Seúl, Corea del sur.
30 de Marzo del 2022.

Unos meses antes de....

— Será mejor que te alejes de nosotros, Taehyung —. Agregó, Jimin con una gruesa y masculina voz.

— Ninguno de nosotros queremos estar contigo —. Hoseok, tomó la palabra.

Estaban de brazos cruzados con sus miradas fijas en Kim Taehyung. La lluvia se abate sobre él como un castigo del cielo, y las personas que se suponían que eran sus amistades son un monstruo de rabia y rencor. La película lluviosa se derrama con las gotas haciendo un siniestro ataque contra su rostro; como un techo que se desploma o una duda que devora su corazón. Taehyung estaba parado frente a la puerta principal de la casa. Todo su rostro al igual que su cuerpo estaban mojados por la lluvia. Llevaba unos pantalones negros desgastados y traía una camiseta polo roja. El agua se deslizaban por sus ojos, sin poder diferenciar si era la lluvia o lágrimas provenientes de él.

— No te humilles de esta manera, Taehyung —. Min Yoongi, agregó calmado, uniéndose a la tensa conversación— Sí tú, realmente lo sientes, acepta nuestra difícil decisión.

— La verdad, nunca me imaginé que serias un completo imbecil, Kim Taehyung—. Una vez más, Jimin respondió fríamente.

— ¿Ustedes tampoco me creen, verdad?—. Trató de hablar con un nudo en la garganta— ¿Porque me hacen esto? ¿Porqué no confían en mí? Entiendo, perfectamente que Jungkook ya no quiera verme. ¿Por qué alejarme de ustedes también?

— Nunca me caíste bien, Taehyung—. Una sonrisa de lado se mostró en los labios de Hoseok— Nunca caí en tus encantos, siempre me pareciste una persona muy falsa.

— A mi me lograste engañar muy bien querido, Taehyung.

— ¡¿Qué carajos les pasa?!

— ¡Solo Lárgate!

— ¡No, no, les puedo explicar todo!

— ¿Ahora con que vas a excusarte? ¡No solo a él lo estas lastimando, a nosotros también!

— Hay una explicación para esto.—
El castaño, pedía a súplicas el perdón de todos.

— ¿Explicación? No hay explicaciones Taehyung. Ya lo sabemos, nos dimos cuenta.—. Se cruzó de brazos Park.

— ¿Cómo les pido perdón?—. Taehyung
decidió agacharse y ponerse de rodillas con la cabeza baja y la lluvia aún mojando todo su cuerpo.— ¿Quieren que me humillen ante ustedes? ¿Esto es suficiente?

— ¡Lárgate, antes de que mi paciencia se termine!

— ¿Estamos hablando con un animal?

— Taehyung, yo no sé que decir para probar tu inocencia, a mi también me sorprendió bastante que no respetaras tu relación con Jungkook—. Dice Min Yoongi, en un tono bajo— Es mejor que regreses a tu casa y no atrapes un resfriado debajo de la lluvia.—. Suspiró.— ¿De acuerdo?

— ¡Diablos, Tae!—. Park Jimin no dudo ni dos veces en agarrar con ambas manos la camisa del castaño,haciéndolo ponerse de pie frente a él.— ¡Te mereces esto por lastimar a mi mejor amigo!—. Su mano derecha, se estrelló en la delicada mejilla del castaño.

— ¡Detente Jimin!—. Gritó Min Yoongi.— ¿Qué rayos estás haciendo?

— ¿Y tú qué?

— Debes controlarte Jimin, él ni siquiera esta tratando de evitar tus puños.—. Un color rojo adquiría en el rostro del castaño.— ¡¿Acaso quieres matarlo?!—. Posterior a los gritos, continuó seguido de un segundo golpe directo en la zona baja del estómago.

El castaño se llevó una mano al estómago y gimió de dolor.

— ¿Te parece suficiente Kim Taehyung?
¿Ahora sabes que no queremos verte aquí?

— Park, por favor —. Murmuró sin aliento.— Deja de ser tan insensible conmigo. Somos amigos—. Era la primera vez, que uno de sus amigos respondía violentamente.

— No Tae, estas equivocado. No somos amigos.—. Estaba apunto de rendirse y abandonarlos para siempre pero, todavía tenía que aclarar la verdad que ellos no querían creer.

— Taehyung —. La sombra de Jungkook, salió de su escondite. Él rubio caminaba directo a donde estaba el castaño. La mirada de su ex pareja se iluminaba derramando lágrimas de dolor y traición.— No quiero verte aquí.—. Estaba cansado y completamente mojado por la fuerte lluvia que aún caía en él.— No te vayas a enfermar y vete.

— ¿Irme? ¡No puedo dejarte!

Jeon Jungkook, necesitaba alejarse de él. No quería que Taehyung sufriera por la culpa de sus amigos.

— ¡Tú y yo no somos nada!—. Temía a que uno de ellos lo golpeara muy fuerte y terminara haciéndole mucho más daño.

