Capítulo quince
Antes de iniciar con este capítulo quiero explicarles el funcionamiento del mismo. Este capítulo contiene una escena erótica; sin embargo, como la historia está etiquetada sin contenido adulto podrán encontrar la escena en mi perfil. ¡Pero alto! No estará todo el cap en otro "libro" sino solo una parte por lo que les recomiendo leer todo lo que se encuentra aquí hasta que el texto empiece en cursiva (así) y ahí migrar hacia mi perfil. Luego volver para poder terminar de leer todo. Otra alternativa es leer todo de corrido y luego ir a mi perfil si tienen curiosidad de saber más.
Ahora sí, damos inicio al cap.
Taylor y Theo estaban en Londres. Theo y Taylor estaban en la misma ciudad que yo, pero lo más importante, los cuatro estábamos juntos de nuevo.
Quería matar a Tyler por no decirme, por mantenerme oculta información tan importante, aunque a la misma vez quería abrazarlo y darle las gracias por lo que fuera que hubiese hecho. Estaba segura que eso era obra de él, tenía su nombre grabado en todos lados, no sabía qué había dicho o hecho y probablemente nunca lo sabría, pero lo importante era que el trío de oro estaba de vuelta a mi lado y yo no podía estás más feliz.
ꟷ¿Puedes dejar de mirar a Taylor como una loca enamorada? ꟷSoltó Tyler con burla.
Me acurruqué más contra mi hermoso novio al cual había extrañado con locura y él rió por lo bajo mientras me rodeaba más con los brazos. Estábamos en el asiento trasero del BMW de mi abuela, Walter nos llevaba de regreso a la casa. Como nadie quería ir en el asiento delantero me había sentado en el regazo de Taylor por lo que podía abrazarlo sin preocupaciones.
Dios, lo había extrañado tanto. Había echado de menos su perfume, sus abrazos, el calor que emanaba de su cuerpo, la manera en que me miraba, sus sonrisas desde la más inocente a la más pervertida, sus ojos verdes que me recordaban a la hierba húmeda, el latido de su corazón cuando me acurrucaba contra él y el sonido de su voz. En definitiva había extrañado todo de él incluso que se levantara temprano por las mañanas y me obligara a aprovechar el día.
ꟷDéjame en paz ꟷdije finalmente.
ꟷSí, Ty, déjanos en paz y continúa viendo videos en Tik Tok.
ꟷEstoy viendo teorías sobre mis libros, cierra la boca.
La sonrisa en sus labios evidenciaba que estaba de buen humor.
ꟷYo solo quiero decir que a mí no me ves desde las vacaciones de primavera y solo me has dado un abrazo, pequeñita.
Sonreí y estiré la mano para apretar su mejilla. No lo hice con fuerza y de todas maneras una marca roja quedó en su piel.
ꟷTú no satisfaces todas sus necesidades, Theo ꟷbromeó Ty.
ꟷPodría hacerlo.
Me guiñó un ojo con coquetería y solté una carcajada en consecuencia. Desde que se había ido a la universidad había abandonado parte de su timidez para hablar de temas sexuales, seguía sonrojándose en ocasiones, pero ya no evitaba la conversación como si fuera un delito. Era divertido, seguramente había pasado unos buenos meses de soltería en San Francisco.
ꟷTheo, amigo, te quiero, pero como le pongas una mano encima te la quiebro.
Besé la comisura de los labios de Taylor sintiendo ternura por su respuesta. Él no era celoso y yo lo sabía, simplemente estaba jugando.
ꟷVale la pena.
Tay quitó una de las manos que me rodeaban para darle un leve empujón a nuestro amigo rubio que rió divertido. A Tyler no le hizo tanta gracia porque terminó estampándose contra la puerta.
Walter redujo la velocidad para ingresar a la vivienda de mis abuelos y nunca me había sentido más feliz de llegar a ese lugar. Era una casa preciosa, aunque no la sentía como un hogar, quizás nunca volvería a sentir a un lugar como mi hogar.
ꟷ¿Dónde dormirán? ꟷPregunté al bajar.
ꟷEn la habitación frente a la de Tyler ꟷcontestó Theo.
ꟷContigo.
Mi muchacho de ojos verdes y pelo oscuro acompañó sus palabras con un abrazo por atrás y cerré los ojos de manera inconsciente al sentir su presencia. Amaba a ese hombre, realmente me enloquecía como nunca nadie lo había hecho.
ꟷBien, ya. Muchas muestras de afecto por un día.
ꟷNo seas amargado, Ty ꟷle reprendió Theoꟷ. Están enamorados y tú pareces alérgico al amor ahora mismo.
