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namkook

Esta historia contiene escenas sexuales explícitas (+18), uso de juguetes sexuales y narraciones que podrían ser perturbadoras para cierta gente.
Así que si no estás de acuerdo con esto te invito a irte porque aquí no eres bienvenidx :) gracias.

Namjoon se encuentra sentado en el sillón de cuero negro que está en la esquina de la habitación, tiene la espalda recargada en el asiento y las piernas abiertas, una mano reposa en su muslo mientras sostiene su vaso de whiskey y con la otra da una calada a su cigarro Marlboro.

Su aspecto, como siempre, es elegante e impoluto: el cabello corto y negro está bien peinado, su pantalón de vestir negro no tiene ninguna arruga en la tela y su playera, negra también, de cuello de tortuga se ve como nueva. El saco negro que traía está doblado pulcramente a un lado suyo, por comodidad no trae zapatos ni calcetines. Sus ojos de dragón se ven más oscuros de lo normal gracias al reflejo de la luz roja que hay en la habitación y, aunque la ventana está levemente abierta, el ambiente dentro se siente íntimo y todo el cuarto huele a tabaco.

Kim Namjoon termina el líquido ámbar y deja el vaso de vidrio en una mesita que está junto a él, donde también hay un cenicero. Da otra calada a su cigarro mientras sigue viendo al frente, donde todo este tiempo ha estado su mirada atenta. Frente a él está la cama de tamaño matrimonial, con sábanas color negro y un par de cojines color blanco, otro par está tirado en la alfombra color caqui. Pero lo que importa es el chico que está sentado ahí en medio, mordiéndose el labio y soltando gemidos en una mezcla de disfrute y frustración.

Jeon Jungkook está recargado en la cabecera de la cama, totalmente desnudo, con las piernas bien abiertas apoyando los pies en el suave colchón; sus manos están arriba de su cabeza, pues tiene unas esposas en sus muñecas. El cabello largo es un desastre, empapado de sudor, las puntas de color rojo se pegan a la piel brillosa de su cuello. Jungkook está totalmente expuesto para Namjoon, tan sexy y vulnerable al mismo tiempo, con esos ojos grandes y expresivos y esa piel llena de lunares, sudor y tatuajes. Lo mejor de todo es el vibrador color borgoña que tiene dentro de su ano, el chico siente su cuerpo temblar con cada vibración dada en su punto más sensible.

Los ojos cafés de Jungkook le dan una mirada suplicante al hombre frente a él, que a sus ojos es un malvado por dejarlo solo ahí por tanto tiempo, mientras Kim disfruta de verlo sufrir. Porque sí, antes de que Jungkook llegara a su clímax, Namjoon quitó el juguete de su lugar y cubrió con su mano la punta del pene ajeno, controlando el orgasmo de Jeon. Después de unos minutos, volvió a meter el vibrador en el cuerpo de Adonis poniendo el nivel mínimo, disfrutando de los sollozos, quejas y lágrimas que bajaban por el rostro suave de Jungkook. A Namjoon pareció no importarle, puesto que seguía fumando tranquilamente e incluso expulsaba el humo del cigarro frente a la cara de su amante.

Kook lo odia con la misma pasión con la que disfruta ese momento junto a él. Ama estar así de expuesto, lo excita ser observado por Namjoon y saber que en cualquier momento el hombre puede acercarse y hacer lo que le de en gana con su cuerpo; se le eriza la piel cada que ve la erección que se marca sobre la tela negra: tan grande y gruesa. Jungkook desea meterla en su boca y sentirla dentro de su culo, llenándolo por completo. Pero por ahora debe conformarse con el vibrador, mientras gime y muere lentamente por los ojos llenos de deseo que le regala el pelinegro. Además, escuchar sus propios gemidos también lo pone duro, pues es lo único que puede escuchar en la habitación, eso y los latidos de su corazón.

Cuando termina el cigarro, Kim se levanta del sillón y camina hasta la cama para después subirse a ella y ponerse de rodillas frente a Jungkook, quien saca la lengua y trata de acercarse también, pero con las muñecas amarradas no puede hacer mucho. Quiere pasar su lengua húmeda por los pezones que se marcan sobre la tela negra, quiere besar y morder el pecho de Namjoon, apretar con sus manos y dejar marcas por toda su piel morena. Jungkook tiene una fijación especial por los pectorales de Namjoon, y esa playera de manga larga y cuello alto hacen que esa parte de su cuerpo se vea aún más perfecta. Jungkook ama la cara de satisfacción que pone Namjoon cuando él besa y juega con sus pezones canela, también le encanta cuando el cuerpo grande está encima de él y puede tener la mejor vista del mundo mientras Namjoon lo jode tan bien.

