —dijo el menor al sentarse a su  lado.

—¿Cómo te fue?, ¿Ya quedó todo listo?

JiMin pareció dudarlo un poco.

—Mmm... algo así. —su expresión disgustada decía mucho sobre eso. —Ya sabes, siempre hay quien hace las cosas mas dificiles. —la pequeña mueca en sus labios.

Gracias a la cercanía, pudo acariciar su rodilla en un gesto reconfortante.

—Supongo que solo queda seguir insistiendo. —dijo en modo de broma, aunque había cierta verdad en sus palabras.

Un pequeño asentimiento como respuesta antes de volver a sumergirse en la clase.

Tan solo un par de horas más ya estaban fuera y de camino a casa.

Era una fortuna el vivir por el rumbo, así ambos podían hacerse compañía en el camino.

Amo la carita maravillada de su menor al ver las pequeñas flores blancas caer para adornar su cabello.

Sabía cuánto amaba ese árbol.

El recuerdo de la primera vez que estuvieron en ese lugar, como pareció estar encantado con ese árbol en particular, aquel que les brindaba sombra durante su espera del autobús y quién los cubría de mojarse en días lluviosos.

—¡Mira, hyung!

La vocesita emocionada lo saco de sus pensamientos.

El como parecía señalar las florecillas blancas en su cabeza.

Sonrió divertido. Dios, lo amaba demasiado.

Todo de el lo tenía maravillado.

Su preciosa sonrisa en los pequeños detalles y aquello que muchos considerarían insignificante. Era cuestión de saber ver las cosas, aprender a apreciar lo que hay en tu entorno. En su caso, la hermosura de la naturaleza, era simplemente increíble.

Lo admiró en silencio, apreciando cada pequeño detalle de su persona, perdiendose por completo en su sonrisa. 

¿Por cuanto tiempo mas podria guardar sus sentimientos? 

Era un pensamiento recurrente en los ultimos dias, su relacion de amistad era algo que atesoraba, pero siempre existia el temor de demorar demasiado y que JiMin le terminara dando su corazon a alguien mas. 

Temeroso pero decidido, titubeo un poco en sus acciones. 

—Mimi... —llamo para obtener su atencion. 

La calida mirada del menor se poso en la suya un momento, atento a lo que fuera a decirle. 

«—...Ah- bueno, yo... me preguntaba si quisieras salir a comer en la tarde —jugó nervioso con sus manos, esperando su respuesta.»

Jiji está vez no hice correcciones al capítulo por qué enserio que ya quería publicarlo 😓 pero procuraré hacerlo al final de la historia 😅

Vamos de poquito en poquito pero la trama está a punto de comenzar 🤭

No olviden dejar su voto y comentario si les gusto, es agradable saber que alguien aprecia lo que escribo 🥺