Desconocía demasiado la forma de actuar de todos sus amigos. No era correcto que uno de ellos lo golpeara por pedir perdón. Ninguno de ellos, merecía hacerlo menos. No eran la persona que fue traicionada, por alguien que amaban. No eran ellos, quienes se le fue el alma saber lo sucedido. Ellos no sabían nada.

— Regresa a tu casa, por favor.—. Respiró profundo.— Nadie te lastimará si lo haces.

— ¿Es lo único que le dirás a este imbecil, Jungkook? ¿Me estás jugando una sucia broma? ¡Adelante, desahogate y dile todas sus verdades!—. Gritó furioso Jimin.— Estas parado frente a él. ¡Anda golpealo!

— Yo-

— Jungkook, si no lo haces tú. Lo haré con gusto

— Park Jimin, por primera vez en tu vida, ¿Podrías cerrar tu maldita boca?

— ¿Pero que..? —. Sus palabras quedaron en el aire.

— ¿Por qué crees que tienes que decidir por mí? ¿Piensas que no tengo la fuerza como para saber que quiero? Siempre, has tenido que protegerme como si en realidad somos hermanos. No, no lo somos. Jamás lo seremos.—. Expresó con dificultad— Chicos, deben de entender que tengo la edad suficiente para dar la voz por mí mismo.

— Sí, Jungkook, pero-

— ¿De qué manera lo puedo explicar?

— Matalo, sí, lo haces, dejaremos que el resto de tu vida decidas por ti mismo —. Agregó Hoseok, fijamente.

— ¿Mi muerte podría darles paz?—. Dice Taehyung llevandose ambas manos a la cabeza.

— No, esperen, ¿están bromeando, no?

— Es una broma, Min yoongi.—. Respondió Jimin desviando la mirada—Esta bien, no diré nada más y no trataré de involucrarme en tus decisiones Jungkook.

— Gracias —. Dice secamente el rubio.— Taehyung, el perdón no será lo suficiente para eliminar mi dolor.

Dirige su vista al chico frente él.

— ¿Comprendes?—. El cuerpo del castaño titiritaba de frío.— Estoy seguro que sí comprendes.

— ¿Ya no me necesitas en tu vida?

— No—. Negó rápidamente. Lo veía de una manera distinta, el joven que tiempo atrás amaba con todo su corazón—y que aún lo hacía, pero trataba de negarlo—estaba ahí, a unos pocos pasos de él.

Cerró los ojos con fuerzas, antes de tomar la decisión que cambiaría toda su vida. Ya no necesitaba a Taehyung. No necesitaba el apoyo que le dió durante cinco años. Ya no quería verlo, después de todo lo sucedido.

¿Por qué sus recuerdos dolían como si una daga atravesara su corazón? ¿Por qué era tan difícil sacar las palabras de su mente? Un recuerdo fugaz sobre ellos en el barrio de Itaewon, en Seúl, apareció en su mente.

—Lamento, que nuestro aniversario no sea como deseas.

— ¿Y qué realmente deseo, Taehyung? ¿Lo sabes?—. Respondió el rubio con una divertida expresión en su rostro.

— Viajar, viajar y viajar.

— Eso era antes, ¿no recuerdas la vez que te confesé mi más oscuro secreto?

— ¿Me confesaste un secreto, Jeon?—. Pregunta curioso—¿Se puede saber cuando sucedió?

— Ah, sí, ya me acordé—. Rió bajo— Ese día habias tomado demasiado alcohol.

El castaño, se mostró pensativo tratando de recordar aquella vez. Su mente se mostraba blanca y no recordaba absolutamente nada de lo que decía Jungkook.

— Estas jugando conmigo, ¿no?

— No, no, te estoy diciendo la verdad.

— No te creo—. Se cruza de brazos.

— Bueno, te diré. Pedí, que siempre estuvieras conmigo.

— Jungkook, yo siempre lo estaré.

— ¿Me lo prometes?

— Te lo prometo.

Encajó su manos en su bolsillo al abandonar aquel recuerdo fugaz al observar al castaño que estaba desesperado por recibir su esperada respuesta. Es claro lo que Jungkook quería. No volver a verlo nunca más. Necesitaba centrarse en su presente, y no en su pasado.

— Olvidame —. Dice finalmente.

— ¿Es lo que quieres, Jungkook? ¿Que te olvide?

— Lo necesito demasiado, Taehyung.

— Me conoces por ser una persona que no se rinde fácilmente, ¿cierto? Lamentablemente no puedo abandonarte. No lo haré.—. Intentó acercarse a él, pero sus ex amigos no lo permitieron.— Hasta que te des cuenta que todo lo que te estoy diciendo es la verdad.—. Se defendió.— Yo no lo hice, Jungkook. Yo jamás sería capaz de traicionar mi amor por tí. Me duele el saber que tu no me creas, ¿Por qué no puedes creerme? ¿Que te impide hacerlo?—. Resopló— No te dejaré por nada en el mundo. Te lo prometí.