—Mírame a los ojos, Jungkook.

El nombrado obedece, quitando sus ojos hambrientos del pecho ajeno, es imposible ignorar ese tono demandante y serio. Las miradas de ambos se encuentran y Jungkook quiere llorar de placer, tener a Namjoon tan cerca y sentir la punta del vibrador tocar una y otra vez su próstata es demasiado.

—Eres hermoso —susurra Kim para después tomar la mandíbula de Kook y besar con desespero esos labios rojos.

El beso sabe a whiskey y los labios gruesos de Namjoon se amoldan perfecto a los labios más delgados de Kook. Si Jeon tiene una fijación por el pecho de Nam, a este último se le para la polla cuando besa a Jungkook y siente la perforación chocar contra sus propios labios. Le encantan los piercings y, que Jungkook tenga un aro en el labio, le nubla la cabeza. Así que Namjoon besa con ahínco la boca ajena y jala suavemente de la pieza de acero, sacándole a Jeon un jadeo. Con una mano acaricia la mejilla de Jungkook y con la otra empieza a masturbar el pene erecto del menor. Baja sus labios gruesos por el cuello sudoroso y va dejando leves mordidas por toda la piel hasta llegar al tatuaje en el hombro derecho de Jungkook, después sigue bajando por el pecho formado hasta chupar los pezones suaves y erectos. Namjoon se deleita con la respiración descontrolada de Jungkook y sonríe al escucharlo gemir, cada vez más alto.

—Así, gime mi nombre más alto, bonito.

El cuerpo de Jungkook se mueve, tratando de soltarse de las esposas que tiene en las muñecas, quiere abrazar la espalda ancha y enterrar sus uñas ahí, pero cualquier movimiento que hace es en vano. En vez de eso, sus movimientos hacen que el vibrador que tiene dentro lo llene más y más.

Pero ya no quiere el juguete de silicón, ahora está desesperado por sentir el gran pene caliente tocando su próstata. Jungkook quiere gritar el nombre de Namjoon hasta quedarse afónico, quiere sentir como sus nalgas rebotan contra la pelvis del mayor y también quiere sentir esas manos grandes sobre cada rincón de su cuerpo; no le importa si reparten caricias, apretones, rasguños o nalgadas, simplemente quiere sentir el exquisito toque de Namjoon sobre él.

Así que con ese pensamiento y la sobreestimulación que Namjoon le da, su semen sale disparado ensuciando la ropa del pelinegro y grita de placer. Grita el nombre del hombre que lo vuelve loco, que lo hace delirar y que enciende todos los pensamientos más eróticos que alguien puede tener. Namjoon saca un lado de él tan íntimo y pasional que a veces le da miedo, se asusta de todo lo que Namjoon le hace sentir con sólo murmurar su nombre en el oído, con sólo una mirada ardiente y con esa sensación de romperse en dos cuando lo coge duro como a él le gusta. Porque cada que ambos llegan juntos al clímax y se miran con esos ojos llenos de palabras inexplicables, para Jungkook todo está bien.

Y sigue estando bien cuando Jeon Jungkook se despierta exaltado, con el cuerpo bañado en sudor y la respiración errática. Tiene una erección y el cabello rojo se le pega al cuello y nuca. Está en su cuarto, el mismo escenario de su sueño erótico con Namjoon. Le pasa tan seguido que ya no se decepciona al despertar y caer en cuenta de que todo es una fantasía. Jungkook suspira y con su brazo se cubre los ojos. Jura que aún puede sentir la suavidad de esos labios en su cuello, aún puede recordar a la perfección el aroma de Namjoon y si cierra los ojos puede retratar la imagen del pelinegro frente él, listo para darle el mejor sexo de su vida. Maldición, todo es perfecto en sus sueños eróticos.

...