Si mis abuelos parecieron sorprendidos por nuestra repentina y temprana llegada no lo mostraron. Nos dedicaron una sonrisa desde la sala de estar formal y tomamos eso como un saludo para escabullirnos. Ellos me agradaban, eran buenas personas; sin embargo, en ese momento lo que menos quería era su presencia. De hecho, no quería la presencia de nadie más que de Taylor.
¡Un mes! No lo veía desde que había terminado los exámenes en la universidad y se había ido de gira con Poison. Necesitaba pasar tiempo con él de una manera más privada.
ꟷNos vamos a dormir ꟷanuncié al llegar al último piso entrelazando nuestras manos.
ꟷ¡Usen gorrito! ꟷExclamó Theo caminando hacia la dirección contraria.
ꟷ¡Demonios, Theo! No quiero imaginarme la situación ꟷse quejó Tyler siguiéndolo.
ꟷVe a divertirte con tu mano, Ty. Te hace falta.
Tyler mal miró a mi novio y yo le di un codazo leve que no hizo más que hacerlo reír. Esperamos hasta que ambos ingresaron en la habitación de Theo y nos dedicamos una mirada que lo decía todo.
Sus ojos verdes me calaron hasta los huesos y con ese simple acto el oxígeno se me agotó de golpe. No podía terminar de creer que fueran tan bello y, sobre todo, que lleváramos más de un año juntos. Parecía una locura que dos años atrás estaba en Los Ángeles con mis padres y mi mejor amiga Sarah y que en ese momento estuviera deseando volver a Massachusetts para finalizar la mudanza a un piso que compartiría con él.
ꟷAdelante, señorita.
Abrió la puerta para mí y antes de ingresar realicé una tonta reverencia que lo hizo reír. La habitación estaba silenciosa y casi a oscuras, la luz que ingresaba del balcón era suficiente para marcar los límites de los muebles.
ꟷVen aquí ꟷsusurré.
Tomé su camisa negra formando un puño con la tela y sin mucha delicadeza lo atraje hacia mí. Sus manos viajaron rápidamente hasta mis caderas y poniéndome de puntitas de pie alcancé su boca con la mía. No tardé en elevar mis brazos y rodear su cuello apegando mi cuerpo al suyo en un contacto que se sintió tortuoso luego de tanto tiempo separados. Besé con necesidad sus labios mientras él correspondía gustoso con esa seguridad que me enloquecía. Sus dedos trazaron un camino lento por mi espalda despertando cada uno de mis nervios hasta llegar a mi cuello, ladeé la cabeza profundizando el beso y embriagándome con los movimientos que nuestros labios coordinaban. Su lengua se hizo paso hacia el interior de mi boca y mi cuerpo entero se llenó de una energía explosiva. El sabor a caramelos de mora me dio la bienvenida y sonreí contra su boca encantada porque siguiera siendo la misma persona que un mes atrás había despedido en la universidad.
ꟷEsta camiseta no es tuya ꟷmurmuró cuando nos separamos por unos instantes para respirar.
ꟷNo, la mía se manchó con refresco y Julian me prestó esta.
Era verdad, mi camiseta blanca había fallecido en el momento exacto en que un muchacho me había empujado sin querer mientras me hacía paso en la fiesta rumbo a la cabina del DJ. Julian me había prestado una camiseta que tenía en su vehículo y aunque me había quedado gigante, le había hecho un nudo para que no luciera como un vestido sobre mí.
ꟷNo sé quién es Julian, pero créeme que nunca fui tan feliz de poder quitarte una prenda de ropa.
Reí y elevé los brazos para que pudiera quitarme la camiseta. No dudó en hacerlo, sus dedos viajaron hacia el borde de la misma y la retiró con rapidez a la vez que rozaba mi piel con sus dedos tibios. Mis nervios enloquecieron ante el contacto y una sensación punzante se instaló en la parte baja de mi vientre.
ꟷAhora te ves mejor ꟷsusurró con una diversión seductora.
Su mirada abrazadora me estudió por completo y sentí que la garganta se me secaba. No era la primera vez que compartíamos esa clase de intimidad y, sin embargo, la distancia parecía haber intensificado todas las sensaciones.
Mis ojos se habían acostumbrado a la escasa luz y en ese momento pude ver su rostro a la perfección. Elevé mi mano hacia sus mejillas y recorrí el camino de pecas que iban hasta su nariz, los puntitos podían pasar desapercibidos, pero allí estaban y me encantaban.
ꟷTe amo, MIT.
ꟷTambién te amo, Tay.
Selló nuestras palabras con un beso lleno de pasión y anhelo, un beso que expresaba las emociones que no habíamos sido capaces de transmitir en ese mes alejados.