— No lo recuerdo, será mejor para mí que te vayas, ¿si?

— Jungkook, no lo hagas....

— ¡Ya Lárgate, Taehyung!

— No lo hagas más difícil. Solamente vete.

— Esta bien. Me iré—. Respondió con lágrimas— Pero nos veremos pronto, Jungkook. Sabes que lo haré.

Taehyung se retiró con rapidez, sus pies golpeando contra el suelo. Las palabras amargas resonaban en sus oídos.

—Fue lo mejor que hiciste hasta ahora, Jungkook—. La sonrisa sardónica de Jimin señalaba su implacable crueldad.— ¿Alguien quiere tomar Whisky?

— ¿Te ayudo, Park?—. Él asiente. Min Yoongi y Jimin abandonaron la sala de estar en busca de una botella de Whisky, dejando la tensión flotando en el ambiente.

Se movieron por la cocina, sacaron una botella de Whisky y vasos de cristal. Con cuidado, vertieron la bebida en los vasos, una capa de oro oscuro y brillante en cada uno. Dejaron un vaso en el centro de la mesa, dispuestos para celebrar una victoria. Los chicos comenzaron a ingerir grandes cantidades de Whisky. Cada sorbo iba borrando el pasado, engañándolos, dejando su cabeza tan confusa como su corazón. Pronto, los efectos del alcohol comenzaron a hacerse sentir, su cuerpo se volvió pesado y su mente nublada.

— ¿Podemos brindar?—. Sugirió Hoseok, jadeando y haciendo un gesto hacia la botella que habían dejado en la mesa.

— ¿Brindar? ¿Por qué?—. Preguntó Yoongi.

Hoseok miró divertido a los demás.

— Por Jungkook y su grandiosa decisión, claro.

— ¡Basta de burlas, chicos!—. Dijo Jungkook, levantando la voz.— Taehyung ya es mi pasado, y ninguna cantidad de Whisky va a cambiar eso.

Los demás guardaron silencio. La habitación se llenó de una incomodidad tácita, como un gato negro que merodeaba en las sombras. Los chistes finalmente se fueron haciendo más tenues, y sus somnolientos sonrisas se fueron volviendo más pesadas. Al fin, cada uno comenzó a caerse de sueño, y Jungkook empezó a relajarse en el sofá, observando la escena. De repente, la pesada respiración de sus amigos se convirtió en un sonido uniforme y regular. Se escuchó un susurro de voz en la radio:

“El pronóstico prevé que las lluvias continuarán durante una semana más. Asegúrate de abrigarte”

Jungkook estaba atrapado en su mundo privado de silencio y tristeza. Por un momento, el mundo exterior se apartó, y solo él, sus amigos y sus problemas permanecieron. Se preguntaba qué lo había llevado a ese estado tan vulnerable y desesperado. Recordó los rumores, los amigos que habían visto a Taehyung con otra persona en su ausencia. La traición había sido como una herida abierta en su corazón, y su respuesta se había visto dominada por la ira y el dolor.

La incertidumbre parecía una redondez que no podía ser desenredada, pero había un pequeño punto de luz. Alguien le había mandado un mensaje anónimo. Había dicho que Taehyung había sido visto en un bar besándose con otro chico. No tenía idea de quién era la persona detrás de la pantalla. Pero sí estaba seguro que se hacía llamar "La sombra"

¿Quién era "La sombra"? ¿Y qué clase de interés tenía en ellos dos?

A lo largo de los cinco años que duró su relación, "La sombra" había estado ahí para revelar los secretos y daños causados por Taehyung. Como un verdadero lobo vestido de oveja, dejaba a la vista las citas, y las amistades que tenía su ex novio. La persona anónima siempre estaba a su lado, reportándole cada acto oculto, cada mentira, cada traición.

¿Pero por qué lo hacía? ¿Con qué fin?

La habitación parecía girar lentamente, como un carrusel en un sueño. Él sintió que su mente se hacía más pesada y su cuerpo se acurrucaba en el sofá, sumiéndose en el sueño. En ese instante, apareció una presencia. Un leve roce contra su rostro lo hizo volver la cabeza, y abrió los ojos entreabiertos, sin poder ver nada. Desconcertado, trató de centrarse. Todo seguía estando borroso, pero la silueta oscura que se arrodillaba ante él, sus manos suaves besando su rostro. Una mano rodeó su cuello, y un labio se unió al de él. Sus sentidos estaban nublados por el alcohol, sin poder identificar quién de sus amigos lo estaba tocando de esa manera.

Logró escuchar las palabras que salieron de la boca de la persona desconocida, sin embargo, no pudo reconocer la voz.

— Jeon Jungkook, desaparecería a todas las personas que se encuentran a tu alrededor con tal de que me pertenezcas solo a mí.