(10): INESTABILIDAD.

Décimo mes, «Dime de una vez que somos en realidad, JiMin. Deja tu estúpida cobardía y acepta la realidad.» Esa fría noche el cansancio pudo más sobre mí y te golpeé sin medir mis atropelladas acciones, descargando los dolores que guardé por tanto tiempo y retuve con lágrimas que no debía de llorar.

Recuerdo cuando tú me miraste dolido pero aún así me devolviste el golpe con el mismo sentimiento de furia e impotencia. Por primera vez nuestros cuerpos fueron los sacos de boxeo para liberar todo aquel mal que nos hacíamos, al final saliendo más lastimado en mis propios sentimientos porque sabía que habíamos arruinado la situación más.

Perdón.