Minutos después, Katie le está echando una crema en el cuerpo de Marshall ya que lo ayuda a que ya no le duela tanto.

El pequeño dálmata está acostado boca abajo sobre su cama y se siente muy relajado al sentir la crema en su cuerpo

Katie: Esta crema te hará sentir mejor, te lo prometo, mi hermoso bebito, jeje *muy feliz y echándole la crema* Jeje

Marshall: Está bien, mami, jeje *sonríe muy feliz mientras siente como Katie le está echando la crema en su cuerpo*

Katie: Esta crema tengo que echarte 3 veces al día, mi hermoso bebito, luego solo serán 2 veces y luego 1 vez, jeje

Marshall: Está bien, mami, me gusta la crema, me siento muy relajado cuando me la pones, mami, jeje *muy feliz*

Katie: Lo sé, mi hermoso bebito, eso es porque esta crema es muy relajante, es un relajante muscular, mi bebito, jeje

Marshall: Si que relaja bastante mis músculos, mami, jeje *sonríe muy feliz mientras se encuentra relajado* Jeje

Después, la joven veterinaria termina de echarle la crema relajante muscular en el cuerpo del pequeño dálmata.

Katie: Listo, mi hermoso bebito, ahora tienes que quedarte echado un par de minutos para que la crema haga efecto

Marshall: Está bien, mami, me quedaré echado y esperaré a que la crema haga efecto, jeje *sonríe muy feliz* Jeje

Katie: Jeje *sonríe muy feliz, lo acaricia suavemente y muy feliz* Duerme un rato, mi hermoso bebito Marshall, jeje

Marshall: Está bien, mami, jeje *sonríe muy feliz, bosteza tiernamente y se va quedando profundamente dormido*

Katie: Jeje *sonríe muy feliz mientras sigue acariciando suavemente y muy feliz al pequeño dálmata* Mi bebé, jeje

Marshall: Jeje *sonríe muy feliz y se va quedando profundamente dormido y acostado sobre la cama muy feliz* Jeje