Me aferré con fuerza a él mientras sus labios succionaban los míos y su lengua acariciaba la mía. Con cuidado de no caer, caminé hacia atrás hasta encontrar la cama y me deslicé sobre el colchón lentamente mientras él hacía lo mismo. Mi espalda quedó recostada contra la superficie blanda y su cuerpo se acomodó sobre el mío mientras profundizábamos un beso que había necesitado con locura.
Estiré mi mano con movimientos torpes para buscar el gatillo de la luz de noche y la habitación se iluminó tenuemente en consecuencia. Volví entonces a la tarea de besarlo, de recordar la manera en que sus labios rosados se sentían contra los míos y como sus manos recorrían mis curvas.
Las prendas desaparecieron poco a poco, sin prisa y alargando un momento que quedaría grabado a fuego en mi memoria. Sus manos recorrieron mi cuerpo, sus labios devoraron los míos y nos perdimos en el otro por unos minutos que me dejaron sin aliento.
Lo observé quedarse dormido a mi lado, abrazado a mi cintura y con su rostro escondido entre las almohadas. Se veía tan apuesto y recorrí cada centímetro de su anatomía con mi mirada para hacerme la idea de que era real, que estaba allí conmigo.
Amaba cada faceta y parte de él y estaba agradecida de que hubiera llegado antes de lo esperado a mi encuentro.
Desperté con la garganta seca y con una respiración que no era mía recorriendo mi mejilla. Sonreí al sentir el contacto de Taylor y acaricié sus manos que estaban entrelazadas sobre mi abdomen. Mi espalda se encontraba presionada contra su pecho y su rostro descansaba cerca del mío.
Me deshice con cuidado de su abrazo procurando no despertarlo. Parecía realmente agotado, de lo contrario habría abierto los ojos instantáneamente. Me escabullí de la cama sin hacer ruido y recogí mi ropa interior del suelo así como la camisa que Taylor había vestido unas horas antes. Busqué mis pantaloncillos de pijama y de puntillas me retiré de la habitación.
Tenía sed y había olvidado llevar un vaso con agua a la habitación debido a la prisa de quedarme a solas con Tay. Miré en todas las direcciones y bajé con cuidado los tramos de escaleras que me separaban de la planta baja. El recorrido era un poco tenebroso en la oscuridad, por fortuna Callahan dejaba las pequeñas lámparas de las escaleras encendidas para mí.
La luz de la cocina me alertó que no estaba sola y acomodé mi cabello para que no luciera como el de una persona que acababa de tener sexo. No quería encontrarme allí con mis abuelos o con el chef luciendo de esa manera. No obstante, al entrar hallé a Theo sentado sobre una de las banquetas con los pantalones cortos de su pijama y sin camiseta, dándome la espalda.
ꟷGrandote.
Dio un respingo sobre su silla y giró hacia mí con los ojos abiertos como platos.
ꟷCasi me matas del susto, pequeñita.
ꟷLo lamento. ¿Qué haces aquí?
Me acerqué a él y posé una mano sobre su espalda. Estaba allí con un vaso de agua, pero no parecía haberlo tocado y tenía la mirada un poco perdida. Lo conocía lo suficiente para saber que había algo sucediendo en su vida que le quitaba el sueño, de lo contrario estaría en su cama roncando.
ꟷEstoy bebiendo agua.
ꟷClaro que no.
Me dedicó una sonrisita y tomé el vaso que tenía ante él. Yo sí tenía sed y me lo bebí de un sorbo.
ꟷEstaba pensando.
ꟷ¿Quieres hablar de eso?
ꟷNo, estoy bien.
ꟷEstás en la cocina en la madrugada, eso no es estar bien.
Su bonita sonrisa se borró y una mueca tomó su lugar. Ahí estaba, la mirada de "me has atrapado, me siento fatal". Sus ojos azules con pintitas grises se ensombrecieron y sentí la necesidad de abrazarlo. Cuando la necesidad llamada yo no la callaba, así que lo abracé por la cintura.
ꟷ¿Me abrazas para convencerme de hablar, pequeñita?
Correspondió a mi abrazo de todas maneras.
ꟷNo, te abrazo porque sé que lo necesitas y porque te he extrañado como nadie nunca ha extrañado a una persona.
ꟷLo dices porque ya te revolcaste con Taylor y recordaste que tienes más amigos.
Reí contra su pecho y me separé de él para dedicarle una sonrisa con la intención de hacerlo sentir mejor.
ꟷ¿Quieres helado?
ꟷTú sí que sabes hacerme feliz.
Caminé hacia el refrigerador y tomé el pote de helado con galletas que había comprado esa mañana, luego busqué dos cucharas y terminé sentándome a su lado. Extendí uno de los cubiertos en su dirección y él no dudó en tomarlo.
ꟷ¿Hablaremos de tu llegada repentina o de tu soltería?
ꟷCreo que es más sencillo hablar de mi soltería por ahora.
