La reunión que teníamos no pude ir, por cuestiones de flojera y porque solo estarían esos tres y ya.

Les había dicho que ya haría mi parte en casa y lo dejaron tranquilo, ya para el próximo sábado nos reuniríamos, aún faltaba mucho siendo nosotros los penúltimos de la lista.

Me distraje solo por un rato viendo videos de Youtube por el celular, pasada las 11pm recibí una llamada de parte de Leonardo, por lo que conteste.

-Veo que eres una especie de perro buscando el cariño de su amo –dije yo mientras iba a la cocina por un mate.

-Me di cuenta desde un principio que no te caigo bien, la primera vez que viniste a mí te veías muy nervioso –reí nervioso.

-¿Qué quieres? No creo que me llamases por gusto, tengo el tiempo contado para repasar lo que tengo que aprender –mire el libro tirado en el suelo.

-Quiero hablar contigo –lo dijo en tono dulce. –me pusiste una barrera para que no me acercase a ti, pero fue tarde, sentí mucha curiosidad hacia ti desde que te salude el tercer día después de la fiesta.

-Si hablamos de esa extraña forma en la que me acerque a ti, no es gran cosa, me pasa algunas veces cuando hablo con alguien nuevo.

-En realidad no soy nuevo en el colegio, estuve ahí en inicial hasta quinto de primaria, después me tuvieron que cambiar diciéndome que tenía que adaptarme a un nuevo ambiente.

-Qué casualidad, yo entre al colegio en sexto de primaria –acaricie al perro al ver como este se acercó a mi buscando mimos.

-¿Qué haces? –me pregunto.

-¿Que te importa? –dije seco.

-A eso quería llegar, te acercas a mí de forma cariñosa para después tratar de alejarme como si no tuvieras corazón...

-Si te vas a quejar de eso no deberías hacerlo, no por eso trataba de decirte que si no te gusta esta forma de mi ser, mejor te alejas o...

-No me quiero alejar de ti –me quede en silencio. –me di cuenta en un principio que si realmente querías acercarte mi lo hubieras intentado otra vez hace días, pero no ¿Por qué hablaste conmigo? Si igualmente nos hablaríamos en el colegio pero no mucho.

Me mordí el labio quedando pensativo acerca de cómo explicarle que solo lo hice porque Melissa estaba interesada en él.

-Te demoras mucho –hablo haciéndome desesperar más.

-¿Está mal que piense?

-Normalmente tu responderías en un segundo, seco y cortante.

-¿Sabías que muchas personas están interesas en ti? –le pregunte irónico.

-¿Eso que tiene que ver? –el ambiente lo sentía pesado.

-Es mejor no volver a hablar –solté suplicante.

Leonardo se quedó en silencio.

-¿Eso es lo que quieres? –me pregunto sorprendido.

Asentí a pesar de que no me veía.

La llamada se cortó solo para ponerme sentimental, sentí el corazón dolerme llegando a pensar que me metí más a fondo y que me llegue a encariñar con una persona o acostumbrarme a esta.

-¡No puede ser! –grite alzando mis brazos al aire.

Pito como era mi perro solo lamió mis manos una vez que estaba abajo.

Lo acaricie en la cabeza sintiéndome m*erda al pensar en algo que se que me arrepentiré después.

No dormí hasta que amaneció y mi hermana al verme por la madrugada se acercó a mí.

-¿Estás bien? –me pregunto acordándome la cara de Sullivan en el cuerpo de Mike de Monster INC.

-Aaah... estoy creyendo que debería darle oportunidad a alguien ilusionado.

Adela acarició mi espalda sintiendo que es lo mejor que podría hacer, a no ser que haya otras opciones en las cuales no pensé con anterioridad.