Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

NUEVA AMIGA.

Jack. 

— ¿Quién eres? - pregunté señalándola con mi callado. 

— ¡No puedo creerlo! ¡Estoy viendo a Jack Frost! - gritaba la chica, supongo que puede gritar como quiera, ni Sophie y su Madre han subido al cuarto, así que seguro no están en casa.

— Te hice una pregunta - acerqué apuntando a su cara mi callado. 

— Oh, perdón - se puso firme y me miró - me llamo Erika, es un gusto.

— ¿Edad? ¿A qué te dedicas? ¿Qué haces con Jaime? - interrogué. 

— No me trates como criminal - alzó las manos a la altura de sus hombros - 23 años, estudio biología, le doy clases de regularización a Jaime. 

— ¿Con qué motivo? ¿Eres enviada por alguien? - ella negó. 

— Escucha, mi diploma y tesis están de por medio, necesito dinero para que eso se haga posible, manejo muy bien muchas áreas de conocimientos y por eso me ofrecí a dar clases de regularización - habló. 

— Es cierto, Jack. Nuestras madres son amigas, su madre le comentó a la mía la necesidad que tenía y aceptó que ella me diera clases para ayudarme en la materia. - habló Jaime y lo miré - todo lo que ha dicho hasta ahora es verdad.

— Te creeré a tí Jaime - dejé de señalar a la chica - Como sea, me interesa saber ¿Cómo es que puedes verme? - pregunté. 

— ¿Qué no estás acostumbrado a que te vean? - bajó las manos.

— Estoy acostumbrado a que niños - resalté el tono en la última palabra - logren verme, no personas mayores de edad.

— El único mayor de edad aquí eres tú - se cruzó de brazos - Apenas soy una adulta joven, más respeto. - suspiró - Utiliza tu cerebro y piensa por qué es qué puedo verte. 

— Agh, como se nota que será difícil tratar contigo - me di la vuelta y me quedé observando la pared, hubo un gran momento de silencio, hasta que Jaime comenzó a saltar. 

— ¡Yo! ¡Yo sé por qué lo puedes ver! - gritaba y saltaba - Nunca dejaste de creer en él. 

— Acertado - comentó Erika - Yo creía en tí desde hace algunos años, cuando tenía 15 años. - la miré confundido - Encontré en la biblioteca un libro que hablaba brevemente de un espíritu que rondaba desde hace años en el mundo, y era un espíritu del invierno con nombre Jack Frost. 

— ¿¡Había gente que sabía de mí!? - pregunté asombrado. 

— Al parecer - alzó los hombros - Resulta que terminé por enajenarme a la idea de que existía ese espíritu del invierno y he de suponer que pasé un límite en donde lograba ver a un chico que volaba y hacía destrozosos a las personas. 

— Sí lograbas verme ¿¡Por qué rayos nunca me hablaste!? - exclamé.

— ¡Pensaba que estaba loca! ¡No era normal ver a alguien que se detenía en el techo de tu casa, volaba y congelaba todo a su paso! Llegué a creer que necesitaría internarme en un hospital psiquiátrico. - acomodó su cabello - Fueron años difíciles. 

— Y aún así sabiendo que ya era guardián y todo esto ¿Seguiste creyendo en mí? - pregunté. 

— Claro, escuchaba a los niños decir que los protegías y que los apoyabas si se encontraban mal, tenía la esperanza en que tú llegaras algún día y pudieras ayudarme cuando tuviera problemas... - suspiró sentándose en la cama de Jaime. 

— Sí hubiera sabido que necesitabas mi ayuda, ten por seguro que iría - desvié mi vista - ¿Piensas seguir creyendo? 

— ¿Por qué dejaría de creer? No quiero que este mundo me convierta en una amargada, quiero seguir manteniendo a mi niña interior, que se alegra por un regalo de navidad o por la Pascua. No quiero olvidar aquella felicidad que tuve siendo niña - sonrió poco - Por eso no dejo de creer en la magia, criaturas extrañas y en los guardianes, eso te incluye a tí. 

— Quiero ser como ella Jack - habló Jaime - ¡Genial! Ya puedes pasar tiempo con nosotros - miró Jaime a Erika sonriendo - Serás como mi hermana mayor. 

— Será un placer ser tu hermana mayor - sonrió Erika y revolvió su cabello. 

— Yo... Bueno, no puedo arreglar los años en los que requeriste ayuda, pero, espero que en algún momento tengas la confianza suficiente para contarme ello - me acerqué a ella y estreché mi mano - Seré tu amigo - le sonreí - Y prometo que a partir de ahora tendrás a alguien con quien hablar. 

— Gracias Jack - me dió un abrazo corto - Espero que también pueda servirte de ayuda en algún momento 

Asentí y en seguida sentí un abrazo de Jaime, solo acaricié su cabello. 

— Oye ¿Qué es esto? - metió su mano en mi sudadera y sacó la foto - ¿¡Cuándo te ibas a atrever a mostrarla!? 