Asentí y enterré la cuchara en la crema helada mientras le brindaba su tiempo. Theo hablaría cuando él lo sintiera necesario y yo estaría ahí a su lado hasta que eso sucediera para escucharlo con atención y aconsejarlo.
ꟷ¿Has visto a Sophie? ꟷSoltó finalmente.
ꟷLa vi cuando falleció mi abuela y eso fue todo, pero hablo con ella cada tanto.
ꟷ¿Y qué te ha dicho ella de nuestra ruptura?
ꟷDijo que no podía soportar la distancia y que no le gustaba sentirse ignorada.
Theo suspiró y supe que por allí iba el tema. Realmente no sabía mucho de su separación, simplemente que mi amiga se había vuelto un poco tóxica y controladora respecto a él. Theo no había soportado mucho y finalmente ella terminó con él por llamada telefónica diciéndole muchas cosas horribles que no se merecía. Sophie me agradaba; no obstante, había perdido parte de mi cariño al tratar de esa manera a mi mejor amigo que era el muchacho más agradable y amable en la faz de la Tierra.
ꟷBueno, todo comenzó en las vacaciones de verano pasadas. Ella no estaba feliz con el hecho de que me fuera a Massachusetts con ustedes y la dejara en el pueblo, sobre todo porque no se lo había mencionado ꟷexplicóꟷ. Eso fue mi culpa y lo admito, no pensé en ella ni por un segundo porque quería estar con ustedes. La invité y dijo que no quería estar entre nosotros por compromiso. Creía que la habíamos ignorado a propósito.
ꟷEso explica por qué no me habló por unos días.
ꟷSí, luego de unos días me perdonó y todo quedó bien entre nosotros. Cuando comenzamos las clases, volvió esa sensación de abandono que ella tenía sobre todo porque fui a Nueva York a la presentación de Tyler y no a visitarla. Pretendía que la llamara luego de cada clase para saber de ella y que fuera hasta su universidad cada mes. ¡Como si el dinero me lloviera! Por supuesto le dije que eso no podía ser, entre el valor del pasaje y mis compromisos no podía darle toda la atención. ꟷLlevó a su boca una gran cucharada de helado y suspiró mientras la tragabaꟷ. Eso se fue repitiendo cada mes, ella se sentía abandonada y yo presionado. Nos veíamos por videollamada casi cada noche, aunque personalmente solo dos veces en cinco meses y fueron geniales las veces que nos encontrábamos, pero cuando nos separábamos todo volvía a ese círculo vicioso.
ꟷEntonces le expresaste tus sentimientos ꟷconcluí.
ꟷSí, y me envió al demonio. Intenté hablar con ella en las vacaciones de Navidad, quería que la relación entre nosotros quedara bien y fuéramos amigos al menos. Me envió al demonio de nuevo y entendí que no sacaría nada bueno de un "nosotros".
Se encogió de hombros y volvió a comer. Sin embargo, sabía que aunque lo decía con naturalidad el tema seguía afectándole. Él había querido mucho a Sophie, la había llegado a amar y había sido su primera novia. Antes de ella no se había permitido ver a nadie porque sentía que no era normal que le gustaran chicas y chicos por igual, me deprimía un poco que su primera relación hubiese terminado tan mal.
ꟷPodemos conseguirte un amor de verano ꟷpropuse con una sonrisa.
Sus ojos viajaron rápido hacia mi rostro y sonrió con diversión con un trocito de helado en su labio.
ꟷPreferiría una aventura de verano a decir verdad, dejemos el amor lejos por un tiempo.
Reí y limpié su boca con mi dedo pulgar.
ꟷNo sé qué te hicieron en San Francisco, pero has cambiado.
ꟷ¿Eso es malo?
Negué mientras sonreía.
ꟷMe agrada tu lado despreocupado.
ꟷDile eso a mi madre.
Y con eso comprendí que había algo más que estaba molestándolo. Algo que no se sentía listo para decir y que cuando lo hiciera sería una explosión de emociones para él. Esperaba simplemente estar a su lado cuando eso sucediera para ayudarlo a reconstruirse desde cero.
¡Hola! ¿Qué tal? ¿Cómo ha ido su semana?
Escribo esto imaginando que ya han leído la escena +18 en mi perfil y quiero saber sus opiniones. ¿Les ha gustado? ¿Eran lo que esperaba o no tengo madera de escritora erótica?
¿El resto del capítulo les ha gustado? ¿Qué opinan de la conversación de G con Theo? Recuerden que no aprobamos la violencia pero si Sophie sufre un accidente no señalaré a ninguna, okey no.
Muchísimas gracias por leer, votar y comentar. Gracias por su enorme apoyo y cariño. LAS AMO.
Nos leemos la semana que viene. Que tengan un bello fin de semana.
MUAK!
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