Jungkook está recargado en la pared blanca del área de fumadores de su escuela, frente a él una barrera de concreto llena de stickers aleatorios en blanco y negro lo protege de no caer al suelo de piedra. Lleva puesto un gorro negro de lana que cubre su cabello teñido y orejas, dejando despejada su frente y haciendo que se marquen más sus facciones. Su mochila azul marino descansa en el suelo y una canción de Epik High ameniza el momento por medio de sus audífonos blancos.

Es una mañana fría, pero sin duda el café que compró lo ayuda a calentar su cuerpo a la vez que disfruta del sabor, al igual que su cigarro mentolado. Faltan pocos minutos para que empiece su primera clase, pero prefiere perder el tiempo que escuchar el murmullo de sus compañeros en el pequeño salón de clases. Jungkook le da una calada al cigarrillo y tararea la melodía tranquila que escucha, cuando junto a él aparece el hombre de sus sueños.

Puede ver que Kim Namjoon está muy ocupado bebiendo lo que parece ser un licuado de avena mientras habla por teléfono que ni siquiera se da cuenta de su presencia. El hombre se para a unos dos metros de él y se recarga en la barrera, pero es suficiente para que Jungkook perciba el perfume de Jean Paul Gaultier. Namjoon viste un saco largo color negro y una bufanda color canela, Jeon no puede ver su pecho pero está seguro que lleva una camisa o suéter negro debajo. Como siempre, Kim Namjoon lleva su maletín, en realidad es una mochila parecida a un maletín; y también, como siempre, se ve increíblemente guapo.

Jungkook no sabe si fijarse en él o en el lindo cielo que poco a poco se va coloreando de un intenso naranja. El área de fumadores tiene vista a la explanada del campus universitario lleno césped, arbolitos y estudiantes que corren retardados; también desde ahí puede ver la preciosa biblioteca central, su facultad tiene la mejor vista que puede pedir. Pero nada se compara cuando tiene a Namjoon a pocos pasos de él.

No es la primera vez que se lo encuentra ahí, pues en los intervalos de clase o incluso por las noches, cuando Jungkook tiene que quedarse a hacer algún estúpido trabajo en equipo, el joven Jeon acostumbra ir a fumar. Y al parecer también es el lugar predilecto para fumar de Namjoon.

Jungkook termina el cigarro y deja la colilla en el cenicero que está ahí. Cierra bien su termo que aún tiene café y recoge la mochila del suelo. Namjoon sigue hablando en voz baja por teléfono, con una sonrisa en el rostro que deja ver sus lindos hoyuelos. Namjoon es el equilibrio perfecto entre lindo y sexy, piensa Jungkook. Ese cuerpo grande y ancho, al igual que su voz grave, contrastan con la cálida sonrisa y la amabilidad que caracteriza a Kim. Pero sin duda sus ojos de dragón son los más versátiles que ha visto alguna vez en su vida. Jungkook no miente cuando dice que cuando Namjoon le sostiene la mirada, escalofríos traspasan por toda su espina dorsal.

Mientras Jungkook pasa detrás de Namjoon, le es imposible retener los recuerdos de la noche anterior y, mientras se muerde el labio imaginando que le hace una mamada a Namjoon ahí mismo, Jungkook habla.

—Buenos días, profesor Kim.

Sigue caminando sin esperar una respuesta, pero aún así escucha la voz seria de Namjoon responderle, muy diferente al tono que ocupa al hablar por teléfono.

—Buen día, joven Jeon.

Antes de entrar a su salón, Jungkook pasa al baño a mojarse la cara, tratando de despejar su sucia mente. Después se prepara mentalmente para su clase de historia del arte, sabe que ese día sabrá el resultado de su examen pero lo que lo tiene nervioso es volver a tener a Kim Namjoon tan cerca. Pero no puede hacer nada, debe esa materia y le urge aprobar el curso, así que no puede darse el lujo de faltar a clases.

Aunque a Jungkook no le importa mucho asistir si Kim Namjoon es su profesor. 

Holaaaa, gracias por leer 🥺
Para abrir este libro recopilatorio, decidí iniciar con el shot que inspiró el proyecto. Este relato es el inicio de una historia que tenía pensada y que seguramente luego desarrollaré.

La canción que pongo en multimedia inspiró dicha historia. Cada que me inspire en algo lo pondré al final del shot.

Iniciamos lento, ¿qué les pareció este namkook? ^^

Besos, Moon

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