— A eso iba, pero ocurrió esto con Erika - rasqué mi nuca - Perdón Jaime - miré la foto - La chica en la que estoy recostado, es Elsa. 

— Qué bonita - dijo mirando la foto y se la mostró a Erika - Ella es la chica que le gusta a Jack. 

— Vaya que es muy hermosa - tomó la foto - ¿Ella es otro espíritu? 

— Sí, solo que de otro mundo - me miró confundida - Más tarde te lo explicaré y Jaime también. 

— Está bien - me dió la foto - La otra chica, debe ser su hermana, son casi iguales. 

— Sí, es Anna y su prometido Kristoff - Jaime me arrebató la foto - ¡Oye! 

— Espera - fue a un aparato raro, puso la imagen ahí y este comenzó a hacer un raro sonido. Su computadora hizo un raro sonido y en ella apareció la fotografía. 

— ¿Qué acabas de hacer? - miré a Jaime y el volvió conmigo con la fotografía. 

— Solo la he escaneado - se sentó mirando la foto. 

— ¿Para qué la quieres tener? - pregunté confundido. 

— Te conozco Jack, eres capaz de perder las cosas, así que si algún día llegases a perder la fotografía, aquí tendré un resguardo. 

— Wow, gracias - guardé la foto - Tengo que dejarlos, Norte me debe estar esperando. 

— Espero puedas visitarnos dentro de poco. - comentó Erika y fue al escritorio con Jaime - Tenemos que seguir con la clase. 

— Claro, adiós Jack - se despidió Jaime. 

Salí de su cuarto entrecerrando la puerta y pedí ayuda a viento para que me llevara al Polo Norte. Pasó un pequeño rato en lo que llegaba al taller. Entré por uno de los tantos grandes portones y me dirigí a donde estaba él. Para mi sorpresa, Norte no estaba solo, estaba acompañado de los demás guardianes. 

— ¿Me perdí de algo? - me acerqué a ellos preguntando. 

— ¿En dónde estabas? - preguntó Norte molesto. 

— Por ahí - hice una leve mueca. 

— ¿Cómo te fue en tu ronda? Recuerdas que hoy tendrías que vigilar - habló. 

— Bien, no hubo ningún problema - me recargué en una columna - No hubo ningún disturbio. 

— No mientas Frost - interrumpió Tooth - Sabemos que no fuiste a tu ronda. 

— Pero qué cosas estás inventando.

— Robaste dos de mis esferas, una parte del bosque Nacional de Alaska fue destruido durante tu ronda ¿Sigues pensando que lo inventamos o que estamos alzando falsos contra tí? - me miró apretando los puños Norte - Te lo preguntaré por última vez Jack Frost ¿En dónde estabas? 

Mierda, me han descubierto. 

— Estaba en Arendell con Elsa... - confesé y él soltó un golpe a una mesa. 

— ¡En Arendell! ¡Ja! - gritó - ¡Sabes la responsabilidad que tienes en este mundo! ¡No todo es vigilar a Elsa!

— Norte, de verdad, perdón - suspiré - Yo sé que tengo que hacer rondas para vigilar qué Pitch no haga destrozos en este mundo y tengo que proteger a Elsa ¡Hago todo lo que está en mis manos! ¿Por qué Pitch está relacionado con ese dichoso bosque?

— Jack, esto que acaba de suceder en Alaska fue por obra de Pitch, no hubo registro de algún incendio, tormenta o inundación. - pasó una mano por su barbilla - las hadas de Tooth se percataron de ello en un viaje a dejar un diente, ellas fueron testigos de que Pitch absorbía toda energía de cada árbol, planta y flor.

— No volverá a repetirse... - tragué saliva - lo juro, vuelvo a pedir perdón.

— Con un "perdón" no vas a solucionar nada - habló Conejo -  Entendemos que te dimos la misión de vigilar a Elsa, pero no por ella tienes que dejar una responsabilidad aquí. Hemos acordado un castigo para tí, cubrirás el turno de Sandman y el de Tooth para dar rondas. 

— ¿Qué? - pregunté - ¿Y aparte debo realizar mi ronda? - ellos asintieron - Agh, bien, me lo tengo merecido. 

— No nos falles Jack. No otra vez - comentó Norte.

Norte se dió la vuelta y se fue a no sé que parte del taller. Tooth salió junto con un par de haditas y Sandman salió tras ella. Conejo, solo dió un último suspiro y se fue entrando por el hoyo que creó en el suelo. 

— Completo imbécil - dí un golpe en mi frente. 

                                  //////////////

ACLARACIÓN: Este nuevo personaje que es esencial para la siguiente novela :3. Lo construí basándome en mi mejor amiga, no piensen que ésta "Erika" es la Barbie de "La princesa y la plebeya" Porque no lo es UwU. 

Espero disfruten este pequeño capítulo :3 Nuevamente gracias por las lecturas y los bonitos comentarios, aunque no responda a ellos siempre los leo :3

Darks se despide uwu 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro

Tags: #jelsa